experiencias de empleo de personas con

INTER EUROPA
NÚMERO 1 - Nov 2015
C A PAC E S
EXPERIENCIAS DE EMPLEO DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD INTELECTUAL
Programa de formación e inclusión laboral de la Asociación riojana Inter Europa
Enmarcado dentro del Centro CHAT
C A PAC E S
“A mí por las mañanas, abrir la puerta y que David
me diga “Buenos días Lorea” con una sonrisa de
oreja a oreja, ya puedo venir con el día torcido que
hace que se me pase”.
Lorea Unanue es la encargada de papelería de la librería
Santos Ochoa en la calle Doctores Castro Viejo y es la
responsable dentro de la tienda de David con el que
lleva más de un año trabajando mano a mano.
Como en todos los comienzos, hay un punto de
nerviosismo cuando llega una persona nueva al trabajo y
no sabes si vas a estar preparada para transmitirle como
realizarlo, pero estaba muy ilusionada ya que nos parecía
un reto muy bonito y muy positivo.“Fue conocerle y a los
diez minutos se nos había pasado absolutamente todo”,
nos cuenta Lorea. David es una persona muy alegre, es
muy trabajador y tiene unas ganas de aprender enormes.
Al principio, la figura del preparador laboral es una gran ayuda. Me parece muy importante porque te da confianza
y se la da a ellos, solucionando nuestras dudas.
Para Lorea, David aporta al equipo ganas de aprender, alegría y frescura, mucha frescura. “David entiende muy bien
lo que es un equipo, cómo te tienes que apoyar los unos con los otros”.
Me parece que es un valor añadido que la empresa apueste por un trabajador con discapacidad intelectual. Los
seres humanos somos muy distintos y con muy diferentes características y David aporta normalidad a la sociedad
de hoy en día.
“Nunca me lo hubiese imaginado, yo creía que no iba a
trabajar y al final lo he conseguido, estoy muy contento”.
David a sus 26 años se ha convertido en un gran trabajador y
compañero en la librería Santos Ochoa en la calle Doctores
Castroviejo, donde lleva trabajando desde el mes de Julio de 2014.
Sus inicios en la librería fueron difíciles ya que no sabía muy bien
como desarrollar su tarea, sumado a la vergüenza de preguntar a
sus compañeros las dudas. Para su rápida integración contó con
la ayuda de su preparador laboral, que le ha ayudado muchísimo.
Para David, hace unos años era impensable el estar en un trabajo
normalizado: “nunca me lo hubiese imaginado. Yo creía que no iba
a trabajar y al final lo he conseguido, estoy muy contento”.
El trabajo le ayuda a integrarse y sentirse cada día más parte de
la sociedad.
www.intereuroparioja.org - www.centrochat.es
NÚMERO 1 - Nov 2015
“Dani es un trabajador normal y corriente, uno más
dentro del equipo de cocina”.
Manuel Álvarez es el jefe de cocina de La Tavina, restaurante
donde trabaja Dani desde hace dos años y medio, chico de
25 años con discapacidad intelectual.
Manuel nos cuenta que los comienzos con su nuevo
compañero fueron muy buenos, nada mas allá de lo normal,
con un trato muy cordial y con mucho respeto. Para Manuel
algo que cabe destacar de Dani, es que es una persona que
tiene una predisposición y unas ganas terribles por trabajar.
“Lo normal sería que contratar a una persona con
discapacidad intelectual fuera más habitual y que todas las
empresas apostasen por ello”; Dani es un trabajador normal
y corriente y creo que es el mayor valor añadido que tiene”,
argumenta Manuel.
La relación del equipo con Dani es extraordinaria, “Es un
chico muy agradable, nos aporta muchas ganas, esfuerzo y
una gran predisposición”, nos comenta Manuel.
“Para mi familia esto significa mucho: están muy
contentos y se alegran por este trabajo”
Dos años y medio después de comenzar a trabajar, Dani de
25 años, hace un recorrido por su trayectoria en La Tavina.
Tuvo un comienzo laboral en La Tavina algo costoso ya que
nunca había trabajado en hostelería, y menos en un bar como
los que hay en la Calle Laurel, y el exceso de gente le agobiaba.
Gracias a su esfuerzo y la ayuda de su preparador laboral
ha ido evolucionando, hasta integrarse por completo en el
equipo. Dani está con la vajilla, lavando los platos y cuando
no hay mucho “jaleo” ayuda a hacer pinchos, pelar patatas o
poner la lavadora.
A Dani, éste trabajo le ha ayudado muchísimo, antes era una
persona callada y desde que está en La Tavina su actitud ha
cambiado. No se hubiese imaginado estar tanto tiempo y con
un contrato fijo. “La experiencia muy bien. Los compañeros
son geniales: son lo más para mi. Nunca me han tratado en
ningún trabajo como me han tratado aquí”.
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Mis padres están muy
contentos con mi trabajo. Un
día me dijo mi madre “Algún
día me tendrás que invitar tú
a comer en un restaurante”
María tiene 24 años y lleva dos
meses trabajando en la biblioteca
Rafael Azcona, pero, previamente,
realizó unas prácticas laborales
durante cuatro meses.
Para ella hace unos meses,
cuando estaba empezando, era
difícil creer que iba a tener la
misma soltura que tiene ahora
para realizar las diferentes tareas
que le asignan. “Me resultó difícil empezar a trabajar en la biblioteca, porque al principio no sabía como ordenar
tantos libros pero, poco a poco, he ido aprendiendo y ahora estoy muy contenta”. Ahí siempre he tenido a mi
preparador laboral para ayudarme en lo que he necesitado y resolver todas mis dudas, comenta María.
En su trabajo, disfruta de mucha variedad de tareas como ordenar libros, revistas, ayudar en la biblioteca, sellar y
grapar periódicos… pero lo que realmente le entusiasma es ordenar las películas, ya que le gusta mucho el cine.
Con toda la plantilla de la biblioteca tiene muy buena relación y está muy agradecida a sus compañeras por el
trato que recibe, por lo que intenta responder con un trabajo bien hecho.
Ana Isabel Muñoz es la directora de la Biblioteca Rafael Azcona. Nos cuenta que los comienzos fueron buenos y
fue grata la sorpresa de incorporar a María ya que no dio problemas, aprendió las tareas muy fácil y rápidamente
se integró perfectamente con la gente.
“Yo creo que nos ha venido a todos muy bien que viniera María. Ella se abre y a nosotros nos ha quitado el
miedo de tratar con gente que tiene alguna discapacidad”.
Piensa que la gran ayuda fue contar con la presencia de su preparador laboral: “ Gonzalo desde el primer
momento nos ha proporcionado todo tipo de falicidades. Cuando hemos tenido algún problema o duda,
siempre ha estado ahí para venir a resolverlo”.
María, como nos cuenta Ana, es una persona muy disciplinada y muy buena compañera, aportando la unidad al
equipo que antes faltaba.
“Ha hecho que todo el mundo se vuelque con ella y todo el equipo valora mucho su presencia”. A mi
personalmente, gracias a María, me ha quitado el miedo a tratar con gente con discapacidad”.