CAPITULO vII D) SUJETOSA I,OSQUE SE IMPUTA EL DEBERDE SEGURIDAD EN EL TRABAJO:EL EMPRESARIOY SUS ENCARGADOS COMO AUTORESTIPICOS DE LOS DELITOS IMPRUDENTES DE HOMICIDIO Y LESIONESEN ACCIDENTESDE TRABAJO Hastaahora se ha hechoconstantereferenciaal empresariocomo sujetoespecifico de imputaciondel deberde cuidadoen el desarrollode la actividadlaboral,del deber de seguridaden el trabajo.Pero.como tambiénha sido indicado.el deberde seguridad se imputa no sólo al titular de la empresasino a los a el equiparadospor recibir del mismo poderesde mando.organizacióny controll en definitiva.porqueel empresario les inviste de su originario poder de dirección. En el CapituloIl. 5. de estaparte ll. seanalizoel fundamentomaterialy legalde la imputaciondel deber de seguridadal empresario.asi como de la imputaciónde este deberparalelaa la traslaciondel poder de direcciondel empresarioa otras personas. Quedabafijado tambien en aquel lugar el marco teórico de l<lssu.ietosobligadosen la empresaa ese deberde seguridad.Sobre Ia basede lo allt expuesto.se trata en este apartado de analtzarlos criterios juridico penalesde determinacionde quienesson cn concretolas personasobligadasy cuyo cumplimientopuedeacarrearresponsabilidad criminal, tema al que la jurisprudenciaha prestadoreiteradaatención.l-oscriteriosen distintosa los empleadosen otros sectoresdel lo penal han de ser necesariamente ordenamiento juridico, pues distintas son las lunciones de las declaraciones normativasde las sancionesprevistastanto en el orden privado como en el laboraladministrativo. En el primero. la determinaciÓnde la imputacion de deber de seguridadsirve a establecerIa personaobligadaa sufragar económicamentelos costes de la puesta en práctica de las medidas de seguridady a indemnizar los daños materialesque de su ausencia resulten. En el orden administrativo laboral la imputacióndel deberde seguridadtiendea determinarlas personasque en la empresa puedeser debende poner en prácticalas normas de seguridady cuya desobediencia castigadacon los sancionesadministrativas previstasa tales efectos. de determinarquiénesson los sujetos En el ambito penalse trata especiñcamente susceptiblesde ser consideradosautores de un delito imprudente de homicidio o lesionespor incumplimientode los deberesde cuidadoexigidosparala seguridaden el trabajo. no sirviendo a tales efectos los criterios meramente formales del orden administrativo. de algunassentenciasdictadascon Esto es Io que subyaciaen los considerandos de de las ordenánzasy reglamentaciones anterioridada la reforma v sistematizacion 167 seguridaden el trabajo. que se enfrentabancon normas de estecarácterdirigidasen sus mandatos.como consecuencia de defectosde tecnicalegislativa.exclusivamente al empresario.Asi, era necesarioaclarar que "el hecho de figurar el patrono como responsableen el orden administrativo de la infraccion .de normas laboralesde protecciÓncontra el peligro no implica que los voluntariamenteencargadosde dirigir los trabajos...esténexentosde la obligacionde hacerlacumplir" il). Aun corregidostalesdefectos.particularmentecon la OrdenanzaGeneralde | 97 l. la definicionen las normasadministrativasde los sujetosque junto al empresarroson especialmente obligadosa cumplir las normas de seguridaden el trabajo no exime de tratar de encontrar el fundamento material de la condición de hipotéticosautores tipicos de los delitos imprudentesante los que nos encontramos. El resultadolesivo producido en la empresacomo consecuenciade un proceso causalgeneradoo no impedidopor la no adopcionde medidasde seguridacl sólo puede lmputarse a quienes vengan obligados a adoptarlas.A este respectolas normas administrativasse refierenal "empresario"y al "personaldirectivo técnicoy mandos tntcrmedios"(art. l0 o.s.H.). El problemano se resuelve-ni siquieraen el plano administrativo- con estos conceptosformales.lo de{lnitivo es la posición material comun a talescategoriasprofesionales. en la cual se fundamentasu equiparacióna la figura del empresario:conferido por éste,han asumido y ejercenel poder de dirección del mismo y, con ello, los deberesde cuidado y la posición de garante conectadosa dicho poder de direción. sin la concurrencia de tales circunstancias,un empleado no puede quedar obligado más que al cumplimiento de las medidas de seguridadcuya necesidad apaÍezcaya en la mera experiencialaboralcomún y paracuya puestaen prácticano se requiera otra competenciatecnica y organizativaque la que él posea,como mero emfleado para la ejecucion de su trabajo. Por encima de estos presupuestosde capacidady competenciacomún. ni la activacausaciónpor el empleadode la lesiondel bien juridico realizaráel tipo del delito imprudente.puestoque no ha infringido deber de cuidadoalguno que la corresponda,ni. en los supuestosde omision.el no impedirel resultadoseráequiparablea su activaproducción,por no estarél puestocomo garante de la seguridaden el trabajo. El fundamentode la responsabilidad criminal de personasdistintasdel empresario es. pues,la asuncióndel poder de direcciony mando del empresario,hechoque. por una parte.le obliga a respetaren la ejecuciondel trabajo que realicetodaslas normas de seguridadobjetivamenteexigidas.y. por otra. además.le constituyeen garantede la seguridadde los trabajadoresque se encuentrenen la orbita del riesgodel procesode trabajoque organizay dirige.obligandolea ejerceruna actividadde vigilanciasobreel desarrollodel trabajo para actuar de tal forma que, superadoel riesgo controlado. pueda neutralizarlo de nuevo y. en ultimo término. suspenderel trabajo y la exposiciónde las personasal riesgo. Para designar a esta categoria de personas que ejercen en su parcela de competenciael poder de direccionempresarial.el 'fribunal Supremo ha recurrido al término "encargado", entendiendo que permite abarcar conceptualmentea las (l) Cfr. f.S. l9-X-1965. Ar. 4852. Et problemase mantienevigenteen ltalia y es fuente de graves problemas tecnicos.mas aún cuando no disponen de cláusulaspenalesdestinadasa resolverel problema de los delitos propios cometidospor personasen quienesno concurre la caracteristicatipica de la autoria, al estilo del par. l4 del Codigo penal alenrán. vid. PADOVANI. Diritto penaledel lavoro, N,tilan197ó.p. 18 y 22. tó8 multiples denominacioneslegales.administrativasy profesionalesde los sujetosde imputacióndel deberde seguridaddistintosdel empresario.ya que ..enel conceprode encargadocabe la alta direccion.la media y la del simple rector de la ejecuciono caparaz.es decir, la de cualquier persona a la que se confia la realiz.acionde una cosa.conmando sobreotros y con funcion generalde vigilanciay cuidado" (2). Sobreestasbasespodrramosya formular como principio generalel que en el sen<.r de la empresa.y ademásdel titular de la misma.puedenser sujetosde imputaciondel especificodeber de cuidado de seguridaden el trabajo y, en consecuencra. autores tipicos de los delitos imprudentesde homicidio y lesionesen accidentesde trabajo aquellas personasque por delegación del empresario han asumido en el esquema olganizativo de la empresa puestos que implican facult¿d de mando sobre otros trabajadores y facultad de remlución en la concreta esfera funcionat que tiene a su cargo (3). l-a eftcaciafundamentadorade la imputacion det deberde seguridadal encargad6 se condicionaa que se den determinadospresupuestos en la delegaciondel poder de direccionpor partedel empresarioy en la aceptaciónde su ejerciciopor el encargado. presupuestosque coincidencon los exigidospor la doctrina para que la voluntaria aceptaciónde una funcion de protecciónfundamenteun deberde garantla(4). a l¡s cualesnos referimosseguidamente. Ha de decirseen primer lugar que la determinacionde quienesseanlaspersonasa las que como encargadosse imputa el deber de seguridadno se rige por criterios formales.v. gr., contractuales.sino que, conformea una reiteradajurisprudencia,ha de atendersea quienesseande hecholos que asumeny ejercenel poder de direccion empresarial(5). 'rribunat En estesentido.el supremo declaraque lo relevanteno esel cargocon el que el sujetofigure en el organigramade la empresao en el contratode trabaio(6). ni ( 2 ) C l i . f . S . l - l - l l - 1 9 7 4A. r . ó ó 8 .r e i t e r a d a e lnl - \ ' - 1 9 7 ó .C . 1 . . 6 5 7\.' i d . t a m h i e nl.- l \ - 7 5 .¡ \ r . . 1 5 4 2 l. 2 - \ ' - 7 6 .9 - \ ' - 7 7 . 6 - \ ' t - 7 7l -. . 1 - x t - 7 27 -. 1 - i l - 7 c8t._ 1 5 8 .l ] _ x i l _ 7 t Jc.t . 1 0 6 ] . I _ i l t - 8 0 . Ar. I 169. (-l) vid. FERNANDEZ rtARCos. La seguridade higienedel trabajo,cir-. \ladrjd 1975.p. | 44. (4) Sobre la asunciónvoluntaria de una posici<-rn de proteccioncomo fuen(edel deher.iurrdic<r de actuar.consideradoen Ia dttctrinaanteriorconlo aceptacioncontractual,ver: Jl\lF-NE7. l)t: ASUA. Tratado, lll. 3'. ed..p 42.1ss.:SfRAfEN\\'ER'FH. Strafrecht,l. 2". erl..p. J74 r.s: SCIIÓNKE/SCHRÓDER/Sl-REE. StGB Komm., l8 ed.. n. 2ó a -10al par 1.1:RL.'DOLl,l,lt. S K , n . 5 8 y s s a lp a r l - 1 ; N I A U R A C H - G Ó S S E I - l. lAl .. pf .. l 5 l y s . R e c u é r d e s e q u e c o n r o h a sido expuestoanteriormente.el problemade las fuentesmaterialesde imputaciondel deber¡te cuidadoespecifico(no de los deberes"comunes")de la seguridaden el trabajoesel nrisnroque el del fundamentodel deber de garantiade la seguridaden el trabajoque sirve a equipararlas conductasomisivasa la comisión activa. vid. supra cap. VI. c. I 2. (5) Cfr. S'IRA'IENWER'IH. Strafrecht,cir.. p. 275. (6) En estesentido:"El hecho de que el procesadofuera gerentede la sociedad.lo cual abarca generalmentela mera gestióñeconomica-comercial no obstapara reconoceren el al garantede la seguridad"puesen el casoconcretoera tambiendirectordel procesotécnicode l'abricacion ('f .S. 9 junio 197-j)(Ar. 265I ): "que las clasificaciones laboralesrealizadaspor normas reglamentarias de profesioneso actividadesen que sedeslindenlos cometidosde los su.ietr>s que actúancomo directores.encargados.mandosintermedios.tecnicosu obreros.tienensusefécros puros dentro de las relacioneslaboralespúblicas.pero son meramenteindicativosen el orden criminal ... porque ha de estarse{aqur)no a lo que talesnormas dispongan.sino a la ef'ectiva realidaddel hecho.para no evitarsea medio de citas legales.delitoscometidosen la praxis y 169 la categoriaprofesionalen la que el sujeto en cuestión está cualiflcado(7). sino la funcion que la personarealmenterealice.El deberde seguridadse imputa.y con ello la cualidaddel autor tipico. a las personasque "de facto" ejercenel poder de direccion sobre el y tienen las facultadesnecesariaspara adoptar las medidasde seguridad (8). pertinentes. I-a pruebafundamentalpara la constatacióno negaciondel carácterde encargado o responsablede la seguridaddel sujeto en cuestión.consisteprecisamenteen la comprobacion de si el implicado tenta o no facultad de adoptar por su cuenta autonomamentelas medidas de seguridad.siendo muy especialmentedecisoriala facultadde suspenderlos trabajoscuando éstosse realizanen condicionesde peligro (9). sobrevenido l-a trascendencia del poderde suspensiondel trabajocomo último y mas decisorio criterio de comprobacion del caracter de la persona como sujeto encargado y responsablede la seguridaden el trabajo se fundamentaen consideraciones tanto materialescomo legales.En sentidomaterial.porqueel resultadoconsecuencia de un procesode riesgosolo puede ser consideradocomo "hecho de una persona"si esta tieneel señorrosobreéstey en su mano estáel impedirel desarrollodel mismo haciael resultado y. en ultima instancia.el que los trabajadoresestén al alcancede dicho procesode riesgocuando no es ya posibleevitar el incrementono controlablede éste. En sentidolegal.porque ha de tenerseen cuentaque la suspensiondel trabajo cuando no es ya evitable o neutralizableel riesgo agravado. es una de las obligaciones fundamentales.la ultima en sentidotemporal. que el ordenamiento(art. 10,3 OSH) impone a los "directivos. tecnicos y mandos intermedios". en defrnitiva. a los encargados de los diversosniveles(10). lmporta destacarque el poder de direccionefectivoque ha de comprobarsees el relativo al procesode riesgoconcretoque ha llevadoal resultadolesivoante el cual el juez penalseencuentra.lo cual implicaque ha de referirseal ámbito de la competencia funcional del sujeto. Es decir. prescindiendode aquellosencargadosgeneralesen trabajoscon reducidacomplejidadde division del mismo. ha de tenerseen cuentaque los "encargados"son "encargadosde la direccionde un determinadotrabajo y a un por lo generaluna complejaestructurajerarquica determinadonivel". presentándose con derogacionmaterialdel contenidode aquéllosque se incumplieran"(I.S. mayo 1974. Ar.l409). Aqur mismo tambien; lo que importa es si "fue autónoma su direcciónde la cjecucion del trabajo". (7) Asr en la S. de 2l-\'-7-1 A. 241.1.el procesadoera simple albañil profesional.per<r representantede la empresaen la obra. (ll) F-ntre las multiples sentenciasque se declaran por el sistema fáctico. además de las anterioresv. lasde 7-XII- 196l. 7-XIl- 1964(supuesto consigue esteultimo en que el empresario que los trabajadoresfirmen un documentopor el que se pretendeexoneraral empresarioy que los trabajadores asumanen exclusivala tutelade su seguridad). 2l-fl-1974. Ar. 79t|.y 24-\'l1975A . r. 2929. (9) As¡.f.S. 24-\'l-1975. Ar. 2929. afirmando la responsabilidad del encargadode l¡echoy considerandoletal porque disponede las facultadesmencionadas.Por el contrario.en lasde 24X I - 1 9 ó 4 y l 9 - X - l 9 T 5 s e n i e g a ecl a r a c t e r d e e n c a r g a d o a q u i e n e s c a r e c e n d e d i c h a s f a c u l t a d e s . "El cumplimiento(de las medidasde protección)no ) asr.en la primera de ellasse declaraque puede ser imputable al simple encargadodel trabajo que no tiene funciones de dirección y responsabilidaden la organizacióny marcha del negocio industrial". (10) \'id. FERNANDEZ \IARCOS. La seguridad e higiene como obligación contractual y como deberpúblico,\.ladrid 1975.p. 146.Vid. supra.Cap. ll. ap. 5. t70 de competencias o ambitosde atribuciondel poderde direccion.de tal maneraque no podra imputarsea un sujeto un procesode riesgo o momento del mismo que se desarrollefuera del ambito de su competenciafuncional.considerandocomo tal no la formalmenteatribuida.sino la competenciarealmenteasumiday ejercida( I | ). pues. no puede exigirse al encargadomás de lo que ha aceptado( I 2) y de lo que esrá facultado para realiz.ar. Bien entendidoque el corte de competenciassolo se produceen forma absoluta "hacia pero no en direcciónc<'¡ntraria. arriba" de la estructurajerarquica. Es decir.por ejemplo.los defectosde planteamientotécnicode la obra que generanun resultado lesivo han de imputarse a quien era responsabledel mismo (v. gr. arquitecto o ingeniero)y no puedeexigirseresponsabilidad al encargadode la obra. aunquedicho resultadoseproduzcaen el marcode la concretaactividadlaboralque esteexige.Por el contrario, resultadoslesivosderivadosde las ordeneso defectosen la más concreta direccióndel trabajo.v. gr. ordenesincorrectasdel encargadode la obra. se imputan directamentea quien es su mas inmediatoautor. pero no se excluyeel que aquc.llos que. como el aparejadoro arquitecto.tienen una competenciamas abstractasobreel trabajo puedan ser llamados a responder. pues para el superior. la esfera de competenciade su subordinadoes tambien de su competencia. Otros elementosconstituyen tambien presupuestosdet carácter de su.ietotle imputaciondel deberde seguridad.Particularmente seexigeque la personaencargadir tengafos conocimientostécnicosnecesariospara captarlas dificultadesy peligrosque puedensurgir en la ejecuciondel trabajocuya ejecucionlesestaconfiaday para poder determinarlas medidasadecuadaspara evitarloso neutralizarlos( | .l). No puede ser consideradoautor quien carece de los conocimientt-lstecnicos necesarios.l-a responsabilidad por el incumplimientode las normasde seguridadpt>r parte de encargadosincompetentes.a la vez le excluye su responsabilidad.(14) fundamentala imputaciondel resultadoa los superioresjerarquicosdel mismo(culpa in eligendo). Ahora bien. expuestohastaahora que el criterio definitivo es el del ejerciciode hecho del poder de direccion. no debe desconocerseel valor indiciario que presentafl los criteriosformales(cargo.clasificaciónprofesional.cláusulasde contrato.etc.).y nt'r sólo carácter indiciario. pues en algunos casgs el incumplimiento del deber de seguridadpuedeconsistirprecisamente en que el encargovoluntariamenteasumidoy consignadoformalmenteno es ejercidode facto, v. gr.. cuando el contratadocttmo encargadode la obra incumple.sus obligacionesy se ausentade la misma. ( l l ) C f r . R U D O I - P H IS. . K .c i t . .n . ó , 1a l p a r .1 . 1 . ( 1 2 )C f r .J I N I E N E Z D E A S U A . T r a t a d oI,I I . c i t . .p . 4 2 5 . (1.1)Asr.en la Reglamentación (O.\1. ll-l\'-1946)en cuvo del trabajoen la construccion art¡culoI0. fl. se delinela figura del encargado general.incluyecxpresamente entrc sus parala realizacion que requisitos la "posesion de losconocimientos de las()rdcncs suficientes r e c i b a d e s u s s u p e r i o r e s " e i g u a l m e n t e e n r e l a c i o n a l o s e n c a r g a d o s d e o b rla{ )y.c a p a t a c e s ( a r t . Ill). se haceparticularreferencia F-l l.S. a los"conocimientos sobreprevisionde accidentes". generalmentc comprueba y lo consigna la fornlula la tenencia deesosconocimientos rnediante para de "la funciónqueseencomendo supcriorcs ... no requiera conocinrientos al recurrerlte que los trabajosse llevarana cabodentrode las necesarias ordcn v normasde prudencia. . - l \ ' -1 9 7 5A. r . 1 5 4 2 ) . s e g u r i d a (d' f". S 2 (14)A no serqueestase l!ndamenteprecisamente de una tarca en la imprudente aceptacion "Ubernahmeverschulden". parala queseesconsciente secarecede competencia: t7l Podemospor tanto decir en conclusion.que el juez penal debe determinar los sujetosen que recaeel especialdeberde cuidadoen basea un análisisde lasposiciones de direccionformalesy facticasde los miembrosde la empresa('I.S.5-VI*1968y l4X-1970). predominandoen generallas posicionesde hecho sobre las puramente ( l5). fcrrmales En conexioncon el problemade la determinacionde la imputacion del deberde seguridadse encuentrael de la delegacionpor el empresarioa uno o a varios de sus encargadosde todo su poderde direcciony. conectadoa ello o independientemente. el de la responsabilidad sobrela seguridaden el trabajo.Sin embargo.preferimostratar esto más adelantecon un problema dentro de los relativosa la "participación"en el delitclimprudente,o. mas propiamente.a las autoriasculposasconcurrentes,pueses en ese ambito donde se ponen de rnanifiesto las consecuenciaspracticas de la d e l e g a c i o(nl ó ) . Son igualmenteproblemasde autoria y de imputaciondel deberde seguridadlos del agenteno cualificadopor el deber de seguridad(simplestrabajadores)y de los sujetosno suhcientemente etc.). cualificados(encargados del másbajo nivel. capataces. pero tambiénestoslos tratamosjunto al anterior.pues.por lo general.lasconductasde estos sujetos no aparecencomo causantesen exclusiva del resultado,sino como concurrentes en la producciondel mismo ( l7). E) EL GRADODE DILIGENCIA EXIGIBLE EN EL CUMPLIMIENTO DEL DEBERDE SEGURIDAD EN EL TRABAJO El grado de diligenciaexigiblees determinadogeneralmentecon basea la medida del que es propio de una personadiligentedel crrculo de actividada que perteneceel agente ( l8). La medida de la diligencia exigible se corresponderia.en términos tradicionales.con la propia de un buen empresario(l9). Con ésto.apenasse dice nada acercade cuál sea la diligenciaa exigir. En nuestraopinion. no por la dificultad de establecercriteriosmas precisosdebemos.transferirestatarea al juez. 'Si bíen correspondeal juez.el ultimo momentode valoraciónde lascircunstancias de hecho. no puede dejarsede lado el que la actividad laboral es un fenomeno "su graduacion ( 1 5 )A s r .p o r e j e m p l oe. n l a s e n t e n c idae 2 4 - \ ' l - 1 9 7 5A . . 2 9 2 9 . s e d e c l a r aq u e laboralera la de oflcial de primera y no la de encargadode obras.tal como aparecetal supuesto definido en la ReglamentacionN. de trabajo de la construcción.pero no cabeduda que lo era (encargado)de hecho. con facultadesen ausenciade su jefe el contratistapara adt'rptarlas medidas.no tecnicas.pero si practicas.para la buena continuaciónde las obras'".Sobre esta combinación de criterios facticosy formales vid. GALI-AS. Die Strafrechtliche Verantwortlichkeit der am Bau Beteiligten, Heidelberg.1963. p. 4l y ss. ( 1 6 ) \ , ' i d .i n f r a .C a p . I X . B . 2 . ( 1 7 )\ ' i d . i n f r a .C a p .I X . 8 . 3 y 4 . { I 8) En estesentidonuestrajurisprudencia"Precauciones y cautelasque hubierensido tenidas en cuenta por cualquier tecnico medio en la rama de actuaciónen que se produzcael evento dañoso". f.S. l7-Xll-75. Ar.4837: "No la del hombre medio abstracto.sino la del normal concretoen aquellascircunstancias ...". t.S. 3-X-64,Ar. 4128.Vid. JESCHECK.Lehrbuch,p. 4 7 1 .C r r t i c ae n S C H U N E \ I A N N . M o d e r n eT e n d e n z e nc, i t . .e n " J A " 1 9 7 5p . 1 4 9 . (19) Cfr. S\tURAGl-lA. La sicurezzadel lavoro, cit.. 3'. ed. p. 79. 172 generalizado. y problemasexisteuna considerasobrecuyo desarrollo.caracteristicas ble "experienciasocial". Determinadosfactoresy constantesde la seguridaden el trabajo pueden ser consideradoscomo tipicos de todo trabajo en general o de determinadasformas de trabajoen particular.y sobrela basede esatipicidadde problemassepuedenestablecer unos principiosgeneralesacercade cuál seala diligenciaexigibleen relacióncon cada uno de aquellos.A la hjacionde estosprincipioscontribuyenno solamentelos datosde la experiencia.particularmentecuando son asentadospor la jurisprudencia. sino tatnbién la misma normativa legal sobre seguridaden el trabajo. En estesentido.podemosdecir que son fundamentalmentedos los principiosque han de ser tomadosen cuentaa la hora de calificar la diligenciadel empresarioen el cumplimentode su deberde seguridad.En primer lugar. a mayor riesgocorresponde la exigencia de mayor cuidado. En segundo lugar. el cuidado a aplicar por el errpresario debe abarcar tambien la prevision de conductas imprudentesde sus trabajadores.particularmenteen los supuestosde trabajospropensosal riesgo. Junto al desarrollo de estos dos principios. abordaremosalgunos problemas concretosque se planteanen la practica en orden a la determinaciondel grado de diligenciaexigible. 1) GRADO DE DILIGENCIA EN RELACION A SUPUESTOS DE DIFICULTADTECNICA I-a seguridaden el trabajoes en buenamedidaun problematécnico.Precisamente en esesentidose orienta la politicade seguridadde los diversosEstadosy. sobretodo. de las organizacionespatronales.I-a mayor seguridaden el trabajo se consigue aplicandoa las máquinas.mediosy procesosde trabajo nuevossistemasde seguridad. sustituyendolas máquinas.medios.etc.,por otros nuevosque ofrezcanmásseguridad. Estaexigenciade reducciónde los riesgosal mismo encuentralimitessolamenteen la posibilidad técnica. El empresario está obligado a aplicar todas aquellas técnicas de seguridadque en el momento histórico de que se trate seangeneralmentereconocidas (20t. En este sentido puede decirseque el limite de lo exigible al empresarioha de trazarseen el nivel tecnico o tecnológicodel momento. no exigiendoselellegar a la propia de la seguridad.a la invencion(21). investigacion principal I-a consecuenciapractica que de aqui se deriva consisteen que el empresariono puede justificar la omision de dispositivosde seguridadaduciendo imposibilidado dificultadtécnica.Si a la maquinao aparatono se le puedenaplicarlos dispositivosde seguridad.la máquinano puedeser construida.ni vendidani puestaen funcionamiento.(22) Particular importancia reviste el principio de que cuando es descubiertay reconocidapor los organismosprofesionalescompetentesuna máquina. sustancia. (20) I-o cual. como vimos. es expresióndel más elementalde los principiosderivadosde Ia idea de riesgo permitido. ( 2 1 )C f r . C A \ { E R I - I N C K . I - Y O N { A E N . o b . c i t . . p . 2 7 9 . (22)En estesentidola más recientejurisprudenciaitaliana,en "Giust, Penale"1974.p. ll. p. 523. 173 proceso. etc.. susceptiblede sustituir al aplicado hasta ese momento. ofreciendo mayorescondicionesde seguridad.el empresariodebede procedera dicha sustitucion. sin que le ampareel hecho de que cuando abrio la empresao instalola máquina en cuestiónestabareconocidaéstacomo la más segurao que se adecuabaa las normas reglamentariasy. en consecuencia. fue aprobadapor la delegacióndel N4inisteriode Industria. Este principio de adecuaciónde las condicionesde seguridaden el trabajo a los nuevosavancestecnológicosha sido reconocidopor la jurisprudenciacivil y. en su virtud. se ha exigido responsabilidad.Habida cuenta de que viene a definir el contenido del cuidado debido. entendemosque debe reconocerseigualmenteen lo penal(23). 2) GRADO DE DILIGENCIA EN RELACION A NECESIDADES FINANCIERAS Si la seguridades en buenaparte un problematecnico.no es menoscierto que la 'Iampoco solucióntécnicaimplica una decisiónfinanciera. en el plano de lo financiero. ni Ia dificultadni la imposibilidad.sirven a eximir al empresariodel cumplimientode su obligaciónde proporcionarla máxima seguridad. Esteprincipio debemantenersecon carácterabsolutoen el momentode proceder a la aperturade empresa.Sin embargo.puedeser adecuadauna cierta flexibilidaden orden a los supuestosen los que un nuevo descubrimientopermita sustituir la instalaciónindustrialpeligrosapor otra nueva. 'Iampoco puede desconocerseque en tiempos de crisis. el cumplimiento empresarialdel deber de adecuar su empresaa las condicionesde seguridadque ofrecennuevossistemas,puedeconducir al colapsoeconómicode la empresa¡. a la perdidade puestosde trabajo (24). I-a cqnplejidad de los problemasfinancierosque plantea la adecuaciónde l¿r empresa a las nuevas posibilidades de seguridad hace necesaria la intervención normativa y ordenadorade la Administración.Continuamentese estádescubriendo hoy, p. ej.. el caractercancerigenode sustanciasempleadasen la produccion que afectan a los trabajadores.poniéndosede manifiesto la resistenciade las empresasa sustituirlospor productosalternativos.I-a mera imputacionde los resultadoslesivosa titulo de imprudenciay el castigopenal no sirve adecuadamente a la tutelaeficazde la vida y salud de los trabajadoresy. por ello. la intervenciónestatalen el control de los procesosde producciónaparececomo un presupuesto politicocriminal de importancia manifresta(25). En cualquiercaso,debetenerseen cuentaque todosestosproblemasno afectanal deberobjetivo de cuidado del empresario.sino al de la "culpabilidadde la culpa" a ( 2 l l l - a s e n t e n c i a c i v i l d et l. S . d e 5 - l \ ' - 6 - l ( C l - n " . 3 - 1 5 . p1.0 7 ) d e c l a r a b a e l d e b e r d e s u s t i t u i ¡ e l viejo sistema de tendido electrico por uno nuevo a base de cables fiadores de acercr generalmentereconocidocomo considerablementemás seguro. Vid. comentario de DIF-Z P|CAZO en sus Estudios sobre la jurisprudencia civil, I. N,ladrid.197-1.p. 273-276. (24) Vid. sobre todo esto v. I-ENCKNER. Technische Normen und Fahrlflssigkeit en "Festschr. für Engisch".Frankfurt. l9ó9 p. 500 y s. (25) Veanse las reaccionesprivadas y estatalesen Alemania Federal ante el recientemente descubrimientodel caracter mortalmentecancerigenodel empleo de diclorimetanoy otras substanciasen el trabajo industrial en informe de J. Sierra en "El Pals" de 3-XI-78. 174 través de la idea de exigibilidad al sujeto en función de sus circunstanciasv facultades personales. Cuestión aparte son las alegacionesempresarialesa las "necesidadesdel trabajo" para justificar la realizaciondel trabajo en condiciones inseguras.A este respecto.el 'fribunal Suspremoha declaradoque la ultima frasedel art. I I del Rto. de seguridad en el trabajo de la construcción:"de acuerdo con las necesidades del trabajo" no puede tener otra interpretaciónque "la necesidadde atemperarel trabajo a la evitación de los riesgos para el obrero. no exponiendo a éste a ta comodidad o rapidezde la obra a realiz.ar.quitando o poniendo la valla protectora cuantasvecesfueseprecisoen aras a ('IS. 30-4-l969. Ar.2497). la seguridad..." 3) GRADO DE LA DILIGENCIA Y GRADO DE PELIGRO El principio fundamentalpara Ia medidadé ta ditigenciaexigibleal empresarioen orden a la seguridad en el trabajo ha sido formulado reiteradamente por la jurisprudencia:el grado de aseguramientode la ejecuciony desarrollodel procesode trabajo. el grado de vigilancia que ha de prestarsea las condiciones materiales de trabajo y a la conducta de las personasque en él intervienen. están en relación directa con el grado de peligro que presentala empresao el trabajo de que se trate dentro de ella. en el sentido de que a mayor riesgo correspondemayor y más esmeradocuidado. Numerosassentenciasrecogenesteprincipio. p. ej.. la de 30-VI-76 (C.L. n. 920). la cual lo deduce.ademásexpresamente de preceptopositivoscomo los art.20. 3 y 22, I oSH: "se extremarán l¡s medidas de seguridad conforme se encuentre el peligro; igualmentela de 9-VI-1973(Ar. 2651): l-a vigilancia"se exige en m¡yor medida respectode las fasesde la actividad industrial que son más peligrosas" y "cuanto más grave es el riesgo es cuanto más necesariaes la intervención del director, que venia obligado a vigilar todas las fasesy con mayor cuidado las miis peligrosas". a) Peligrosidad de los trabajos. I-a valoraciondel cuidadoexigibleimplica por lo tanto una valoraciónpreviade la peligrosidadde la empresa.del trabajo en concreto,etc..sobrelos que ha de versarel cuidado. A este respecto. las calificaciones de "trabajos peligrosos" que Ia propia administraciónlaboralotorgaen su normativa no es mis que un indicede los criterios a utilizar tambien en otros tipos de trabajo o fasesdel mismo no contempladosen las leyesy los reglamentos. U na cierta homogeneidaden la formulacion det grado de cuidado necesariopuede alcanzarsesólo en los supuestosque podemosdenominar "de trabajos no peligrosos"y de "trabajos sólo potencialmentepeligroso": Trabajos no peligrososson aquéllos para cuya realizacionno es previsible et que surjan riesgos,sin que de ello derive el que no puedan producirse efectivamente.I-o decisivo en estoscasoses que el empresariodirector del trabajo no viene obligado -en base a la experienciageneral- a esperarque el peligro se produzca. En trabajos no peligrososno hay, lógicamente.un especialdeber de vigilancia. Donde el peligro surge de modo insolito no hay deber de situarse en posición de prevenirlos o evitarlos. Ahora bien, si en estascircunstanciasde riesgo no previsible, 175 éste se produce a pesar de todo. esta obligado a adoptar medidas de seguridad -solamente- quien por estar condiciones en de reconocerla situaciónde riesgopuede efectivamenteadoptarlas(26). Trabajos sÓlopotencialmentepeligrosos.son aquéllosrespectode los cualesla experienciarevela que son auténticasfuentes de peligro. pero su plasmacionen resultado lesivo no es probable si se adoptan medidas de seguridady se vigila adecuadamente su realizacion.Ejemplo trpico es el trabajo de la construccion.de la utilizaciónde andamiosno es probableque derivenaccidentessi estándotadosde las medidasde seguridadnecesarias y se vigila su utilización.asi como si se comprueban sus condicionesde seguridad. En estos supuestos.tras las medidasestructuralesde seguridadnecesagas.la vigilanciasobrelas mismasconstituyeel núcleodel cuidadodebidoy el presupuestsde la aplicacionde las medidasde seguridadque posteriormentepuedenser requerrdas por la evolución negativadel riesgopotencial. En la realizacionde estostrabajospotencialmentepeligrososla jurisprudenciano exige una vigilancia permanentesobre la actividad de los trabajadoresy sobre las condicionesy elementosmaterialesdel trabajo. sino solamenteuna vigilancia y comprobacionesde la seguridadde carácterp.iiodi.o. 'Iribunal En las sentencias del Supremoencontramosdeclaraciones como las que "no siguen: puedeexigirsetotal y absolutamente que el empresariovigile todosy cada uno de los movimientosde los trabajadores y en todo momento"('r.S. l9-V-70. Ar 2155)"Al encargadono se le puedeexigir que sigay controletodosy cadauno de los movimientosde una pluralidadde personas"('r.s.5-vl-72. DI\,|J.no. l02gg). En relación a arquitectos y aparejadoresse dice reiteradamenteque la "visita y, conservaciónde la obra no puede ser permanente"('t.S. l2-xll-66. Ar. 5600).sino que "deberealizarse con la debidaasiduidad"(-t.s. l4-x-70. Ar. 404g)(27). I-a frecuenciade la comprobacionde lascondicio¡res de seguridaddebeadecuarse en cada trabajo a periodostemporalesque permitan detectara tiempo las posibles alteracionestipicasde seguridad. Cuandosetratede trabajosen variasfasesde desarrollo.o de trabajos"dentro" de otros trabajos más generales.suele ser necesariala comprobacionde la correcta realizaciónfinal de cadauna de las fases.Asi. por ejemplo,el contratistade una obra que ordena la construcciónde un nuevo andamio no debe vigilar en concreto l¿r construcción del mismo. sino que finalizado este. debe comprobar si ofrece las condiciones ('I.S.2l-lX-1970). de seguridadrequeridas cuando se trata de trabajos peligrosos o especialmentepeligrosos el cuidado habra de extremarseen proporciónal incrementodel peligro.y asi. la vigilancia.que en un principio no debeextendersea todoslos trabajadoresy bastaque seaperi<'ldica. puedellegara exigirseque seconcretesobrecadauno de los participesen el procesoy que seade carácterpermanente.Esto quiere decir que el empresariodeberadestacar mas encargadosde la direccion), vigilanciadel trabajo y adoptar una mayor y mas afinada organizacióny division del mismo. etc. En el mismo sentido.la vieilancia ( 2 6 )A s i e n f . S ' l 9 - V I - 1 9 ó 9D . 1 \ 1 . Jn . l 0 - l l 0 : l - a o p e r a c i o n o r d e n a d a a l o s t r a b a j a d o r e s n o e r a en si peligrosay por ello el patrón no estabaobligadoa vigilar para prevenirriesgos.solamente si por cualquier otra razón hubiera estadopresenteen el lugar y captadoo podido captar Ia apariciÓn del riesgo vendria obligado a incrementar la vigilancia a adoptar medidas de seguridad.Vid. tambien'f.S.20-X-75.Ar. 39ó. (27) con mayor frecuenciaen [a jurisprudencialaboral del 'f.S p. ej. Sala 6,. l9-x-7]. . 176 sobre las instalacioneso aparatos,que normalmente exigen ser comprobadosde forma periodica,en el casode que su naturarezaseaparticularmentepeligro,sa, requieren una observación consüantd28) con respecto al deber de instrucción e información sobre los riesgos a los trabajadores,y en ros supuestosde trabajos(o condiciones der mismo) peligrosos,no bastan las simples advertenciasgeneralesde cuidado ni las indicaciones de que se suspendael trabajo cuando aparezcauna condición insegura, sino que se exige sean instruccionesprecisasy completas(T.S. S. 6,., 2g_I_7 l). El deber de cuidado del empresariose conhgura de forma muy distinta cuando se trata de los peligros que derivan de los elementosmateriales de la propia empresay cuando se traüade los peligros que pueden surgir de la participación en eila de otras person¿rs. . En relaciÓna los primeros, el empresarioestáobligado a evitar toda elevacióndel riesgopor encima de lo permitido que seaobjetivamenteprevisible,y ha de ser evitado mediante la adopción de las medidas precisas de asegurámiento y áe b apliación de toda la vigilancia que es necesariapara poder actuar frente todá grÁ a a" riesgo no permitido cuyo surgimiento sea prevísible. b) Petigrosidad derivada de l¡ activid¡d de las personas. principio de confianz¡, Presupuestos y ümites. Por el contrario. en reración a los rresgosque pueden . surgrr de r¡ conduct¡ incorrect¡ de otr¡s persoR¡s rige el principio opuesto, el cuidadJder empresario no tiene, en principio. que extendersea la pievisión de los peligro. ot o, puedan lu" crear. Rige aqui el ilamado pRINcIpIo DE IA coNFIAñzA en eicomportemiento cuid¡doso dc terceros que intervienen en el prooesode trabaJo,(29). Ahora bien, el principio de confianza está sometido "áiu"rr", restricciones, afectandounas a la propia naturalezade la institución y otras a la ¿isiinta categoia de personas que pueden intervenir en los procesos de riesgo, bien sean tecnicos y directivos' bien sean simples trabajadores. como nuesña p..pi" :"rirprudencia esüablece, el principio de confianzano es de carácterabsoluto.slno que áta sometido a determinadospresupuestosy condiciones(30). (28) Por ejemplo, las calderas a presión, que "serán convenieniemenfe vigitadas duranúe todo el tiempo en que esten de servicio" (art. 129, I OSH), o los que ," ."Jic"n en instalaciones "consüante qrre exigen vigilancia..(S. g_Xf_79,¡r. igfs). ,e^lgt¡icas. (lvf sobre el mrsmo Vid. SfRA'tENwER'fH, Arbeitsteilung und lrztleiche Sorgf¡ltsDflicht, en "Festschrfur E. schmidt", Gotinga r96r, p. 3g2.y ss; el mismo, strafircht, r, cit., p. 3r4 y p. l1-J.1Í9Pj:_SJudier, cit.. 88 n. l70; SCHMTDHÁUSgn, S¡¡frechr, 2, ed.. cit.p. 3t I y s.; SCHONKE/SCHRóDER/CRAMER. SIGB Komm, l8 ed., cit., not. í46 y ss. at par. 15. (30) cfr. 'r.s. 2t-v-1966, DN,ÍJno. 10538. Et'r.S. ha reconocidoel piincipio de confianzaen relación al trálico. v. fundamentalmente.ademásde la anterior, tas Oe'17-Xl¡-70 (DMJ no 10544). l-a doctrina alemana aplica el principio de confianza mÉ¡sallá del ámbito del tráfico (expresamente en contra. scHMtDHÁusrn, loc. cit. urt. nota), y particurarmente los supuestos de división del trabajo, dentro de lo cual se sitúa el üerna ie nuestro estudio. Entendemos que entre nosotros no hay dificultad a esta ampliación, habida cuenta de que el T'S' parece inclinarse a fundamentar el principio no en el riesgo permitido sino en la idea de *responsabilidad por uno mismo". Vid. la transcendenciade una u otra fundamentación en JAKOBS. loc. cir. 177 El presupuestoconsisteen que solo puedeacogersea la confianzaquien actúa conforme al cuidado debido (31). Este presupuestose concretaen el campo de la division del trabajo en que quien dirige este. debe haberlo encargado a persona cualificadacon toda satisfacciónpara su ejecuciÓn(32)A estecriterio respondela doctrinacontenidaen la S. de22-Y-74(Ar. 2409).en la que se declara que si el empresario ordena al encargado(o trabajador) realizar (o dirigir) un trabajoque se encuentradentrode la competenciaprofesionalde este(33) y no presentacaracteristicasanormalesa su propia naturaleza.puededejar la realizacion del mismo al criterio autónomo del encargado.sin que sea exigible al empresario la emision de órdenesexpresasy hjas sobreel asunto. Esta relacion de confianza que afirma la sentenciacitada es la que se da generalmenteentre el empresarioy sus técnicm. Entre el empresarioy los especialistas que emplea.particularmentelos del más alto nivel como los tituladossuperioresno jerarquicau orgánica.El que hacerlo decideel empresario. hay mas que dependencia el cómo llevarlo a cabo en condicionesde correccion tecnica y de seguridaddepende fundamentalmentedel especialista.Esteno solamenteno debeesperaro confiar en que tecnicas.sino que esel quien estaalli puesto la orden de trabajocontengainstrucciones precisamentepara resolver esta cuestion autonomamente. Sobre estas bases. si el empresario no especialista ordena realizar el trabajo incluyendo instruciones incorrectas, el especialista no puede ampararse en la obedienciadebidapara llevar a cabo el trabajo. sino que. por el contrario. debeadvertir de cumplirlas.Si el al empresariode la incorrecciónde las instruccionesy abstenerse y seráresponsable las lleva a cabo. instrucciones las técnico confia en la corrección de del resultado,puespor su cualilicación deberiahaber reconocidosu inadecuacion.En mayor medidadeberárespondersi ejecutala ordencon concienciade su inadecuaciÓn. EI empresariosólo responderáen estoscasossi por alguna causa concreta no debia confiar en la capacitacióntecnicadel subordinadoo si, a pesarde haber sido advertido por este. impone la realizacióndel trauajo. El tecnico no responderasi advierte y se niega a ejecutar. no correspondiéndoleespecialdeber de garante respectodel peligrt-r desatadopor el empresario(34). Cuando el encarg¡do o trabaiador no poseatoda la cuelificación necesariapara realizar sin riesgo autónomamente el trabajo, el empresario no podrá confiar en la corrección de la actividad del encargado. [a orden de trabajo sÓlo será entonces confiormeal cuidado exigido si mediante información suplementariay vigilancia adecuadacompleta la capacidaddel agente para la realizaciondel cometido. (3llEl'I.s.diceque"reglamenrariamenre".('t.s. l4-x¡-70)vid.scHÓNKE/SCHRÓDER.ob. cit., n. marg. 150 al par. 5. (32) Cuando la división del trabajoes mas complejaque la de un empresarioun encargadoo trabajador. se requiere ademasla adopción previa de medidasde seguridad para una adecuada comunicaciony coordinaciónentfe los participes.vid. S'IRA'IENWER'IH. Arbeltsteilung' cit. p. 395-396. (33) A la determinabiónde la competenciaprofesionalserviráen generalIa titulacionconferida por el Estado. En relación a las clasificaciones profesionales realízadas por normas reglamentarias,de profesiones.etc. la sentenciacitada declara que son meramente indicativas en el orden criminal, ya que en éste ha de citarse a la efectiva realidad de hecho. Vid. SIRA'IENWER'IH. ob. cit.. p. 394. (34) Vid. sobretodo estoCAI-!-AS. Die Verantworteichkeit,cit.. p. 3l y ss.Asi. en la s. l7-Xll' 79, Ar.4613, el arquitectoy el aparejadordenuncianta faltá de seguridady solo respondeel empresario y el capataz. r78 En estos supuestos.la exclusion del principio de confianza y er surg¡rniento correlativo del deber de complementarla cualificacionde los ageniesencuentrasu fundamentomaterial.por una parte.en que es previsibleque q,",]¿n no esüádel todo cualificado puede incurrir en errores fatates y. por otra parte, en que el agente inmediato actúa con reducidasposibilidadesde reconocer los peligros y las formas de evitarlosy. ademas.en que. en la medidade que seaconscrente de que su seguridad dependede la correctadirecciondel trabajopor su superiorviene oblijado a esperarde esteIa tlrientacionnecesariay actuaconfiadoen el mismo. lo cual afeciaal principio de "autorresponsabilidad". base.como se ha indicado.det principio de la confianza.f,os hechosdel agenteque cuenta con la direccion y vigilancia del empresariono son solamente"sus hechos"sino tambienlos hechosdel director-ernpr"ru.io. y el descuido o actuar incorrectodel agentees tambien descuidoo incorreccion del empresario.si aquel tuvo su causaen la deficienteinstruccióno vigilancia impartida(35). Fsto es asl porque el empresario.o los dírectívoso encargadosdel mismo. por su condicion de especialistastecnicos se encuentran en una posición generadora de confianza de los trabajadoresen la corrección de la direccion del tratajo que estos efectuan.confianzaen que no hay peligro allí donde no es advertido de ello por el director(-16). Esta confianzaconduceal agentea exponersedescuidadamente al riesgoen dos supuestosbasicos.En primer lugar. donde el empresariono vigila, pues donde no -en vigila se ctlentacon la inexistenciadel peligro.En segundolugar. aquelloscasosen los que el empresario vigila y dirige. pero. sin embargo, dicta instrucciones incompletas.pues el agentecuenta que con las instruccionei basta para realizarla actividadencomendadasin correr petigros. Por otra pafte. para la efectividad del principio de confianza se requiere no solamente el presupuesto de que et trabajo haya sido encomendado persona a tecnicamentecualificada.Seentiendetambienque el principio de confianzaencuentra sus limites alli donde tas circunstaniasdel caso hacen concretamenteprevisible la probabilidadde que se produzcauna conductadescuidadadel agente(37),o dondeel Derecho. las normas regutadoras de la actividad de que se trate impongan precisamenteun "principio de desconflanza" (38) en atención a criterios de experiencia del legislador sobre los momentos en los que se debe esperar comportamientosarriesgados,o. por ultimo. cuando el peligro de conducta descuidada se haya presentadoya en el caso concreto (39). En consecuencia,el empresario ha de presclndir de Ia conflsnza y ampliar su cuid¡do a la prevención de conductrs peligrosas de los encergldos y trebaJadores a sus Órdenescuando éstos adolecende defectos de cu¡liflc¡cion p¡r¡ el eJeiciclo del trabajo encomendadoo cuando sea previsible en concreto la conduct¡ incorrecta del agente . (35)cfr. I-ENCKNER.Technischer Normen,cit..p. 506-508; JESCHECK. t ehrbuch,p. 471. in fine. 't.S. (36)Cfr. 9-lX-66:Iosobrerostrabajanconfiados en la correctadisposición y vigilanciade su superior. (37)Cfr. STRA'IENWERTH,Arbeitsteilung, cir..p. 39:.;WEIZEL Derecbopenetalemán, trad.española de la lln. ed.cit..p. 188y'f.S. 2401-69, l4_Xl-70y l7-Xll-70. 't.S. (38)Vid. 2l-V-66y 20-X-óó. (39)Vid. S'IRA'I'ENWER'[H. Str¡frecht,t, cir.p.314,ss,no. ll5ó y tl5g. 179 En el marco de los riesgoslaboralesse puedeprecisaren mayor medidael carácter de ta diligenciaque impone esteprincipio de desconhanza.Si en el tráfico la confianza prima sobre su negación, en el orden laboral ocurre lo contrario: la regla es la desconfianza,hasta el pun'to de que se configura como principio fundamental de la determinacion de la diligencia del empresarioel de que esteestáobligado a prever las imprudenciasde la propia victima, tema sobreel que nos extenderemosahora. dadasu imporLanciapráctica. 4) EL DEBER DE CUIDADO DEL EMPRESARIO EN RELACTON A LAS IMPRUDENCIAS DE SUS TRABAJADORES: PROTECCION DEL TRABAJADOR, INCLUSO FRENTE A SI MISMO EN TRABAJOS PROPENSOS AL RIESGO El principio de confianza en la corrección del comportamiento de los demas participesen la vida de relación sufre una inversión radical en el ámbito del deber de seguridaddel empresario,hastael punto de que Éstedebeaplicar una diligenciatal que le permita reconocery evitar los peligrosque los trabajadorespuedangenerarcontra si mismos. l¿ doctrina yjurisprudencia laboral se ha enfrentadocon latareade decidir sobre el deber del trabajador de indemnizar al empresario por los daños producidos en el patrimonio de éstea consecuenciade un comportamiento imprudente asi como sobre las condicionesen que el empresariodebeindemnizar al trabajador por los daños que éstemismo se haya producido. I-assolucionesa que conduciaen estosdos supuestosla aplicación de los criterios tradicionales de la culpa se manifestabaninsatisfactoriase injustas.Asi si el trabajadorcausaun daño por cupa o negligenciadeberiaindemnizar al empresarioaunque, p. ej., el descuidohaya sido leve y el prejuicio valorado en millones (explosión de una maquina). Por otra parte, cuando el accidente ha sido producido por imprudencia de la propia victima, el accidentadono podria aspirar a ser "reparación". indemnizado para sufragar su Particularmenteinsatisfactoriase injustas parecianestasobligadasconsecuencias juridicas cuando el daño era producido por trabajadoresnormalmente cuidadososy cuando lo que lleva a éstosal error o descuidoes la misma natvralezadel trabajo. es áecir, cuando las mismas condiciones de trabajo a que el obrero está sometido "empujan" a estea cometer el error o descuidogeneradordel daño. Mas allá de las solucioneslegislativasde objetivizaciónde la responsabilidadpor accidenües de trabajo, la doctrina elaboró una teoria particular de la responsabilidaden los que se han denominado trabaJospropensü¡ ¡l rlesgo (40). Propensosal riesgo son aquellos trabajos que, bien como un todo, bien en fases del mismo o en particulares formas de su realizaciÓnimponen al trabajador la "normal" en el desarrollo de su actividad y a tendencia a prescindir del cuidado (40) Sobre esto vid. GAN,IILLSCHEG/HANAU, Die Haftung des Arbeitnehmers, 2u. ed., Karlsruhe 1974.Sobrelas exigenciasque planteaal legisladorv. EIKE v. HIPPEL. Reform der "ZRP" 1971,p. 217 ss.ERIKA BOKELMANN. Die heftung HsftungdesArbeltsnehmers,en *ZRP" 1972,p. 283. Entre nosotrosla única y valiosacontribuciónde des Arbeitnehmersen 'Iesis. Madrid 1978' BARREIRO GONZALEZ, Dillgenci¡ y negligenciaen el cumplimiento, p. 506-536. r80 incurrir en desatenciones o descuidosque provocan situacionesde peligro y resultados lesivos. l-as caracteristicasque configuran un trabajo como propenso al riesgo son muy diversas. Entre ellas se cuentan la dificultad de los metodos de trabajo o del procedimiento técnico (p. ej., manejo de máquinas complicadas), la delicadezao intrinsecapeligrosidadde los materialescon que se trabaja (productos inflamables).o del lugar en que se presta{alturas elevadas).la monotonia en la realizacióndel trabajo. el automatismo o elevadaceleridadde los nrovimientoscorporales(ritmos de trabajo), exigencia de especialconcentración.etc (4 | ). 'rodas estas circunsúncias provocan en el trabajador excesos de fatiga. sobrecargasnerviosas, familiarizacion con el riesgo y corisiguiente desprecio del mismo, etc.. que determinan faltas de atención o descuidoscontrarios a la diligencia debidaen condiciones"normales" (42). I-a propensiÓndel trabajo al riesgo condiciona la conducta de los trabajadores cuidadososde forma prácticamenteinevitable.alterándolade tal forma que desaparece el abstracto"cuidado del hombre -del trabajador- medio". y lo que seconfigura como "medio" no es tanto el cuidado como la falta. una conducta más cuidadosano es ni esperabte ni motivable(43) y, por lo [anto, no puedeserexigible(44).un cuidadoque excluya estasfaltas del trabajador no seria realmenteel cuidado exigido en el trafico propio de la preEtaciÓnde trabajo en estascondicionesy las que serian infraccionesde la diligenciaabqtiactamentedebida no serian infracción del concreto deberobjetivo de cuidado de quién tpbaja en esascondiciones. Naturalmente é'sa"negligencia" del trabajador se sometea limitaciones de grado. I-a negligenciaprivilegiada es solamentela que puedeenmarcarseen las categoriasde Ieveo simple-a la que lá jurisprudencia laboral denomina "imprudencia profesional"y no en la de imprudenciatemeraria.Es decir, lo que se admite es la omisión de Ia diligencia media, pero no la de mas elemental de las diligenciasque se niega con la temeridad. I-as consecuenciasde estas ideas en el orden penal son fundamentalmentedos (45). Por una parte se reduceel ámbito de responsabilidadcriminal del trabajador por daños,lesionesy homicidios imprudentesque puedaproducir (46). y por otra. y éstosi afecta directamente al objeto de este trabajo, determinan una ampliacion del deber objetivo de cuidado del empresario(directivos, etc.).que ha de extendersea prever y neutralizar los riesgosderivados de las "imprudencias de los trabajadores". (41) vid. BARREIRo GONZALEZ. ob. cit.. p. 509rsN,tuRAGLlA. La sicurezzadel lavoro, 4 ¿ .e d . .c i t . p . 2 1 8 . (42) Puedeverseun análisistécnicoen NEULOH y otros, Der Arbeitsunf¡ll, Stutgart 1957.p. 239. Es precisoindicar que la idea de trabajo peligrosono coincidecon la de trabajopropenso al riesgo.el trabajo realizadoen cadenaa un ritmo alto no es peligroso en si pero si propensoal riesgo por error del agente.v. GAI\4lLLSCHEG/HANAU, Die Haftung, cit.. p. 30 y 52-53. (41) Vid. E. BOCKELMANN. ob. cit.. p. 289. (44) Vid. BARRE|RO.ob. cit.. p. St2 y 515 n. 6. (45)Sobrelas consecuencias en el plano civil. vid. RODRTGUEZPIÑERO.Culp¡ de la vlctlma y accidentede trabeJo,en "ADC" 1970,p. 543 y ss; Al-oNso OLEA. L¡ responsabilidadpor accidentede trabaJo,cot., p. 22-24,y BARREIRO. ob. cit.. p. 531-536. (46) 'rema en el que no entramos aqui por estar interesadosexclusivamenteen la responsabilidadde la otra "parte" de la relación laboral. Ese tema tampoco ha merec-idola atención de la doctrina penal, excepcionalmentev. OSTI-ER. Unfallurs¡che und Unf¡llschuld bei gefahrgeneigter Arbeit, en "NJW" 1962, p. 1229 ss. t8l En esteultimo aspectointeresael que del hecho de la "tipicidad" de la lalta de cuidado.de la normalidadde la mismaen las condicionesconcretasde propensióndel riesgo.y de que la misma es objeto de la experienciaempresarial.se deriva el que la conductaimprudentedel trabajador.que va a convertirlea él o a sus compañerosen vctimas. no es un fenómeno meramente previsible en abstracto como posible. sincr previsibleen concretocomo tal y, en ocasiones,como prácticamenteseguro. Por otra parte.interesaconsignarque.como exponeHANAU (47).el fundamento , de la limitación "exclusión de la responsabilidad"no radica solamenteen el hecho de que el trabajo sea propenso al riesgo e implique situaciones de.previsión sobre el individuo. sino, más aún, en que esas circunstancias favorecedorasde la conducta incorrectamentearriesgadason inevitablespara el trabajador dependiente,en la medida en que esta sometido al poder de direccion y decision (exclusivo) del ernpresariosobre las condicionesde prestacióndel trabajo (48) y en esesentido.los presupuestos de su conductay los riesgosderivadosde ella no puedenserconsiderados como propios.Eltrabajadorno es señor de los mismos.Solamentequien trabajapor cuentapropia y autonomamentepuedeser consideradoen estascircunstanciascomo señor de su propio riesgo. Por todas estasrazones.porque la conducta imprudentede los trabajadoreses concretamenteprevisibley altamenteprobable.y porque esasimprudenciasno son. por ello. ajenasal empresario.este no puedeacogerseal principio de confianzaa la hora de formar su decisión en orden al cuidado que va a prestar.Como se ha visto. el principio de conhanzase asientaen el principio de responsabilidadpor los propios actos y la espera justificada de que los demas participes se comportaran cuidadosamente.y. como aqui hemos constatado.el trabajador dependienteen los trabajos propensosal riesgo no puede dar la medida del cuidado responsabilidad media. ni sus actosson "sus propios actos"(49). Si las conductas imprudentesde los trabajadoresno son solo objetivamente previsiblesen abstracto.sino concretamenteprevisiblesy esperables. el empresariono debe confiar en la realización cuidadose del trabajo, por el contrario, debe "desconliar" de que el trabajador sea prudente. En conclusión.el cuidadoque le esexigibleal empresariodebeser tal que tome en cuenta las hipotéticasconductasimprudentesde sus trabajadores.Las medidasde seguridad a adoptar y el grado de vigilancia a prestar deben tender a asegurar al trabajador frente a sus propias imprudencias. l-a idea fundamentalde todo ésto se encuentracontenidaen nuestroderechoya desdeel Reglamentode accidentes de trabajo(28-Vll-1900).en cuyo articulo 57 se declara que "las medidas materiales que se traducen en la adicion de mecanismos ( 4 7 1 C f r .C A N , { l l - l - S C H E G / H A N Uo.b . c i t . . p . 5 7 . (48) Podria parecerque el automovilistadebenaser beneficiadode esterégimenal incurrir en desatencionespor el cansancioproducido por el prolongado viaje. Sin embargo. entre e¡ automovilista y el trabajador hay una diferencia sustancial. pues el primero asume voluntariamenteel riesgode la desatenciónal continuar el viaje y el trabajador,por su parte.ni asume voluntariamenteel trabajo propenso al riesgo ni esta en su mano el descansarpara romper la monotonia o el desgastefisico en el trabajo. (49) Si el fundamentodel principio de la confianzafuera el riesgo permitido (Schidháuser)no habria razón alguna para excluir la vigenciadel principio citado. lo que llevaria a resultad<'rs incorrectose injustos. t82 preventivospara disminuir los riesgospropiosde cadatrabajo.se debende aplicarcon la mira de del'endertambien al obrero contra las imprudenciasque son consecuencia forzosa de la continuidad de las manipulacionesque ofrecen peligro". l-a doctrina y jurisprudencia laboral han desarrollado el principio bajo la nomenclatura de "irnprudencia profesional" (50). Se contiene igualmente en el derecho vigente. particularmenteen la OSH (p. ej. arts. 120 y 139). y ha sido admitido por la jurisprudenciapenalen la sentenciadel'I.S. de 23 de Junio de 1978(C.l-. 609). En el ambito de la jurisprudenciapenal ha sido asumido.con anterioridada la sentenciacitada. a traves.sobre todo. del reconocimientodel deber empresarialde hacer cumplir. incluso coactivamente,las normas de seguridadal personal a sus ordenes(5 I ). La jurisprudencia penal española hace uso de esta idea más que en orden a fundamentar el deber de cuidado del empresario.en orden a establecerlos llmites de exigencia del deber de seguridaddel empresario.es decir. a efectosde determinar las condiciones de exoneración del mismo. Por otra parte. y como consecuenciade la tecnica tradicional de la responsabilidad por imprudencia y de la relación de causalidad.el'I.S. sitúa el problemaen el marco de la relaciónde causalidady no en el del deber objetivo de cuidado. Por ello. analizaremoslas consecuenciasprácticas de esta ampliación del deber objetivo de cuidado en el capítulo correspondientea la imputación y conductade la victima (52). (50) \'id. supra.nota 45. 15l) Art. 10.I OSH. vid. Cap. Vl. 6. 22 c. Vid. tambienJESCHECKAulbru und Behandlung der Fahrllssigkeit im modernen,Strafrecht.Friburgo dex Br. 1956. (52) \'id. infra. Cap. lX. En todocaso.véanselas sentenciasde 30-Xl-ó8(Ar.4fttt5)r28-ll-70 ( A r . 1 0 4 9 ) : 2 1 - l V - 7 1 ( A1r7. 7 0 ) : 8 - V - 1 9 7 3 ( A1 r9.6 6 )l:7 - X l l - 7 4 ( A r . 5 2 2 7 ) : 9 - V - 7 5 ( A l 9r5 7 ) r . r. 4-ló l 5 - f V - 7 7( A r . l ó 4 7 ) : 9 - V - 7 7( A r . 2 2 0 7 ) tI 3 - X l " l 7 ( A r . 4 3 3 2 ) : 4 - l l - 8 0A r83