342194. . Tercera Sala. Quinta Época. Semanario Judicial de la Federación. Tomo CXII, Pág. 924. BIENES HEREDITARIOS, VENTA DE LOS. Para que la venta de bienes hereditarios sea válida, es indispensable que se efectúe con el consentimiento de todos los herederos, así como que se este en alguno de los casos en que la ley permita esa venta. El albacea debe intervenir en toda venta o enajenación de bienes hereditarios, aun cuando concurran todos los herederos judicialmente reconocidos, porque aquél representa a todos aquellos que tienen intereses jurídicos en la masa hereditaria, como son los acreedores de la herencia, los herederos y los legatarios. Por otra parte, dado el sistema mismo del derecho hereditario, no puede ser válida una enajenación de bienes de la sucesión, sin que previamente se hayan aprobado los inventarios y de los mismos resulte que existe un haber líquido patrimonial, del cual sí podrán disponer los herederos, por acuerdo unánime. Conforme al artículo 3701 del código civil de 1884, toda herencia se entiende aceptada con beneficio de inventario, aunque no se exprese, lo cual significa que no sólo se protege al heredero para que no responda con sus bienes propios de las deudas de la herencia, cuando el activo sea inferior al pasivo, sino también a los acreedores de la sucesión, el impedirse que los herederos dispongan del activo hereditario, sin estar antes garantizado el pasivo, pues de lo contrario, lo harían en fraude o en perjuicio de dichos acreedores. Al afecto, todo el sistema hereditario se orienta en el sentido de que los herederos sólo podrán disponer de los bienes de la herencia, una vez liquidado o garantizado el pasivo de la misma. Por último, no basta para que sea válida venta de bienes hereditarios, que la consientan los presuntos herederos, antes de ser reconocidos con tal carácter, en el juicio sucesorio, pues además de que debe concurrir el albacea, es necesario que el Juez haya hecho la declaratoria correspondiente de herederos, y antes de tal declaratoria, los que se reputen con tal carácter de herederos sólo pueden disponer de sus posibles derechos hereditarios. Amparo civil directo 6043/51. Quintanilla Garza José y coaga. 8 de mayo de 1952. Mayoría de tres votos. Disidentes: Vicente Santos Guajardo e Hilario Medina. Relator: Rafael Rojina Villegas. -1-