Las funciones de la comunicación

Anuncio
1
La comunicación y sus funciones1
Jakobson propuso […] entonces, estudiar primero los factores que constituyen
cualquier acto de comunicación verbal, para luego poder esquematizar las funciones.
Así presenta el esquema de la comunicación.
Contexto
Destinador
Mensaje
Destinatario
……….
Contacto
Código
Un destinador envía un mensaje a un destinatario. Para que este mensaje sea efectivo,
requiere un contexto de referencia, verbal o susceptible de verbalización, necesita
también un código común al destinador y al destinatario, un contacto, un canal físico y
una conexión psicológica entre ambos que les permita establecer y mantener la
1
Tomado de Manual de teoría literaria. Óscar Castro y Consuelo Posada. Medellín, Universidad de
Antioquia, 1998, pp. 50-54
2
comunicación. Jakobson planteó que cada uno de estos factores determina una función
diferente del lenguaje, lo cual no quiere decir que halla mensajes que satisfagan una
sola de las funciones o que una de estas monopolice a las demás. Se trata de una
jerarquía a partir del predominio de una función sobre las demás. Esta predominancia
caracteriza el tipo de lenguaje, las demás funciones integradas a esta cumplen un papel
accesorio. Las funciones serían, entonces:
Referencial
Emotiva
Poética
Conativa
Fática
Metalingüística
La función referencial, conocida también como denotativa o cognoscitiva, se da
cuando el lenguaje se dirige hacia el referente o contexto. En el párrafo siguiente,
todos los elementos enunciados pertenecen a la historia del continente americano,
contexto al que se remite el destinatario o lector cuando o lee, además, puede
corroborar la veracidad de las afirmaciones, de los lugares y de los personajes, al
confrontarlos con otros datos en otras fuentes probadas. Aunque en este párrafo el
significante se refiere a un solo significado, se observará una expresión poco objetiva y
de difícil confirmación en el contexto de la historia, una expresión que indica un juicio
de valor y una actitud emotiva del historiador: el adjetivo inmortales.
En 1511, Diego de Velásquez al frente de trescientos hombres, entre los que
iban los inmortales padre Las Casas y Hernán Cortes, explora la isla de Cuba y
funda las ciudades de Baracoa, Puerto Príncipe, Trinidad y La Habana
La función emotiva o expresiva está centrada en el destinador; refleja, sobre todo, la
actitud subjetiva del hablante ante lo que dice, y utiliza las interjecciones con más
frecuencia. Lo anterior puede observarse en la siguiente arenga de un antiguo obispo
colombiano, pronunciada en momentos en los que todos buscaban terminar la guerra, y
en cuya palabras se siente una actitud personal, un deseo y un empecinamiento que
reflejan más su estado interior que la realidad de las situación:
No, no hay paz posible. La paz en este caso es traición y apostasía en estas
circunstancias no cabe más que el grito de guerra de Julio 2 ¡fuera los bárbaros!
¡A pelear por nuestra religión! ¡Dios lo quiera!
La función conativa está orientada, en cambio, hacia el destinatario, y se expresa de
manera más genuina por medio del imperativo y del vocativo. Un aforismo de
Nietzsche la ejemplifica:
Rodeaos de cosas buenas y perfectas, hombres superiores. Su dorada madurez
cura el corazón. Las cosas perfectas nos enseñan a esperar.
3
La función fatica ocurre cuando el lenguaje busca establecer, mantener o interrumpir
una comunicación para comprobar que el canal de comunicación funciona; se orienta,
pues hacia el contacto, por medio de formulas o discursos, muchos de ellos
ritualizados, que solo buscan prolongar el acto mismo de la comunicación. En el
octavo capitulo de Alicia en el país de las maravillas se lee:
¿En qué se parece un cuervo a un escritorio?
“¡ahora si nos divertimos! ¡Con lo que me gustan las adivinanzas!”, pensó
Alicia. Y añadió en voz alta:
Creo que puedo dar la solución.
¿Quieres decir que crees poder dar la respuesta? Preguntó la Liebre de Marzo.
Exactamente contestó Alicia
Entonces di lo que piensas prosiguió la Liebre de Marzo.
Eso es lo que hago, dijo Alicia precipitadamente. A lo menos… a lo menos…
yo pienso lo que digo. Es la misma cosa.
No es la misma advirtió el Sombrerero. Según tu, sería lo mismo decir: “Veo lo
que como”, que “Como lo que veo”.
Y también intervino el Lirón, que parecía hablar en sueños, para ti sería lo
mismo decir “Respiro cuando duermo”, que “Duermo cuando respiro”.
Para ti es lo mismo dijo el Sombrerero.
La conversación decayó, y todos permanecieron en silencio durante un
minuto…
La función metalingüística ocurre cuando los interlocutores quieren comprobar que
están usando el mismo código; en este caso, se pregunta por significados de términos,
se precisan conceptos ambiguos o se ponen de acuerdo para darle determinados
significados a las palabras claves que emplean en su discurso, como en el siguiente
dialogo tomado de Al otro lado del espejo:
Era la asarvesperia y lo flexilimoso toves giros copiaban teledrando en el vade;
débil míseros estaban los borogoves; bramatchisilban los verdilechos parde.
Es…suficiente para empezar interrumpió Humpty dumpty. Hay allí muchas
palabras difíciles. La “asarvesperia” significa las cuatro de la tarde, el tiempo
en que empiezan a meterse al horno las cosas para la comida.
Esta muy bien dijo Alicia. Y, ¿“flexilimosos”?
Bueno, flexilimoso significa flexible y cenagoso. Flexible es lo mismo que
activo. Es como una maleta, ¿comprendes? Hay dos significados empacados en
una sola palabra.
La función poética del lenguaje
Por ultimo, Jakobson consideró la función poética, caracterizada porque el mensaje se
centra en el mismo. No es la única función del lenguaje literario, sino la predominante.
En lenguajes en los cuales dominan otras funciones, la poética pasa a desempeñar un
papel secundario, accesorio; y lo mismo sucede con las demás, en otros casos, como ya
se menciono. Sin embargo, el estudio de esta función no es suficiente en el análisis de
un texto poético, pues también es necesario el estudio de otros aspectos. Jakobson
mostró que en la poesía épica hay más énfasis en la función referencial; la lírica se
4
acerca más a la función emotiva y la poesía en segunda persona tiende a utilizar más la
función conativa.
Jakobson se preguntó por el rasgo lingüístico observable de la función poética; por los
rasgos indispensables que debía tener cualquier fragmento poético. Para ello, en un
poema hay que analizar la presencia de las demás funciones del lenguaje y establecer
las características que configuran la función poética del mismo. Para responder a esta
pregunta, se apoyó en los dos modos básicos de conformación empleados en la
conducta verbal: la selección y la combinación. La primera se basa en la equivalencia,
la semejanza y la desemejanza, la sinonimia y la antonimia; de esta forma, se tiene
nombres equivalentes: caballo, perro, vaca, gato; y acciones semejantes: se construye
la secuencia combinando dos palabras adecuadas, una al lado de la otra en el tiempo y
en el espacio; por ejemplo: la vaca rumia.
Según Jakobson: La función poética proyecta el principio de la equivalencia del eje de
selección al eje de combinación. La equivalencia pasa a ser un recurso constitutivo de
la secuencia. A modo de explicación, se puede decir que sobre la secuencia de palabras
no solo se lee o se capta un contenido, un mensaje verbal, sino también un modelo
fónico, paralelismos y oposiciones fónico-fonológicas, morfo-sintácticas, visuales y
semánticas, un ritmo y otros elementos que impiden reducir el poema o el texto
poético a su contenido o a su significado.
El análisis de esta propiedad del lenguaje literario llevó a Jakobson a afirmar que la
similitud sobrepuesta a la contigüidad le otorga a la poesía su “esencia enteramente
simbólica, múltiple, poli semántica”. Le asignó a la poesía el carácter intrínseco de la
ambigüedad, el doble sentido al que corresponden también destinadores, destinatarios
y referencias divididos. Con el principio de la repetición, que se logra con la aplicación
del principio de equivalencia a la secuencia, no solo se reiteran las secuencias que
constituyen el mensaje poético sino también todo el mensaje. Esta es una propiedad
inherente y efectiva de la poesía y del mensaje literario, la que hace del mensaje algo
duradera. Esta es lo esencial del artículo de Jakobson.
Ejemplo:
Reciclando
Cuando papá en un ataque de rabia mató al gato,
a mi gato Bartolo
porque metió la cola entre su caldo
y porque ya era viejo y no cazaba como debía ratones
y además era caro mantenerlo,
cuando papá borracho lo mató con sus manos,
hubo una gran algarabía en casa.
Vinieron todos, todos;
mi hermana dijo guárdenme los ojos
para un par de zarcillos, y Martino,
nuestro vecino ciego, se pidió las tripitas
–sirven para hacer cuerdas de violín–
y mi mamá, que al principio lloró, lloró conmigo,
5
quiso la piel
para ponerle cuello a su chaqueta,
y los bigotes
se los pidió mi hermano Eladio, el que es mecánico,
y los cojines de sus patas fueron
lindos alfileteros
para la bruja gorda que vive atrás del patio
y es modista.
Lo que sobró lo hirvieron con sal y con cebolla.
Se lo dieron a Luis, que duerme en nuestra calle,
pues también sirve el caldo de gato para el hambre.
Yo me pedí los huesos.
Uno a uno los muerdo delante del espejo de mi hermana
porque dijo mi abuela
que al morder el que toca se vuelve uno invisible,
y eso quiero.
Piedad Bonnet
6
FUNCIONES
Expresiva o
emotiva
Las funciones del lenguaje - Cuadro resumen
INFLUENCIA/ ENFOQUE/
MODALIDAD
PERSONAS
EXPRESIÓN
ORACIONAL
Emisor
1ª persona
verbal
Representativa Contexto
o referencial
(realidad
concreta o
abstracta)
Apelativa o
conativa
Subjetivo:
sentimientos y
emociones.
Connotativa
3ª persona
Objetivo:
Informativo o
comunicativo.
Denotativa
Referencias
dentro del texto
Receptor
2ª persona
Persuasivo
Exhortativa
Exclamación
Interjección
Interrogación
Dubitativa
 Desiderativa
Suposición
Probabilidad
EJEMPLOS/
TIPOS DE
TEXTOS
¡Qué bien! ¡Ay!
delicioso,
cargantes.
Estoy aquí. Ya
veré
Expresivo
Poético
Descriptivo
Coloquial
Diarios
Enunciativa (declarativa Está lloviendo /
o asertiva).
Ha venido
Interrogativa afirmativa: corriendo.
directa o indirecta.
Científico
Expositivo
Narrativo
Exhortativa
Tú dirás /
Imperativa
díselo / Oiga,
Mandato
señor /
Orden, ruego, petición.
Márchate /
Formas vocativas
Hazlo / Ven
Publicitario.
Coloquial.
Político.
Discurso
Metalingüística Código o
o
signos de la
explicativa
lengua
(palabras
utilizadas)
Objetivo
Explicativa
(sirve para
aclarar las
palabras
usadas).
Enunciativa
Asertiva
Explicativa
Preguntas informativas
Vocabulario específico
3ª persona
Estética
o
poética
Fática
o
de contacto
Mensaje
(forma del
contenido)
1ª, 2ª, 3ª
personas
Canal
1ª, 2ª, 3ª
personas
¿Qué es un
vértice sino un
punto en que
se cortan dos
lados?
Científico
Temas
especializados
Objetivo /
subjetivo
Literaria
(recursos o
figuras)
Connotativa
Subjetivo /
objetivo
Comunicativa
Todo tipo de
modalidades
oracionales, usadas
según la intención:
propiedad, corrección,
objetividad,
expresividad, belleza o
creatividad.
Frases hechas
Muletillas de apoyo
Apoyaturas de contacto
La luz del sol
ilumina o La luz
lanza destellos
luminosos.
Expositivo
Narrativo
Poético
¿No es así?
¿Verdad? Ya,
ya / El caso es
que.../
Conversación
7
Ejercicios:
1. Buscar en diferentes fuentes, y copiar tres ejemplos cortos de cada una de las
funciones. Dar las razones por las cuales los ejemplos propuestos pertenecen a
determinada función.
2. Identificar en el texto que se presenta a continuación las funciones de la
comunicación que se manifiestan en él. Utilizar marcadores o lápices de
colores y escoger un color para subrayar cada función. Cuando se tenga todo el
texto rayado, proceder a hacer una lista jerárquica de las funciones, según la
frecuencia con que aparezcan en el texto. Extraer conclusiones.
La cola
MANUEL VICENT 18/10/2009
Cuatro generaciones ocupan un siglo. Por otra parte se calcula en cien mil millones el
número de habitantes humanos que ha pasado ya por este planeta. Imagina que ese gentío
está todo en pie agolpado a nuestra espalda formando una densa cola y cada generación se
halla separada por un metro de distancia. Si uno recorriera esa cola en sentido inverso,
como quien pasa revista a la historia, cuatro metros detrás estaría Einstein elaborando la
ley de la relatividad; a trece metros podríamos ver a Napoleón en Waterloo; dieciséis
metros más allá sería el Renacimiento con Lorenzo de Médicis, Leonardo da Vinci y
Galileo; a ochenta metros podríamos ver a Jesús de Nazaret en el Gólgota; a cien metros
aparecería Sócrates dentro de una sábana en el ágora; muy cerca estaría Buda bajo la
higuera y un poco más allá de los griegos nos harían señales con la mano algunos
faraones. Luego vendría un gran espacio muerto, tierra de nadie y habría que empezar a
contar no en siglos, sino en millones de años. Tendríamos que recorrer cuatrocientos
metros hacia atrás para llegar al neolítico. Después la cola se perdería en el horizonte y a
cuatro kilómetros descubriríamos al homo sapiens, a veinte kilómetros veríamos a un
primate manejando por primera vez el fuego, a treinta y dos kilómetros estaríamos en
Atapuerca y a trescientos veinte kilómetros llegaríamos al reino común que compartimos
un día con los gorilas y chimpancés. Sobre esa inmensa cola de cien mil millones de seres
sólo ha brillado la inteligencia en un ínfimo tramo. El resto fue un abismo antes de que
lentamente sobre esa insondable muchedumbre comenzara a clarear la conciencia. Nadie
se cuestiona hoy si el hombre de Atapuerca está en el cielo o en el infierno, pero uno se
pregunta quién sería el que introdujo en esa cola el sentido de la culpa y el castigo, quién
predicó la inmortalidad y comenzó a enterrar a los muertos, quién se coronó con unos
cuernos de oro e impuso la ley del más fuerte. Es evidente que en los últimos metros de
esa cola unos pocos héroes han conquistado la libertad entre terribles convulsiones, pero
el río humano continúa de forma convulsa y uniformemente acelerada hacia lo
desconocido. Unos metros más adelante y la humanidad ya estará plantando tomates en
otro planeta.
© EDICIONES EL PAÍS S.L. - Miguel Yuste 40 - 28037 Madrid [España] - Tel. 91 337 8200
http://www.elpais.com/articulo/ultima/cola/elpepiult/20091018elpepiult_1/Tes?print=1
Descargar