CAPITULO vII

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CAPITULO vII
D) SUJETOSA I,OSQUE SE IMPUTA EL DEBERDE SEGURIDAD
EN EL TRABAJO:EL EMPRESARIOY SUS ENCARGADOS
COMO AUTORESTIPICOS DE LOS DELITOS IMPRUDENTES
DE HOMICIDIO Y LESIONESEN ACCIDENTESDE TRABAJO
Hastaahora se ha hechoconstantereferenciaal empresariocomo sujetoespecifico
de imputaciondel deberde cuidadoen el desarrollode la actividadlaboral,del deber
de seguridaden el trabajo.Pero.como tambiénha sido indicado.el deberde seguridad
se imputa no sólo al titular de la empresasino a los a el equiparadospor recibir del
mismo poderesde mando.organizacióny controll en definitiva.porqueel empresario
les inviste de su originario poder de dirección.
En el CapituloIl. 5. de estaparte ll. seanalizoel fundamentomaterialy legalde la
imputaciondel deber de seguridadal empresario.asi como de la imputaciónde este
deberparalelaa la traslaciondel poder de direcciondel empresarioa otras personas.
Quedabafijado tambien en aquel lugar el marco teórico de l<lssu.ietosobligadosen la
empresaa ese deberde seguridad.Sobre Ia basede lo allt expuesto.se trata en este
apartado de analtzarlos criterios juridico penalesde determinacionde quienesson cn
concretolas personasobligadasy cuyo cumplimientopuedeacarrearresponsabilidad
criminal, tema al que la jurisprudenciaha prestadoreiteradaatención.l-oscriteriosen
distintosa los empleadosen otros sectoresdel
lo penal han de ser necesariamente
ordenamiento juridico, pues distintas son las lunciones de las declaraciones
normativasde las sancionesprevistastanto en el orden privado como en el laboraladministrativo. En el primero. la determinaciÓnde la imputacion de deber de
seguridadsirve a establecerIa personaobligadaa sufragar económicamentelos costes
de la puesta en práctica de las medidas de seguridady a indemnizar los daños
materialesque de su ausencia resulten. En el orden administrativo laboral la
imputacióndel deberde seguridadtiendea determinarlas personasque en la empresa
puedeser
debende poner en prácticalas normas de seguridady cuya desobediencia
castigadacon los sancionesadministrativas previstasa tales efectos.
de determinarquiénesson los sujetos
En el ambito penalse trata especiñcamente
susceptiblesde ser consideradosautores de un delito imprudente de homicidio o
lesionespor incumplimientode los deberesde cuidadoexigidosparala seguridaden el
trabajo. no sirviendo a tales efectos los criterios meramente formales del orden
administrativo.
de algunassentenciasdictadascon
Esto es Io que subyaciaen los considerandos
de
de las ordenánzasy reglamentaciones
anterioridada la reforma v sistematizacion
167
seguridaden el trabajo. que se enfrentabancon normas de estecarácterdirigidasen
sus mandatos.como consecuencia
de defectosde tecnicalegislativa.exclusivamente
al
empresario.Asi, era necesarioaclarar que "el hecho de figurar el patrono como
responsableen el orden administrativo de la infraccion .de normas laboralesde
protecciÓncontra el peligro no implica que los voluntariamenteencargadosde dirigir
los trabajos...esténexentosde la obligacionde hacerlacumplir" il).
Aun corregidostalesdefectos.particularmentecon la OrdenanzaGeneralde | 97 l.
la definicionen las normasadministrativasde los sujetosque junto al empresarroson
especialmente
obligadosa cumplir las normas de seguridaden el trabajo no exime de
tratar de encontrar el fundamento material de la condición de hipotéticosautores
tipicos de los delitos imprudentesante los que nos encontramos.
El resultadolesivo producido en la empresacomo consecuenciade un proceso
causalgeneradoo no impedidopor la no adopcionde medidasde seguridacl
sólo puede
lmputarse a quienes vengan obligados a adoptarlas.A este respectolas normas
administrativasse refierenal "empresario"y al "personaldirectivo técnicoy mandos
tntcrmedios"(art. l0 o.s.H.). El problemano se resuelve-ni siquieraen el plano
administrativo- con estos conceptosformales.lo de{lnitivo es la posición material
comun a talescategoriasprofesionales.
en la cual se fundamentasu equiparacióna la
figura del empresario:conferido por éste,han asumido y ejercenel poder de dirección
del mismo y, con ello, los deberesde cuidado y la posición de garante conectadosa
dicho poder de direción.
sin la concurrencia de tales circunstancias,un empleado no puede quedar
obligado más que al cumplimiento de las medidas de seguridadcuya necesidad
apaÍezcaya en la mera experiencialaboralcomún y paracuya puestaen prácticano se
requiera otra competenciatecnica y organizativaque la que él posea,como mero
emfleado para la ejecucion de su trabajo. Por encima de estos presupuestosde
capacidady competenciacomún. ni la activacausaciónpor el empleadode la lesiondel
bien juridico realizaráel tipo del delito imprudente.puestoque no ha infringido deber
de cuidadoalguno que la corresponda,ni. en los supuestosde omision.el no impedirel
resultadoseráequiparablea su activaproducción,por no estarél puestocomo garante
de la seguridaden el trabajo.
El fundamentode la responsabilidad
criminal de personasdistintasdel empresario
es. pues,la asuncióndel poder de direcciony mando del empresario,hechoque. por
una parte.le obliga a respetaren la ejecuciondel trabajo que realicetodaslas normas
de seguridadobjetivamenteexigidas.y. por otra. además.le constituyeen garantede la
seguridadde los trabajadoresque se encuentrenen la orbita del riesgodel procesode
trabajoque organizay dirige.obligandolea ejerceruna actividadde vigilanciasobreel
desarrollodel trabajo para actuar de tal forma que, superadoel riesgo controlado.
pueda neutralizarlo de nuevo y. en ultimo término. suspenderel trabajo y la
exposiciónde las personasal riesgo.
Para designar a esta categoria de personas que ejercen en su parcela de
competenciael poder de direccionempresarial.el 'fribunal Supremo ha recurrido al
término "encargado", entendiendo que permite abarcar conceptualmentea las
(l) Cfr. f.S. l9-X-1965. Ar. 4852. Et problemase mantienevigenteen ltalia y es fuente
de
graves problemas tecnicos.mas aún cuando no disponen de cláusulaspenalesdestinadasa
resolverel problema de los delitos propios cometidospor personasen quienesno concurre la
caracteristicatipica de la autoria, al estilo del par. l4 del Codigo penal alenrán. vid.
PADOVANI. Diritto penaledel lavoro, N,tilan197ó.p. 18 y 22.
tó8
multiples denominacioneslegales.administrativasy profesionalesde los sujetosde
imputacióndel deberde seguridaddistintosdel empresario.ya que ..enel conceprode
encargadocabe la alta direccion.la media y la del simple rector de la ejecuciono
caparaz.es decir, la de cualquier persona a la que se confia la realiz.acionde una
cosa.conmando sobreotros y con funcion generalde vigilanciay cuidado" (2).
Sobreestasbasespodrramosya formular como principio generalel que en el sen<.r
de la empresa.y ademásdel titular de la misma.puedenser sujetosde imputaciondel
especificodeber de cuidado de seguridaden el trabajo y, en consecuencra.
autores
tipicos de los delitos imprudentesde homicidio y lesionesen accidentesde trabajo
aquellas personasque por delegación del empresario han asumido en el esquema
olganizativo de la empresa puestos que implican facult¿d de mando sobre otros
trabajadores y facultad de remlución en la concreta esfera funcionat que tiene a su
cargo (3).
l-a eftcaciafundamentadorade la imputacion det deberde seguridadal encargad6
se condicionaa que se den determinadospresupuestos
en la delegaciondel poder de
direccionpor partedel empresarioy en la aceptaciónde su ejerciciopor el encargado.
presupuestosque coincidencon los exigidospor la doctrina para que la voluntaria
aceptaciónde una funcion de protecciónfundamenteun deberde garantla(4). a l¡s
cualesnos referimosseguidamente.
Ha de decirseen primer lugar que la determinacionde quienesseanlaspersonasa
las que como encargadosse imputa el deber de seguridadno se rige por criterios
formales.v. gr., contractuales.sino que, conformea una reiteradajurisprudencia,ha
de atendersea quienesseande hecholos que asumeny ejercenel poder de direccion
empresarial(5).
'rribunat
En estesentido.el
supremo declaraque lo relevanteno esel cargocon el
que el sujetofigure en el organigramade la empresao en el contratode trabaio(6). ni
( 2 ) C l i . f . S . l - l - l l - 1 9 7 4A. r . ó ó 8 .r e i t e r a d a e lnl - \ ' - 1 9 7 ó .C . 1 . . 6 5 7\.' i d . t a m h i e nl.- l \ - 7 5 .¡ \ r . .
1 5 4 2 l. 2 - \ ' - 7 6 .9 - \ ' - 7 7 . 6 - \ ' t - 7 7l -. . 1 - x t - 7 27 -. 1 - i l - 7 c8t._ 1 5 8 .l ] _ x i l _ 7 t Jc.t . 1 0 6 ] . I _ i l t - 8 0 .
Ar. I 169.
(-l) vid. FERNANDEZ rtARCos. La seguridade higienedel trabajo,cir-. \ladrjd 1975.p.
| 44.
(4) Sobre la asunciónvoluntaria de una posici<-rn
de proteccioncomo fuen(edel deher.iurrdic<r
de actuar.consideradoen Ia dttctrinaanteriorconlo aceptacioncontractual,ver: Jl\lF-NE7. l)t:
ASUA. Tratado, lll. 3'. ed..p 42.1ss.:SfRAfEN\\'ER'FH. Strafrecht,l. 2". erl..p. J74 r.s:
SCIIÓNKE/SCHRÓDER/Sl-REE.
StGB Komm., l8 ed.. n. 2ó a -10al par 1.1:RL.'DOLl,l,lt.
S K , n . 5 8 y s s a lp a r l - 1 ; N I A U R A C H - G Ó S S E I - l. lAl .. pf .. l 5 l y s . R e c u é r d e s e q u e c o n r o h a
sido expuestoanteriormente.el problemade las fuentesmaterialesde imputaciondel deber¡te
cuidadoespecifico(no de los deberes"comunes")de la seguridaden el trabajoesel nrisnroque
el del fundamentodel deber de garantiade la seguridaden el trabajoque sirve a equipararlas
conductasomisivasa la comisión activa. vid. supra cap. VI. c. I 2.
(5) Cfr. S'IRA'IENWER'IH. Strafrecht,cir.. p. 275.
(6) En estesentido:"El hecho de que el procesadofuera gerentede la sociedad.lo cual abarca
generalmentela mera gestióñeconomica-comercial
no obstapara reconoceren el al garantede
la seguridad"puesen el casoconcretoera tambiendirectordel procesotécnicode l'abricacion
('f .S. 9 junio 197-j)(Ar. 265I ): "que las clasificaciones
laboralesrealizadaspor normas
reglamentarias
de profesioneso actividadesen que sedeslindenlos cometidosde los su.ietr>s
que
actúancomo directores.encargados.mandosintermedios.tecnicosu obreros.tienensusefécros
puros dentro de las relacioneslaboralespúblicas.pero son meramenteindicativosen el orden
criminal ... porque ha de estarse{aqur)no a lo que talesnormas dispongan.sino a la ef'ectiva
realidaddel hecho.para no evitarsea medio de citas legales.delitoscometidosen la praxis y
169
la categoriaprofesionalen la que el sujeto en cuestión está cualiflcado(7). sino la
funcion que la personarealmenterealice.El deberde seguridadse imputa.y con ello la
cualidaddel autor tipico. a las personasque "de facto" ejercenel poder de direccion
sobre el y tienen las facultadesnecesariaspara adoptar las medidasde seguridad
(8).
pertinentes.
I-a pruebafundamentalpara la constatacióno negaciondel carácterde encargado
o responsablede la seguridaddel sujeto en cuestión.consisteprecisamenteen la
comprobacion de si el implicado tenta o no facultad de adoptar por su cuenta
autonomamentelas medidas de seguridad.siendo muy especialmentedecisoriala
facultadde suspenderlos trabajoscuando éstosse realizanen condicionesde peligro
(9).
sobrevenido
l-a trascendencia
del poderde suspensiondel trabajocomo último y mas decisorio
criterio de comprobacion del caracter de la persona como sujeto encargado y
responsablede la seguridaden el trabajo se fundamentaen consideraciones
tanto
materialescomo legales.En sentidomaterial.porqueel resultadoconsecuencia
de un
procesode riesgosolo puede ser consideradocomo "hecho de una persona"si esta
tieneel señorrosobreéstey en su mano estáel impedirel desarrollodel mismo haciael
resultado y. en ultima instancia.el que los trabajadoresestén al alcancede dicho
procesode riesgocuando no es ya posibleevitar el incrementono controlablede éste.
En sentidolegal.porque ha de tenerseen cuentaque la suspensiondel trabajo cuando
no es ya evitable o neutralizableel riesgo agravado. es una de las obligaciones
fundamentales.la ultima en sentidotemporal. que el ordenamiento(art. 10,3 OSH)
impone a los "directivos. tecnicos y mandos intermedios". en defrnitiva. a los
encargados
de los diversosniveles(10).
lmporta destacarque el poder de direccionefectivoque ha de comprobarsees el
relativo al procesode riesgoconcretoque ha llevadoal resultadolesivoante el cual el
juez penalseencuentra.lo cual implicaque ha de referirseal ámbito de la competencia
funcional del sujeto. Es decir. prescindiendode aquellosencargadosgeneralesen
trabajoscon reducidacomplejidadde division del mismo. ha de tenerseen cuentaque
los "encargados"son "encargadosde la direccionde un determinadotrabajo y a un
por lo generaluna complejaestructurajerarquica
determinadonivel". presentándose
con derogacionmaterialdel contenidode aquéllosque se incumplieran"(I.S. mayo 1974.
Ar.l409). Aqur mismo tambien; lo que importa es si "fue autónoma su direcciónde la
cjecucion del trabajo".
(7) Asr en la S. de 2l-\'-7-1 A. 241.1.el procesadoera simple albañil profesional.per<r
representantede la empresaen la obra.
(ll) F-ntre las multiples sentenciasque se declaran por el sistema fáctico. además de las
anterioresv. lasde 7-XII- 196l. 7-XIl- 1964(supuesto
consigue
esteultimo en que el empresario
que los trabajadoresfirmen un documentopor el que se pretendeexoneraral empresarioy que
los trabajadores
asumanen exclusivala tutelade su seguridad).
2l-fl-1974. Ar. 79t|.y 24-\'l1975A
. r. 2929.
(9) As¡.f.S. 24-\'l-1975. Ar. 2929. afirmando la responsabilidad
del encargadode l¡echoy
considerandoletal porque disponede las facultadesmencionadas.Por el contrario.en lasde 24X I - 1 9 ó 4 y l 9 - X - l 9 T 5 s e n i e g a ecl a r a c t e r d e e n c a r g a d o a q u i e n e s c a r e c e n d e d i c h a s f a c u l t a d e s .
"El
cumplimiento(de las medidasde protección)no
) asr.en la primera de ellasse declaraque
puede ser imputable al simple encargadodel trabajo que no tiene funciones de dirección y
responsabilidaden la organizacióny marcha del negocio industrial".
(10) \'id. FERNANDEZ \IARCOS. La seguridad e higiene como obligación contractual y
como deberpúblico,\.ladrid 1975.p. 146.Vid. supra.Cap. ll. ap. 5.
t70
de competencias
o ambitosde atribuciondel poderde direccion.de tal maneraque no
podra imputarsea un sujeto un procesode riesgo o momento del mismo que se
desarrollefuera del ambito de su competenciafuncional.considerandocomo tal no la
formalmenteatribuida.sino la competenciarealmenteasumiday ejercida( I | ). pues.
no puede exigirse al encargadomás de lo que ha aceptado( I 2) y de lo que esrá
facultado para realiz.ar.
Bien entendidoque el corte de competenciassolo se produceen forma absoluta
"hacia
pero no en direcciónc<'¡ntraria.
arriba" de la estructurajerarquica.
Es decir.por
ejemplo.los defectosde planteamientotécnicode la obra que generanun resultado
lesivo han de imputarse a quien era responsabledel mismo (v. gr. arquitecto o
ingeniero)y no puedeexigirseresponsabilidad
al encargadode la obra. aunquedicho
resultadoseproduzcaen el marcode la concretaactividadlaboralque esteexige.Por el
contrario, resultadoslesivosderivadosde las ordeneso defectosen la más concreta
direccióndel trabajo.v. gr. ordenesincorrectasdel encargadode la obra. se imputan
directamentea quien es su mas inmediatoautor. pero no se excluyeel que aquc.llos
que. como el aparejadoro arquitecto.tienen una competenciamas abstractasobreel
trabajo puedan ser llamados a responder. pues para el superior. la esfera de
competenciade su subordinadoes tambien de su competencia.
Otros elementosconstituyen tambien presupuestosdet carácter de su.ietotle
imputaciondel deberde seguridad.Particularmente
seexigeque la personaencargadir
tengafos conocimientostécnicosnecesariospara captarlas dificultadesy peligrosque
puedensurgir en la ejecuciondel trabajocuya ejecucionlesestaconfiaday para poder
determinarlas medidasadecuadaspara evitarloso neutralizarlos( | .l).
No puede ser consideradoautor quien carece de los conocimientt-lstecnicos
necesarios.l-a responsabilidad
por el incumplimientode las normasde seguridadpt>r
parte de encargadosincompetentes.a la vez le excluye su responsabilidad.(14)
fundamentala imputaciondel resultadoa los superioresjerarquicosdel mismo(culpa
in eligendo).
Ahora bien. expuestohastaahora que el criterio definitivo es el del ejerciciode
hecho del poder de direccion. no debe desconocerseel valor indiciario que presentafl
los criteriosformales(cargo.clasificaciónprofesional.cláusulasde contrato.etc.).y nt'r
sólo carácter indiciario. pues en algunos casgs el incumplimiento del deber de
seguridadpuedeconsistirprecisamente
en que el encargovoluntariamenteasumidoy
consignadoformalmenteno es ejercidode facto, v. gr.. cuando el contratadocttmo
encargadode la obra incumple.sus obligacionesy se ausentade la misma.
( l l ) C f r . R U D O I - P H IS. . K .c i t . .n . ó , 1a l p a r .1 . 1 .
( 1 2 )C f r .J I N I E N E Z
D E A S U A . T r a t a d oI,I I . c i t . .p . 4 2 5 .
(1.1)Asr.en la Reglamentación
(O.\1. ll-l\'-1946)en cuvo
del trabajoen la construccion
art¡culoI0. fl. se delinela figura del encargado
general.incluyecxpresamente
entrc sus
parala realizacion
que
requisitos
la "posesion
de losconocimientos
de las()rdcncs
suficientes
r e c i b a d e s u s s u p e r i o r e s " e i g u a l m e n t e e n r e l a c i o n a l o s e n c a r g a d o s d e o b rla{ )y.c a p a t a c e s ( a r t .
Ill). se haceparticularreferencia
F-l l.S.
a los"conocimientos
sobreprevisionde accidentes".
generalmentc
comprueba
y lo consigna
la fornlula
la tenencia
deesosconocimientos
rnediante
para
de "la funciónqueseencomendo
supcriorcs
... no requiera
conocinrientos
al recurrerlte
que los trabajosse llevarana cabodentrode las necesarias
ordcn v
normasde prudencia.
. - l \ ' -1 9 7 5A. r . 1 5 4 2 ) .
s e g u r i d a (d' f". S 2
(14)A no serqueestase l!ndamenteprecisamente
de una tarca
en la imprudente
aceptacion
"Ubernahmeverschulden".
parala queseesconsciente
secarecede competencia:
t7l
Podemospor tanto decir en conclusion.que el juez penal debe determinar los
sujetosen que recaeel especialdeberde cuidadoen basea un análisisde lasposiciones
de direccionformalesy facticasde los miembrosde la empresa('I.S.5-VI*1968y l4X-1970). predominandoen generallas posicionesde hecho sobre las puramente
( l5).
fcrrmales
En conexioncon el problemade la determinacionde la imputacion del deberde
seguridadse encuentrael de la delegacionpor el empresarioa uno o a varios de sus
encargadosde todo su poderde direcciony. conectadoa ello o independientemente.
el
de la responsabilidad
sobrela seguridaden el trabajo.Sin embargo.preferimostratar
esto más adelantecon un problema dentro de los relativosa la "participación"en el
delitclimprudente,o. mas propiamente.a las autoriasculposasconcurrentes,pueses
en ese ambito donde se ponen de rnanifiesto las consecuenciaspracticas de la
d e l e g a c i o(nl ó ) .
Son igualmenteproblemasde autoria y de imputaciondel deberde seguridadlos
del agenteno cualificadopor el deber de seguridad(simplestrabajadores)y de los
sujetosno suhcientemente
etc.).
cualificados(encargados
del másbajo nivel. capataces.
pero tambiénestoslos tratamosjunto al anterior.pues.por lo general.lasconductasde
estos sujetos no aparecencomo causantesen exclusiva del resultado,sino como
concurrentes
en la producciondel mismo ( l7).
E) EL GRADODE DILIGENCIA EXIGIBLE EN EL
CUMPLIMIENTO DEL DEBERDE SEGURIDAD
EN EL TRABAJO
El grado de diligenciaexigiblees determinadogeneralmentecon basea la medida
del que es propio de una personadiligentedel crrculo de actividada que perteneceel
agente ( l8). La medida de la diligencia exigible se corresponderia.en términos
tradicionales.con la propia de un buen empresario(l9). Con ésto.apenasse dice nada
acercade cuál sea la diligenciaa exigir. En nuestraopinion. no por la dificultad de
establecercriteriosmas precisosdebemos.transferirestatarea al juez.
'Si bíen correspondeal juez.el ultimo momentode valoraciónde lascircunstancias
de hecho. no puede dejarsede lado el que la actividad laboral es un fenomeno
"su graduacion
( 1 5 )A s r .p o r e j e m p l oe. n l a s e n t e n c idae 2 4 - \ ' l - 1 9 7 5A
. . 2 9 2 9 . s e d e c l a r aq u e
laboralera la de oflcial de primera y no la de encargadode obras.tal como aparecetal supuesto
definido en la ReglamentacionN. de trabajo de la construcción.pero no cabeduda que lo era
(encargado)de hecho. con facultadesen ausenciade su jefe el contratistapara adt'rptarlas
medidas.no tecnicas.pero si practicas.para la buena continuaciónde las obras'".Sobre esta
combinación de criterios facticosy formales vid. GALI-AS. Die Strafrechtliche Verantwortlichkeit der am Bau Beteiligten, Heidelberg.1963. p. 4l y ss.
( 1 6 ) \ , ' i d .i n f r a .C a p . I X . B . 2 .
( 1 7 )\ ' i d . i n f r a .C a p .I X . 8 . 3 y 4 .
{ I 8) En estesentidonuestrajurisprudencia"Precauciones
y cautelasque hubierensido tenidas
en cuenta por cualquier tecnico medio en la rama de actuaciónen que se produzcael evento
dañoso". f.S. l7-Xll-75. Ar.4837: "No la del hombre medio abstracto.sino la del normal
concretoen aquellascircunstancias
...". t.S. 3-X-64,Ar. 4128.Vid. JESCHECK.Lehrbuch,p.
4 7 1 .C r r t i c ae n S C H U N E \ I A N N . M o d e r n eT e n d e n z e nc, i t . .e n " J A " 1 9 7 5p . 1 4 9 .
(19) Cfr. S\tURAGl-lA. La sicurezzadel lavoro, cit.. 3'. ed. p. 79.
172
generalizado.
y problemasexisteuna considerasobrecuyo desarrollo.caracteristicas
ble "experienciasocial".
Determinadosfactoresy constantesde la seguridaden el trabajo pueden ser
consideradoscomo tipicos de todo trabajo en general o de determinadasformas de
trabajoen particular.y sobrela basede esatipicidadde problemassepuedenestablecer
unos principiosgeneralesacercade cuál seala diligenciaexigibleen relacióncon cada
uno de aquellos.A la hjacionde estosprincipioscontribuyenno solamentelos datosde
la experiencia.particularmentecuando son asentadospor la jurisprudencia. sino
tatnbién la misma normativa legal sobre seguridaden el trabajo.
En estesentido.podemosdecir que son fundamentalmentedos los principiosque
han de ser tomadosen cuentaa la hora de calificar la diligenciadel empresarioen el
cumplimentode su deberde seguridad.En primer lugar. a mayor riesgocorresponde
la exigencia de mayor cuidado. En segundo lugar. el cuidado a aplicar por el
errpresario debe abarcar tambien la prevision de conductas imprudentesde sus
trabajadores.particularmenteen los supuestosde trabajospropensosal riesgo.
Junto al desarrollo de estos dos principios. abordaremosalgunos problemas
concretosque se planteanen la practica en orden a la determinaciondel grado de
diligenciaexigible.
1) GRADO DE DILIGENCIA EN RELACION A SUPUESTOS
DE DIFICULTADTECNICA
I-a seguridaden el trabajoes en buenamedidaun problematécnico.Precisamente
en esesentidose orienta la politicade seguridadde los diversosEstadosy. sobretodo.
de las organizacionespatronales.I-a mayor seguridaden el trabajo se consigue
aplicandoa las máquinas.mediosy procesosde trabajo nuevossistemasde seguridad.
sustituyendolas máquinas.medios.etc.,por otros nuevosque ofrezcanmásseguridad.
Estaexigenciade reducciónde los riesgosal mismo encuentralimitessolamenteen la
posibilidad técnica. El empresario está obligado a aplicar todas aquellas técnicas de
seguridadque en el momento histórico de que se trate seangeneralmentereconocidas
(20t.
En este sentido puede decirseque el limite de lo exigible al empresarioha de
trazarseen el nivel tecnico o tecnológicodel momento. no exigiendoselellegar a la
propia de la seguridad.a la invencion(21).
investigacion
principal
I-a
consecuenciapractica que de aqui se deriva consisteen que el
empresariono puede justificar la omision de dispositivosde seguridadaduciendo
imposibilidado dificultadtécnica.Si a la maquinao aparatono se le puedenaplicarlos
dispositivosde seguridad.la máquinano puedeser construida.ni vendidani puestaen
funcionamiento.(22)
Particular importancia reviste el principio de que cuando es descubiertay
reconocidapor los organismosprofesionalescompetentesuna máquina. sustancia.
(20) I-o cual. como vimos. es expresióndel más elementalde los principiosderivadosde Ia idea
de riesgo permitido.
( 2 1 )C f r . C A \ { E R I - I N C K . I - Y O N { A E N . o b . c i t . . p . 2 7 9 .
(22)En estesentidola más recientejurisprudenciaitaliana,en "Giust, Penale"1974.p. ll. p.
523.
173
proceso. etc.. susceptiblede sustituir al aplicado hasta ese momento. ofreciendo
mayorescondicionesde seguridad.el empresariodebede procedera dicha sustitucion.
sin que le ampareel hecho de que cuando abrio la empresao instalola máquina en
cuestiónestabareconocidaéstacomo la más segurao que se adecuabaa las normas
reglamentariasy. en consecuencia.
fue aprobadapor la delegacióndel N4inisteriode
Industria.
Este principio de adecuaciónde las condicionesde seguridaden el trabajo a los
nuevosavancestecnológicosha sido reconocidopor la jurisprudenciacivil y. en su
virtud. se ha exigido responsabilidad.Habida cuenta de que viene a definir el
contenido del cuidado debido. entendemosque debe reconocerseigualmenteen lo
penal(23).
2) GRADO DE DILIGENCIA EN RELACION A NECESIDADES
FINANCIERAS
Si la seguridades en buenaparte un problematecnico.no es menoscierto que la
'Iampoco
solucióntécnicaimplica una decisiónfinanciera.
en el plano de lo financiero.
ni Ia dificultadni la imposibilidad.sirven a eximir al empresariodel cumplimientode
su obligaciónde proporcionarla máxima seguridad.
Esteprincipio debemantenersecon carácterabsolutoen el momentode proceder
a la aperturade empresa.Sin embargo.puedeser adecuadauna cierta flexibilidaden
orden a los supuestosen los que un nuevo descubrimientopermita sustituir la
instalaciónindustrialpeligrosapor otra nueva.
'Iampoco
puede desconocerseque en tiempos de crisis. el cumplimiento
empresarialdel deber de adecuar su empresaa las condicionesde seguridadque
ofrecennuevossistemas,puedeconducir al colapsoeconómicode la empresa¡. a la
perdidade puestosde trabajo (24).
I-a cqnplejidad de los problemasfinancierosque plantea la adecuaciónde l¿r
empresa a las nuevas posibilidades de seguridad hace necesaria la intervención
normativa y ordenadorade la Administración.Continuamentese estádescubriendo
hoy, p. ej.. el caractercancerigenode sustanciasempleadasen la produccion que
afectan a los trabajadores.poniéndosede manifiesto la resistenciade las empresasa
sustituirlospor productosalternativos.I-a mera imputacionde los resultadoslesivosa
titulo de imprudenciay el castigopenal no sirve adecuadamente
a la tutelaeficazde la
vida y salud de los trabajadoresy. por ello. la intervenciónestatalen el control de los
procesosde producciónaparececomo un presupuesto
politicocriminal de importancia
manifresta(25).
En cualquiercaso,debetenerseen cuentaque todosestosproblemasno afectanal
deberobjetivo de cuidado del empresario.sino al de la "culpabilidadde la culpa" a
( 2 l l l - a s e n t e n c i a c i v i l d et l. S . d e 5 - l \ ' - 6 - l ( C l - n " . 3 - 1 5 . p1.0 7 ) d e c l a r a b a e l d e b e r d e s u s t i t u i ¡ e l
viejo sistema de tendido electrico por uno nuevo a base de cables fiadores de acercr
generalmentereconocidocomo considerablementemás seguro. Vid. comentario de DIF-Z
P|CAZO en sus Estudios sobre la jurisprudencia civil, I. N,ladrid.197-1.p. 273-276.
(24) Vid. sobre todo esto v. I-ENCKNER. Technische Normen und Fahrlflssigkeit en
"Festschr.
für Engisch".Frankfurt. l9ó9 p. 500 y s.
(25) Veanse las reaccionesprivadas y estatalesen Alemania Federal ante el recientemente
descubrimientodel caracter mortalmentecancerigenodel empleo de diclorimetanoy otras
substanciasen el trabajo industrial en informe de J. Sierra en "El Pals" de 3-XI-78.
174
través de la idea de exigibilidad al sujeto en función de sus circunstanciasv facultades
personales.
Cuestión aparte son las alegacionesempresarialesa las "necesidadesdel trabajo"
para justificar la realizaciondel trabajo en condiciones inseguras.A este respecto.el
'fribunal
Suspremoha declaradoque la ultima frasedel art. I I del Rto. de seguridad
en el trabajo de la construcción:"de acuerdo con las necesidades
del trabajo" no puede
tener otra interpretaciónque "la necesidadde atemperarel trabajo a la evitación de los
riesgos para el obrero. no exponiendo a éste a ta comodidad o rapidezde la obra a
realiz.ar.quitando o poniendo la valla protectora cuantasvecesfueseprecisoen aras a
('IS. 30-4-l969. Ar.2497).
la seguridad..."
3) GRADO DE LA DILIGENCIA Y GRADO DE PELIGRO
El principio fundamentalpara Ia medidadé ta ditigenciaexigibleal empresarioen
orden a la seguridad en el trabajo ha sido formulado reiteradamente por la
jurisprudencia:el grado de aseguramientode la ejecuciony desarrollodel procesode
trabajo. el grado de vigilancia que ha de prestarsea las condiciones materiales de
trabajo y a la conducta de las personasque en él intervienen. están en relación directa
con el grado de peligro que presentala empresao el trabajo de que se trate dentro de
ella. en el sentido de que a mayor riesgo correspondemayor y más esmeradocuidado.
Numerosassentenciasrecogenesteprincipio. p. ej.. la de 30-VI-76 (C.L. n. 920).
la cual lo deduce.ademásexpresamente
de preceptopositivoscomo los art.20. 3 y 22,
I oSH: "se extremarán l¡s medidas de seguridad conforme se encuentre el peligro;
igualmentela de 9-VI-1973(Ar. 2651): l-a vigilancia"se exige en m¡yor medida
respectode las fasesde la actividad industrial que son más peligrosas" y "cuanto más
grave es el riesgo es cuanto más necesariaes la intervención del director, que venia
obligado a vigilar todas las fasesy con mayor cuidado las miis peligrosas".
a) Peligrosidad de los trabajos.
I-a valoraciondel cuidadoexigibleimplica por lo tanto una valoraciónpreviade la
peligrosidadde la empresa.del trabajo en concreto,etc..sobrelos que ha de versarel
cuidado. A este respecto. las calificaciones de "trabajos peligrosos" que Ia propia
administraciónlaboralotorgaen su normativa no es mis que un indicede los criterios
a utilizar tambien en otros tipos de trabajo o fasesdel mismo no contempladosen las
leyesy los reglamentos.
U na cierta homogeneidaden la formulacion det grado de cuidado necesariopuede
alcanzarsesólo en los supuestosque podemosdenominar "de trabajos no peligrosos"y
de "trabajos sólo potencialmentepeligroso":
Trabajos no peligrososson aquéllos para cuya realizacionno es previsible et que
surjan riesgos,sin que de ello derive el que no puedan producirse efectivamente.I-o
decisivo en estoscasoses que el empresariodirector del trabajo no viene obligado -en
base a la experienciageneral- a esperarque el peligro se produzca.
En trabajos no peligrososno hay, lógicamente.un especialdeber de vigilancia.
Donde el peligro surge de modo insolito no hay deber de situarse en posición de
prevenirlos o evitarlos. Ahora bien, si en estascircunstanciasde riesgo no previsible,
175
éste se produce a pesar de todo. esta obligado a adoptar medidas de seguridad
-solamente- quien por estar condiciones
en
de reconocerla situaciónde riesgopuede
efectivamenteadoptarlas(26).
Trabajos sÓlopotencialmentepeligrosos.son aquéllosrespectode los cualesla
experienciarevela que son auténticasfuentes de peligro. pero su plasmacionen
resultado lesivo no es probable si se adoptan medidas de seguridady se vigila
adecuadamente
su realizacion.Ejemplo trpico es el trabajo de la construccion.de la
utilizaciónde andamiosno es probableque derivenaccidentessi estándotadosde las
medidasde seguridadnecesarias
y se vigila su utilización.asi como si se comprueban
sus condicionesde seguridad.
En estos supuestos.tras las medidasestructuralesde seguridadnecesagas.la
vigilanciasobrelas mismasconstituyeel núcleodel cuidadodebidoy el presupuestsde
la aplicacionde las medidasde seguridadque posteriormentepuedenser requerrdas
por la evolución negativadel riesgopotencial.
En la realizacionde estostrabajospotencialmentepeligrososla jurisprudenciano
exige una vigilancia permanentesobre la actividad de los trabajadoresy sobre las
condicionesy elementosmaterialesdel trabajo. sino solamenteuna vigilancia y
comprobacionesde la seguridadde carácterp.iiodi.o.
'Iribunal
En las sentencias
del
Supremoencontramosdeclaraciones
como las que
"no
siguen:
puedeexigirsetotal y absolutamente
que el empresariovigile todosy cada
uno de los movimientosde los trabajadores
y en todo momento"('r.S. l9-V-70. Ar
2155)"Al encargadono se le puedeexigir que sigay controletodosy cadauno de los
movimientosde una pluralidadde personas"('r.s.5-vl-72. DI\,|J.no. l02gg). En
relación a arquitectos y aparejadoresse dice reiteradamenteque la "visita y,
conservaciónde la obra no puede ser permanente"('t.S. l2-xll-66. Ar. 5600).sino
que "deberealizarse
con la debidaasiduidad"(-t.s. l4-x-70. Ar. 404g)(27).
I-a frecuenciade la comprobacionde lascondicio¡res
de seguridaddebeadecuarse
en cada trabajo a periodostemporalesque permitan detectara tiempo las posibles
alteracionestipicasde seguridad.
Cuandosetratede trabajosen variasfasesde desarrollo.o de trabajos"dentro" de
otros trabajos más generales.suele ser necesariala comprobacionde la correcta
realizaciónfinal de cadauna de las fases.Asi. por ejemplo,el contratistade una obra
que ordena la construcciónde un nuevo andamio no debe vigilar en concreto l¿r
construcción del mismo. sino que finalizado este. debe comprobar si ofrece las
condiciones
('I.S.2l-lX-1970).
de seguridadrequeridas
cuando se trata de trabajos peligrosos o especialmentepeligrosos el cuidado
habra de extremarseen proporciónal incrementodel peligro.y asi. la vigilancia.que
en un principio no debeextendersea todoslos trabajadoresy bastaque seaperi<'ldica.
puedellegara exigirseque seconcretesobrecadauno de los participesen el procesoy
que seade carácterpermanente.Esto quiere decir que el empresariodeberadestacar
mas encargadosde la direccion), vigilanciadel trabajo y adoptar una mayor y mas
afinada organizacióny division del mismo. etc. En el mismo sentido.la vieilancia
( 2 6 )A s i e n f . S ' l 9 - V I - 1 9 ó 9D . 1 \ 1 . Jn . l 0 - l l 0 : l - a o p e r a c i o n o r d e n a d a a l o s t r a b a j a d o r e s n o e r a
en si peligrosay por ello el patrón no estabaobligadoa vigilar para prevenirriesgos.solamente
si por cualquier otra razón hubiera estadopresenteen el lugar y captadoo podido captar Ia
apariciÓn del riesgo vendria obligado a incrementar la vigilancia a adoptar medidas de
seguridad.Vid. tambien'f.S.20-X-75.Ar. 39ó.
(27) con mayor frecuenciaen [a jurisprudencialaboral del 'f.S p.
ej. Sala 6,. l9-x-7].
.
176
sobre las instalacioneso aparatos,que normalmente exigen
ser comprobadosde forma
periodica,en el casode que su naturarezaseaparticularmentepeligro,sa,
requieren una
observación consüantd28)
con respecto al deber de instrucción e información sobre los riesgos
a los
trabajadores,y en ros supuestosde trabajos(o condiciones
der mismo) peligrosos,no
bastan las simples advertenciasgeneralesde cuidado ni las indicaciones
de que se
suspendael trabajo cuando aparezcauna condición insegura,
sino que se exige sean
instruccionesprecisasy completas(T.S. S. 6,., 2g_I_7
l).
El deber de cuidado del empresariose conhgura de forma muy
distinta cuando se
trata de los peligros que derivan de los elementosmateriales
de la propia empresay
cuando se traüade los peligros que pueden surgir de la participación
en eila de otras
person¿rs.
. En relaciÓna los primeros, el empresarioestáobligado a evitar toda elevacióndel
riesgopor encima de lo permitido que seaobjetivamenteprevisible,y
ha de ser evitado
mediante la adopción de las medidas precisas de asegurámiento y
áe b apliación de
toda la vigilancia que es necesariapara poder actuar frente todá grÁ
a
a" riesgo no
permitido cuyo surgimiento sea prevísible.
b) Petigrosidad derivada de l¡ activid¡d de las personas. principio
de
confianz¡, Presupuestos y ümites.
Por el contrario. en reración a los rresgosque pueden
.
surgrr de r¡ conduct¡
incorrect¡ de otr¡s persoR¡s rige el principio opuesto, el cuidadJder
empresario no
tiene, en principio. que extendersea la pievisión de los peligro.
ot o, puedan
lu"
crear. Rige aqui el ilamado pRINcIpIo DE IA coNFIAñzA
en eicomportemiento
cuid¡doso dc terceros que intervienen en el prooesode trabaJo,(29).
Ahora bien, el principio de confianza está sometido "áiu"rr", restricciones,
afectandounas a la propia naturalezade la institución y otras
a la ¿isiinta categoia de
personas que pueden intervenir en los procesos
de riesgo, bien sean tecnicos y
directivos' bien sean simples trabajadores. como nuesña p..pi"
:"rirprudencia
esüablece,
el principio de confianzano es de carácterabsoluto.slno que áta sometido
a
determinadospresupuestosy condiciones(30).
(28) Por ejemplo, las calderas a presión, que "serán
convenieniemenfe vigitadas duranúe todo el
tiempo en que esten de servicio" (art. 129, I OSH), o los que ,"
."Jic"n en instalaciones
"consüante
qrre exigen
vigilancia..(S. g_Xf_79,¡r. igfs).
,e^lgt¡icas.
(lvf sobre el mrsmo Vid. SfRA'tENwER'fH,
Arbeitsteilung und lrztleiche Sorgf¡ltsDflicht,
en "Festschrfur E. schmidt", Gotinga r96r, p. 3g2.y ss; el mismo, strafircht,
r, cit., p. 3r4 y
p.
l1-J.1Í9Pj:_SJudier, cit.. 88 n. l70; SCHMTDHÁUSgn, S¡¡frechr, 2, ed.. cit.p. 3t I y s.;
SCHONKE/SCHRóDER/CRAMER. SIGB Komm, l8 ed., cit., not. í46 y
ss. at par. 15.
(30) cfr. 'r.s. 2t-v-1966, DN,ÍJno. 10538.
Et'r.S. ha reconocidoel piincipio de confianzaen
relación al trálico. v. fundamentalmente.ademásde la anterior, tas
Oe'17-Xl¡-70 (DMJ no
10544). l-a doctrina alemana aplica el principio de confianza mÉ¡sallá
del ámbito del tráfico
(expresamente en contra. scHMtDHÁusrn,
loc. cit. urt. nota), y particurarmente los
supuestos de división del trabajo, dentro de lo cual se sitúa el üerna
ie nuestro estudio.
Entendemos que entre nosotros no hay dificultad a esta ampliación, habida
cuenta de que el
T'S' parece inclinarse a fundamentar el principio no en el riesgo permitido
sino en la idea de
*responsabilidad
por uno mismo". Vid. la transcendenciade una u otra fundamentación
en
JAKOBS. loc. cir.
177
El presupuestoconsisteen que solo puedeacogersea la confianzaquien actúa
conforme al cuidado debido (31). Este presupuestose concretaen el campo de la
division del trabajo en que quien dirige este. debe haberlo encargado a persona
cualificadacon toda satisfacciónpara su ejecuciÓn(32)A estecriterio respondela doctrinacontenidaen la S. de22-Y-74(Ar. 2409).en la
que se declara que si el empresario ordena al encargado(o trabajador) realizar (o
dirigir) un trabajoque se encuentradentrode la competenciaprofesionalde este(33) y
no presentacaracteristicasanormalesa su propia naturaleza.puededejar la realizacion
del mismo al criterio autónomo del encargado.sin que sea exigible al empresario la
emision de órdenesexpresasy hjas sobreel asunto.
Esta relacion de confianza que afirma la sentenciacitada es la que se da
generalmenteentre el empresarioy sus técnicm. Entre el empresarioy los especialistas
que emplea.particularmentelos del más alto nivel como los tituladossuperioresno
jerarquicau orgánica.El que hacerlo decideel empresario.
hay mas que dependencia
el cómo llevarlo a cabo en condicionesde correccion tecnica y de seguridaddepende
fundamentalmentedel especialista.Esteno solamenteno debeesperaro confiar en que
tecnicas.sino que esel quien estaalli puesto
la orden de trabajocontengainstrucciones
precisamentepara resolver esta cuestion autonomamente.
Sobre estas bases. si el empresario no especialista ordena realizar el trabajo
incluyendo instruciones incorrectas, el especialista no puede ampararse en la
obedienciadebidapara llevar a cabo el trabajo. sino que. por el contrario. debeadvertir
de cumplirlas.Si el
al empresariode la incorrecciónde las instruccionesy abstenerse
y
seráresponsable
las
lleva
a
cabo.
instrucciones
las
técnico confia en la corrección de
del resultado,puespor su cualilicación deberiahaber reconocidosu inadecuacion.En
mayor medidadeberárespondersi ejecutala ordencon concienciade su inadecuaciÓn.
EI empresariosólo responderáen estoscasossi por alguna causa concreta no debia
confiar en la capacitacióntecnicadel subordinadoo si, a pesarde haber sido advertido
por este. impone la realizacióndel trauajo. El tecnico no responderasi advierte y se
niega a ejecutar. no correspondiéndoleespecialdeber de garante respectodel peligrt-r
desatadopor el empresario(34).
Cuando el encarg¡do o trabaiador no poseatoda la cuelificación necesariapara
realizar sin riesgo autónomamente el trabajo, el empresario no podrá confiar en la
corrección de la actividad del encargado. [a orden de trabajo sÓlo será entonces
confiormeal cuidado exigido si mediante información suplementariay vigilancia
adecuadacompleta la capacidaddel agente para la realizaciondel cometido.
(3llEl'I.s.diceque"reglamenrariamenre".('t.s.
l4-x¡-70)vid.scHÓNKE/SCHRÓDER.ob.
cit., n. marg. 150 al par. 5.
(32) Cuando la división del trabajoes mas complejaque la de un empresarioun encargadoo
trabajador. se requiere ademasla adopción previa de medidasde seguridad para una adecuada
comunicaciony coordinaciónentfe los participes.vid. S'IRA'IENWER'IH. Arbeltsteilung'
cit. p. 395-396.
(33) A la determinabiónde la competenciaprofesionalserviráen generalIa titulacionconferida
por el Estado. En relación a las clasificaciones profesionales realízadas por normas
reglamentarias,de profesiones.etc. la sentenciacitada declara que son meramente indicativas
en el orden criminal, ya que en éste ha de citarse a la efectiva realidad de hecho. Vid.
SIRA'IENWER'IH. ob. cit.. p. 394.
(34) Vid. sobretodo estoCAI-!-AS. Die Verantworteichkeit,cit.. p. 3l y ss.Asi. en la s. l7-Xll'
79, Ar.4613, el arquitectoy el aparejadordenuncianta faltá de seguridady solo respondeel
empresario y el capataz.
r78
En estos supuestos.la exclusion del principio de confianza y
er surg¡rniento
correlativo del deber de complementarla cualificacionde los
ageniesencuentrasu
fundamentomaterial.por una parte.en que es previsibleque q,",]¿n
no esüádel todo
cualificado puede incurrir en errores fatates y. por otra parte,
en que el agente
inmediato actúa con reducidasposibilidadesde reconocer
los peligros y las formas de
evitarlosy. ademas.en que. en la medidade que seaconscrente
de que su seguridad
dependede la correctadirecciondel trabajopor su superiorviene
oblijado a esperarde
esteIa tlrientacionnecesariay actuaconfiadoen el mismo. lo
cual afeciaal principio de
"autorresponsabilidad".
base.como se ha indicado.det principio de la confianza.f,os
hechosdel agenteque cuenta con la direccion y vigilancia
del empresariono son
solamente"sus hechos"sino tambienlos hechosdel director-ernpr"ru.io.
y el descuido
o actuar incorrectodel agentees tambien descuidoo incorreccion
del empresario.si
aquel tuvo su causaen la deficienteinstruccióno vigilancia
impartida(35).
Fsto es asl porque el empresario.o los dírectívoso encargadosdel
mismo. por su
condicion de especialistastecnicos se encuentran en una posición generadora
de
confianza de los trabajadoresen la corrección de la direccion del tratajo que
estos
efectuan.confianzaen que no hay peligro allí donde no es advertido
de ello por el
director(-16).
Esta confianzaconduceal agentea exponersedescuidadamente
al riesgoen dos
supuestosbasicos.En primer lugar. donde el empresariono vigila, pues
donde no
-en
vigila se ctlentacon la inexistenciadel peligro.En segundolugar.
aquelloscasosen
los que el empresario vigila y dirige. pero. sin embargo, dicta
instrucciones
incompletas.pues el agentecuenta que con las instruccionei basta para
realizarla
actividadencomendadasin correr petigros.
Por otra pafte. para la efectividad del principio de confianza se requiere no
solamente el presupuesto de que et trabajo haya sido encomendado persona
a
tecnicamentecualificada.Seentiendetambienque el principio de confianzaencuentra
sus limites alli donde tas circunstaniasdel caso hacen concretamenteprevisible
la
probabilidadde que se produzcauna conductadescuidadadel
agente(37),o dondeel
Derecho. las normas regutadoras de la actividad de que se trate impongan
precisamenteun "principio de desconflanza" (38) en
atención a criterios de
experiencia del legislador sobre los momentos en los que se debe esperar
comportamientosarriesgados,o. por ultimo. cuando el peligro de conducta descuidada
se haya presentadoya en el caso concreto (39).
En consecuencia,el empresario ha de presclndir de Ia conflsnza y ampliar su
cuid¡do a la prevención de conductrs peligrosas de los encergldos y trebaJadores
a
sus Órdenescuando éstos adolecende defectos de cu¡liflc¡cion p¡r¡ el eJeiciclo del
trabajo encomendadoo cuando sea previsible en concreto la conduct¡ incorrecta
del
agente .
(35)cfr. I-ENCKNER.Technischer
Normen,cit..p. 506-508;
JESCHECK.
t ehrbuch,p. 471.
in fine.
't.S.
(36)Cfr.
9-lX-66:Iosobrerostrabajanconfiados
en la correctadisposición
y vigilanciade
su superior.
(37)Cfr. STRA'IENWERTH,Arbeitsteilung,
cir..p. 39:.;WEIZEL Derecbopenetalemán,
trad.española
de la lln. ed.cit..p. 188y'f.S. 2401-69,
l4_Xl-70y l7-Xll-70.
't.S.
(38)Vid.
2l-V-66y 20-X-óó.
(39)Vid. S'IRA'I'ENWER'[H.
Str¡frecht,t, cir.p.314,ss,no. ll5ó y tl5g.
179
En el marco de los riesgoslaboralesse puedeprecisaren mayor medidael carácter
de ta diligenciaque impone esteprincipio de desconhanza.Si en el tráfico la confianza
prima sobre su negación, en el orden laboral ocurre lo contrario: la regla es la
desconfianza,hasta el pun'to de que se configura como principio fundamental de la
determinacion de la diligencia del empresarioel de que esteestáobligado a prever las
imprudenciasde la propia victima, tema sobreel que nos extenderemosahora. dadasu
imporLanciapráctica.
4) EL DEBER DE CUIDADO DEL EMPRESARIO EN RELACTON A LAS
IMPRUDENCIAS DE SUS TRABAJADORES: PROTECCION DEL
TRABAJADOR, INCLUSO FRENTE A SI MISMO EN
TRABAJOS PROPENSOS AL RIESGO
El principio de confianza en la corrección del comportamiento de los demas
participesen la vida de relación sufre una inversión radical en el ámbito del deber de
seguridaddel empresario,hastael punto de que Éstedebeaplicar una diligenciatal que
le permita reconocery evitar los peligrosque los trabajadorespuedangenerarcontra si
mismos.
l¿ doctrina yjurisprudencia laboral se ha enfrentadocon latareade decidir sobre
el deber del trabajador de indemnizar al empresario por los daños producidos en el
patrimonio de éstea consecuenciade un comportamiento imprudente asi como sobre
las condicionesen que el empresariodebeindemnizar al trabajador por los daños que
éstemismo se haya producido. I-assolucionesa que conduciaen estosdos supuestosla
aplicación de los criterios tradicionales de la culpa se manifestabaninsatisfactoriase
injustas.Asi si el trabajadorcausaun daño por cupa o negligenciadeberiaindemnizar
al empresarioaunque, p. ej., el descuidohaya sido leve y el prejuicio valorado en
millones (explosión de una maquina). Por otra parte, cuando el accidente ha sido
producido por imprudencia de la propia victima, el accidentadono podria aspirar a ser
"reparación".
indemnizado para sufragar su
Particularmenteinsatisfactoriase injustas parecianestasobligadasconsecuencias
juridicas cuando el daño era producido por trabajadoresnormalmente cuidadososy
cuando lo que lleva a éstosal error o descuidoes la misma natvralezadel trabajo. es
áecir, cuando las mismas condiciones de trabajo a que el obrero está sometido
"empujan" a estea cometer el error o descuidogeneradordel daño.
Mas allá de las solucioneslegislativasde objetivizaciónde la responsabilidadpor
accidenües
de trabajo, la doctrina elaboró una teoria particular de la responsabilidaden
los que se han denominado trabaJospropensü¡ ¡l rlesgo (40).
Propensosal riesgo son aquellos trabajos que, bien como un todo, bien en fases
del mismo o en particulares formas de su realizaciÓnimponen al trabajador la
"normal" en el desarrollo de su actividad y a
tendencia a prescindir del cuidado
(40) Sobre esto vid. GAN,IILLSCHEG/HANAU, Die Haftung des Arbeitnehmers, 2u. ed.,
Karlsruhe 1974.Sobrelas exigenciasque planteaal legisladorv. EIKE v. HIPPEL. Reform der
"ZRP" 1971,p. 217 ss.ERIKA BOKELMANN. Die heftung
HsftungdesArbeltsnehmers,en
*ZRP"
1972,p. 283. Entre nosotrosla única y valiosacontribuciónde
des Arbeitnehmersen
'Iesis.
Madrid 1978'
BARREIRO GONZALEZ, Dillgenci¡ y negligenciaen el cumplimiento,
p. 506-536.
r80
incurrir en desatenciones
o descuidosque provocan situacionesde peligro y resultados
lesivos.
l-as caracteristicasque configuran un trabajo como propenso al riesgo son muy
diversas. Entre ellas se cuentan la dificultad de los metodos de trabajo o del
procedimiento técnico (p. ej., manejo de máquinas complicadas), la delicadezao
intrinsecapeligrosidadde los materialescon que se trabaja (productos inflamables).o
del lugar en que se presta{alturas elevadas).la monotonia en la realizacióndel trabajo.
el automatismo o elevadaceleridadde los nrovimientoscorporales(ritmos de trabajo),
exigencia de especialconcentración.etc (4 | ).
'rodas
estas circunsúncias provocan en el trabajador excesos de fatiga.
sobrecargasnerviosas, familiarizacion con el riesgo y corisiguiente desprecio del
mismo, etc.. que determinan faltas de atención o descuidoscontrarios a la diligencia
debidaen condiciones"normales" (42).
I-a propensiÓndel trabajo al riesgo condiciona la conducta de los trabajadores
cuidadososde forma prácticamenteinevitable.alterándolade tal forma que desaparece
el abstracto"cuidado del hombre -del trabajador- medio". y lo que seconfigura como
"medio"
no es tanto el cuidado como la falta. una conducta más cuidadosano es ni
esperabte
ni motivable(43) y, por lo [anto, no puedeserexigible(44).un cuidadoque
excluya estasfaltas del trabajador no seria realmenteel cuidado exigido en el trafico
propio de la preEtaciÓnde trabajo en estascondicionesy las que serian infraccionesde
la diligenciaabqtiactamentedebida no serian infracción del concreto deberobjetivo de
cuidado de quién tpbaja en esascondiciones.
Naturalmente é'sa"negligencia" del trabajador se sometea limitaciones de grado.
I-a negligenciaprivilegiada es solamentela que puedeenmarcarseen las categoriasde
Ieveo simple-a la que lá jurisprudencia laboral denomina "imprudencia profesional"y no en la de imprudenciatemeraria.Es decir, lo que se admite es la omisión de Ia
diligencia media, pero no la de mas elemental de las diligenciasque se niega con la
temeridad.
I-as consecuenciasde estas ideas en el orden penal son fundamentalmentedos
(45). Por una parte se reduceel ámbito de responsabilidadcriminal del trabajador por
daños,lesionesy homicidios imprudentesque puedaproducir (46). y por otra. y éstosi
afecta directamente al objeto de este trabajo, determinan una ampliacion del deber
objetivo de cuidado del empresario(directivos, etc.).que ha de extendersea prever y
neutralizar los riesgosderivados de las "imprudencias de los trabajadores".
(41) vid. BARREIRo GONZALEZ. ob. cit.. p. 509rsN,tuRAGLlA. La sicurezzadel lavoro,
4 ¿ .e d . .c i t . p . 2 1 8 .
(42) Puedeverseun análisistécnicoen NEULOH y otros, Der Arbeitsunf¡ll,
Stutgart 1957.p.
239. Es precisoindicar que la idea de trabajo peligrosono coincidecon la de trabajopropenso
al riesgo.el trabajo realizadoen cadenaa un ritmo alto no es peligroso en si pero si propensoal
riesgo por error del agente.v. GAI\4lLLSCHEG/HANAU, Die Haftung, cit.. p. 30 y 52-53.
(41) Vid. E. BOCKELMANN. ob. cit.. p. 289.
(44) Vid. BARRE|RO.ob. cit.. p. St2 y 515 n. 6.
(45)Sobrelas consecuencias
en el plano civil. vid. RODRTGUEZPIÑERO.Culp¡ de la vlctlma
y accidentede trabeJo,en "ADC" 1970,p. 543 y ss; Al-oNso OLEA. L¡ responsabilidadpor
accidentede trabaJo,cot., p. 22-24,y BARREIRO. ob. cit.. p. 531-536.
(46) 'rema en el que no entramos aqui por estar interesadosexclusivamenteen la
responsabilidadde la otra "parte" de la relación laboral. Ese tema tampoco ha merec-idola
atención de la doctrina penal, excepcionalmentev. OSTI-ER. Unfallurs¡che und Unf¡llschuld
bei gefahrgeneigter Arbeit, en "NJW" 1962, p. 1229 ss.
t8l
En esteultimo aspectointeresael que del hecho de la "tipicidad" de la lalta de
cuidado.de la normalidadde la mismaen las condicionesconcretasde propensióndel
riesgo.y de que la misma es objeto de la experienciaempresarial.se deriva el que la
conductaimprudentedel trabajador.que va a convertirlea él o a sus compañerosen
vctimas. no es un fenómeno meramente previsible en abstracto como posible. sincr
previsibleen concretocomo tal y, en ocasiones,como prácticamenteseguro.
Por otra parte.interesaconsignarque.como exponeHANAU (47).el fundamento
, de la limitación "exclusión de la responsabilidad"no radica solamenteen el hecho de
que el trabajo sea propenso al riesgo e implique situaciones de.previsión sobre el
individuo. sino, más aún, en que esas circunstancias favorecedorasde la conducta
incorrectamentearriesgadason inevitablespara el trabajador dependiente,en la
medida en que esta sometido al poder de direccion y decision (exclusivo) del
ernpresariosobre las condicionesde prestacióndel trabajo (48) y en esesentido.los
presupuestos
de su conductay los riesgosderivadosde ella no puedenserconsiderados
como propios.Eltrabajadorno es señor de los mismos.Solamentequien trabajapor
cuentapropia y autonomamentepuedeser consideradoen estascircunstanciascomo
señor de su propio riesgo.
Por todas estasrazones.porque la conducta imprudentede los trabajadoreses
concretamenteprevisibley altamenteprobable.y porque esasimprudenciasno son.
por ello. ajenasal empresario.este no puedeacogerseal principio de confianzaa la
hora de formar su decisión en orden al cuidado que va a prestar.Como se ha visto. el
principio de conhanzase asientaen el principio de responsabilidadpor los propios
actos y la espera justificada de que los demas participes se comportaran
cuidadosamente.y. como aqui hemos constatado.el trabajador dependienteen los
trabajos propensosal riesgo no puede dar la medida del cuidado responsabilidad
media. ni sus actosson "sus propios actos"(49).
Si las conductas imprudentesde los trabajadoresno son solo objetivamente
previsiblesen abstracto.sino concretamenteprevisiblesy esperables.
el empresariono
debe confiar en la realización cuidadose del trabajo, por el contrario, debe
"desconliar" de que el trabajador sea prudente.
En conclusión.el cuidadoque le esexigibleal empresariodebeser tal que tome en
cuenta las hipotéticasconductasimprudentesde sus trabajadores.Las medidasde
seguridad a adoptar y el grado de vigilancia a prestar deben tender a asegurar al
trabajador frente a sus propias imprudencias.
l-a idea fundamentalde todo ésto se encuentracontenidaen nuestroderechoya
desdeel Reglamentode accidentes
de trabajo(28-Vll-1900).en cuyo articulo 57 se
declara que "las medidas materiales que se traducen en la adicion de mecanismos
( 4 7 1 C f r .C A N , { l l - l - S C H E G / H A N Uo.b . c i t . . p . 5 7 .
(48) Podria parecerque el automovilistadebenaser beneficiadode esterégimenal incurrir en
desatencionespor el cansancioproducido por el prolongado viaje. Sin embargo. entre e¡
automovilista y el trabajador hay una diferencia sustancial. pues el primero asume
voluntariamenteel riesgode la desatenciónal continuar el viaje y el trabajador,por su parte.ni
asume voluntariamenteel trabajo propenso al riesgo ni esta en su mano el descansarpara
romper la monotonia o el desgastefisico en el trabajo.
(49) Si el fundamentodel principio de la confianzafuera el riesgo permitido (Schidháuser)no
habria razón alguna para excluir la vigenciadel principio citado. lo que llevaria a resultad<'rs
incorrectose injustos.
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preventivospara disminuir los riesgospropiosde cadatrabajo.se debende aplicarcon
la mira de del'endertambien al obrero contra las imprudenciasque son consecuencia
forzosa de la continuidad de las manipulacionesque ofrecen peligro". l-a doctrina y
jurisprudencia laboral han desarrollado el principio bajo la nomenclatura de
"irnprudencia profesional" (50).
Se contiene igualmente en el derecho vigente.
particularmenteen la OSH (p. ej. arts. 120 y 139). y ha sido admitido por la
jurisprudenciapenalen la sentenciadel'I.S. de 23 de Junio de 1978(C.l-. 609).
En el ambito de la jurisprudenciapenal ha sido asumido.con anterioridada la
sentenciacitada. a traves.sobre todo. del reconocimientodel deber empresarialde
hacer cumplir. incluso coactivamente,las normas de seguridadal personal a sus
ordenes(5 I ).
La jurisprudencia penal española hace uso de esta idea más que en orden a
fundamentar el deber de cuidado del empresario.en orden a establecerlos llmites de
exigencia del deber de seguridaddel empresario.es decir. a efectosde determinar las
condiciones de exoneración del mismo. Por otra parte. y como consecuenciade la
tecnica tradicional de la responsabilidad por imprudencia y de la relación de
causalidad.el'I.S. sitúa el problemaen el marco de la relaciónde causalidady no en el
del deber objetivo de cuidado. Por ello. analizaremoslas consecuenciasprácticas de
esta ampliación del deber objetivo de cuidado en el capítulo correspondientea la
imputación y conductade la victima (52).
(50) \'id. supra.nota 45.
15l) Art. 10.I OSH. vid. Cap. Vl. 6. 22 c. Vid. tambienJESCHECKAulbru und Behandlung
der Fahrllssigkeit im modernen,Strafrecht.Friburgo dex Br. 1956.
(52) \'id. infra. Cap. lX. En todocaso.véanselas sentenciasde
30-Xl-ó8(Ar.4fttt5)r28-ll-70
( A r . 1 0 4 9 ) : 2 1 - l V - 7 1 ( A1r7. 7 0 ) : 8 - V - 1 9 7 3 ( A1 r9.6 6 )l:7 - X l l - 7 4 ( A r . 5 2 2 7 ) : 9 - V - 7 5 ( A
l 9r5 7 ) r
. r. 4-ló
l 5 - f V - 7 7( A r . l ó 4 7 ) : 9 - V - 7 7( A r . 2 2 0 7 ) tI 3 - X l " l 7 ( A r . 4 3 3 2 ) : 4 - l l - 8 0A
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