Los esquemas de construcción en argumentación jurídica Jean Claude Tron Petit Intereses y Stories Desde un enfoque procedimental, las sentencias son la síntesis de las pretensiones deducidas —en su calidad de tesis y antítesis— dentro de un contexto dialéctico y contradictorio. Es así que la decisión del conflicto, la juris dictio, se toma a partir de la litis propuesta. La pretensión que aduce una parte, es una «acción estratégica» que se completa con la respuesta de la contraria, excepciones y defensas. El objetivo de las partes es «construir» estratégicamente los presupuestos para que el juez pronuncie una decisión que favorezca sus intereses. El juez a su vez y a partir de la confrontación dialéctica toma los resultados, los organiza, depura y estructura adecuadamente como presupuestos o antecedente para construir su decisión. En los juicios, pero también sucede en los procedimientos administrativos, la realidad empírica es la que las partes se proponen y pretenden construir, ex profeso y de antemano, a través del planteamiento de circunstancias tales que impliquen un estado de cosas al que podemos llamar resultado, del que deriven las consecuencias que les convenga. Es así, que los interesados o partes, conforme a sus particulares intereses y a partir de las circunstancias del caso, susceptibles de ser probadas, diseñan un enunciado que sea indicativo de una conducta que permita asociarla con ciertas consecuencias. El escenario así propuesto, serán los hechos del caso que se busca sean asociados o vinculados con ciertas reglas o normas que permitan construir un argumento acorde y que justifique las consecuencias deseadas. Pretensión y litis Las pretensiones judiciales son argumentos de las partes interesadas, dirigidos a ganar en un debate y convencer de cierta posición que se espera sea reconocida por el decisor. Por tanto, deben satisfacer, en principio, los requisitos mínimos o de validez de la lógica formal, en la medida que son la expresión y el instrumento para hacer valer un interés en el juicio y obtener una decisión favorable. A estos planteamientos se deben sumar las oposiciones o refutaciones y, el conjunto, en un contexto dialéctico, es lo que 1 conforma la litis, el conflicto y los problemas que el debate plantea y la sentencia debe atacar o resolver pronunciándose de manera motivada. Concepciones y justificación de los argumentos La existencia y entidad de un problema y, más concretamente de un conflicto, genera una diversidad de situaciones por las que surge la necesidad de argumentar. Para autores como Alexy (2007: 33-36), la argumentación es mucho más que metodología y aplicaciones de la lógica, en la medida que debe dar cuenta de valoraciones, de ahí la importancia y necesidad de su estudio. Cuando hay supuestos en los que la decisión de un caso singular no se sigue lógicamente ni de las normas presupuestas, ni de enunciados sólidamente fundamentados de un sistema cual-quiera (juntamente con enunciados empíricos), ni puede ser fundamentada concluyentemente con ayuda de las reglas de la metodología jurídica, entonces al decisor le queda un campo de acción en el que tiene que elegir entre varias soluciones a partir de normas jurídicas, reglas metodológicas y enunciados de sistemas jurídicos no determinados ulteriormente. Así, Larenz habla del "reconocimiento de que la aplicación de la ley no se agota en la subsunción, sino que exige en gran medida valoraciones del aplicador”; Müller es de la opinión de que "una Jurisprudencia sin decisiones ni valoraciones... (no sería) ni práctica, ni real""; Las preguntas: (1) ¿dónde y en qué medida son necesarias las valoraciones?, (2) ¿cómo actúan estas valoraciones en los argumentos calificados como "específicamente jurídicos"?, y (3) ¿son racionalmente fundamentables tales valoraciones?, no pueden ser contestadas de antemano en esta introducción, sino que constituyen el objeto mismo de esta investigación. Atienza (2006: 13) distingue el significado de argumentación respecto a método de esta manera: En mi opinión, la diferencia en el uso que hoy se da a la expresión «argumentación jurídica» frente a la de «método jurídico» radica esencialmente en que la primera tiende a centrarse en el discurso jurídico justificativo (particularmente, el de los jueces), mientras que «método jurídico» (por lo menos entendido en un sentido amplio) tendría que hacer referencia también a otra serie de operaciones llevadas a cabo por los juristas profesionales y que no tienen estrictamente (o no solo) un carácter argumentativo: por 2 ejemplo, encontrar el material con el que resolver un problema o adoptar una decisión en relación con un caso (en la medida en que se distingue de la justificación de esa decisión). Agrega el autor que hay una teoría estándar de la argumentación –dirigida a calificar especialmente las decisiones judiciales–, pero él propone otra que se ocupe también de los argumentos de todos los operadores jurídicos1. De hecho, lo que puede llamarse «teoría estándar de la argumentación jurídica» parte de una distinción clara (que no suele encontrarse en los cultivadores más tradicionales de la metodología jurídica), por un lado, entre la decisión (judicial) y el discurso referido o conectado con la decisión; y, por otro lado (en el plano del discurso), entre el de carácter justificativo y el descriptivo y explicativo; la teoría de la argumentación jurídica de nuestros días se ocupa, casi exclusivamente, del discurso justificativo de los jueces, esto es, de las razones que ofrecen como fundamento —motivación— de sus decisiones (el contexto de la justificación de las decisiones), y no de la descripción y explicación de los procesos de toma de decisión (el contexto del descubrimiento) que exigiría tomar en cuenta factores de tipo económico, psicológico, ideológico, etc. El razonamiento jurídico no puede prescindir de tres concepciones o dimensiones de la argumentación2 que aparecen combinadas e íntimamente conectadas y que, en conjunto, determinan la corrección del razonamiento y la calificación del argumento como bueno y eficaz. Atienza (2006: 12) hace un parangón de los conceptos de lógica que luego aplica y utiliza para describir las concepciones de argumentación que propone. Respecto al concepto de lógica formal dice: Dicho en forma aproximativa, la lógica —la lógica formal— entiende los argumentos como encadenamientos de enunciados, en los que, a partir de algunos de ellos (las premisas) se llega a otro (la conclusión). Al concepto material le atribuye esta peculiaridad: Otros enfoques pueden consistir en ver la argumentación como una actividad, una técnica o un arte (el ars inveniendi) dirigido a establecer o descubrir las premisas; 1 Lo que implica incluir a quien promueve un juicio y a su contraria, a las autoridades legislativas y administrativas, etc. 2 En este sentido seguiré a Atienza (2006) en cuanto a la división que desarrolla en la obra de las tres concepciones de la argumentación. 3 Finalmente, respecto a la concepción pragmática expresa que: … como una técnica dirigida a persuadir a otro u a otros de determinada tesis; o como una interacción social, un proceso comunicativo que tiene lugar entre diversos sujetos y que debe desarrollarse conforme a ciertas reglas. Concepción formal El razonamiento jurídico debe, en la medida de lo posible3, atender los requisitos de la lógica formal que racionaliza y justifica el paso de las premisas a la conclusión por la relación de inferencia; esto es, permite justificar que a partir de ciertas circunstancias se arribe a determinada conclusión. Prueba de ello es que, conforme a las leyes y precedentes judiciales, las sentencias deben considerar los principios procesales de congruencia, exhaustividad y motivación, so pena de ser nulas. Igualmente, los razonamientos de las partes mediante los que se plantean pretensiones o defensas, deben también observar corrección formal. La evaluación formal de los razonamientos implicará que sean atendidos varios aspectos como: Identificar las premisas y la conclusión dentro del pasaje, aspectos que en ocasiones no aparecen claramente conformados o delimitados sino que en una narrativa aparezcan mezclados. Sin embargo para validar una conclusión deben aparecer en las premisas todos los elementos y presupuestos necesarios para justificarla como inferible y no como una imposición arbitraria. Distinguir razonamientos deductivos de inductivos, es importante porque de ello dependerá el valor y la certidumbre de la conclusión que puede oscilar entre verdadera o probable en grados distintos. Traducir mediante proposiciones a notación lógica, poniendo de relieve los conceptos o ideas esenciales para determinadas reflexiones o inferencias. Esto implica construir los esquemas formales o estructurales pertinentes 3 Concretamente para resolver los casos fáciles o atender y dar respuesta a problemas simples dentro de los casos difíciles; también para presentar ordenada y aceptablemente la conclusión o desenlace final de los planteamientos, sean de las partes o del juez. 4 Es a partir de lo anterior que resulta posible construir la prueba formal de validez (validity) por una serie de razonamientos conectados o correlacionados (ars iudicandi o arte de la verificación). Es así que a un problema de carácter formal le basta una respuesta de lógica deductiva basada en un esquema bien formado que haga válida la inferencia mediante el paso de las premisas a la conclusión. Lógica formal, aspectos generales de: Inferencias y silogismos La lógica es una ciencia formal, parte de la filosofía, cuyo campo de estudio es la inferencia, mediante el estudio de los métodos y principios utilizados para distinguir el razonamiento correcto del incorrecto. Para Quine, “La lógica es la tecnología de la deducción” (Moreso 2006: 13). En sus orígenes, la lógica tradicional se basaba, únicamente, en el silogismo como razonamiento fundado en el juicio categórico aristotélico. Hoy día la lógica utiliza como unidad básica la proposición y las reglas de inferencia en la argumentación discursiva. La operación intelectual consta de tres etapas o formas elementales del pensamiento que son: Concepto o Idea. Es la simple aprehensión o conocimiento de modo inmaterial de la esencia de una cosa, la representación y conceptualización de la realidad, sea esta, tangible o intangible. Es determinar algo en la mente después de examinadas las circunstancias, el pensamiento expresado con palabras, denominado término. Hay términos que, de manera certera, describen a los conceptos y permiten una comunicación diáfana de las ideas; sin embargo, también hay otros donde rige la ambigüedad o vaguedad, propia de los lenguajes naturales4. 4 Un ejemplo son los conceptos jurídicos indeterminados que apenas son indicadores generales y abstractizantes de la realidad, que adolecen de vaguedad o indeterminación y su calificación es difícil, lo que requiere acudir a circunstancias concretas para concluir si son o no subsumibles en el contenido del término, en la medida que implican propiedades tanto descriptivas o incluso valorativas. Algunos ejemplos son: Interés público, apariencia de buen derecho, proporcionalidad de las contribuciones, abuso de poder sustancial en el mercado relevante, etcétera. 5 Juicio. Es la operación del entendimiento que compara y atribuye relaciones de correspondencia o repugnancia entre conceptos o ideas. Es una afirmación o negación entre un sujeto y un predicado que se expresa por medio de una proposición, la que puede ser verdadera o falsa. La afirmación consiste en unir dos o más conceptos, en tanto que la negación es la separación. Razonamiento. Consiste en obtener nuevos juicios o proposiciones a partir de los ya conocidos. Es la operación intelectual que permite transitar de lo conocido a lo desconocido, lo que compromete dos operaciones mentales: abstraer y juzgar. Se compone, esencialmente, de juicios denominados: antecedente y consiguiente. La expresión se da mediante argumentos. Argumentar significa dar razones o pruebas de lo que se afirma o predica, expresiones que vienen a ser el contenido de las premisas En efecto, la argumentación y, en especial la dialéctica, es un proceso dinámico que presupone un diálogo donde los oponentes, mediante razonamientos que intercambian, buscan ya sea probar la realidad o existencia de hechos o bien, demostrar la verdad de una tesis. La lógica formal permite conseguir un primer control de la corrección o validez de los argumentos que se expresan en los juicios5 y opera en el contexto estructural, a través de acatar, en la medida de lo posible, las reglas de la inferencia, lo que se conoce como justificación interna. Sin embargo, conviene matizar que la corrección o validez plena del argumento, requiere de un segundo control en cuanto al contenido, pertinencia y suficiencia de las premisas, que incide sobre la materia o sustancia y es la justificación externa de los enunciados; algo que supera y está fuera del alcance de la lógica formal o deductiva. 5 Tanto por las partes como por el juez. Esta validez lógica es independiente de la verdad o falsedad de las premisas. Importa solo la sintaxis de las expresiones lingüísticas, prescindiendo de la semántica y significado de las expresiones. 6 La lógica formal recopila, generaliza, abstrae y reconstruye en fórmulas, las relaciones aceptables entre proposiciones, lo que permite verificar, sólo en ese aspecto, la corrección6 de los razonamientos. Es sólo una herramienta intelectual y no la fuente de la verdad. El énfasis se pone en la forma, estructura o esquema formal del argumento y en la noción de inferencia, sin que importe analizar los criterios de verdad o corrección de las premisas. Es así que un esquema deductivo 7, asegura que la conclusión también lo sea. La corrección —formal— viene dada por usar las reglas de inferencia, dentro de las que destacan el modus ponens8 y la analogía. Es así que en lógica clásica, las inferencias válidas exigen que la conclusión sea consecuencia necesaria de las premisas, pues de otra suerte se incurre en cometer falacias lógicas. Principios fundamentales de racionalidad La lógica tradicional se funda en ciertos principios fundamentales, también denominados supremos, primeros o de racionalidad. Son proposiciones evidentes por sí mismas y, por ende, indemostrables, que rigen el proceso del pensamiento y del conocimiento, teniendo tal amplitud que se aplican a las demás ciencias particulares. El principio de no contradicción establece que una cosa no puede ser idéntica a su contrario, no pueden ambas coexistir. La forma esquemática dice así: "Es imposible que A sea B y no sea B." 9. Razón suficiente, todo lo que es tiene una razón de ser y suficiente. 6 Es limitado el alcance del control, que se reduce sólo al aspecto formal, ajeno al contenido de las premisas y poco útil en razonamientos no monótonos o dialécticos, propios de la argumentación pragmática. Echave (2002: 20 y 3). 7 Partiendo de que las premisas son verdaderas o válidas, un resultado que previamente debe haberse alcanzado. 8 En las proposiciones condicionales cuya fórmula es: p→q (si p entonces q), resulta que quién comete una falta debe ser sancionado, por tanto, si se afirma que se da p, es indiscutible que se dé q. 9 Por ejemplo, no es posible que un objeto sea un libro y no sea, a la vez, un libro. Es posible pensar que el objeto pueda ser algo ahora y no ser ese algo después, pero no al mismo tiempo. Así, lo que antes fue un libro puede ser ahora basura o cenizas. Yo puedo estar aquí ahora y no estar después, pero no al mismo tiempo.http://www.conocimientosfundamentales.unam.mx/vol1/filosofia/m01/t01/01t01s02b.html#null 7 El principio de razón suficiente, formulado por Leibniz, establece que "todo objeto debe tener una razón suficiente que lo explique". Lo que es, es por alguna razón, "nada existe sin una causa o razón determinante"10. El principio de tercero excluido, proclama que algo no puede ser intermedio entre dos contradictorios. Establece que dos juicios contradictorios (pretensión fundada e infundada) no pueden ser simultáneamente falsos, por lo tanto, al demostrarse la falsedad de un juicio queda establecida formalmente la verdad del otro. No existe una tercera posición, no existe término medio. Igualmente se aplica a dos propiedades contradictorias como a dos conceptos opuestos11. Inferencia Inferir significa sacar una consecuencia o deducir algo de otra cosa, obtener de los antecedentes un consecuente12. Es la operación intelectual mediante la cual, de unos juicios dados —que nos resultan conocidos—13 los correlacionamos14 y es así que inferimos otro juicio que no contemplábamos de acuerdo al siguiente esquema15. La ilación o conexión constituye la forma lógica del discurso16. 10 http://transformacionpersonal.blogspot.mx/2011/07/principio-de-razon-suficiente.html Si decimos, por ejemplo, que "el perro es un mamífero" y que "el perro no es mamífero", no podemos rechazar estas dos proposiciones como falsas, pues no hay una tercera posibilidad, http://www.conocimientosfundamentales.unam.mx/vol1/filosofia/m01/t01/01t01s02b.html#null. Lo mismo sucedería si a una persona en un juicio se le califica como culpable y como no culpable de cierta falta. 12 Diccionario de la Lengua Española, Real Academia Española. Supongamos que sobre mi mesa de trabajo aparece algo de café y una taza volteada, por mi experiencia asociada a esas evidencias, puedo inferir que se volcó y el café se derramó en la mesa. 13 Se les denomina antecedentes o premisas que conjugan aspectos abstractos (Vg. reglas o máximas de experiencia) y otros concretos (Vg. circunstancias, datos o información de casos específicos). 14 Mediante un método ya sea inductivo o deductivo, lo que viene a ser una comparación. 15 Siguiendo con mi ejemplo, el antecedente sería tanto que tenía una taza con algo de café como que esta se volteó y el líquido se derramó. La ley de la gravedad, asociada a una diferencia de niveles provoca el derrame que son la consecuencia y el café derramado es el consecuente. 11 8 Para la lógica formal los argumentos correctos —desde la perspectiva de la inferencia— son válidos. Esto depende, a su vez, que se den tres factores: Corrección formal del argumento; Verdad de las premisas; y, Verdad de la conclusión. La solución o respuesta a los problemas jurídicos cotidianos no se alcanza, en todos los casos, mediante lógica formal y especialmente con y por medio de razonamientos deductivos, pues lo estricto y certero de sus reglas, especialmente las sintácticas, son estándares que no siempre se pueden observar y obtener; por lo cual, no alcanza para resolver todos los problemas, especialmente los difíciles o aquellos en que se carece de información suficiente; sin embargo, no por ello podemos ni debemos dejar de inferir. Surge así la exigencia de contemplar e idear esquemas de inferencia más amplios y flexibles, tal como los que se deducen de razonamientos inductivos o por defecto, lo que encaja en las ideas de Toulmin. El giro obedece a que no siempre se dispone o se parte de premisas o enunciados verdaderos, absolutos, completos o universales, por tanto bastará que los antecedentes o premisas tengan la calidad de aceptables, verosímiles o probables, aunque de manera preliminar, para justificar la conclusión17. Deducción El razonamiento deductivo parte de categorías generales para hacer afirmaciones sobre casos particulares. En un razonamiento deductivo válido la conclusión debe poder derivarse necesariamente de las premisas aplicando a éstas algunas de las reglas de inferencia según la metodología de transformación de un sistema deductivo o cálculo lógico. Dicho de otro modo, la conjunción o producto de todas las premisas cuando es verdadero, es decir, todas y cada una de las premisas son verdaderas, entonces se implica la verdad de la conclusión. 16 Puede ser deductivo, inductivo, analógico, etcétera. Un ejemplo al canto es cuando en un juicio solo disponemos de indicios y máximas de experiencia, conceptos ambos que admiten excepciones, son solo generalidades probables, denominadas también prima facie, preliminares o derrotables por casos específicos que los descalifiquen bajo ciertas circunstancias. 17 9 La forma de los argumentos deductivos puede ser: Modus ponendo ponens afirmando la existencia del antecedente o condición, se afirma el consiguiente o condicionado. Es la forma deductiva más simple y su expresión es: Si P entonces Q18. P (existe)19. Entonces, Q20. Modus tollendo tollens negando la existencia del consiguiente se niega el antecedente o condición; también llamado razonamiento indirecto, es el nombre formal para la prueba indirecta o inferencia contrapositiva. La tautología modus tollens toma las siguientes formas de ley lógica: Si P, entonces Q21. No Q22. Entonces no P23. Uno de los grandes límites del razonamiento deductivo, estriba en que la información disponible es, las más de las veces insuficiente, tanto en el ámbito de los hechos, lo que incide en la falibilidad de la premisa menor; pero también en cuanto a leyes, reglas o generalidades que incide en la premisa mayor; esto es, a partir de solo un número incompleto de ocurrencias o sucesos intentamos o pretendemos construir conceptos absolutos, lo que da lugar a que emerjan casos de excepción que deterioran nuestras 18 Quien paga el precio de un bien tiene derecho a la entrega de él. Juan ha hecho pago del precio. 20 Juan tiene derecho a exigir la entrega del bien adquirido. 21 Si llueve habrá cosecha. 22 No ha llovido. 23 No habrá cosecha. 19 10 concepciones. La tendencia en las ciencias sociales es preferentemente proponer hipótesis preliminares, siempre sujetas a correcciones o revisiones24. En los juicios que cotidianamente se tramitan surgen una serie de incidencias o problemas que conducen a la derrotabilidad de planteamientos y decisiones, entre los más importantes están los siguientes: ¿Tenemos información suficiente? El contexto de aseveraciones ¿Es universal? ¿Es verdad lo que aducen las partes? ¿Podemos procesar información y problemas planteados con lógica formal? La información que al juez le allegan ¿es preliminar y sesgada? Los puntos de vista ¿Siempre están suficiente y exhaustivamente razonados y probados? Inducción El razonamiento inductivo es una modalidad del razonamiento no deductivo que consiste en obtener conclusiones generales o específicas a partir de premisas que contienen datos particulares. Dentro del razonamiento inductivo se distinguen dos tipos: Completo: se acerca a un razonamiento deductivo porque la conclusión no aporta más información que la ya dada por las premisas. En él se estudian todos los individuos abarcados por la extensión del concepto tratado y se establece una conclusión para todos los objetos o eventos de dicha naturaleza25. Incompleto: la conclusión va más allá de los datos que aportan las premisas. La mejor aplicación consiste en recabar un buen número o cuando menos relevante 24 Supóngase que tenemos como hechos probados que Juan mató a Pedro, la conclusión es declararlo culpable de homicidio, sin embargo si eso ocurre por una legítima defensa que no habíamos considerado, el resultado cambia radicalmente. Otro ejemplo, se actualiza una causa formal de ilegalidad de un acto administrativo, lo que conllevaría a declarar la nulidad, pero si no generó indefensión o trascendió a la decisión, es un supuesto de ilegalidades no invalidantes, insuficientes para anular el acto que debe conservarse por razones de interés social. 25 Se analiza un muy alto número de casos en que se calienta agua pura a 100ºC (al nivel del mar) y se advierte que cambia el estado de líquido a gaseoso, es la esencia del método científico donde el establecimiento de las reglas derivan de la observación. 11 de casos particulares o indicios y asociarlos a máximas de experiencia o generalidades para inferir, sólo como una probabilidad, la existencia de hechos o circunstancias antes desconocidas; es el fundamento de la prueba indiciaria o circunstancial26. Este tipo de razonamiento es el que rige la validez y justificación de argumentos basados en pruebas indiciarias o circunstanciales donde, sólo a partir de ciertos indicios asociados a máximas de experiencia o generalidades, es factible construir como hipótesis un cierto hecho o estado de cosas pero siempre sujeto a ser debatido, pues apenas tendrá un margen de probabilidad que puede ser más allá de toda duda razonable o apenas ser una probabilidad que prevalece sobre los cuestionamientos en contra. También hay métodos abductivos o basados en la experiencia, sucede cuando una persona experta solo con ciertos resultados, plantea como hipótesis de trabajo asumir la probabilidad de una regla para luego comprobar si existen las peculiaridades de un determinado caso27. Silogismo Silogismo es el argumento que consta de tres proposiciones, la última de las cuales se deduce necesariamente de las otras dos. También se le conoce como esquema formal, instrumento técnico o paradigma del razonamiento deductivo. Los procesos judiciales, usualmente, comienzan por planteamientos basados en enunciados disyuntivos en razón de las pretensiones opuestas —contrarias o 26 http://es.wikipedia.org/wiki/Razonamiento_inductivo. Los niños de 5 años son traviesos, es una máxima de experiencia, si veo a uno que se comporta muy bien, infiero que está enfermo o cansado o arrepentido de una travesura; para despejar la duda debo recabar más información, ensayar líneas de investigación y argumentación pero es claro que algo anómalo sucede. 27 Los razonamientos a la Sherlock Holmes son claros indicadores de ello. Si el perro no hubiera conocido bien al visitante, entonces hubiera ladrado. El perro no ladró. Por lo tanto, el perro conocía bien al visitante. La experiencia y dominio de lo que usualmente acontece en casos típicos, lleva al experimentado decisor a llegar rápidamente a una conjetura que luego debe ser corroborada pero que, prima facie, conduce a la línea de investigación más probable o exitosa. 12 contradictorias— de las partes, lo que permanece y subsiste durante toda la instrucción.28 A ∨29 E —acción o excepción será fundada—. Al momento de aproximarse a la decisión el juez a partir de las circunstancias elabora enunciados hipotéticos —en razón de las normas existentes que orientan a tomar una u otra alternativa de solución, Vg., si se dan los elementos del tipo P entonces se aplica la sanción Q, regido por el enunciado lógico jurídico de carácter hipotético P→Q30, y Finalmente concluye con un enunciado categórico, concretando la razón a cierta parte que adujo ciertas pretensiones, por ejemplo la acción intentada por A es fundada A ˄ F31 Subsunción En el silogismo judicial32 debe darse una justificación lógico-jurídica en dos aspectos: Justificación interna, tiene que ver con la validez lógica de la inferencia que lleva de las premisas a la conclusión o argumento. La corrección y control de calidad depende que la conclusión C derive lógicamente de las premisas P, requiere una relación de implicación, esto significa que los elementos o términos de C aparezcan consignados y previstos en P, no puede haber algo nuevo o no previsto en los antecedentes. Justificación externa, consiste en controlar la solidez del contenido de las premisas, la fáctica debe ser o pretender la verdad, en tanto que la jurídica debe expresar el contenido y sentido de la norma o institución aplicable prevista en el sistema jurídico vigente. Lo peculiar e ideal en las decisiones judiciales es que la quaestio facti sea concreta y descriptiva de todas pero solo las circunstancias relevantes de un caso particular, en tanto la quaestio iuris sea abstracta, de carácter normativo o prescriptivo y con pretensiones de universalidad o cuando menos de ser plausible. 28 El indiciado es inocente o culpable. Esta notación indica una disyunción o es A o E 30 Esta notación lógica se debe leer: Si P, entonces Q. 31 Indica una conjunción o correspondencia de acción con el calificativo o cualidad de fundada. 32 Tanto en lo concerniente al planteamiento de las pretensiones de las partes como al razonar el juez al decidir. 29 13 Es a partir de estos elementos que formalmente se construye el argumento básico cuyos elementos son: Datos, asociados a una Regla ad hoc que legitima el paso o induce a la Decisión o Conclusión. La explicación esquemática sería: Si S33, entonces C34 Premisa normativa Existe H35, Premisa fáctica Dado H, corresponde aplicar C Decisión Los procesos judiciales, basados fundamentalmente en un esquema dialéctico, en tanto que siempre deben conducir o llegar a una decisión única, se asemejan al método hipotético-deductivo o de contrastación de hipótesis. Principios de lógica formal aplicados a las sentencias Los tradicionales principios procesales que rigen en toda decisión jurisdiccional de congruencia36, exhaustividad37, no contradicción, motivación formal38 y justificación interna; son resultados que se obtienen de aplicar al proceso judicial las reglas de lógica formal. Razonamiento justificativo, regla de la razón y ponderación Los casos normativamente difíciles39, no pueden ser resueltos mediante esquemas racionales, propios de la lógica deductiva, sino mediante criterios de razonabilidad que en muchos casos deben apelar a factores extraños al entorno o ámbito jurídico formal. En estos casos hay valores, razones, bienes, consecuencias o derechos fundamentales que deben alcanzarse como objetivos o fines constitucionales de máxima entidad, 33 Se refiere al supuesto de hecho, una descripción de conductas o circunstancias que deben darse para que se impongan las consecuencias 34 Son las consecuencias o sanción derivada de la norma que establecerá si una conducta es: Prohibida, obligatoria o permitida. 35 Indica que se ha realizado una opción o posibilidad dentro del universal de S, H es un hecho relevante o coincidente con el supuesto normativo o de hecho 36 Lo decidido debe corresponder exactamente a lo alegado por las partes, lo excepcional es la suplencia. 37 La totalidad de planteamientos que constituyen la pretensión o la defensa deben ser atendidos. 38 Debe existir una: Explicación t justificación de lo decidido, al grado que el inconforme disponga de información suficiente para refutar lo decidido. 39 Cuando no existe norma para decidir, la existente no satisface los principios o valores del orden jurídico o la solución normativa se contiene en principios que pueden colisionar con otros. Un claro ejemplo de ésta última hipótesis son los casos donde se juzga la constitucionalidad de una ley. 14 prioridad o jerarquía pero no hay reglas específicas para determinar el cómo ni para establecer de manera unívoca el cómo esos propósitos se pueden conseguir40. El razonamiento que debe primar en esos casos, estará basado en establecer y determinar ciertos fines y la elección o invención de diversos medios para alcanzarlos o conseguirlos en el grado óptimo posible. La decisión estriba entonces en calificar el mérito, eficacia y eficiencia de tales medios o recursos. Resulta elocuente lo dicho al respecto por la Corte Constitucional de Colombia: TEST DE RAZONABILIDAD-Pasos. El test de razonabilidad sigue precisos pasos que le imprimen objetividad al análisis de constitucionalidad. Las jurisprudencias nacional, comparada e internacional desarrollan generalmente el test en tres pasos: 1. el análisis del fin buscado por la medida, 2. el análisis del medio empleado y 3. el análisis de la relación entre el medio y el fin. Cada uno de estos pasos busca absolver diversas preguntas, según se trate de un test estricto, intermedio o leve.41 Para determinar si la elección del medio empleado ha sido la más adecuada, primándose el óptimo, se evalúan razones y posibilidades: Fácticas, jurídicas, morales, utilitarias, realistas, etc. Como pueden existir varios medios que satisfagan el fin pretendido o anhelado, se debe hacer una ponderación o balanceo entre las alternativas posibles para elegir y establecer de entre ellos cual es el mejor. Nuevamente la Corte Constitucional de Colombia aporta un interesante referente, en tratándose de cómo decidir un caso de discriminación: RAZONABILIDAD DEL TRATO DESIGUAL-Relación de proporcionalidad entre el trato y el fin perseguido. El concepto de proporcionalidad sirve como punto de apoyo a la ponderación entre principios constitucionales: cuando en la solución de un caso particular, dos o más derechos entran en colisión, porque la aplicación plena de uno de ellos conduce a la reducción significativa del campo de aplicación de otro u otros, corresponde al juez constitucional determinar hasta dónde tal reducción se justifica a la 40 Suponiendo que lo pretendido constitucionalmente es el desarrollo sustentable, artículo 25, todo se basará en prever las mejores posibilidades de los dos objetivos de acuerdo a las circunstancias del caso. Un ejemplo es la sentencia que aparece en http://jeanclaude.tronp.com/index.php?option=com_docman&task=cat_view&gid=176&Itemid=40 41 Sentencia de la Corte Constitucional de Colombia C-673/2001 http://www.corteconstitucional.gov.co/ 15 luz de la importancia del principio o derecho afectado para el ordenamiento jurídico, en su conjunto. La proporcionalidad (lato sensu) exige la verificación de tres supuestos, a saber: (i) la adecuación de la medida al fin perseguido (sea útil o idónea); (ii) la necesidad de dicho medio ante la inexistencia de otra herramienta que resulte menos onerosa, suficiente y/o idónea (la más eficiente); y, por último, (iii) la proporcionalidad (strictu sensu) en si misma considerada, es decir, el juicio sobre la improcedencia de un sacrificio en la igualdad que altere valores y principios de mayor entidad para la vigencia de un orden constitucional. En esta medida, sólo si se demuestra que un tratamiento disímil se ajusta a dichas exigencias, la disposición que lo consagra debe ser declarada exequible.42 En el mismo sentido el Tribunal de Justicia de la Unión Europea resuelve estos problemas: 124 Con carácter preliminar, debe recordarse que, según reiterada jurisprudencia, el principio de proporcionalidad, que constituye uno de los principios generales del Derecho comunitario, exige que los actos de las instituciones comunitarias no rebasen los límites de lo que resulta apropiado y necesario para el logro de los objetivos legítimos perseguidos por la normativa controvertida, entendiéndose que, cuando se ofrezca una elección entre varias medidas adecuadas, debe recurrirse a la menos onerosa, y que las desventajas ocasionadas no deben ser desproporcionadas con respecto a los objetivos perseguidos (véase la sentencia de 8 de julio de 2010, Afton Chemical, C 343/09, Rec. p. I 0000, apartado 45 y jurisprudencia citada). 43 Como se advierte, el esquema formal de la argumentación que estos casos requiere es notoriamente distinto al que rige para los casos fáciles, pues la creatividad debe imperar para ser capaz de construir la mejor respuesta posible pero, sobre todo, lograr dar cuenta que se eligió la mejor valoración de intereses, valores, principios y reglas que emergen en el caso particular. 42 43 Sentencia de la Corte Constitucional de Colombia T-555/11 http://www.corteconstitucional.gov.co/ Sentencia de la Sala Cuarta del TJUE, de 21 de julio de 2011, C-15/10 16 Concepción material El razonamiento jurídico, en conjunto, que es la materia de análisis o el fondo de todo acto administrativo44, demanda o sentencia, no es algo simple. Se trata de explicar y justificar una hipótesis o pretensión con base en razones pero no de cualquier clase sino de «buenas razones». Tal objetivo requiere de enunciados que se construyen a partir de discursos complejos basados en datos, información, generalidades en temas jurídicos y no jurídicos, razones e incentivos, tomar en cuenta y considerar intereses, entre otros aspectos. Por lo general los criterios de corrección de las argumentaciones materiales en temas fácticos, deben ser una buena o adecuada explicación, conjetura, predicción o justificación, basados en máximas de experiencia, leyes científicas o de la sana crítica, reglas técnicas, principios morales y los fundamentos para avalar la verdad, pasando a un segundo plano el uso de formas argumentales. Hay problemas relacionados con los hechos o circunstancias de casos concretos que exigen explicar un fenómeno, predecir un acontecimiento, averiguar que algo ha sucedido de tal manera o que tiene tales y cuales características, justificar una acción, recomendar cierto comportamiento, determinar o prever ciertas consecuencias, etc., pero lo verdaderamente importante es la actitud de compromiso con lo que se afirma. Los conflictos deben ser resueltos conforme a normas jurídicas y, en ocasiones, son oscuras o no existen de manera específica, por lo que deben construirse en concordancia con las circunstancias y problemas de eventos concretos. Por lo tanto, se deben elaborar premisas correctas y convincentes que justifiquen las conclusiones, mediante enunciados de respaldo que den cuenta de ello. (Atienza 2006: 91-92). 44 Un ejemplo de ello es la fracción IV del artículo 51 de la Ley Federal de Procedimiento Contencioso Administrativo que prevé las condiciones de validez, en lo material, de los argumentos de fondo: IV. Si los hechos que la motivaron no se realizaron, fueron distintos o se apreciaron en forma equivocada (quaestio facti), o bien si se dictó en contravención de las disposiciones aplicadas o dejó de aplicar las debidas, en cuanto al fondo del asunto (quaestio iuris). 17 Dicho en otras palabras, se debe demostrar la solidez del contenido de las premisas, en tanto que la fáctica debe ser o pretender la verdad45, la jurídica debe expresar el contenido, sentido y espíritu de la norma o institución aplicable, prevista en el sistema jurídico vigente46, lo que equivale a la justificación externa de los argumentos, en tanto se alude a elementos externos para demostrar la validez de la hipótesis. Es así que la justificación de las premisas obliga a recurrir a teorías sobre interpretación, valorización de pruebas, reglas técnicas o científicas, máximas de experiencia, ponderación de principios o derechos fundamentales, etc. Argumento de respaldo Cualquier razonamiento jurídico, comprende básica y esencialmente los siguientes componentes: una regla o garantía que permite el paso para arribar a la conclusión a partir de ciertos datos o circunstancias particulares. Regla 47 Datos Conclusión En toda sentencia encontramos una norma singular o individual48 dirigida a dar respuesta al conflicto en concreto, la cual, es deducida o derivada a partir de normas generales, que son la base jurídica descubierta49 o construida50 por el juez para respaldar y justificar su decisión, pudiendo complementarse con razones pertinentes que den cuenta como es deducida o derivada la individual de la general. Todos estos 45 Suficientes indicios y máximas de experiencia son referentes de razones convincentes en casos donde la prueba directa sea imposible y una hipótesis se elija como preferente, ver sentencia en http://jeanclaude.tronp.com/index.php?option=com_docman&task=cat_view&gid=153&Itemid=40, Valle Dorado inundación sentencia. 46 Ver sentencia http://jeanclaude.tronp.com/index.php?option=com_docman&task=cat_view&gid=161&Itemid=40, Requiere copias apercibir antes de desechar. 47 Hechos o circunstancias del caso concreto o particular. 48 Estas ideas son de Kelsen, quien entiende la labor de creación de normas en dos momentos: 1) cuando el legislador crea la general y a partir de ella 2) el juez deduce la individual. 49 En casos fáciles se acude al repertorio normativo y se elige la pertinente. 50 En casos difíciles donde no haya norma expresa sino solo principios, conceptos jurídicos indeterminados o, en general, lagunas, el juez debe de construir el marco normativo que más se acomode o amolde a los principios, fines y valores del orden jurídico. 18 componentes, en conjunto, constituyen la premisa normativa o questio iuris. Con la siguiente estructura: Norma general Deducida o derivada Quaestio iuris Ratio decidendi51 Norma individual Obiter dicta52 Decisum53 Resulta así que la razonabilidad, corrección y validez de las premisas54, depende, a su vez, de otros argumentos que pueden ser denominados de respaldo e implican la justificación externa. Su función es sustentar las aseveraciones que se hagan, tanto de la certeza o probabilidad de los datos o hechos como de la corrección de la regla o enunciado normativo. Son bases del argumento principal, siempre con el objetivo de convencer y derrotar a través de las pretensiones o justificar la decisión. Es así que el citado respaldo aquilata y fundamenta la importancia, solvencia y la plausibilidad de los enunciados: a) fáctico —datos— y b) normativo —regla—, en 51 Ratio decidendi es la "razón para decidir" o "razón suficiente". Hace referencia a aquellos argumentos en la parte considerativa de una sentencia o resolución judicial que constituyen la base de la decisión del tribunal acerca de la materia sometida a su conocimiento. La ratio decidendi -o “hilo lógico” del razonamiento de los jueces-, en los sistemas del common law, comprende a) el principio de derecho, b) el hecho relevante considerado por el juez (holding) y c) las denominadas obiter dicta o razones subsidiarias. Es así que vienen a ser las razones decisivas para el caso, las que vinculan, más no las consideraciones tangenciales o de aggiornamento (obiter dicta). Huanca En el common law se distingue: Facts (hechos), Issues (problemas o cuestiones a resolver), Decision o holding (respuesta a la cuestión litigiosa), Reasoning, rationale o ratio decidendi (es la cadena de razonamiento que llevó al juez a pronunciarse en cierto sentido –holding-). Esto debe ser esbozado punto por punto en oraciones o párrafos numerados. 52 Es toda aquella reflexión adelantada por el juez al motivar su fallo, pero que no es necesaria a la decisión, por lo cual son opiniones más o menos incidentales en la argumentación del funcionario, razones o doctrinas tomadas en cuenta por el decisor en el proceso de reflexión que lo conduce a decidir en determinado sentido. 53 El decisum es la resolución concreta del caso, esto es, la determinación específica de si el acusado es o no culpable en materia penal, si el demandado debe o no responder en materia civil, si al peticionario el juez le tutela o no su derecho, si la disposición acusada es o no retirada del ordenamiento, etc. http://www.corteconstitucional.gov.co/relatoria/1999/su047-99.htm 54 La fáctica que son los datos, circunstancias o hechos del caso y la normativa que es un conjunto integrado y fusionado de las normas o reglas adecuadas y pertinentes, adaptadas al caso y debidamente interpretadas y correlacionadas para determinar las consecuencias jurídicas o conclusión. 19 cuanto los conecta, correlaciona y valida, sea en función del mundo real o del sistema normativo a los que pertenecen y son su antecedente dotándolos de legitimidad. Correlacionado con estas ideas, se tiene que la ratio decidendi, viene a ser la explicación, justificación y aplicación de cómo la norma general y abstracta se incardina para resolver el caso particular: es la formulación general, más allá de las particularidades irrelevantes del caso, del principio, regla o razón general que constituyen la base de la decisión judicial específica. 55 Pero el argumento de respaldo no sólo debe legitimar y fundamentar la corrección del enunciado normativo o regla del argumento principal sino que también debe acreditar la certeza o probabilidad del enunciado fáctico, referente a los datos, hechos o circunstancias concretas. Es así que debe existir un fundamento y justificación del razonamiento judicial, entendido como una sub-regla, que constituye un argumento de respaldo para ser tomado en cuenta como pedigrí del criterio, el cual, consiste en normas jurídicas56 o argumentos para acreditar qué determinados hechos se tienen como probados. El esquema decisorio completo es este: Hechos Problema Ratio decidendi Consideraciones jurídicas Pruebas Sub regla Enunciado acredita hechos Decisión Argumento jurídico de respaldo Relacionado con la quaestio facti, sucede que, en ciertos casos, los datos o hechos se acreditan a partir de pruebas directas. Sin embargo también puede suceder que solamente se disponga de indicios, lo que requerirá construir un argumento inductivo, 55 56 Corte Constitucional de Colombia http://www.corteconstitucional.gov.co/relatoria/1999/su047-99.htm Entendido el concepto en cualquiera de sus expresiones como principios, reglas, criterios jurisprudenciales, etc. 20 basado en demostrar la existencia de ciertos hechos57 que asociados a máximas de experiencia y conforme a las reglas de la sana crítica permitan tener por acreditada, vía inferencia, la existencia de determinadas circunstancias. En estos casos, el argumento de respaldo son razones que justifican la corrección y validez material del enunciado fáctico58 en el que se afirma conforme al resultado de pruebas desahogadas que se está ante determinadas circunstancias particulares o hechos del mundo real, relevantes y suficientes para obtener, válidamente, la conclusión o pretensión59. En este sentido la siguiente jurisprudencia: INDICIOS. SU CONCEPTO Y CONDICIONES PARA CONFERIRLES VALOR CUANDO SEA IMPOSIBLE O POCO PROBABLE ACREDITAR CIERTOS HECHOS DE MANERA DIRECTA60. Finalmente cabe decir que el presupuesto necesario de todo argumento judicial61, especialmente en lo concerniente a la quaestio iuris, implica hacer referencia a una regla general62 pero en casos más complejos, sobre todo cuando deciden tribunales terminales basados en principios, determinación del alcance de los derechos fundamentales o conceptos jurídicos indeterminados, puede ser que apelen a las consecuencias63 creando así interpretaciones finalistas y acordes a los efectos que favorecen los grandes objetivos del derecho pero también de la política y otras ciencias afines. En este sentido el método de interpretación conforme que se ilustra en la tesis siguiente: 57 Factum probanda son determinados indicios o circunstancias que a manera de síntomas posibilitan inferir la existencia de otros hechos conocidos como Factum probandum o presuntos, siempre tendrán la calidad de probables. 58 En el vocabulario de Toulmin son los datos, razones o grounds que son base de la conclusión o pretensión. 59 El razonamiento se compone de dos o más argumentos suficientes e idóneos tanto para la determinación como para la calificación de los hechos. 60 [TA]; 9a. Época; T.C.C.; S.J.F. y su Gaceta; Tomo XXXIII, Mayo de 2011; Pág. 1193 61 Esto incluye al argumento base de la demanda, de la oposición o contestación pero también de la decisión. 62 Además de citar la regla general se necesita un enunciado descriptivo de las condiciones de aplicación que es la referencia al supuesto de hecho. 63 Además de las consecuencias, se debe suponer una regla que diga que la producción de determinadas consecuencias es un estado de cosas obligatorio. En los casos de tribunales terminales o en casos difíciles donde no existe una norma idónea para resolver el conflicto, satisfactoriamente, se acude a invocar que solución pueda acarrear las mejores consecuencias tanto para las partes como para la colectividad, de ahí que el artículo 14 constitucional, in fine, disponga como ingredientes para las decisiones: a) la letra de la ley, b) la interpretación jurídica de ella o c) los principios generales del derecho. En este sentido ver Alexy citado por Moreso (2006: 104) 21 DIVORCIO EXPRÉS. INTERPRETACIÓN DE SU NORMATIVIDAD PARA QUE RESULTE CONSTITUCIONAL.64 Modelo para el análisis jurídico IRAC / CRAC En la literatura y metodología norteamericana, es reconocido el “Método IRAC” como un recurso básico, que explica el proceso, conforme al cual, los abogados razonan cualquier problema legal. Lo valioso de IRAC es que permite reducir lo complejo del derecho a una simple ecuación. 65 Utilizando el método IRAC 66 un problema jurídico es resuelto al: 1. 2. 3. 4. Identificar las cuestiones y problemas (issue) , Declarar y establecer las reglas, Aplicar las reglas a los hechos, y Obtener una conclusión o decisión. 67 Una adecuada, clara y convincente explicación y justificación, ya sea de un planteamiento de las partes o de la decisión del juzgador, exige sujetarse a una eficiente estructura comunicativa de las líneas argumentativas y los enunciados. La alternativa más práctica puede basarse en el esquema CRAC68 para guardar un orden y coherencia aceptable que permita la comprensión del planteamiento o hipótesis y, en su caso, lograr convencer, ser plausible. El siguiente esquema ilustra estas ideas, incluso aplicadas al caso de una decisión judicial. 64 65 66 [TA]; 9a. Época; T.C.C.; S.J.F. y su Gaceta; Tomo XXXI, Febrero de 2010; Pág. 2843 LawNerds.com Acrónimo del método basado en cuatro etapas: Issue, Regulation, Application o Analysis y Conclusion 67 Cooper (1998: 274) Significa la castellanización de la expresión IRAC, e incluye: Circunstancias o temas del caso concreto, puede requerir precisar un contexto. Regulación aplicable, comprende todas las generalizaciones pertinentes o aplicables al contexto fáctico, implicando normativas jurídicas, científicas, morales, conocimientos empíricos, etc. Aplicación lo que incluye la interpretación adecuación y relevancia de reglas invocadas con respecto a los hechos calificados, subsumir, adjudicar y asignar, es el argumento en sí, incluye las explicaciones de prueba y demostración conducentes y pertinentes para llegar a evidenciar que el antecedente o premisas (fáctica y normativa) conduce al consecuente. Conclusión que es la tesis que se pretende sostener para lo cual será muy pertinente destacar y reconocer las consecuencias que deben ser las óptimas o más aceptables para las circunstancias prevalecientes, un epílogo que destaque la bondad y supremacía de resultados. En esencia coincide con el discurso oratorio judicial, que en su vertiente clásica, se componía de las siguientes partes: 1) un exordio o proemio; 2) narración; 3) argumentación, y 4) epílogo. 68 22 Resultado Consecuencias Generalizaciones Circuns tancias Issue Regu lación Aplica ción Conclusión Correlación Particularidades y Problema Ratio decidendi Contexto Litis (pretensiones y oposición) Hechos / Enunciados (relevantes) Cuestión y Problemas Cooper (1998: 274) propone como ejemplo del modelo CRAC, el de un caso ficticio al que se denomina Smith v. Lemon Motors, donde las reglas aplicables estipulan para la persona que con la intención de defraudar, engañe alterando las millas recorridas por un automóvil materia de transacción, una condena de tres tantos del monto de los daños causados, estimados en el caso en $1,500. En seguida la versión simplificada del caso: ISSUE Cuando Lemon Motors vende el CS10 a Smith, ¿tuvo la intención de defraudar? RULE Cualquier persona que con la intención de defraudar, engañe alterando las millas recorridas por un vehículo, será responsable de pagar 3 tantos del importe de los daños causados APPLICATION CONCLUSION El odómetro del CS10 fue Lemon Motors alterado disminuyendo el número carecía de una de millas recorridas antes que intención de Tim Duncan comerciara el auto a defraudar Lemon Motors. Lemon Motors creyó que las millas consignadas en el odómetro eran reales Enunciados jurídicos y judiciales Los enunciados que se plantean en los juicios, sean las pretensiones de las partes o los que emite el juez, se refieren y tienen un componente o elemento: a) fáctico conocido también como quaestio facti o juicio de hechos, esencialmente descriptivo; y otro, b) jurídico que es la quaestio iuris o juicio de Derecho, básicamente prescriptivo69. Sin 69 Estas ideas ya fueron propuestas por Becaria como elementos del silogismo judicial. 23 embargo, ya en lo concerniente a la decisión sobre los hechos, circunstancias e intereses debatidos, se aprecian o distinguen 4 fases70: El detalle y contenido de las prácticas decisorias es el siguiente: Apreciación de los hechos. Consiste en ponderar o sopesar los elementos fácticos que la norma recoge o permite ponderar, incluso cuando estos sean necesarios para precisar y concretar el sentido de un concepto jurídico indeterminado. Resulta importante considerar la sustancia, naturaleza, significado real, económico, de conductas o datos, negocio jurídico involucrado, esencia de la práctica, efectos, funciones, objetivos y fines perseguidos, para adscribir la consecuencia jurídica pertinente71. El resultado es poder subsumir determinados hechos en tales conceptos, cargados de criterios valorativos respecto a las circunstancias del caso y sus consecuencias, para lo cual es necesario apreciar los fines, hechos y causas en una estrecha relación. Todas estas operaciones o apreciaciones se entienden verificadas en relación con el fin del acto administrativo o decisión y la vigencia de principios y valores. En casos de abuso o simulación, amerita corregir la decisión, debiendo imponerse la sustancia sobre la forma cuando esta aparezca como artificial o fantasiosa. Se parte de que los valores están ya determinados en el ordenamiento y solo deben ser interpretados por la Administración o los jueces72. 70 De Asis 1995: 215 En las planeaciones fiscales es común que se construyan «realidades artificiosas» que conducen a aplicar cierto precepto. Descubierta y argumentada tal simulación cabe priorizar la realidad jurídica o económica por encima de formalidades sugerentes, reconduciendo así aplicar la norma conducente a tal realidad y no la relativa a las apariencias. 72 Aquí también cabe un análisis de error manifiesto, sólo por jueces audaces, no tímidos. Decisionismo vs. seguridad jurídica (Alonso Mas 1998: 119 y 144). 71 24 Valoración de los hechos. Implica tanto el ponderar los intereses públicos reflejados —expresa o implícitamente— en la norma; como concretar de entre todos los calificados por el legislador aquellos que el acto o decisión debe perseguir aun cuando la norma fundatoria sea omisa. Es así que la Administración o los jueces determinan los valores a proteger o bien ponderan los distintos valores e intereses que han de tenerse en cuenta, sobre todo cuando hay pluralidad de fines a satisfacer, como consecuencias económicas o interés público73. La discrecionalidad de actuar depende de un juicio previo del Derecho, sus fines, los hechos y las consecuencias que se deriven de darles una cierta respuesta jurídica. Calificación. Una vez probados ciertos comportamientos o estados de cosas, es necesario asignar las consecuencias pertinentes. Parece que es algo obvio, sin embargo, en ciertos casos ello conlleva a la interpretación sustancial y evaluar la naturaleza y objetivo perseguido por las circunstancias particulares a fin de poder asignar una adecuada y pertinente calificación jurídica, atribuyendo las consecuencias correspondientes, esencialmente decidiendo que algo está prohibido, es obligatorio o es permitido y las consecuencias inherentes. Comenta Alonso Mas que la calificación jurídica se ubica en un plano diferente al de la apreciación y valoración, operaciones que, atendiendo a las peculiaridades, pueden darse antes o después de una previa calificación. Plantea Martínez (2010: 37) que los problemas de calificación surgen al momento de subsumir un caso individual en el supuesto de hecho de la premisa normativa, especialmente cuando adolece de vaguedad o textura abierta. La dificultad reside en que a pesar de conocerse lo ocurrido empíricamente, existen dudas acerca de cómo calificar jurídicamente tales hechos. Por demás elocuente, es la cita del caso hipotético que relata: 73 Alonso Mas 1998: 119 y 144. 25 Un ejemplo de esta dificultad podría ser el siguiente: imaginemos que una persona de talante bromista decide gastar una broma a otra persona, y finalmente resuelve esperarla en la entrada de su casa a que llegue y darle un susto cuando aparezca. Sin embargo, la víctima tiene el corazón delicado de salud (cosa que el bromista desconoce, por otra parte), y, con la impresión del susto, sufre un ataque cardíaco y fallece. Aunque los hechos se conozcan perfectamente, puede surgir el siguiente problema: ¿se ha de considerar que esta persona ha «matado» a su víctima, en el sentido de que estos hechos son subsumibles en el antecedente del delito de homicidio (art. 138 CP)? La situación plantea dudas. Por una parte, el susto responde a una acción consciente y voluntaria del agresor, y es de suponer que la víctima no hubiera fallecido de no haber sufrido la acción del bromista. Esto parece inclinarnos a pensar que el susto ha causado la muerte y, por tanto, que el agresor ha matado a su víctima. Pero por otro lado, parece también que el hecho de dar un susto no es un comportamiento del tipo adecuado para poder imputar a alguien la muerte de una persona. Esto es, la persona falleció por sus especiales circunstancias de salud, pero no es imputable la muerte al susto porque el hecho de dar un susto no es un comportamiento que pueda considerarse adecuado para provocar la muerte de las personas (máxime si se desconoce su enfermedad), y así poderles incluir en el antecedente del delito de homicidio. En este sentido, no puede decirse que el agresor haya matado a su víctima. En conclusión, no parece poder decirse de modo concluyente ni que el agresor ha matado a la víctima ni que no la ha matado. Por otra parte, los problemas de calificación podrían concebirse como una sub-clase de los problemas de interpretación, dado que en el ejemplo expuesto, puede considerarse que la discusión gira en torno de considerar si la clase «matar» incluye la clase de «asustar a otro cuando tiene problemas de corazón y muere». No obstante, resulta útil seguir manteniendo la distinción si se considera que mientras que los problemas de interpretación giran en tomo a casos genéricos (clases), los problemas de calificación se limitan a la subsunción de casos individuales. Decisión. Es la norma individualizada para el caso concreto que adjudica consecuencias a los hechos. En efecto, el proceso de interpretación judicial debe iniciar con tener un claro entendimiento de cuál es el conflicto o los conflictos que se dan entre las partes contendientes y las cuestiones o problemas a dilucidar, sólo entonces se tendrá una idea de los intereses en disputa y será posible hacer un análisis de las circunstancias debidamente contextualizadas. 26 Es entonces cuando, a partir de los hechos probados, es posible hacer una interpretación y calificación de ellos. Después se buscará o construirá la norma relevante para estar en posibilidades de interpretarla con vocación de aplicarla al caso concreto y particular, buscando obtener los mejores resultados. La solución final para casos difíciles e inéditos implica acudir a la teoría constructivista que propone Dworkin a fin de obtener la mejor perspectiva social del objeto —norma y práctica del caso— interpretado. Pero retomando el tema de la norma relevante y pertinente para resolver el caso concreto sucede, en muchos casos, que existen ciertos problemas, imputables al propio sistema jurídico que no ofrece una única y clara respuesta, tal como sucede con las antinomias74 o lagunas normativas. No obstante, los jueces tenemos el deber jurídico de resolver los casos que se nos plantean75, de manera que se deben superar estas dificultades y suplir estas carencias, aportando las premisas normativas correspondientes, cuya justificación dependerá de la solidez de las razones que respaldan la selección de dichas premisas76. El paso de una etapa a la otra, como he dicho, no es definitivo sino que se van dando aproximaciones parciales, progresivas y preliminares, de manera recursiva y circular, cada vez más definitivas y profundas a partir de un círculo hermenéutico. Intereses Conflicto Circunstancias Hechos Prueba Calificación Normas Relevantes Interpretación Intereses Esta secuela procesal con más detalles es la siguiente: 74 Son contradicciones normativas debido a que varios preceptos regulen de manera distinta e incompatible la misma situación, de modo que un determinado comportamiento resulte simultáneamente permitido y prohibido por el derecho. Para afrontar este tipo de problemas existen algunas estrategias basadas en los criterios de: lex posterior, lex superior, lex specialis, etc. 75 Dada la prohibición del non liquet, prevista en el artículo 14 constitucional in fine 76 Martínez (2010: 34) 27 Complejidad de los argumentos Las narraciones que hacen las partes en sus planteamientos, o los jueces en sus sentencias, no son esquemas simples sino combinaciones variadas, complejas y hasta abundantes de distintos tipos de enunciados que a manera de cadenas o de redes se enlazan e interconectan. Las decisiones —actos administrativos y sentencias— usualmente son pluridecisiones encadenadas, derivadas de múltiples pretensiones y decisiones77. En ese sentido, deben darse tantas quaestio facti como pretensiones haya y problemas a decidir. Sobre el particular son muy claras las sentencias del TJCE y ahora también de la CorteIDH donde se plantean los problemas o puntos de conflicto y luego, en un enfoque dialéctico, se construye la decisión para cada aspecto o tema en específico. Relatar los hechos, las pruebas que los justifican y su valoración conjunta, exige previamente la valoración singularizada conforme al estilo analítico examinando y calificando todas las pruebas relevantes, requisito de saturación y exhaustividad que incluya y abarque pruebas que conduzcan o avalen la reconstrucción de hechos así 77 Una sentencia o acto administrativo no es ni implica sólo una decisión sino que hay, usualmente, decisiones instrumentales o previas que son pertinentes e indispensables para llegar, a la postre, a la decisión final. 28 como las que sean contrarias, distinguiendo y eliminando las pruebas no relevantes en razón de no pertenecer o ser ajenas a la pretensión deducida. Concepción pragmática El pragmatismo, escuela filosófica creada en los Estados Unidos a finales del siglo XIX, proclama que sólo es verdadero aquello que funciona, enfocándose así en el mundo real y objetivo. La verdad y la bondad para los pragmatistas, son medidas de acuerdo con el éxito que tengan en la práctica, puesto que el pragmatismo se basa en la utilidad, que es la base de todo proyecto78. La argumentación, entendida como un tipo de acción, descansa en las concepciones tanto retórica como dialéctica. Haciendo un símil con el lenguaje, la argumentación tiene una dimensión pragmática que envuelve y presupone las otras dos la sintáctica (relacionada con las formas) y la semántica (correspondiendo a la sustancia o validez material de los enunciados). ¿Cuáles son los propósitos u objetivos de los operadores jurídicos en un juicio? Para el actor o promovente, es obtener una sentencia que acoja sus pretensiones. El demandado u opositor, busca frustrar ese objetivo y, en ciertos casos, conseguir que su contrario sea condenado, caso de la reconvención. El juez, debe comprender cuales son los puntos en litigio, determinar cuál es el o los conflictos subyacentes y tomar, conforme a derecho, la decisión pertinente, debiendo razonar sus conclusiones que deben ser cabalmente comprendidas por las partes. En ese entorno conflictivo, el debate se deduce mediante un proceso de carácter dialéctico, en el que advertimos una tesis, cuestionada mediante una antítesis y una síntesis que concluye a tal secuela. Los objetivos y propósitos de las partes son: a) vencer, b) evitar esa victoria; en tanto que el juez debe c) justificar la decisión, lo que viene a ser la concepción dialéctica de la argumentación. 78 http://es.wikipedia.org/wiki/Pragmatismo 29 Sin embargo, para alcanzar y conseguir el éxito, cada operador debe obrar conforme a las máximas de la retórica al exponer sus propuestas o su decisión, con una técnica tal que logre derrotar y convencer. La eficacia en la función que a cada operador corresponde, dependerá que conozca y se comporte dentro de reglas del proceso dialéctico, pero además, valiéndose de la técnica y recursos retóricos que hagan plausibles sus razones. Esquema dialéctico La elemental estructura de cualquier litigio implica un fin y objetivo práctico ganar la contienda para el actor o promovente; para el demandado evitar ese propósito y para el juez dirimir la contienda. En ese contexto, una demanda implica una pretensión de condena o declarativa, dentro de un procedimiento donde se dé la posibilidad de refutar o contraargumentar y finalmente una decisión. Este modelo es la base con la cual se elaboran opciones más específicas y complejas. El objetivo es que el juez decida si es fundada la pretensión o fue derrotada por la oposición, pero lo esencial es que cada pronunciamiento debe construirse a partir de argumentos sólidos. Estas ideas se representan en el gráfico siguiente: Juez Argumentos en el quehacer judicial ¡Juego estratégico! Sentencia y proveídos Justificación Razones Pruebas >> Hechos Pretensión genérica Argumentos Contra pretensión genérica Actor Demandado Demanda (1) (1) Contestación (1) Pretensión específica: Causa de pedir (hechos y razones) 30 Modelo de Toulmin Buscando una alternativa para superar los límites de la lógica formal, Toulmin79 propone un modelo funcional y práctico que se avenga a la manera como los hombres piensan, argumentan e infieren, de hecho, de manera cotidiana. Se opone a la tradición que pretende hacer de la lógica una ciencia formal comparable a la geometría —que data desde Aristóteles— y, en cambio, propone desarrollar una lógica operativa o aplicada (working logic). Elige como modelo a la jurisprudencia y compara los argumentos cotidianos y las pretensiones que hacemos valer en contextos extrajurídicos, con los propios de los litigios judiciales. El modelo general de argumentación de Toulmin, consta de seis elementos que interactúan entre sí de la siguiente manera: a) Pretensión (claim).- Punto de partida y destino o conclusión. Es la aseveración del proponente que, si no es discutida sino aceptada por el probable oponente, será válida y suficiente. Dos ejemplos de pretensiones pueden ser: i. La epidemia fue causada por una infección bacteriana transmitida de una sala a otra por el utillaje del servicio de alimentación; y, ii. X tiene derecho a recibir la herencia. b) Razones o datos (ground).- Sólo para el caso de que el oponente cuestione la pretensión, se requerirá la invocación de los hechos o circunstancias del caso, deben ser suficientes y relevantes para sostener la validez de la pretensión. Básicamente es un enunciado descriptivo. En una argumentación jurídica típica, son los elementos del supuesto de hecho de la norma o circunstancias del caso. Para seguir con los ejemplos propuestos las razones, pertinentes a las pretensiones citadas, serían: 79 Atienza, (2003: 81-104). 31 i. Nuestras pruebas excluyeron todo lo demás, y finalmente encontramos un defecto en el lavavajillas del comedor; y, ii. X es el único hijo de Y, quien falleció sin dejar testamento. c) Garantía (warrant).- Si las razones son criticadas por no considerarse pertinentes y suficientes, será imprescindible invocar la garantía; entendida como un enunciado hipotético de carácter general, deducida o que interpreta y adapta fundamentos, tales como las máximas de experiencia, normas, leyes de la naturaleza o principios jurídicos; corresponden a los estándares prácticos o cánones de los argumentos; es la regla que autoriza el paso de los datos a la pretensión. Su expresión se asemeja a una moraleja o consecuencia general de carácter práctico y equivale en términos coloquiales a la receta que permite producir el resultado, combinando los ingredientes o datos. Son enunciados hipotéticos y asumen el carácter de argumento práctico a partir de su aplicación y conexión con los hechos del caso particular. Sirven para certificar la validez de todos o múltiples argumentos o datos80. Para los ejemplos en cita, las garantías correspondientes serían: i. El defecto del lavavajillas permite explicar este tipo de epidemia; y, ii. Los hijos suceden (deben suceder) a los padres cuando éstos han fallecido sin dejar testamento. d) Respaldo (backing).- Si se duda de la validez, relevancia y suficiencia de la garantía, debe aportarse el presupuesto o justificación que será un enunciado categórico. Corresponderá al fundamento con base en el cuál se construye y valida la fuerza convictiva de la garantía, tales como las máximas de experiencia, normas, principios jurídicos, precedentes judiciales, presunciones legales, leyes de la naturaleza, etcétera. Cada campo en el que se construya la argumentación imprime diferencias al tipo de respaldo que deba acudirse, y dependerá, por ejemplo, de las leyes, constataciones por estadísticas o sistemas de clasificación taxonómica, etc., que sean los rectores en cada especificidad. 80 En el caso de las sentencias equivalen, en gran medida, a la ratio decidendi. 32 Coincide con la justificación externa del contenido del argumento en tanto vincula a la garantía con enunciados empíricos basados en hechos ciertos o probables o con la corrección jurídica de cómo se interpreta el ordenamiento81. En relación con los ejemplos, los respaldos de las garantías citadas serían: i. El campo general de experiencia científica sobre bacterias de origen hídrico y sobre su control y ii. El artículo 930 del Código Civil e) Cualificadores.- El paso a la conclusión no siempre tiene el carácter de necesario en la vida práctica, en tanto que la fuerza absoluta del argumento sólo ocurre en la matemática, por lo que puede ser probable o presumible en matices y proporciones distintas, lo que se puntualizará por medio de calificativos o matizadores modales, tales como probable, convincente muy seguro, etc. f) Condiciones de refutación.- Son las circunstancias extraordinarias o excepcionales que pueden socavar la fuerza de los argumentos y que inciden en los cualificadores. Consisten en las problematizaciones, cuestionamientos, defensas u oposiciones que en los juicios se plantean a manera de antítesis para refutar lo que una tesis previa propone pero que solo es un planteamiento prima facie, puesto que dependerá de que soporte los cuestionamientos y críticas que en contra se enderecen. Razones que pueden frustrar los argumentos propuestos en los ejemplos pudieran ser: i. La razón más determinante y que supera a las expectativas aludidas es que alguien introdujo al depósito de agua un contaminante muy efectivo; y, ii. El hijo heredero mató al padre para obtener de inmediato la herencia, cuando que nadie puede abusar ni aprovecharse de actos criminales para obtener beneficios82. 81 Referido a las sentencias equivale fundamentalmente con la quaestio iuris. Este acontecimiento se dio en la celebre sentencia del caso RIGGS VS. PALMER que data de 1889 donde la Suprema Corte de Justicia norteamericana entre otros aspectos consideró: "todas las leyes, lo mismo que todos los contratos, pueden ser controlados en su operación y efecto por máximas generales y fundamentales del derecho 82 33 Los elementos descritos y la forma en que interactúan se ilustran en el siguiente gráfico: Respaldo Ley Fundamento del enunciado Debido a que Garantía Principio Enunciado explicativo Razón causa Puesto que Cualificador Por tanto condición Pretensión conclusión Dado que Probable, Plausible, Presumible, Derrotabilidad normativa Refutación A menos que, Excepciones, Defectos, Derrotabilidad procesal Es así que el modelo de Toulmin permite identificar y utilizar argumentos y enunciados no categóricos83, que son los más usuales, además que explica, como en un esquema dialéctico, se pueden ir construyendo dialécticamente y, a la postre, se consiguen o se frustran pretensiones. Es una representación que refleja lo dinámico, contingente, razonable y plausible de las prácticas argumentativas reales de lo que ocurre, día con día y no una teoría, distante de lo cotidiano y convencional. En seguida dos esquemas muy sintéticos de cómo se puede aplicar y aprovechar el modelo en estudio para dar cuenta de temas judiciales. Prueba indiciaria El esquema de Toulmin puede ser muy adecuado para diagnosticar si la prueba de indicios está correctamente propuesta y es confiable, si supera el test de «más allá de consuetudinario. A nadie se le permitirá aprovecharse de su propio fraude o sacar partido de su propia injusticia, o fundar demanda alguna sobre su propia iniquidad o adquirir propiedad por su propio crimen". Esta decisión se basó en el principio de derecho latino; NEMO EX SUO DELICTO MELIOREM SUAM CONDITIONEM FACERE POTEST (Nadie puede beneficiarse de su propio delito), contenido en el Digesto, L. 50, T. 17; L. 134, párrafo 1º. 83 Sino de carácter inductivo, con márgenes de probabilidad, en oposición a lo que sucede en lógica formal donde son característicos los juicios deductivos. 34 toda duda razonable» o de simple probabilidad prevalente84; a partir de que cumpla con los supuestos pertinentes y la medida en que los satisface, siempre sujeto a que la refutación no logre derrotar los planteamientos de imputación. Caso contrario la prueba no es pertinente. El esquema de la prueba es este: Enunciado judicial: Quaestio facti Respaldo Juicio de hechos Prueba indirecta o indiciaria Fundamento del enunciado Dado que Nexo o Fundamento Pruebas enunciado Argumento: Fiabilidad, Coherencia, Pertinencia, Adecuados a conclusión e Idoneidad del medio 1 Indicios o Hechos Factum probans Resulta que Objetivos Pertinentes Concordantes causa Norma establece Presunción Casos anteriores, experiencias juez o perito Teorías Debido a que Presunción Máxima experiencia: (carácter: científico o especializado, jurídico o privado) Definición o teoría Puesto que Deductivo Inductivo Abductivo Por tanto Cualificador Hipótesis condición conclusión Probable, Plausible, Presumible, Derrotabilidad normativa y narrativa Verosimilitud y probabilidad Negar eficacia elementos de inferencia Incoherencia Proponer otro enunciado Refutación Factum probandum A menos que, Excepciones, Defectos, Derrotabilidad procesal 1 Argumento intermedio indispensable Todas estas condiciones deben darse también en el enunciado que fija la hipótesis Conceptos de violación Los conceptos de violación85 al igual que los de anulación86 son argumentos muy complejos e imbricados por todas las condiciones que deben satisfacer. El modelo que Toulmin propone es también útil para advertir si se cumplen o no las condiciones esenciales y de operabilidad o se está ante una omisión relevante, para ello se propone el siguiente esquema: 84 Estas calificativas nacen en el common law pero se han extendido en Europa y Latinoamérica. Otras denominaciones son: preponderancia de la prueba o probabilidad, balance de probabilidad, basados siempre en sopesar probabilidades, aplicables a los casos civiles; prueba clara y convincente o incluso indubitable, más allá de toda duda razonable, son estándares mayores que se exigen para casos criminales. 85 Correspondientes al juicio de amparo. 86 Los exigidos en el juicio contencioso administrativo. 35 Respaldo Texto de Constitución, ley o Jurisprudencia Garantía Interpretación del derecho o garantía violados Concepto de violación en amparo: Estructura formal Derecho fundamental violado Ley indebidamente aplicada Hechos mal ponderados Datos * Prueba Acto autoridad ** características Afectación concreta Cualificadores modales Conclusión o Pretensión Acto “X” es inconstitucional Derrotabilidad Suficiente Interés jurídico Derecho subjetivo Interés legítimo Probabilidad Condiciones refutación Oposiciones o excepciones a la acción Vía impugnativa Agravio causado Restituir Antijuridicidad (lógica o jurídica) Lesión a bien tutelado * Incluye aspectos y condiciones sine qua non de procedencia jurídico procesal ** Acto administrativo, Sentencia o Ley Célula judicial argumentativa Una adecuada comprensión formal de cómo se estructuran las planteamientos 87 y la decisión resultante, es a partir de un concepto básico y esencial de «pretensión→ decisión», para lo cual propongo la idea de una célula judicial argumentativa88, de acuerdo al siguiente esquema. 87 De carácter y contenido positivo y negativo con funcionalidad contradictoria Tanto las pretensiones de las partes como las decisiones judiciales deben corresponder a este modelo. Entendido como un esquema básico, ontológico y de control de la argumentación tanto de las partes como del juez. Me parece que el esquema de Toulmin es adecuado para construir a partir de él un modelo a seguir. 88 36 Puede ir cambiando su contenido en la secuela del proceso, durante el cuál se va construyendo y enriqueciendo ante cada embate o confrontación y la derrotabilidad de enunciados prima facie. El objetivo de la propuesta es una metodología para regir la forma de proponer las pretensiones —sean positivas o negativas— lo que llevará a ordenar o reconfigurar su formulación por el juez, para el caso de que las partes la presenten con reiteraciones inútiles, aduzcan elementos no relevantes o lo hagan desordenadamente. Este enfoque de la litis será la pauta para la redacción de la sentencia o decisión. Los elementos de la pretensión descriptivos, prescriptivos y argumentativos, incluyendo los presupuestos legales de procedencia se exponen en el siguiente diagrama que también puede concebirse como elementos de la acción: 37 P F Pretensión (entendida como núcleo) N Norma Argumento A CP H correlaciona Interés jurídico Causa de pedir Hechos Pr D Subj / Inter Leg / Agravio / Vía Fin Pruebas N P {IJ ˄ CP [(Pr => H) ˄ A ˄ N]} 89 Se integra bajo el criterio de la pretensión cuyos elementos —especialmente los relativos a la causa de pedir— deben verse encadenados y relacionados tanto en un aspecto estructural —estático— con un orden y secuencia, como en otro de funcionalidad —dinámico—. Un prerrequisito que no debe ser ignorado es el interés jurídico, presupuesto y condición de legitimación y eficacia de la acción judicial90 y de la pretensión. Este concepto incluye la existencia de: a) un derecho subjetivo o interés legítimo lesionado o desconocido, b) un agravio o perjuicio, y c) la obligación del tribunal de declarar o 89 La fórmula significa: Toda pretensión tiene un fin dependiendo del interés que anime o sea incentivo de la parte solicitante. La fórmula N P {IJ ˄ CP [(Pr => H) ˄ A ˄ N] } significa: La pretensión (P) procedente (N) requiere de interés jurídico (IJ) asociado a la causa de pedir (CP) integrada por pruebas suficientes (Pr) para acreditar los supuestos de hecho (H) que irroguen una lesión o agravio en razón de la tutela de una norma (N) enlazados mediante un argumento (A). El caso está referido al juicio de amparo por eso es que se contempla la existencia de un interés jurídico (fundado sea en un interés legítimo o derecho subjetivo, indispensable para la procedencia del juicio de garantías. 90 La cual puede considerarse desde dos ángulos: Como la invocación y demostración prima facie de un derecho público subjetivo o de un interés legítimo, presupuesto indispensable para que los tribunales conozcan de cualquier instancia que se les proponga —relacionada con la garantía de acceso a la justicia— y como la pretensión de obtener una decisión favorable a los intereses subjetivos, titularidad del actor. 38 constituir un derecho o imponer una condena, para el caso de resultar fundada la pretensión deducida. Colomer (2003: 187) dice que el trabajo del juez es dinámico, por lo que tomando como punto de partida la realidad fáctica alegada por las partes (causa petendi) y conforme con las pruebas propuestas o practicadas de oficio, deduce un relato o relación de hechos probados, que es el resultado del juicio de hecho91. El discurso de la quaestio facti es el parangón para controlar la racionalidad de la decisión sobre el thema decidendi, según la alternativa elegida respecto al factum probandum. El discurso resultante no es libre, debe mostrar la racionalidad, razonabilidad y coherencia de los momentos del procedimiento, mencionando y justificando cada fase —tanto de selección como de valoración de los hechos— en las que el juez tiene poder de decisión. Ponderación de principios Contexto Hay situaciones o conflictos frente a los cuales: a) No hay regla que aplicar (laguna normativa) o existiendo la disposición, b) Es incompatible con los valores y principios del sistema (laguna axiológica), son supuestos en los que falla el aspecto directivo de la norma al separarse del justificativo, c) Debe aplicarse un derecho fundamental92 o algún otro principio que usualmente colisiona con otro u varios. En estos casos los jueces u operadores deben aplicar principios mediante el método de ponderación. Los principios lato sensu se dividen en i. Principios stricto sensu, son normas de acción que implican instrucciones tanto al juez como al legislador93 y en, 91 El iter de este juicio comienza por la existencia de hechos (brutos), su invocación y posterior ofrecimiento o aportación en juicio a efecto de determinarlos y calificarlos jurídicamente, con el fin de construir la premisa fáctica. 92 Los derechos fundamentales pueden estar contenidos en disposiciones en forma de reglas, artículo 14 constitucional, párrafo primero; o de principios tal como el derecho a la vivienda o a un medio ambiente adecuado, artículo 4º constitucional. 39 ii. Directrices que son normas de fin, en tanto establecen la obligación o permisión de procurar obtener objetivos —estados de cosas— económicos o sociales. También se les conoce como políticas públicas o policies y su destinatario principal es el legislador94 aunque el juez puede considerarlas como pautas interpretativas al decidir. Los principios como concreción de valores o normas morales positivizadas95, son normas de acción de carácter definitivo prima facie96. Se rigen por un régimen de expansividad y de la mayor protección y beneficio a las personas, lo que constituye el principio pro personae. Sus condiciones de aplicación son abiertas, provocando que, en los casos concretos, confluyan diversos y varios principios, las más de las veces, con exigencias contrapuestas, lo que provoca tensiones. Deben distinguirse de las directrices, normas de fin, indicativas de propósitos que deben ser alcanzados en la mayor medida posible que las circunstancias lo permitan 97. Consisten en mandatos de optimización que no se aplican de manera directa sino al redactar leyes y al interpretarlas o por ponderación al exigir el cumplimiento de algo, pero solo en la medida de las posibilidades jurídicas y fácticas, respecto a objetivos de muy diversa índole como políticos, económicos, sociales, cuyo carácter es utilitario o instrumental –prima facie– y nunca podrán ser razones definitivas. 93 El debido proceso legal o formalidades esenciales del procedimiento son mandatos de acción que debe aplicar el juez en sus sentencias de manera ineludible y determinan el marco dentro del que el legislador debe elaborar las leyes procesales. 94 Las leyes y políticas públicas a cargo del legislador deben garantizar que el desarrollo nacional sea integral y sustentable, buscando fortalecer la soberanía nacional y el régimen democrático 95 Señalan aquellas conductas que se consideran valiosas y, por tanto, deben ser realizadas Un ejemplo es la libertad de creencias. 96 No son en todos los casos definitivas, por tanto, se pueden modificar. Esta provisionalidad radica en la posibilidad que puedan ser contrastadas con otras y, por ende, derrotadas por ponderación al colisionar con otro principio, pero de no ser así, resultan concluyentes para determinar por completo el curso de acción. Atienza (2006: 211). Un claro ejemplo es el derecho a la información que al ser aplicable a un cierto caso es usual que concurra y entre en tensión con la vida privada. 97 En la educación buscar conseguir el progreso científico, luchar contra la ignorancia y promover la democracia. 40 En este contexto, cabe matizar que los derechos fundamentales, en tanto y cuanto sean principios98, pueden colisionar entre sí, competir o entrar en tensión y, en esos eventos, deben ser considerados como mandatos de optimización, normas que ordenan que algo sea realizado en la mayor medida posible, de acuerdo a circunstancias y casos particulares99; esto es, dentro de las posibilidades jurídicas y reales existentes, lo que implica que pueden cumplirse en diferente grado y que la medida debida de su cumplimiento no sólo depende de las posibilidades reales sino también de las jurídicas. En cambio, las reglas son normas absolutas y definitivas que suministran razones perentorias ya que sólo pueden ser, cumplidas o no100, se aplican del todo o nada101. Si una regla es válida, entonces debe hacerse exactamente lo que ella exige, ni más ni menos. Robert Alexy en su obra Teoría de los Derechos Fundamentales, recoge los criterios de la jurisprudencia del Tribunal Constitucional alemán. Es así que expone: El principio de proporcionalidad en sentido estricto es idéntico a una regla que cabe denominar «ley de la ponderación», y que dice así: Cuanto mayor es el grado de la no satisfacción o de afectación de uno de los principios, tanto mayor debe ser la importancia de la satisfacción del otro. (P1 P P2) C P1 prevalece sobre P2 bajo las condiciones C 102 Como se observa la ponderación de principios103 se da siempre en el contexto de condiciones o circunstancias específicas, denominadas C. La conclusión del autor citado entonces es: Si el principio P1 en las circunstancias C, tiene precedencia sobre el principio P2: (P1 P P2) C, y si de P1, en las circunstancias C deriva la consecuencia R, entonces tiene validez una 98 Conviene distinguir que los derechos fundamentales pueden asumir el carácter de principios (libertad de expresión), de reglas (prohibición de aplicar retroactivamente leyes en perjuicio) o directrices (incrementar niveles de escolaridad, favoreciendo la educación bilingüe, artículo 2º constitucional) 99 Un ejemplo por antonomasia es la colisión de la libertad de expresión con la vida privada, según las circunstancias uno de esos derechos debe prevalecer sobre el otro pero sólo en un porcentaje, nunca desplazando al otro de manera absoluta. 100 Alexy (2008: 68) 101 Cuando se prohíbe un determinado comportamiento, el efecto y la acción ordenada son absolutos, por lo que dependerá de que se satisfagan circunstancias y condiciones de aplicación para que opere o no el mandato. 102 Alexy en Sieckmann (2011: 124) 103 P1 y P2 41 regla que contiene a C como supuesto de hecho y a R como consecuencia jurídica C → R. Alexy (2008: 75) Esto implica que el resultado de ponderar dos o más principios bajo determinadas condiciones, conduce a establecer una regla individualizada que permita obtener determinadas consecuencias, lo que será el óptimo para aplicar a tales hechos. La ponderación es, precisamente, la manera de encontrar solución a esa situación de tensión. Es así que la aplicación de principios se da en dos fases: a) Convirtiendo a la suma de principios en oposición o tensión, en reglas; 104 y, b) Creando una regla específica para el caso concreto, la cual, se aplica según el modelo subsuntivo o finalista El caso de los exploradores de cavernas es un famoso caso hipotético escrito en el año 1949 por el estadounidense Lon Fuller para la Harvard Law Review. El objetivo es poner en perspectiva como pueden ser planteados los casos difíciles y que según el concepto de derecho que se tenga puede llevar a distintas respuestas.105 Tipos de ponderación Atienza (2006: 169-176) distingue que hay dos tipos de ponderación, según que la tensión se dé entre: 1. Principios en sentido estricto. En los casos concretos y circunstancias particulares en que ocurra, uno prevalece proporcionalmente106 sobre el otro. Supóngase un caso de tensión entre el derecho a la información y la vida privada, donde un menor haya sido víctima de un delito infamante por abuso, parece obvio que la versión pública de la sentencia deberá opacar u ocultar 104 Eso es a lo que en sentido estricto se le puede llamar ponderación. . Un ejemplo en la sentencia visible en http://jeanclaude.tronp.com/index.php?option=com_docman&task=cat_view&gid=84&Itemid=40, Periodistas estatuto D Inform SCJN, donde se evalúa el derecho a la información, libertad de expresión y vida privada en el caso de una autoridad política y se construye por la Corte la regla aplicable dando más énfasis al escrutinio público. 105 En este sitio se da cuenta del caso y existe un link para descargar el libro que se recomienda leer, http://es.wikipedia.org/wiki/Caso_de_los_exploradores_de_cavernas 106 Significa que uno tendrá más peso y se aplicará con mayor énfasis en el caso pero sin que el otro también concurra lo que motiva una mixtura donde uno se expande pero el otro lo restringe. 42 cualquier posibilidad que permita identificar a la víctima a fin de no denostarlo socialmente. En el proceso de ponderación puede suceder que no sólo participen los principios en tensión sino que, adicionalmente, determinadas directrices pueden contribuir o atribuir mayor peso a alguno de los principios en juego. En un caso opuesto donde se planteara la intensidad de la información que debe darse a la gestión de un servidor público, directrices como la vida democrática, la transparencia y rendición de cuentas, justificarían dar más importancia y peso al derecho a la información que a la vida privada, aunque el respeto a esta no desaparece, sino que se reduce a un mínimo tal, que no interfiera con la divulgación de la información que debe ser expuesta. 2. Directrices. Su vigencia y eficacia determina un proceso de concreción, conducente a establecer una serie de medidas, tales como: i) reglas de acción107, ii) de fin108 o iii) medidas concretas que obligan o autorizan realizar cierta acción; a partir de una o varias directrices109. La concreción de objetivos (que preferentemente corresponde al legislador o la Administración) debe ser en armonía con lo derivado de otras directrices o políticas y sin vulnerar, innecesaria o desmedidamente, derechos fundamentales o principios. La concreción de un objetivo (final) puede requerir alcanzar previamente algunos otros de carácter instrumental, intermedios y necesarios. Pero incluso para conseguir estos puede ser indispensable emitir normas o realizar ciertas acciones también con el carácter de instrumental. 107 Medidas específicas e incluso derechos para conseguir el acceso a una vivienda, incluyen obligaciones y prohibiciones concretas. 108 Disposiciones que prevén como objetivo que todos los ciudadanos disfruten de una vivienda digna y adecuada. 109 Facilitar el acceso a créditos que sean incluso asequibles para colectivos con reducidos ingresos. 43 Ponderación como procedimiento y como resultado Es el juicio de valor o peso, que se aplica a los intereses debatidos, sobre la base normativa de principios110. Cobra importancia especial en el caso de los derechos fundamentales, establecer cuales son: a) los límites internos con especial referencia al fin del derecho, el para qué y su funcionamiento razonable, así como definir adecuadamente cuál es y cómo se protege al bien tutelado, partiendo que debe expandirse hasta donde sea posible, con eficacia irradiante a favor de las libertades111; y, b) las restricciones, también conocidas como límites externos o sistémicos, consecuencia de la vigencia y funcionamiento simultáneo de otros derechos112. Y es a partir de ese análisis de las circunstancias, peculiaridades, hechos e intereses del caso concreto que se puede «balancear» o «ponderar» para estar en posibilidad de determinar cuáles principios o derechos fundamentales son admisibles como restricción o límite a otros, siempre en el contexto de casos concretos y específicos, en el entendido que deben ser adecuados o idóneos para conseguir los objetivos o fines constitucionales y sólo entonces son evaluados y ponderados para conocer así y declarar en qué medida o proporción es factible optimizar su aplicación conjunta y en concordancia práctica; esto es, hallar el punto de equilibrio donde se obtenga el grado óptimo de realización, el sublime, tanto de intereses satisfechos como de la efectividad de principios o derechos fundamentales, tomando en cuenta que, usualmente, concurren dos o más en una relación de tensión. 110 En cierta medida es la idea que prima en el artículo 14, in fine, constitucional al establecer que los conflictos deben ser resueltos, aún ante falta de reglas, aplicando los principios pertinentes para dirimir la contienda o pugna de intereses. Estas ideas son aplicables plenamente a los derechos fundamentales ya que asumen la estructura de principios o directrices. 111 En el caso de la libertad de debe privilegiarse la más severa crítica y cuestionamientos, especialmente cuando la información tiene interés público y es necesaria para construir una adecuada opinión pública, sin embargo ello no legitima un ánimo denodado a la injuria o difamación, con evidente abuso de un derecho. 112 Siguiendo con el ejemplo, la libertad de expresión y derecho a la información deben expandirse al máximo posible a menos que afecten derechos de la personalidad como vida privada que también merecen protección por lo que son susceptibles de restringir a los primeros. 44 Los principios o derechos fundamentales deben ponderarse mediante los sub-principios o mandatos parciales de: a) Idoneidad o adecuación. Toda medida limitadora que implica intervención en los derechos fundamentales debe ser idónea para contribuir a alcanzar un fin constitucionalmente legítimo ha de ser útil, apropiada o idónea mandato de adecuación, ser un medio útil o apto para la consecución del bien público que la prevención tiene como objetivo. Resulta que los derechos fundamentales pueden ser restringidos, pero sólo a partir de la condición de satisfacer otros objetivos también constitucionales, incide en las posibilidades fácticas113. b) Necesidad. Debe ser indispensable mandato de necesidad, y sin que exista otro medio igualmente eficaz y menos limitativo o restrictivo para satisfacer el fin de interés público, incide en las posibilidades fácticas114. c) Ponderación stricto sensu.- Implica un mandato de proporcionalidad conforme al cual debe darse un equilibrio, balance o razonabilidad entre el perjuicio que resiente el derecho fundamental y el beneficio en favor de otro derecho o de privilegiar la protección de algún bien público a través de afectaciones que se modulen, según las circunstancias en intenso, medio, leve, que serían los niveles de costo o beneficio, incide en las posibilidades jurídicas115. Estas ideas quedan en evidencia en el gráfico siguiente donde se aprecia que al buscar incrementos en el derecho a la información se reducen las perspectivas de protección a la vida privada. Suponiendo dos casos paradigmáticos, resulta razonable limitar la información sobre datos de un menor, víctima de un delito infamante; en tanto que también es razonable restringir la protección a la vida 113 Suponiendo una ley que restringe libertades como la comercio, no obstante ello, puede ser idónea si protege intereses de consumidores, sin embargo de no tener esta cualidad y fin concreto, reprobaría el test de idoneidad. Alexy (2008: 524) 114 Es una medición de eficiencia del medio empleado para conseguir determinado fin, lo que implica que de existir medios alternos debe elegirse o diseñarse el menos oneroso o intrusivo. Si la protección de consumidores se puede obtener con notorios avisos de peligro en cajetillas de cigarrillos, es un medio razonable y eficiente en contraste con otro donde se prohibiera la venta del producto. Alexy (2008: 524) 115 Alexy (2008: 529) y Rodríguez de Santiago (2000: 25) 45 privada de un servidor público que es investigado y sancionado, ya que la opinión pública debe ser informada y consciente de los detalles de la conducta y nombre del responsable, aún a costa de afectar la reputación. Beneficio c ma r fo In . D Personaje público Grave Costo ión Leve Vi d a Priva da Víctima delito infamante Privacía Publicidad A partir de ese análisis, que es un test eliminativo o secuencial de prioridades, se emite un juicio o decisión respecto del mejor tratamiento o regulación que sea posible asignar a los hechos o intereses del caso concreto, pero de conformidad, a la luz y con la plenitud de los valores que inspiran a los principios pertinentes o derechos fundamentales que están en tensión. Cabe precisar que es a partir de la ponderación de los principios, como se construye la regla para decidir el caso específico —pertinente y ad hoc a los intereses en colisión— de modo que se optimice la armonía, eficacia y funcionalidad de todos los principios concurrentes y en razón, precisamente, de las circunstancias e intereses prevalecientes, esto es, a la luz de los hechos o intereses del caso concreto, evaluando los efectos, las circunstancias y consecuencias particulares y específicas a la luz de una combinación simétrica y balanceada de principios concurrentes. Es un ejercicio para armonizar y cohonestar derechos subjetivos o, si se quiere, concretos. 46 Es así que los principios en tensión deben pesarse o ponderarse en razón de los intereses que están regidos por los hechos o circunstancias del caso concreto y, con el resultado, se construye la regla para resolver el específico evento. En seguida aparece un gráfico que intenta reflejar el método de ponderación referido: El método de ponderación, originalmente propuesto por tribunales de los Estados Unidos de América, perfeccionado y desarrollado por el Tribunal Constitucional alemán y seguido por muchas otras cortes constitucionales e internacionales como el Tribunal Europeo de Derechos Humanos y la Corte Interamericana de Derechos Humanos, han dado pauta a los siguientes criterios muy claros u didácticos de la Corte Constitucional de Colombia en el asunto T-425/95: PRINCIPIO DE ARMONIZACION-Colisión entre derechos constitucionales El ejercicio de los derechos plantea conflictos cuya solución hace necesaria la armonización concreta de las normas constitucionales enfrentadas. El principio de 47 armonización concreta impide que se busque la efectividad de un derecho mediante el sacrificio o restricción de otro. De conformidad con este principio, el intérprete debe resolver las colisiones entre bienes jurídicos, de forma que se maximice la efectividad de cada uno de ellos. La colisión de derechos no debe, por lo tanto, resolverse mediante una ponderación superficial o una prelación abstracta de uno de los bienes jurídicos en conflicto. Esta ponderación exige tener en cuenta los diversos bienes e intereses en juego y propender su armonización en la situación concreta, como momento previo y necesario a cualquier jerarquización o prevalencia de una norma constitucional sobre otra. El principio de armonización concreta implica la mutua delimitación de los bienes contrapuestos, mediante la concordancia práctica de las respectivas normas constitucionales, de modo que se asegure su máxima efectividad. PRINCIPIO DE PROPORCIONALIDAD-Límites al ejercicio de los derechos En este proceso de armonización concreta de los derechos, el principio de proporcionalidad, que se deduce del deber de respetar los derechos ajenos y no abusar de los propios, juega un papel crucial. Los límites trazados al ejercicio de los derechos, en el caso concreto, deben ser proporcionales, esto es, no deben ir más allá de lo indispensable para permitir la máxima efectividad de los derechos en pugna. La proporcionalidad se refiere entonces a la comparación de dos variables relativas, cuyos alcances se precisan en la situación concreta, y no a la ponderación entre una variable constante o absoluta, y otras que no lo son. La delimitación proporcional de los bienes jurídicos en conflicto, mediante su armonización en la situación concreta, se hace necesaria cuando se toma en serio la finalidad social del Estado de garantizar la efectividad de los principios, derechos y deberes consagrados en la Constitución, y se pretende impedir que, por la vía de la restricción injustificada de los derechos, termine por socavarse el contenido de uno o varios de ellos. PRINCIPIO DE PONDERACION-Colisión entre derechos constitucionales En el caso de colisión entre derechos constitucionales, corresponde al juez llevar a cabo la respectiva ponderación. Mediante ésta, se busca un equilibrio práctico entre las necesidades de los titulares de los derechos enfrentados. La consagración positiva del deber de respetar los derechos ajenos y no abusar de los propios, elevó a rango constitucional la auto-contención de la persona en el ejercicio de sus derechos. La eficacia constitucional de este deber, en consecuencia, exige de los sujetos jurídicos un ejercicio responsable, razonable y reflexivo de sus derechos, atendiendo a los derechos y necesidades de las demás y de la colectividad. En igual sentido el siguiente criterio jurisprudencial mexicano: 48 MEDIDAS CAUTELARES EN MATERIA DE PROPIEDAD INDUSTRIAL. PARA ANALIZAR LA NATURALEZA DE LA VIOLACIÓN ALEGADA POR QUIEN LAS SOLICITA Y DETERMINAR SI PROCEDE CONCEDERLAS, DEBE EMPLEARSE LA PONDERACIÓN DE PRINCIPIOS, SIEMPRE Y CUANDO CONCURRAN LOS REQUISITOS LEGALES.- En materia de propiedad industrial, para determinar si procede conceder una medida cautelar es necesario analizar la naturaleza de la violación alegada por quien la solicita, lo que hace necesario realizar un juicio de probabilidad y verosimilitud del derecho esgrimido, en el que debe emplearse la ponderación de principios, a efecto de analizar la idoneidad, la necesidad y la proporcionalidad entre medios y fines de dicha medida, sobre todo cuando están enfrentados dos derechos que se presumen legítimos, ya sea en cuanto a la titularidad de una patente, o de ésta y un registro. Así, la idoneidad se traduce en la legitimidad constitucional del principio adoptado como preferente, por resultar el adecuado para el logro de un fin constitucionalmente válido. Por su parte, la necesidad consiste en que no exista otro medio (igual o más eficaz) menos limitativo para satisfacer el fin del interés público y que sacrifique, en menor medida, los derechos fundamentales de los implicados. Finalmente, el mandato de proporcionalidad entre medios y fines, implica que, al elegir entre un perjuicio y un beneficio en favor de dos o más bienes tutelados, el principio satisfecho o que resulte privilegiado lo sea en mayor proporción que el sacrificado. En estas condiciones, la autoridad administrativa o el órgano jurisdiccional habrá de ponderar si rechaza o decreta las medidas cautelares propuestas, atendiendo a la relación entre la finalidad perseguida, la eficacia de la medida y la afectación que produzca, siempre y cuando concurran los requisitos legales establecidos y se motive su determinación.116 Esquema argumentativo de las sentencias Construcción de la decisión Una estructura silogística bien cuidada siempre será esencial para inducir y convencer ante la demostración basada en un modelo de expresión racional. Yendo al detalle se tiene que los considerandos de toda sentencia deben tener una estructura basada en una serie de elementos y pasos obvios: 116 [TA]; 9a. Época; T.C.C.; S.J.F. y su Gaceta; Tomo XXXIII, Mayo de 2011; Pág. 1220 49 Hechos Problema Relevantes Irrelevantes Marco Razones normativo Sustancial o indispensable Ratio decidendi Esencial Instrumental o accesorio Litis Cuestiones Decisión Principios Reglas Precedentes Apoyo o complementaria Obiter dicta Correlacionados | Regulación | Aplicación | Conclusión El contenido de las razones (aplicación) y de la decisión (conclusión), es o debe ser establecido en la medida y a partir de la información o presupuestos que anteceden (cuestiones y regulación). Atender y acometer la primera etapa (establecer los hechos) implica comprender, adecuada y sustancialmente, los planteamientos de las partes, originados en un ambiente dialéctico117 y controversial118 a fin de recopilar, analizar y sintetizar los hechos o circunstancias del caso que, efectivamente, sean constitutivos ya sea del problema o la disputa, además de relevantes, esenciales, determinantes y conducentes para justificar la decisión. Es entonces que se debe especular, planteando una hipótesis, esto es, si determinadas circunstancias y cuestiones, en una relación de causalidad o inspirada en el principio de razón suficiente, son parte del problema y resulta indispensable sean tomadas en cuenta para arribar a determinada conclusión o decisión, a partir de establecer si son efectivamente los componentes sustanciales del problema o conflicto que se intenta resolver. 117 La estructura de todo juicio o procedimiento jurisdiccional se da partir de una demanda, instancia o pretensión que equivale a la tesis, una oposición o problematización a lo planteado que es la antítesis para concluir o desembocar en una síntesis. 118 Se parte de que existe una pretensión o punto de vista que se desea rija la decisión y la contraria opondrá un interés opuesto. Esto implica un sesgo y parcialidad en la información y las razones. 50 En este momento deben estar claras las cuestiones o aspectos problemáticos del caso lo que debe ser bien establecido y concretado para, a partir de ello, buscar o construir la regla o norma jurídica 119 conducente y pertinente para resolver el caso. Definida o cuando menos delineada la premisa normativa es menester regresar a los hechos para establecer como son incididos por el derecho, implicando un cuidadoso análisis y calificación pero ya con una perspectiva jurídica. En una simplificación esquemática las ideas expuestas aparecen en el siguien te gráfico: Describe Hechos 1 3 4 Análisis y Calificación 2 Regla Cuestiones 5 Aplicación 6 Conclusión 120 La estructura y componentes de la parte decisoria de la sentencia 121, deben tomar en cuenta como premisas ineludibles: La cuestión, aludiendo al problema y citando las circunstancias relevantes que deben estar probadas y establecida su calificación jurídica, esto es, los conceptos jurídicos implícitos en ellas. El marco normativo 122 que serían normas, principios y precedentes pertinentes para regir el caso y dirimir el conflicto. En los casos fáciles, este aspecto se descubre, sin embargo, en situaciones difíciles, será menester 119 Norma jurídica o quaestio iuris, debe ser entendida en el concepto más amplio posible, implicando e incluyendo principios, políticas, reglas, precedentes, etc. 120 Lógica y comunicación.vsd 121 Aplicación y conclusión para efectos del esquema anterior. 122 Lo que constituye la regla según el gráfico. 51 adscribir sentido y significado o incluso será necesario construirlo a partir del orden jurídico. La Regla que rige el caso –quaestio iuris–, consiste en una serie o conjunto —lineal o reticular— de argumentos a manera de proposiciones necesarias para explicar y justificar el resultado o decisión concreta. Este enunciado normativo entendido como norma general y abstracta es la cuna y asidero de la norma individualizada que construye el juez a manera de un razonamiento necesario para alcanzar la conclusión de la sentencia o el paso de la cuestión y circunstancias a la decisión 123. En ocasiones se debe desarrollar una doctrina específica o argumentación respecto de esa norma individual, que es la ratio decidendi 124 Existen otros enunciados a manera de contexto, definición, ampliaciones, fundamentos doctrinales o apoyos, conducentes a la determinación del marco normativo, son formulaciones más generales del o los principios que rigen pero que no resultan necesarias o indispensables para decidir los hechos concretos que forman la litis. Estos razonamientos de respaldo, cobertura o relatoría de lo que pasó por la mente del juzgador, deben reputarse como dictum. Son pertinentes para entender, preparar o dar contexto y una base argumental respecto a los enunciados de la ratio decidendi. La decisión que se toma, respecto al conflicto propuesto, con especial referencia a las consecuencias que surgen del fallo y, en su caso, la manera de cumplir o acatar lo decidido se deben combinar de una manera tal que comunicativamente sean eficaces para cualquier lector de la decisión. Estas ideas y su progresión aparecen en el esquema siguiente: 123 En este sentido dice Kelsen (2003: 246) …los tribunales aplican las normas jurídicas generales al dictar normas individuales, determinadas en su contenido por las normas generales, que estatuyen una sanción concreta, …el derecho se autorreproduce permanentemente, va de lo general (o abstracto) a lo individual (o concreto). Se trata de un proceso de una individualización o concretización en incremento ininterrumpido 124 Son las razones para la decisión, basadas en argumentos, principios, doctrina, precedentes, reglas jurídicas; correspondientes a los hechos del caso y que resuelven la controversia. En cierto modo es la motivación o la garantía para Toulmin, todo depende del caso y de la simpleza o complejidad del asunto, así como de la poca o alta discrecionalidad del juzgador. Batiza (1992) La ratio decidendi es una expresión latina, que significa en español "razón para decidir" o "razón suficiente". Ésta hace referencia a los argumentos que elabora el Juez o Tribunal en la parte considerativa de una sentencia o resolución judicial que constituyen la base de la decisión del tribunal acerca de la materia sometida a su conocimiento, en síntesis es la razón para decidir, razón suficiente, motivación principal en la sentencia. Huanca 52 Hechos Cuestión Descubre Adscribe Construye Escueto, suficiente y convincente Razones decisivas Relevantes y necesarios para la decisión Probados y calificados Marco normativo Ratio decidendi Obiter dicta Lo necesario, no más Razones subsidiarias Decisum Qué se decide Consecuencias Cumplimiento C cuestión y hechos R marco normativo A ratio decidendi, aplicación C decisión Presentación o exposición de la decisión A fin de privilegiar la eficacia comunicativa y el entendimiento de una sentencia, se debe ordenar adecuadamente la información en líneas argumentativas lo más simples y lineales posibles, cuidando de no exponer datos o información innecesaria sino solo la estrictamente indispensable para entender el problema, contexto y las razones que justifiquen las hipótesis, lo opuesto desde el punto de vista comunicativo, es ineficiente y provoca ruido. Ser prolijo de manera innecesaria, no fortalece ni mejora argumentos, antes los debilita. Grice propone como rectores de la comunicación humana, cuatro reglas: Cantidad, Cualidad, Relación y Modo. Manuel Atienza propone el siguiente esquema básico que da cuenta tanto del juicio de los hechos como del derecho con la estructura más clara y elocuente posible. Por una parte aparecen en la línea izquierda los grandes rubros que son materia de exposición, análisis y decisiones. Ya en el esquema se advierte el bosquejo 53 genérico de planteamiento y conclusión al problema principal, para lo cual es necesario separar y distinguir como se aborda y decide lo relativo al enunciado normativo que es necesario determinar en sus etapas y posibilidades, proponiendo incluso como alternativa dos hipótesis una que luego se descalifica y, po r consecuencia, se asume la otra suposición (SPb2), todo ello en función de razones que se aportan a las líneas argumentativas respectivas. Semejante ejercicio debe realizarse respecto a la construcción del enunciado fáctico que se va conformando a partir del resultado y valoración de diversas pruebas. A la postre se llega a la definición de los dos enunciados (quaestio iuris y quaestio facti) que en su carácter de premisas forman parte de un razonamiento deductivo que justifica la decisión final adoptada. Narración Problema (s) Problema Pa Cuestiones Qb ENAI Qc EFAP 1.c (TT) 1.1.c 2.c (PD) SPb1 Suposiciones 1.1.b.1 1.3.c SPb2 3.c (IP) 2.3.c 1.b.1 + 1.b2 1.1.b2 (RI) 4.c (G) 1.4c (ET) 2.b.1 Razones 5.c (TT) Nb1 6.c (PD) 2.b2 7.c (G) Respuesta a cuestiones Ab2 ENI Ac EFP Razonamiento deductivo Decisión Conlusión 54 ENAI Enunciado normativo a interpretar Qb Quaestio iuris EFAP Enunciado fáctico a probar Qc Quaestio facti SP Suposición ENI Enunciado normativo interpretado RI Regla interpretativa (Vgr. Puede ser un método teleológico o consecuencialista, etc.) Nb Suposición negada, Conclusión inaceptable EFP Enunciado fáctico probado ET Enunciado teórico, puede ser una máxima de experiencia, regla científica, probabilidad estadística o presunción legal TT testimonio de testigo PD prueba documental G Enunciado general Vgr. maximas de experiencia IP Informe pericial Ab2 Respuesta a quaestio iuris, ENI enunciado normativo interpretado Ac Respuesta a quaestio facti, EFP enunciado fáctico probado Bibliografía Alexy, Robert, Sobre los derechos constitucionales a protección, en Derechos sociales y ponderación, Madrid, Fundación Coloquio Jurídico Europeo, 2007 Alexy, Robert, Teoría de los derechos fundamentales, Traducción de Carlos Bernal Pulido, Madrid, Centro de Estudios Constitucionales 2008 Alonso Más, Mª José, La solución justa en las resoluciones administrativas, Valencia, Tirant lo Blanch, 1998 · Andrés Ibáñez, Perfecto. Jueces y ponderación argumentativa. La Argumentación Probatoria y su Expresión en la Sentencia, México, UNAM-IIJ, 2006. Atienza Rodríguez, Manuel, El Derecho como argumentación, Barcelona, Editorial Ariel, 2006, 1ª edición. Atienza Rodríguez, Manuel, Las razones del Derecho, Madrid, Centro de Estudios Constitucionales, 1993, hay una reciente reedición de la UNAM, 2003 Batiza, Rodolfo, La "ratio decidendi" en la jurisprudencia y la doctrina angloamericanas, Jurídica. Anuario del Departamento de Derecho de la Universidad Iberoamericana, Número 21, Año 1992, http://www.juridicas.unam.mx/publica/rev/indice.htm?r=jurid&n=21 Colomer Hernández, Ignacio, La motivación de las sentencias: Sus exigencias constitucionales y legales, Valencia, Tirant lo Blanch, 2003. Cooper, David G. y Gibson, Michael J., Introduction to Paralegal Studies, West Publishing, 1998. http://books.google.com.mx/books?id = ogKeFLQvI5MC&printsec = frontcover&client = firefox-a&source = gbs_navlinks_s#v = onepage&q =&f= false Cornu, Gérard, Linguistique juridique, Paris, Montchrestien, 2000 55 Huanca Yampara, Ángel Gumercindo, La "ratio decidendi" o razonamiento decisivo, http://www.monografias.com/trabajos71/ratio-decidendi-razonamiento-decisivo/ratio-decidendirazonamiento-decisivo.shtml Iniesta Delgado, Juan José, Enunciados jurídicos en la sentencia judicial, Bolonia, Publicaciones del Real Colegio de España, 2003. Kelsen, Hans, Teoría pura del derecho, México, Porrúa, 2003 Martínez Zorrilla, David, Metodología jurídica y argumentación, Madrid, Marcial Pons, 2010. Moreso i Mateos, Josep Joan, Lógica, argumentación, e interpretación en el derecho, Barcelona, UOC, 2006. 56 Los esquemas de construcción en argumentación jurídica .......................................................................... 1 Intereses y Stories ......................................................................................................................................... 1 Pretensión y litis ............................................................................................................................................ 1 Concepciones y justificación de los argumentos........................................................................................... 2 Concepción formal ........................................................................................................................................ 4 Lógica formal, aspectos generales de: Inferencias y silogismos ............................................................... 5 Principios fundamentales de racionalidad ............................................................................................ 7 Inferencia............................................................................................................................................... 8 Deducción .............................................................................................................................................. 9 Inducción ............................................................................................................................................. 11 Silogismo ............................................................................................................................................. 12 Subsunción .......................................................................................................................................... 13 Principios de lógica formal aplicados a las sentencias ........................................................................ 14 Razonamiento justificativo, regla de la razón y ponderación ............................................................. 14 Concepción material.................................................................................................................................... 17 Argumento de respaldo........................................................................................................................... 18 Modelo para el análisis jurídico IRAC / CRAC ....................................................................................... 22 Enunciados jurídicos y judiciales ............................................................................................................. 23 Complejidad de los argumentos.......................................................................................................... 28 Concepción pragmática ............................................................................................................................... 29 Esquema dialéctico.................................................................................................................................. 30 Modelo de Toulmin ................................................................................................................................. 31 Prueba indiciaria.................................................................................................................................. 34 Conceptos de violación ....................................................................................................................... 35 Célula judicial argumentativa .................................................................................................................. 36 Ponderación de principios ....................................................................................................................... 39 Contexto .......................................................................................................................................... 39 Tipos de ponderación ...................................................................................................................... 42 Ponderación como procedimiento y como resultado ..................................................................... 44 Esquema argumentativo de las sentencias ................................................................................................. 49 Construcción de la decisión ..................................................................................................................... 49 57 Presentación o exposición de la decisión ................................................................................................ 53 Bibliografía................................................................................................................................................... 55 58