Unidad 9 • Manipulación y educación liberadora Manipulación y educación "Manipulación" es un influjo indirecto, inconsciente para el sujeto manipulado, mediante el cual se busca una decisión manejada que contraría a la naturaleza misma de la libertad, condicionada por factores res y circunstancias extrínsecas, controladas intencionalmente por E manipulador. Es un dinamismo opuesto a "liberación" y tiene que ver con la educación, porque puede ser ésta una manera de intervenir en las decisiones ajenas, o porque puede ser el remedio contra la manipulación y a favor de la liberación. Por este motivo, es útil con trasponer manipulación y liberación, a la vez que describir, como preámbulo preparatorio, el proceso de manipulación, desde el cual podemos comprender la liberación. Los países que están más manejados, los menos libres en verdad han sido los primeros en dar la voz de alarma y buscar, en la medid de sus fuerzas, remedio a sus males en la educación liberadora. H, sido en el Tercer Mundo, en países subdesarrollados, satélites del con cierto político internacional dominado por naciones más fuertes, donde se ha hecho oír con más insistencia el grito antimanipulador. La manipulación ha solido ser impuesta conscientemente por los "poderosos", bien por haber custodiado sus propios intereses con detrimento de los "débiles", bien porque, casi sin pretenderlo, sus movimientos han afectado negativamente a los que, indefensos, apenas si se han percatado del manejo del que eran víctimas. La manipulación, de la que nosotros tratamos, es la de signo colectivo y sociológico, aunque, como es natural, los individuos sean afectados de rechazo. Las modalidades manipulativas son muchas: política, socioeconómica, moral, axiológica, sexual, publicitaria, etc. 1-a manipulación política es la coartación del libre y espontáneo desarrollo de los pueblos, con solapadas intenciones en provecho de los grupos activos y con menoscabo de las naciones alienadas y manejadas Y con menoscabo de las naciones alienadas y manejadas por otras.1 Los países políticamente manipulados han sido aquellos que han estado sojuzgados y subyugados por otros más fuertes, en estado de colonización, de dependencias ideológica o de cualquier otro tipo de dominio. La manipulación socioeconómica, de ordinario, es el fundamento en el que se han apoyado otras clases manipulación, puesto que desde las primeras manifestaciones del desarrollo industrial moderno, la riqueza de los pueblos, el poder adquisitivo de su moneda, la balanza de pagos, la renta per cápita, el producto bruto y otros criterios semejantes han sido las verdaderas causas ocasionales de la 1 López Trujillo, A. Liberación marxista y liberación cristiana, B.A.C., Madrid, 1974. manipulación. Las clases sociales elevadas han manejado a las que están bajo ellas en el ranking público, por lo que se ha producido una auténtica lucha entre ellas, tal y como detectó e hizo pública la doctrina comunista en sus comienzos; y los económicamente “poderosos” han tenido en sus manos los hilos de la existencia de los menesterosos.2 La manipulación religiosa y moral ha sido también una realidad en las familias, en las comunidades, en las instituciones escolares..., aunque muchísimas veces se haya hecho imperceptible tanto para los manipuladores como para los manipulados; ésta fue la acusación de quienes ya en el siglo XIX exigían neutralidad o laicismo en la instrucción y la educación, por más que ocurrieran también ellos en otra manipulación ostensible: la del absentismo y la pasividad en temas tan trascendentales.3 La manipulación axiológica transtrueca la escala tradicionalmente considerada estable o inmutable de valores, convierte al hombre en hambriento de novedades, crea confucionismo, contribuye a la pervivencia del “cuarto mundo” –el del subdesarrollo moral-, cambia las estructuras familiares, invierte las preferencias ilucionadas y masifica a los hombres, evitándoles la molestis de tener que pensar, porque otros confeccionan credos y slogans en su lugar; es la manipulación más espantosa y la que más atenta contra la dignidad y la libertad del hombre.4 La mamipulación publicitaria es el tributo que nuestra sociedad, negativa en este aspecto, paga a la avanzada técnica de comunicación de masas, que está en manos de las empresas publicitarias, agencias de noticias y dueños de cadenas de radiotelevisión, de periódicos, etc.5 Como parcela muy atendida por la manipulación publicitaria está el trato dado al sexo ante la opinión pública, faceta explotada por el capitalismo y la política de mercados para captar la atención del hombre de la calle en anuncios de bienes de consumo, en publicaciones “porno”, en “sexshop” (tiendas de objetos y libros relacionados con el sexo), en “Teatro.sex”, etc., etc. En todas estas modalidades de manipulación, la libertad resulta herida, menoscabada u obstaculizada, creando una situación de dependencia y heteronomía contrarias al desarrollo de las personas y los pueblos.6 La educación, que bien planeada y dirigida, realiza al hombre la libertad, es medio manipulativo y vejación de la dignidad humana cuando los adultos la usan con objetivos limitadores y alienadores.,, La escuela es una institución social que corre el peligro de coartar la iniciativa personal del ser en desarrollo, ya que toda institución social mira más al provecho colectivo que al personal. La escuela no es excepción. Contra esta amenaza que acecha a la actividad escolar, se han propuesto teorías individualizadas y personalizadas, que buscan cohonestar el grupo con los individuos, o sea, la institución con sus miembros; fruto de esta precaución es la constitución de pequeños grupos, de la individualización y de la personalización. La institución social es una creación de la comunidad, y no puede sustraerse a la ideología, la política y los esquemas mentales de la propia comunidad; estos fines, pretendidamente buenos para 2 Millán Puelles, A. Economía y libertad, Confederación Española de Cajas de Ahorros, Madrid 1974. López Trujíllo. Op. Cit. 4 Otero, O.F. Educación y manipulación. Eunsa Pamplona, 1975, págs. 74-80. 5 Navarro Valls, J. La manipulación publicitaria, Dopesa, Barcelona, 1971. 6 Otero, O. F. Op. cit., págs. 87-103. 3 la colectividad, pueden ser destructores de iniciativas y originalidades, contrarios a los ideales en la educación. La auténtica educación no existe sin el respeto y cultivo de la libertad interior del educando, que evoluciona desde la hetero. nomía y dependencia hacia la autonomía e independencia. La primera forma de manipulación de la institución escolar es la axiológica, aquella que, sin permiso del educando, contagia los valores, actitudes, prejuicios, estereotipos y opinión pública. La escuela no puede ejercer su misión sin trasmitir la tradición de un país y una comarca a los niños, y ese marco cultural encorseta al educando sin permitir la espontaneidad y la libre iniciativa. La escuela del pasado manipulaba a los alumnos con una cultura petrificada, estatificada y prefabricada; la escuela del presente les manipula por los medios de comunicación de. masas, que acercan sugestivamente el pensamiento adulto, revestido de tecnología, a la indefensa mente infantil, a pesar de todos los manifiestos liberalizadores con que se presenta. El naturalismo volvería a acusar a la sociedad de degeneradora, y cantaría líricamente los encantos de la naturaleza virginal del niño, nimbada de espíritu y bellezas personales. No es conveniente abandonar al niño y dejarle a su talante improvisador, en lugar de insertarlo en las macrocomunidades, donde el niño es una gota de agua diluida en el anchuroso piélago, en el que las marejadas de los slogans, los grupos de presión y el pluralismo ideológico los asedia. El proceso de socialización, al que coopera la educación, alerta al educador para no arriesgar demasiado el candor primigenio de la humanidad con los lavados cerebrales que más o menos solapadamente vulneran la individualidad. Las declaraciones de las Naciones Unidas sobre los derechos del hombre y los del niño postulan, como primer principio, el respeto a libertad y en la libertad. El proceso educativo no puede lesionar derechos, máxime cuando los recipientes del proceso son seres criterio propio. La antropología moderna detesta con repugnancia manipulación, el entrometimiento en la existencia individual de ida hombre; modelo de esa repugnancia, el existencialismo de K. Jaspers El hombre definido como libertad absoluta no permite que se pisen las exigencias de a libertad, porque nadie tiene derecho a configurarle de distinta manera a como el libremente quiere realizarse. La educación, proceso internacional nunca podrá pisar los limites de esta exigencia. Cada una de las instituciones sociales que se abrogan el derecho de intervenir en la educación del niño, y que defiende agresivamente este privilegio, no puede ser tan celosa de sus prerrogativas, que moleste a otras instituciones o al propio educando. Las falacias de cualquier teoría jurídica, política o moral que son capa de protección lesionan los derechos del educando, son manipulación. Ni la familia, ni la iglesia, ni el Estado pueden manipular, extremo en el que incurren cuando crean models y modelos de conducta familiar eclesial o estatal. ¿Hasta que punto pueden estas instituciones manejar, sin usar? ¿En que virtud de que privilegio pueden hacer hombres, obligados, sin su consentimiento, a repetir los patrones de comportamiento de la familia, la Iglesia o el Estado? Si la educación es un proceso de socialización., es igualmente un proceso de personalización, y ninguna dé ellas se realizará con detrimento de la otra. En el caso presente, es la socialización la que puede menoscabar la personalización, sacrificando más los intereses individuales al grupo que los del grupo al antojo y conveniencia de los individuos. La antropogénesis, que esto es en definitiva el proceso educativo, no se cumple a cabalidad, sin romper los moldes que obstaculizan el desenvolvimiento natural del hombre. Los procesos de aculturación colocan también en la malla de pensamientos impersonales y sociales al educando. La educación es armónica sólo si la personalización, socialización y aculturación se equilibran, sin llegar a exageraciones, que fuerzan y violentan el ser del hombre. Todo esto es también manipulación. Hay quienes han pretendido hacer servir la educación a la sociedad y no al individuo, procediendo entonces con criterios de sociologismo y de nacionalismo, próximos a los totalitarismos, que tan lesivos son de la libertad y tan proclives q, la manipulación. La educación es un servicio directo al individuo e indirecto a la sociedad.7 Hasta se ha llegado a manipular, cuando se airean fórmulas liberadoras y democráticas, en tanto la manipulación soterránea no sea denunciada, debido a que el término "liberación" ha sufrido una evolución semántica, con la que juegan francotiradores de la educación. No se puede pregonar la desalienación, si lo que realmente se está haciendo es distorsionar realidades históricas y políticas para hacer el propio capricho, bajo la defensa aparente de liberación. Es preciso ponerse en guardia frente a los totalitarismos que se presentan como democracia tolerantes en educación. K. Jaspers, fiel a sus principios, en las interpretaciones de la historicidad del hombre, descarta a todo totalitarismo porque en él es manipulado el educando, en la persecución de u; tipo de modelo humano nuevo, que no es otro sino el apto para el fácil manejo político de un determinado sistema; entre los totalitarismo., cita al nazismo, al comunismo, al fascismo italiano... A veces los sistemas políticos elogian la liberación para, producido el deshielo, manipular más cómodamente. Otra manera de manipulación escolar es el adoctrinamiento, tal y como se ha dicho en el capítulo sobre la instrucción y la educación, De aquí, que los campos donde la manipulación suele ser mayor es en el cívico-político, en el religioso y en el moral; lógicamente las instituciones sociales del Estado, Iglesia y familia son las que pueden abusar de su situación privilegiada para avasallar y manejar. Jamás ideología alguna religiosa o política puede manipular, porque esto no es la ayuda y el auxilio necesitados por el educando, sino el abuso del fuerte y del poderoso. El Concilio Vaticano II ha declarado: "La dignidad de la persona humana se hace cada vez más clara en la conciencia de los hombres de nuestro tiempo, y aumenta el número de quienes exigen que los hombres en su actuación gocen y usen de su propio criterio y de una libertad responsable, no movidos por coacción, sino guiados por la conciencia del deber..." "Los hombres de nuestro tiempo son presionados de distintas maneras 7 García Hoz, V. "La educación liberadora de Paulo Freire", en Revista Española de Pedagogía, 32 (1974), pág. 166. y se encuentran en el peligro de verse destituidos de su propia libertad de elección."8 Educación liberadora La educación liberadora es un movimiento de amplia base, de enraizamiento filosófico muy dispar, coincidente siempre en entender la educación como el medio más apto para evitar la manipulación y fomentar el proceso de autorrealización en la libertad, manera suprema de conseguir plenitud humana dentro de la dignidad. La educación, en cualquier teórico de la educación liberadora, tiene siempre una meta común: la libertad y su ejercicio. Las tres finalidades de toda educación liberadora son evitar las servidumbres y ataduras, potenciar las posibilidades del educando; y la orientación del alumno a los valores dignos del hombre. En ningún momento se consigue liberar de esclavitudes, si el educando no toma conciencia de sus posibilidades, las cuida, las ennoblece y las dirige a la consecución de metas dignas del hombre; la educación liberadora no es un romanticismo, sino un compromiso del educador con promesa de que va a ser respetuoso con los educandos y les va a preparar para que se auto realicen y sirvan mejor a la sociedad. Liberar a un hombre no es entregarle al salvaje desenfreno de su instintividad; esto sería haberle hecho más esclavo. Liberar a un hombre no es prescindir de dogmas religiosos, para endiosar e idolatrar a deidades de piedra; liberar no es indisciplina; liberar no es capricho arbitrario, que conculca los derechos de quienes le rodean y exigen para sus derechos un respeto; liberar no es provocar la violencia; liberar no es entrega a la naturaleza aviesa. Liberar es todo lo contrario. La educación liberadora tiene como meta superar, en cuanto sea posible, una serie de condicionamientos que empobrecen al hombre, hacen estrecho el horizonte de su existencia y empequeñecen su potencialidad. La libertad está enormemente condicionada, y esos condicionamientos son los que han de ser maduramente aceptados o desarticulados y desmontados, si fuere posible. Toda manipulación es un condicionamiento; toda educación debe ser una liberación. La primera limitación á superar es la ignorancia, qué entenebrece la vida, porque presenta cerrados horizontes que en realidad son abiertos y prometedores. La educación liberadora declara guerra sin cuartel al analfabetismo, supremo mal en materia educativa, por imposibilitar la comunicación humana en todas las direcciones y pudrir en soledad al hombre que no puede fecundarse con los gérmenes de la verdad ya descubierta; destruye la carencia de medios de expresión, hoy potenciados por los avances de la psicología y la tecnología; persigue el desconocimiento de la profesión y de las novedades en ella existentes, porque impide una mayor satisfacción personal en su ejercicio y priva a los demás de los beneficios que una adecuada puesta a punto proporciona. La educación liberadora se opone a la superficialidad, o erudición a la violeta, que engaña a quien es su víctima, creyendo que domina y sabe lo que prácticamente desconoce o ignora. La segunda limitación a superar es la estrecha visión del mundo, que recluye en un círculo reducido al educando; la educación liberadora presenta una visión 8 Dignitatis humanae, Declaración sobre la Libertad religiosa, núms. 1 y 8. internacional y cosmopolita, una comprensión de las ideologías ajenas, una preocupación por las necesidades de los demás, un aprecio por la profesión de los otros, un sentido de la vida en la que los demás tienen un sitio con derecho propio, una actitud dialogante en lugar de la violencia. Alguien ha recapitulado estas concreciones bajo la palabra generosidad.9 La tercera limitación a vencer es la socioeconómica, que corta las alas de la imaginación creadora a muchos hombres, imposibilitados de realizar sus ilusiones, porque los prejuicios sociales o la cortedad económica los hacen irrealizables. La liberación por la educación dota al individuo de un poder adquisitivo a través de su trabajo profesional, para el cual se ha preparado de acuerdo con sus atractivos y capacidades, sin que haya sido obstáculo el color de su piel, la clase social de su familia o la posición económica. La cuarta limitación es la poca socialización, que entorpece la convivencia pacífica. La educación liberadora predispone para la aceptación de los demás, el respeto a lo ajeno y la necesidad de coexistencia y convivencia, a pesar de las diferencias naturales de todo género. Prescindiendo de esta contrapartida de la liberación mediante la educación, como contraria a toda manipulación, hay dimensiones de la educación liberadora, que reflejan la faceta positiva del proceso educativo. La educación libera de situaciones de dependencia o alienación. En realidad, el primer paso para liberar es que los pueblos o las personas tomen conciencia de las situaciones de dependencia, para proceder inmediatamente a su superación. Esta toma de conciencia la produce la educación, bien sea de una manera sistemática o asistemática; la educación sistemática libera curando los prejuicios y estereotipos, me, diante la revisión de planes de estudios, de programas y de cosmovisión manipuladora escondida en lecturas, textos, estilos escolares, etc.; la educación a sistemática libera a través de las comunidades de base, grupos juveniles, medios de comunicación social... La educación liberadora de la palabra, en el sentido dado por Paulo Freire a la "palabra". Esta acción liberadora es el desarrollo de un pensamiento crítico, que llena de significado propio y personal a los vocablos. Se distinguen cuatro estadios en la adquisición del Pensamiento crítico: el estadio de intransitividad, caracterizado por la imposibilidad de pronunciar cada cual "su palabra"; se le llama también estadio de la intransitividad o magicidad, porque en lugar de discurrir a base de pensamiento formal, lo hacen con el pensamiento mágico. simbólico, consustancial a los niños entre los tres y los siete años, y a los pueblos primitivos. La liberación de la palabra encauza el diálogo entre los hombres, sólo posible cuando no haya un sentido reverencial y mitológico por los dominadores y opresores, sino que prevalezca el sentimiento de igualdad entre los mortales, y cuando el dominador y opresor se persuadan de su arrogada prevalecía, en reto desafiante a los necesitados y oprimidos. El segundo estadio es el de la conciencia transitiva, que significa el conocimiento de las causas de 9 Isaacs, D. La educación de la generosidad, ICE de la Universidad de Navarra, OF.163. las cosas, pero de un modo superficial, infantil; esta conciencia transitiva se caracteriza por el fanatismo en los juicios, la emotividad en el razonamiento, el miedo ante el peligro, la idolatría de un líder petulante sabelotodo, la falta de creatividad, enemigo de la igualdad humana... El tercer estadio es el de la conciencia transitiva crítica; se distingue por el conocimiento profundo de la realidad y sus causas, por un saber científico, por adultez emocional, por independencia en el juicio, por el compromiso que adquiere ante los demás. Y, por fin, el cuarto estadio es el de la conciencia transitiva política; es decir, el compromiso se extiende entre los miembros de la sociedad, se interviene personalmente en busca del bien común, pero se respeta siempre las opciones que no concuerdan con las personales. La educación al servicio de la comunidad es otra de las dimensiones de la educación liberadora. Esta dimensión presupone la convicción de que nadie se educa en solitario, ni nadie se auto realiza sin los demás, pensamientos frecuentes en los escritos de K. Jaspers. La comunidad educativa, de la que tanto se ha escrito, es el marco en el que puede estimularse la liberación; y esta comunidad educativa comprende el equipo docente a los grupos de alumnos, a la comunidad maestroalumno equipo la comunidad familiar...10 La educación liberadora de Paulo Freire Paulo Freire, brasileño, natural de Recife, nació el 19 de septiembre de 1921, del matrimonio formado por un oficial de la Policía militar, espiritista y por una mujer católica; en este hogar aprendió el respeto por las ideas 'de los otros, lección que le dio su padre, no hostigando o despreciando las creencias de su madre.11 La crisis económica de 1929, con un traslado migratorio, permitió a Freire, pequeño aún, palpar en su propia carne el hambre y la indigencia. Hechos los estudios previos a los universitarios, comenzó la carrera de Derecho, durante la cual se ayudaba con la enseñanza de la lengua portuguesa en escuelas secundarias. A los veintitrés años contrajo matrimonio con una profesora de primaria, circunstancia que tuvo gran repercusión en el futuro de su existencia, pues abandonó muy pronto el ejercicio de la abogacía, para interesarse por la filosofía y sociología de la educación. Su labor alfabetizadora comenzó en 1962 por el Nordeste, la región más pobre de Brasil, con una población de 10 000 000 de analfabetos sobre los 25 millones de habitantes. Su sistema pudo ampliarse inmediatamente a todo el país, apoyado por el Gobierno Federal. Durante el curso de 1963-1964 se extendieron a casi todas las capitales de los Estados brasileños los cursos para formar animadores y monitores. El golpe de estado de 1964 derrocó a Goulart, acusado de procomunista, al que sustituyó el general Castelo Branco. Estaba programada ya la fundación de veinte mil círculos de cultura, que habían de durar tres meses, capaces de alfabetizar en este 10 Yáñez, C. "Educación y liberación", en Educadores, 16 (1973), págs. 305-319; Requena, I. La filosofía de la liberación latinoamericana, comunicación al III Simposio Nacional de Antropología Filosófica, Barcelona, 1976; Ardiles, O., y otros. Hacía una filosofía de la liberación latinoamericana, Bonum, Buenos Aires, 1973; Dussel, E. Para una Ética de liberación latinoamericana, Siglo XXI, Buenos Aires, 1973 11 Freire, P. El mensaje de Paulo Freire. Teoría y práctica de la liberación, Marsiega, Madrid, 1972, pág. 19. breve tiempo a dos millones de brasileños. El golpe de estado cortó en flor el movimiento alfabetizador de Paulo Freire, que terminó en la cárcel, donde permaneció sólo algunos meses, tras los cuales se refugió en Bolivia y luego en Chile. En este último país estuvo tres años, colaborando en la emprendida Reforma Agraria. En 1967 se incorporó a la Harvard Universidad, como profesor. En 1970 se trasladó a Ginebra, como consejero del Consejo Mundial de las Iglesias. Paulo Freire sufrió, de joven, una crisis religiosa durante un año; pero después ha sido fiel a su catolicismo, del que ha criticado aspectos criticables, sinceridad que le ha merecido la repulsa de algunos círculos confesionales católicos. Filosofía y sociología de la educación. La teoría educativa Paulo Freire se fundamenta en su antropología: el hombre no sólo está en el mundo, sino que es con el mundo, expresiones aprendida, e literatura existencialista y revitalizadas con su visión cristiana de inmudaniedad; el hombre es digno de respeto, como persona; el cono miento humano es participación dialógica de quienes conocen el mismo objeto. La educación es creación de cultura en el seno de los "Círculos de cultura", instituciones creadas por Freire para alfabetizar. Los alfabetizados en ellos distinguían perfectamente el mundo de la naturaleza y el mundo de la cultura; el primero era el creado por Dios; el segundo, el transformado por el trabajo humano de los campesinos, que eran así conscientes de su capacidad creativa cultural. Partían de las experiencias cotidianas, comentadas en un diálogo participativo con metodología activa; la crítica de estas experiencias era anterior al aprendizaje lector y escritor, y se convertía en motivación para iniciarlos. La educación es creación de capacidad dialógica, de acuerde con su doctrina sobre el conocimiento humano. El hombre es, por naturaleza, dialógíco; pero, como todas las potencialidades que adornan a los mortales, han de ser desarrolladas y perfeccionadas. He aquí uno de los objetivos de la educación. Freire inculcó a los monitores de sus Círculos de Cultura que no manipularan a los campesinos, que no impusieran sus ideas a los educandos, sino que convirtiesen e! proceso educativo en un proceso dialógico. El diálogo es un encuentro de los hombres para la pronunciación del mundo.12 "La educación es diálogo. Su dialogicidad, sin embargo, no empieza cuando se encuentran educador y educando en situación pedagógica. Debe iniciarse antes; en la etapa de preparación programática."13 El diálogo educativo es el antipolo de la manipulación, del adoctrinamiento, de la imposición de las ideas del educador, de la invasión cultural, que pisa los derechos de la persona humana. Exige al educador una serie de virtudes, que le acercan al educando para dialogar con él: humildad, fe, amor, esperanza y pensamiento crítico.14 La educación es comunicación y no extensión, entendida como trasmisión de cultura. La tesis de Freire se opone a la "concepción bancaria de la educación", la cual, 12 Freire, P. Sobre la acción: cultural, ICIRA, Santiago de Chile, 1971, pág. 52. Op. cit., pág. 57. 14 Maeztu, F. "Paulo Freire, educador y alfabetizador en Latinoamérica", en Analecta Calasanctiana, 15 (10973), pág. 204. 13 como su denominación indica, piensa que educar es acumular datos como se hace hoy en los "bancos de datos" o en las fases alimentadoras de los ordenadores y computadores. Nada más opuesto al modo de ser dialógico del hombre. En cambio, la comunicación educativa es un contacto, una relación, un diálogo.15 La educación es "decir palabra" para los otros, con lo cual, además de "decir palabra" para sí mismo, al entender y comprender las experiencias, se pronuncia la palabra para los demás. La educación es liberación, termino divulgado por Freire, para denotar una concepción del proceso educativo contrapuesta a la "manipulación” y a la "domesticación". La liberación es desalinear al hombre. que vive enajenado por las ataduras y servidumbres por las se siente extraño a sí mismo; es la superación de las limitaciones insinuadas en el numeral anterior. La educación es, desde el punto de vista sociológico, liberación del oprimido, que acusa la de pendencia absoluta del opresor y la escasa libertad del esclavizado. Esta liberación personal y social ha sido el ideal de Freire en sus campañas alfabetizadoras y en la difusión de sus ideas por el mundo occidental. Nadie educa a nadie; nadie se educa solo. Los hombres se educan entre sí mediatizados por el mundo; por tanto, no se requiere auto educación ni heteroeducación, sino una educación dialógica en el mundo. La educación es concientización, o sea, despertar de la conciencia crítica, crear capacidad de enjuiciamiento, sacar al sujeto del silencio y la pasividad inconscientes.16 El proceso de concientización se extiende también al educador, que en el diálogo con el educando toma postura propia y se compromete. No sirven los irresponsables y los maestros evasivos ante los interrogantes continuos de los alumnos. Con la palabra "concientización" se expresa una vieja prerrogativa del ser humano, consistente en un proceso por el cual el hombre toma conciencia de sí mismo y del mundo circundante. "Una vez más los hombres, desafiados por la dramaticidad de la hora actual, se proponen a sí mismos como problema. Descubren qué poco saben de sí..., y se preocupan por saber más. Por lo demás, en el reconocimiento de su poco saber de sí radica una de las razones de esa búsqueda... El problema de su humanización, a pesar de haber sido siempre desde un punto de vista axiológico, su problema central; asume hoy el carácter de preocupación ineludible."17 Concientización es descubrir el sentido de las cosas, tener una visión crítica, razonar los acontecimientos. Concientización es luchar por la liberación propia y la de los alumnos; es la respuesta dada por el hombre a los acontecimientos de Ja historia, que le desafían y le interpelan. Concientización es lucha contra la deshumanización, que priva al hombre de libertad en el trabajo. La concientización es una toma de conciencia de la contradicción sociológica opresor-oprimido, porque cada una de las 15 Freire, P. ¿Extensión o Comunicación?, ICIRA, Santiago de Chile, 1971. Toda la obra está dedicada a desarrollar este pensamiento. 16 Freire, P. La educación como práctica de la libertad, ICIRA, Santiago de Chile, 1972, págs. 119-133. 17 Freire, P. Pedagogía del oprimido, Siglo XXI, Buenos Aires, 1972, pág. 37; Ruiz, J. I.; Morales, P: Marroquín, M. Paulo Freire. Concientización y andragogia, Paidós, Buenos Aires;:1975. dos partes intervinientes están alienados, y porque es distinta la alienación de cada hombre en las múltiples realidades sociales de los países. Las opresiones tienen el mismo signo que tienen las manipulaciones. son políticas, religioso-morales, socioeconómicas, publicitarias, etc.18 La concientización comienza por una insatisfacción y una frustración testificadoras de que en el mundo las cosas no marchan tan bien con, pudieran. La insatisfacción no debe llevar a un complejo formado ante tanta insistencia de que somos incapaces, enfermos, indolentes19 La concientización es darnos cuenta del opresor que cada uno de nosotros llevamos dentro, hacer lo posible por erradicarlo y crear un hombre nuevo: "Por eso, la liberación es un parto. Es un parto doloroso. El hombre que nace de él es un hombre nuevo, hombre que sólo es viable en la y por la superación de la contradicción opresores-oprimidos, que en última instancia es la liberación de todos. La superación de la contradicción es el parto que trae al mundo a este hombre nuevo-n¡ opresor ni oprimido-, sino un hombre liberándose."20 A la concientización ha de seguir una "praxis liberadora". La verdadera concientización es un compromiso de luchar por la liberación de nuestros hermanos oprimidos. La educación alcanza así un sentido fuertemente social, pero muy distinto del profesado por el capitalismo, que lanza diatribas contra el analfabetismo, porque le considera una lacra. En el Brasil de Freire se llegaba hasta inculpar a los oprimidos de su analfabetismo, fomentado por la pasividad y flojedad de los sufridos aborígenes. El analfabetismo era considerado como una enfermedad contagiosa, lo que permitió a Freire hablar de una "concepción bacteriológica del analfabetismo".21 El analfabetismo debía ser suprimido, porque se convertía en testimonio de explotación y de abuso; era como una mancha negra extendida por todo el mapa patrio; era una humillación para la clase dirigente. No fueron éstos los sentimientos que indujeron a Freire a terminar con el analfabetismo; a él le movieron sus principios antropológicos y católicos. Había que alfabetizar, porque lo exigía la dignidad humana. El método liberalizador. No es principalmente el aspecto didáctico el que nos interesa, sino la teoría que subyace. Las características fundamentales del método liberador son la actividad, el carácter dialógico y la participación del educando, fácilmente deducibles de los textos transcritos y de los conceptos de Freire dados ya a conocer. El método liberador comprende cinco fases: Primera fase: obtención del universo vocabulario. Se parte de las palabras generadoras, las cuales descompuestas en sílabas dan pie para crear palabras nuevas mediante combinación original y múltiple. El universo vocabulario es un inventario de 18 Agüero, E. J. Concientización y liberación, en Sal Terrae, 41 (1973), págs. 376-378. Freire, P. Pedagogía del oprimido, pág. 64. 20 Freire. Op. cit., pág. 45. 21 Freire, P. Sobre la Acción Cultural, capítulo dedicado a la alfabetización de adultos. 19 las palabras que tienen mayor si significación y carga emotiva para el grupo a alfabetizar. Segunda fase: selección del universo vocabulario. Del inventario de palabras recogidas en la fase primera se selecciona aquellas que van a ser usadas, de acuerdo con los criterios de riqueza fonética, dificultad fonética y resonancia pragmática. Tercera fase: creación de situaciones existenciales. Se organizan situaciones existenciales, que tengan relación con alguna de las palabras generadoras; son situaciones problemáticas, vividas por el grupo, capaces de suscitar diálogos y debates, con los cuales se verifican la alfabetización y concientización. Las situaciones existenciales creadas son locales, del entorno directo que rodea a los alfabetizadores; pero fácilmente se ligan a ellas los asuntos comarcales, regionales, nacionales e internacionales, que tienen una similitud con aquellas analizadas por el grupo. Las principales existenciales son diez. Cuarta fase: elaboración de fichas, como medios auxiliares para los coordinadores en su trabajo de animación. Estas fichas no han de ser rígidas, sino tales que permitan al coordinador una elasticidad grande, dentro de la cual la actividad y originalidad de los alumnos puede tener cabida. Quinta fase: elaboración de fichas con familias de fonemas en torno a las palabras generadoras seleccionadas. Las palabras generadoras son 17 y, por consiguiente, son 17 las fichas que componen esta fase última. El método liberador termina en lo que Freire califica como decir palabra. Irlo basta con enseñar a leer, ni a silabear, sino que la meta fijada es el despertar crítico del analfabeto, y que junto con el proceso de alfabetización se haga el de concientización. Las palabras generadoras son la ocasión para plantear una serie de cuestiones, relacionadas con las situaciones más frecuentes y problemáticas en la vida del alumno para, a través de ellas, crear cultura y modificar la naturaleza. Juicio personal sobre la educación liberadora de Freire. Las contribuciones positivas de P. Freire a la teoría educativa no son excesivas, porque tal vez simplificó intencionadamente las bases filosóficas, a fin de que la gente sencilla del campesinado brasileño o chileno captasen con facilidad el alcance de su pretensión. No es original su campaña alfabetizadora, porque se ha hecho en muchas naciones, sobre todo si éstas son subdesarrolladas. Dentro de Hispanoamérica, marco geográfico en el que se desenvolvió Freire, Colombia inició en la década de los cincuenta una campaña nacional alfabetizadora, sirviéndose del sistema ideado por el equipo de la radio Sutatenza, en el Departamento de Boyacá. Se organizaron grupos similares a los círculos de cultura, cuyo eje era un monitor y un aparato de radio, que retransmitía las lecciones desde los estudios centrales, completando estos programas un semanario de larga tirada, en el cual los campesinos ya alfabetizados encontraban soluciones a sus dificultades agrícolas y se les apuntaban métodos nuevos de estilo de vida, de higiene, de cultivos, etc. Es decir, la elogiable finalidad de los círculos de cultura de Freire no fue original. Las bases filosóficas y teológicas están tomadas de la antropología existencialista (carácter dialógico del hombre, exaltación de la liber. tad. . .) , de la teología católica (igualdad de todos los hombres, dignidad del cristiano, modificación de la naturaleza por el trabajo...). A pesar de todo, hasta hay quienes piensan que se tergiversa o compromete el sentido trascendente de la vida.22 En materia educativa Freire ideó una praxis, muy cargada de sentí. do, apta para los grupos destinatarios, discutible didácticamente, pero sin que estuviese amparada por una teoría educativa original y seria. Freire es un símbolo del clamor unánime de las personas inquietas el Tercer Mundo; contagió a los dotados de espíritu igualitario, anticapitalista y redentor del oprimido; ha sido fiel a su pensamiento cristiano, a pesar de que sus acomodaciones - sean inculpadas teológicamente de distorsión y cierto alejamiento de la pureza ortodoxa; ha tenido un gran coraje para enfrentarse a los oligarcas y terratenientes, sufriendo la privación de libertad por ser fiel a sí mismo. En este sentido, Freíre es admirable. Por otra parte, tiene las cualidades de todo líder; Freire es un líder de la alfabetización campesina en una nación del Tercer Mundo. Buscar algo más en Freire, es olvidar que ha sido traductor e intérprete de difusos y hondos sentimientos humanitarios muy difundidos entre personas sensibles a lo social en esas latitudes. Freire ha sido un sociólogo de la educación, de carácter práctico, y se ha servido de la educación para liberar al hombre y hacer política contraria a la de las oligarquías rectoras de las naciones sudamericanas. Tal vez tenga más importancia en el terreno político que en el de teoría de la educación. El proceso educativo equivale más a una revolución clasista que a un perfeccionamiento humano de personalización. Textos de Freire son: "En verdad, no hay humanización sin liberación, así como no hay liberación sin una transformación revolucionaria de la sociedad de clases, dentro de la cual no cabe la humanización."23 "La educación para la liberación... es la que se propone, como praxis social, contribuir a liberar a los seres humanos de la opresión en que se hallan, en la realidad objetiva. Por esto mismo, es una educación política, tan política como aquella que, sirviendo a las élites del poder, se proclama, a pesar de todo, neutra. De ahí que esta educación no pueda ser puesta en práctica, en términos sistemáticos, antes de la transformación radical de la sociedad. "24 "Mi respuesta no puede ser otra que mi praxis histórica; en otras palabras, mi praxis revolucionaria."25 22 García Hoz, V. "La educación liberadora según Paulo Freire", en Rev. Esp. de Pedag., 32 (1974) , Págs. 171-174. 23 EL mensaje de Paulo Freire, pág. 148. 24 Pedagogía del oprimido, pág. 8. 25 Mensaje.... pág. 141. Es uno de tantos intentos de usar la escuela y la educación para transformar la sociedad. El hombre individual, imposible de suprimir en la actividad pe dagógica, queda subsumido por lo social; la liberación predicada por Freire es social, más que personal. Al individuo, para liberarse, le resta una sola salida: la acción revolucionaria que, a su vez, pone en peligro extremo la libertad y dignidad del hombre, por otro lado exigida para todos. García Hoz es tajante: "Si desde un punto de vista humano es insostenible la postura ideológica de Paulo Freire. desde un punto de vista cristiano resulta más claramente inaceptable."26 Otras teorías liberadoras La experiencia de Summerhill. El autor de esta experiencia fue A. S. Neill, quien en las cercanías de Londres fundó en 1921 la escuela de Summerhill. A. S. Neill poseía una gran formación psicológica, psicoanalista de profesión y pedagogo por inclinación. En su escuela el respeto a la libertad se convierte en culto, porque está persuadido de que "la libertad funciona", de que el niño ama la vida y se interesa por ella. Falleció en-octubre de 1973. En el prólogo a la obra maestra de A. S. Neil, el psicoanalista Erich Fromm resume el decálogo ideológico que fundamenta la teoría educativa del psicopedagogo inglés: 1. fe en la bondad del niño; 2. el fin de la educación es trabajar con alegría y hallar la felicidad; 3. la educación debe ser intelectual y afectiva; 4. la educación ha de tener en cuenta las necesidades psíquicas y las capacidades del niño; 5. la disciplina impuesta y los castigos producen temor y éste lleva a la hostilidad; 6. la libertad no se confunde con el libertinaje, y los individuos deben respetarse mutuamente; 7. el maestro ha de ser verdaderamente sincero; 8. el niño ha de hacerse independiente de sus padres y de quienes le sustituyen a medida que evoluciona y se desarrolla; 9. el sentimiento de culpabilidad predispone al niño a vincularse con la autoridad; 10. la escuela no educa religiosamente. La aventura pedagógica de Summerhill es una de tantas, cuyo leit motiv es la auto gobernación (self governed). Neill contradice a la sociedad actual, en el seno de la cual se crean individuos manipulados y "dóciles"; a la escuela tradicional, que instruye pero no educa; a los padres engolosinados por la ganancia de dinero, en lugar de atender a sus hijos; a las estructuras sociales que toleran y fomentan la manipulación; a la "antivida" que es lo opuesto a lo intentado por Neill en la llamada "escuela de la felicidad", donde los niños sienten la alegría de vivir. Toda represión, formación moral impuesta y castigo es manipulación y, en el fondo, los adultos que conciben así la educación buscan su bien particular y no el de los niños, plasman en sus hijos o 26 Ibid. discípulos su propia imagen existencial, pero no permiten que el se en desarrollo dé con su propia vida y encarne su sí-mismo y su individuo dualidad: "El niño golpeado será antivida, porque «antivida» son sus padre, su sociedad, su educación, su religión, sus leyes...". Por el amor d Dios, dejad que la gente viva su propia vida.”27 El niño necesita ser aceptado como es, en lugar de ser estructurad y educado según el patrón de los adultos y su cultura; el niño acepta do es feliz, porque puede expansionarse y auto realizarse en la libertad: "Mi mujer, los profesores de Summerhill y yo mismo somos amados por los niños, porque nosotros los aceptamos y esto es todo lo que ellos desean.”28 La educación no es trasvase de nuestra cosmovisión a la cabeza del niño, sino una aceptación de la suya. La consecuencia de la manipulación es que existen muy pocos niños autónomos (Sel f-regulated). Summerhill es una escuela preconizadora de la anti-pedagogía, en el sentido que se ha dado a la fórmula similar "anti-psiquiatría"; es decir, no se puede educar en una escuela tradicional, caracterizada por la disciplina férrea y la desconfianza en el niño, que no nace moralmente indiferente, sino inclinado al mal. Pueden verse mezcladas doctrinas antropológicas y religiosas en estas aseveraciones, muchas de las cuales pueden ser revisadas o discutidas; pero en el fondo, sin que se proclame el libertinaje, liberan al niño de una sociedad opresora y esclavizante del pequeño, que le ha exigido, cuando su lozanía vital le pedía despilfarro de energías y originales formas de ser, la aceptación y adaptación a los estilos adultos, por más que, gracias a la psicología evolutiva,. haya desaparecido ya la idea de que el niño es un "homúnculo" o pequeño hombre. La escuela de Summerhill es una contestación a la escuela tradicional, y toda contestación tiene contenidos parcialmente aceptables y una intención auténtica de repulsa contra los abusos de capa de moralización o socialización. Hay que hacerle también la misma crítica que a la de Freire: es más la proclamación de una revolución social que la renovación de la tarea educativa, mereciéndo su doctrina sobre la bondad de la naturaleza humana las mismas reservas que se han formulado habitualmente contra el naturalismo pedagógico.29 Las pedagogías no-directivas. Puesto que la pedagogía de la liberación tiene como principio primero el respeto a la libertad del educando, la no imposición de ideas sin razonarlas y el pleno desarrollo de las capacidades humanas, las teorías directivas, es decir, aquellas que dan importancia a la autoridad como reguladora de la escuela aun con detrimento de la iniciativa del educando, son más Manipuladoras y menos 27 Neill, A. S. Hablando sobre Smmerhill, Ed. Mexicanos Unidos, México, 1974. pág. 118. A. cit., pág. 124. 29 Ropence, J. Summerhill, Laia, Barcelona, 1973. 28 liberalizadoras, que las no-directivas, más paidocéntricas que magistrocéntricas, más liberales que disciplinarias, mas abiertas que cerradas a la originalidad. Entre las pedagogías no directivas están gran parte de .las concertadas en el movimiento de la escuela activa o nueva, de las cogestionadas y autogestionadas por los alumnos, de las "centradas en el niño"... Las teorías no-directivas están animadas por dos corrientes de pensamiento: en primer lugar, las ideas paidocéntricas y liberalizadoras de la educación nueva; y, en los años que han seguido a la Segunda Guerra Mundial, por la transferencia de los postulados defendidos por el psicoterapeuta norteamericano Carlos Rogers, que propugna una psicoterapia centrada en el cliente o no-directiva. Rogers expuso, por vez primera, sus ideas sobre la no-directividad en una de sus más famosas obras,30 y dio a su sistema el calificativo de "Client-Centered Theraphy" (1951) (Terapia centrada en el cliente). Y uno de los divulgadores de estos postulados aplicados a la educación ha sido Paretti.31 En una línea liberadora están las teorías de K. Jaspers, de Ivan de Somosaguas, de la educación personalizada... El halago de las teorías no-directivas es evidente, y de ahí su popularidad, aun no habiendo sido contrastadas empíricamente. Están más en el estilo actual democrático de libertad religiosa, de liberación social, de iniciativa y originalidad; sin embargo, se han levantado ya voces críticas y revisionistas sobre la no-directividad, inculpándolas de notorios defectos.32 30 Counseling and Psychotherapy, 1942. Libertad y relaciones humanas Marova, Madrid, 1972; Las contradicciones de la Cultura y de la pedagogía, Studium, Madrid, 1971. 32 Snyders,y . O. Ou vont pedagogies no-directivos?, P. U. F., París, 1974. 31