1. ¿Qué es lo que más valoro de estas palabras del Papa? 2. ¿Qué veo más posible y qué veo más difícil? FELICES LOS QUE TRABAJAN POR LA PAZ 4. NOS COMPROMETEMOS (ACTUAR) Podemos hacer diferentes propuestas para practicar durante la semana y seleccionar aquellas que creamos mejores para cada familia. 5. CELEBRAMOS (ORAR) “Haz, Señor, que en nuestra casa nadie esté sólo, que los problemas de los otros no sean desconocidos o ignorados, que pueda entrar quien tiene necesidad y sea bienvenido. Señor, que en nuestra casa sea importante el trabajo, pero no más importante que la alegría; que la comida sea el momento de alegría y de conversación; que el descanso sea paz del corazón y del cuerpo; que la riqueza mayor sea estar juntos. Señor, que en nuestra casa el más débil sea el centro de la atención; que el más pequeño y el más viejo sean los más queridos; que el mañana no nos dé miedo, porque Dios siempre está cerca; que cada gesto esté lleno de significado; que te demos gracias por todo lo que la vida nos ofrece y tu amor nos da”. Acabamos con el Padre nuestro, Ave María y Gloria. 6. DESPEDIDA. Avisos para la próxima reunión: Lugar de reunión… Tema: “Sombras familiares contra la paz” (Se recuer- da que traigan Biblia). Texto: Lc 15, 11-32 (Se les entrega la cita bíblica o el texto para que lo preparen). Los dueños de la casa despiden a los asistentes agradeciendo su estancia y animan para la próxima reunión. AGOSTO PAZ EN LA FAMILIA 2014 LA FAMILIA, COMUNIDAD DE VIDA, AMOR Y PAZ 1ª Reunión OBJETIVO: Reconocer la familia como una comunidad creado- ra de vida, llamada a cultivar y practicar el amor, para crecer todos en paz, bienestar y felicidad. 1. CREANDO AMBIENTE SÍMBOLOS.- Foto familiar BIENVENIDA ORACIÓN.– Cancion de la familia u otra similar. Que ninguna familia comience en cualquier de repente, que ninguna familia se acabe por falta de amor. La pareja sea el uno en el otro de cuerpo y de mente y que nada en el mundo separe un hogar soñador. Que ninguna familia se albergue debajo del puente, y que nadie interfiera en la vida y la paz de los dos. Y que nadie los haga vivir sin ningún horizonte, y que puedan vivir sin temer lo que venga después. LA FAMILIA COMIENCE SABIENDO POR QUÉ Y DÓNDE VA. Y QUE EL HOMBRE RETRATE LA GRACIA DE SER UN PAPÁ, LA MUJER SEA CIELO Y TERNURA, AFECTO Y CALOR, Y LOS HIJOS CONOZCAN LA FUERZA QUE TIENE EL AMOR. BENDECID, OH SEÑOR, LAS FAMILIAS, AMÉN. BENDECID OH SEÑOR, LA MÍA TAMBIÉN. Que marido y mujer tengan fuerza de amar sin medida y que nadie se vaya a dormir sin pedir perdón. En la cuna los niños aprendan el don de la vida, la familia celebre el milagro del beso y del pan. Que marido y mujer de rodillas contemplen sus hijos, que por ellos encuentren la fuerza de continuar. Y que en su firmamento la estrella que tenga más brillo pueda ser la esperanza de paz y certeza de amor. ___________________________________________ Revisamos el compromiso de la semana anterior. 2. MIRAMOS LA REALIDAD (VER) Había una vez un pobre muy viejo que no veía apenas, tenía el oído muy torpe y le temblaban las rodillas. Cuando estaba a la mesa, apenas podía sostener su cuchara, dejaba caer la sopa en el mantel… La mujer de su hijo y su mismo hijo estaban muy disgustados con él, hasta que, por último, le dejaron en un rincón de un cuarto, donde le llevaban su escasa comida en un plato viejo de barro. El anciano lloraba con frecuencia y miraba con tristeza hacia la mesa. Un día se cayó al suelo, y se le rompió el plato que apenas podía sostener en sus temblorosas manos. Su nuera le llenó de improperios a los que no se atrevió a responder, y bajó la cabeza suspirando. Le compraron entonces una tarterilla de madera, en la que se le dio de comer de allí en adelante. Algunos días después, su hijo y su nuera vieron a su niño, que tenía algunos años, muy ocupado en reunir algunos pedazos de madera que había en el suelo. - "¿Qué haces?", preguntó su padre. - "Una tartera, contestó, para dar de comer a papá y a mamá cuando sean viejos." El marido y la mujer se miraron por un momento sin decirse una palabra. Después se echaron a llorar, volvieron a poner al abuelo a la mesa; y comió siempre con ellos, siendo tratado con la mayor amabilidad. (Hermanos Grimm) Dialoguemos con las siguientes preguntas: 1. ¿Qué me ha llamado más la atención de esta historia? 2. Podemos comentar ejemplos de familias que destacan por su buen clima familiar y por qué creemos que es así. 3. NOS DEJAMOS ILUMINAR (JUZGAR) 3.1. POR LA PALABRA PREPARACIÓN. Se invita al recogimiento y a la disposición para escuchar la Palabra de Dios. REPETICIÓN. Espontáneamente repiten alguna palabra en voz alta, sin prisa. Cada uno por dentro la va repitiendo. Al terminar se puede volver a leer el texto. SILENCIÓ. Hacemos unos minutos de silencio y nos preguntamos: ¿Qué me dice la Palabra de Dios? CÓMPARTIMÓS. Podemos expresar lo que la Palabra me dice, según el tema que estamos tratando. 3.2. POR EL MAGISTERIO “Fundada en el amor y abierta al don de la vida, la familia lleva consigo el porvenir mismo de la sociedad; su papel especialísimo es el de contribuir eficazmente a un futuro de paz. Esto lo podrá conseguir la familia, en primer lugar, mediante el recíproco amor de los cónyuges (…); lo podrá conseguir además mediante el adecuado cumplimiento de la tarea educativa, que obliga a los padres a formar a los hijos en el respeto de la dignidad de cada persona y en los valores de la paz. Tales valores, más que "enseñados", han de ser testimoniados en un ambiente familiar en el que se viva aquel amor oblativo que es capaz de acoger al otro en su diversidad, sintiendo como propias las necesidades y exigencias, y haciéndolo partícipe de los propios bienes. Las virtudes domésticas, basadas en el respeto profundo de la vida y de la dignidad del ser humano, y concretadas en la comprensión, la paciencia, el mutuo estímulo y el perdón recíproco, dan a la comunidad familiar la posibilidad de vivir la primera y fundamental experiencia de paz. (…) Además, el verdadero amor va acompañado siempre de la justicia, tan necesaria para la paz. El amor se proyecta hacia quienes se encuentran en dificultad: aquellos que no tienen familia, los niños privados de protección y afecto, las personas solas y marginadas.” -Mensaje del Papa para la Jornada mundial de la paz.(1-1-1994) LECTURA. Se proclama despacio y con claridad el texto: Ef. 5,33 - 6,4. A continuación, se pueden suscitar más participaciones: