Zacatecas, Zac., Año 2, No. 58, 10 de agosto de 2015. Publicación Semanal de la Coordinación de Comunicación Social de la UAZ. Fundamental, fomentar el interés en la ciencia y el arte desde temprana edad: Alfonso Vázquez El Museo Universitario de Ciencias de la UAZ (MUC) materializa un convenio de colaboración con “Espacio Ciencia”, de Uruguay, a partir del apoyo que ambas instituciones recibieron por parte del Departamento de Educación de la Organización de Estados Americanos, específicamente de su programa Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (STEM, por sus siglas en inglés). Nos platican al respecto, Alfonso Vázquez Sosa, Coordinador del Área de Arte y Cultura (de la cual depende el MUC) y Berta Michel Sandoval, Directora de dicho museo. ¿En qué consiste el convenio de cooperación entre estas dos Instituciones que se dedican a la divulgación científica, en diferentes hemisferios? “Gracias a la gestión que hace aquí el Museo de Ciencias, se ha obtenido un apoyo muy importante para participar en una nueva experiencia que será a finales de este año en Montevideo. Para la Universidad, esto es algo totalmente gratificante, porque quiere decir que lo que se está haciendo, se está haciendo muy bien, con gran calidad, porque hay seriedad en el desempeño, en el cómo han involucrado a los niños en estas actividades. Nosotros esperamos que estas nuevas acciones que se llevarán a cabo de manera simultánea en Zacatecas y en Montevideo, puedan cohesionar los intereses y los objetivos de las diferentes instituciones que están involucradas”, nos dice el maestro Alfonso Vázquez. Por su parte, Berta Michel explica: “Este es un proyecto que nos financia en su totalidad la Organización de Estados Americanos (OEA), a través de su Departamento de Educación, de lo que ellos llaman Educación STEM. Con esto, se busca vincular instituciones que tengan más o menos los mismos objetivos y que puedan intercambiar experiencias entre ellos para crecer, hacia ambos lados”. “Este año -continúa- cuando se lanzó la convocatoria de Educación STEM, se presentaron 23 proyectos de toda América Latina y resultó que los proyectos apoyados fueron el de ´Espacio Ciencia´, de Montevideo, Uruguay y el del Museo de Ciencias de la Universidad Autónoma de Zacatecas. Ellos, en Uruguay, tienen un programa que se llama ´Escuela de Científicos´, mientras que nosotros, aquí en Zacatecas, tenemos el ´Club Infantil de la Ciencia´, que sesiona todos los sábados de doce a dos de la tarde. “Bueno, tomando como base estos dos programas específicos, en agosto vamos a enviar a tres chicas, representantes del equipo Quark, que es el que se encarga del ´Club Infantil de la Ciencia´, ellas van a ver cómo trabaja la ‘Escuela de Científicos’ de allá, van a comparar experiencias que nos permitan mejorar lo que tenemos aquí, tener ideas nuevas. Por otra parte, en septiembre nosotros vamos a recibir a tres personas de ´Espacio Ciencia´, una de ellas, la Directora de la ‘Escuela de Científicos’, para que ellos vean cómo trabajamos nosotros en el ´Club Infantil de la Ciencia´, y a partir de este intercambio, ver qué puntos de convivencia podemos explotar ya”. “Son personas con las que ya hemos trabajado, pero el hecho de tener este contacto, ´de cada quien en su lugar´, creo que nos va a enriquecer muchísimo en cuanto a experiencias, en cuanto a formas de hacer las cosas, porque luego si te en- sables de esos niños, no solamente las vean como un juego, o como un distractor”. “Los niños conviven con sus padres, conviven con sus hermanos, conviven con todo tipo de personas que se dedican a muy diversas actividades, y siempre se les ocurren preguntas, a las que generalmente respondemos: ¡Ay no estés molestando! o Después te explico, y creo que se les debe explicar en ese momento y se les debe involucrar, porque esa es la manera en que van a entender por qué vivimos como vivimos, por qué suceden las cosas, de manera que, por ejemplo, cuando un niño experimenta alguna situación médica, alguna situación deportiva, pues la entiende y además de que la entiende, aporta mucho”. “A veces creemos que al niño solamente hay que explicarle, y en muchas ocasiones hay que aprender de los niños: Cómo perciben las cosas, cómo las justifican, cómo las explican y luego terminamos entendiéndolas nosotros, porque cuando la explicación es sencilla, cuando una explicación es muy lógica, pues es más creíble que cuando ´echamos un rollo grandísimo´, ¿no? cierras en un mundo, resulta que piensas que descubres el hilo negro, o que eres muy bueno, o te vas a los extremos: o crees que eres muy bueno o muy malo haciendo las cosas. Y esta oportunidad de ver cómo trabaja otra gente, de aprender, de enterarse cómo funcionan otros proyectos, sobre todo en un lugar que está bastante apartado territorialmente del de nosotros, y encontrar puntos de coincidencia, encontrar esas generalidades que van haciendo la teoría, eso para nosotros es muy, muy importante”. “Y es muy importante, sobre todo, en el área de talleres, porque -y ésta es una opinión personal- el área de talleres es la que más se ha descuidado en el sustento académico. Hay mucha gente que hace talleres, hay gente que es extraordinariamente buena haciendo talleres, pero necesitamos escribir más sobre nuestras experiencias, ese es uno de los objetivos de Quark, creo que lo estamos cumpliendo, pero siempre se necesita hacer más”... Hay que documentar, a lo mejor estructurar bien… analizar bien cuál es la metodología de trabajo para poder compartirla y a lo mejor también para convertirla en una especie de manual que se pueda aplicar en muchas situaciones y eso a veces se nos olvida al calor del trabajo cotidiano, ¿cierto? “Exactamente... y he de decir que yo me siento muy orgullosa del grupo Quark, porque son de los primeros que lo han hecho, y ya son un referente por lo menos a nivel latinoamericano, y si me apuras un poquito, a nivel internacional... y han sido reconocidos por eso, pero siempre quiere uno más, y mientras más haga, más le entiende”, señaló Michel Sandoval. Alguien con una versión un poco más ingenua de las cosas pudiera pensar: ¿Qué es lo que hace aquí el Área de Arte y Cultura, en algo que tiene qué ver con la divulgación científica? Quien nos responde esta inquietud, es Alfonso Vázquez, y nos dice: “Bueno, primeramente porque le corresponde al área de Arte y Cultura atender las actividades de extensión de la Universidad. De esa manera, toda actividad que complemente la formación de los estudiantes, que permita aplicar lo que la Universidad trabaja, en cualquier ámbito del conocimiento, es tarea del área de Arte y Cultura”. “Aquí lo interesante es cómo a partir de dos instituciones -en nuestro caso- de Educación Superior, y en el caso de Uruguay, de un laboratorio tecnológico, se puede fomentar el interés por la ciencia desde temprana edad. Nosotros hemos podido corroborar, en el campo de las artes, la importancia de que se inicie la formación desde muy niños, una formación que los niños vean como algo en lo que pueden ser creativos, que pueden aportar muchas cosas y bueno, ya si más adelante ven que es algo a lo que se quieren dedicar, pues entonces sí que lo hagan de manera profesional”. “Y aquí, en el caso de la ciencia, a partir de cuestiones lúdicas se inicia la participación de los niños, se les va guiando, se les va orientando, se les involucra en actividades en las que ellos pueden manifestar su inquietud, su curiosidad, pueden ir participando en proyectos, en experimentos. Yo veo que, a través de los talleres, ellos ya están creando, están, de alguna manera, haciendo su aportación ahora sí a la ciencia y directamente en instituciones que desarrollan la ciencia de manera profesional. Es por lo que creo que es muy importante el apoyo para estas instituciones”. “Les hablaba de que se ha tenido la experiencia de trabajar con niños en algunos de los programas de artes y creemos que esto es algo que debe suceder en todas las ramas del conocimiento. La Universidad debe estar presente en la actividad infantil, porque es importante que los niños participen en diferentes actividades que los padres, o los respon- Claro. “Decía Einstein: una explicación elegante es muy buena, pero una sencilla, es mejor” –comenta al respecto, Berta Miche–. Así es. “Voy a intervenir yo aquí, -continúa Berta- porque alguna vez ya habíamos platicado: Porqué el Museo Universitario de Ciencias está en el Área de Arte y Cultura. Nosotros pensamos, aquí en el Museo, y creo que compartimos eso con el maestro Alfonso Vázquez, que en un mundo como el de nosotros, donde la ciencia y sus productos tecnológicos permean casi cualquier aspecto de tu vida, entonces es muy importante saber cómo funcionan esas cosas y eso también es parte de la cultura”. “Durante muchísimo tiempo -a veces más por costumbre- cuando decimos cultura nos imaginamos conciertos y exposiciones de arte plástica, y la cultura es eso, pero también es todo aquello que nos rodea, todo lo que es la obra del hombre. Entonces la ciencia y el conocimiento científico, por supuesto, son parte de la cultura y si estamos hablando desde hace mucho tiempo aquí en la Universidad de esa educación integral, entonces el arte y la cultura también tienen que ir de la mano”. Así es, y también deben de ir de la mano del conocimiento científico básico para entender cómo funciona este mundo y saber cómo movernos en él. “Sí, y además proporciona una enorme satisfacción interna. Saber de repente, cómo funciona lo que te rodea, te puede dar uno de los mejores placeres de la vida”, añadió la directora del Museo Universitario de Ciencias. “Como los que da también el Arte”, concluyó el coordinador de Arte y Cultura de la UAZ.