360722. . Tercera Sala. Quinta Época. Semanario Judicial de la Federación. Tomo XLII, Pág. 3532. INTERDICTO DE RETENER LA POSESION, LO PUEDE PROMOVER EL ARRENDATARIO CONTRA EL ARRENDADOR. No debe confundirse la acción posesoria ad interdicta, que defina el capítulo IV, sección tercera, del título segundo, libro segundo, del Código de Procedimientos Civiles del Distrito Federal de 1884, con la acción posesoria ad usucapionem, que define el mismo Código Civil, en el título cuarto, de su libro segundo. La primera, o sea la acción de interdicto de retener la posesión, se endereza contra el que pretende usurpar, de propia autoridad, una cosa, e impide tan sólo que los particulares se hagan justicia por su propia mano, y no atañe ni comprende a las cuestiones de propiedad y de posesión definitivas, (artículos 1134 y 1137 del Código de Procedimientos Civiles); y los juicios sumarísimos a que da lugar, sirven sólo para proteger, interinamente, el hecho de la posesión, (artículos 1131 y 1138); y la segunda de dichas acciones, se refiere a la posesión definitiva. El interdicto de retener la posesión, como todos los interdictos, no tiene el carácter de acción real, sino personal, según Ulpiano, título LXVII, ad edictum de su derecho romano, quien dice que, por precario se entiende el acto por el cual una persona, a ruego de otra, le concede el uso de una cosa, por el término que quiera el concedente, sin obtener la propiedad; teoría que fue aceptada en nuestra legislación, ya que el artículo 1142 del Código Civil, define el título precario, diciendo que es aquel que, sin conceder la propiedad, permite la tenencia natural de una cosa, en nombre de otro. La palabra precario es un adjetivo que califica al sustantivo correspondiente y, por tanto, es la misma su significación, cuando se aplica al sustantivo título, que el sustantivo posesión, que es aquella que se tiene con un título que, sin ser traslativo de la propiedad, concede la tenencia material de una cosa; y como según el artículo 2936 del Código Civil, el arrendamiento concede esa tenencia de la cosa arrendada, es indudable que la posesión que se basa en tal título, es una posesión precaria y que el arrendatario puede intentar, el interdicto de retener la posesión en contra del arrendador; sin que para ese caso sea aplicable el artículo 859 del Código Civil, que previene que si la posesión es de menos de un año, nadie puede ser mantenido ni restituido judicialmente, sino contra aquellos cuya posesión no sea mejor, supuesto que ese artículo se refiere al derecho a la posesión, que no puede discutirse en un interdicto, de acuerdo con el artículo 1137 del Código de Procedimientos Civiles. Amparo civil directo 2136/33. Pérez Paula. 6 de diciembre de 1934. Mayoría de tres votos. El Ministro Joaquín Ortega no intervino por las razones que expresa la orden del día. Disidente: Ricardo Couto. La publicación no menciona el nombre del ponente. -1-