ESTRUCTURACIÓN DE LA PERSONALIDAD: GENERALIDADES J. Tomas. X. Gastaminza. "Dios, puso lo Generante y la Ley de su desarrollo, para la Naturaleza,..." ".. de ahí vino el entender de las plantas y los animales... y por fin el entendimiento de los hombres..." (Diálogos de MontfalcóCalabuig) I) Introducción: La maduración de la personalidad hoy en día sólo se comprende, bajo la perspectiva de una integración dinámica y permanente de diversas fuerzas que se imbrican entre si, a lo largo de todo el período de la edad evolutiva, tanto en un sentido convergente como en contraposición a lo largo del desarrollo. Uno de los primeros factores fundamentales de maduración es el que se basa en las modificaciones que se obtienen gracias a la progresión biológica, cuya comprensión implica: a) La predeterminación hereditaria que existe en el ser humano para alcanzar unos determinados objetivos y así desarrollarse según un orden preestablecido desde un punto de vista corporal-orgánico, Que interactúa con otros dos factores, también de base endógena, para la consecución del desarrollo: b) Motivacional, (dependiente del sentimiento y la afectividad) para conseguir la capacitación en determinadas habilidades y no en otras c) Cognitivo o intelectual por último. El otro factor extremo esta viene constituido por las exigencias del medio, que comprende los siguientes elementos: a) Las características de la relación de los individuos que se hallan en este medio, b) Los valores culturales, morales y éticos, c) Por las leyes explícitas e implícitas, y por el sentido de la conducta que cada medio social o subcultura tenga de por si. II) Desarrollo Neuromotor El zigoto, como ya conocemos, posee en si, todo el aporte genético que marcará al individuo en su evolución dialéctica con el medio, refiriéndonos tanto a las determinantes de la herencia de especie como a la herencia individual o específica. La herencia de especie es común a todo ser humano, y depende de ella el esquema corporal, la deambulación vertical, la diferenciación funcional de manos y pies, el lenguaje articulado, la facultad de abstracción y la de generalización. La herencia individual, afecta fundamentalmente a las características individuales de cada miembro de una especie y que lo definen de forma concreta, talla, huellas digitales, color de los ojos, etc. Como es de sobras conocido, las habilidades que se trasmiten genéticamente aparecerán mas o menos a la misma edad en todos los individuos, normales, de una misma especie. El desarrollo biológico y las distintas habilidades que se consiguen a partir de él permiten nuevas situaciones relacionales con el medio. Gracias a ello se crean etapas nuevas del desarrollo o estadíos de progresión, que son importantes, para la adquisición articulada de nuevos conocimientos. Si el entorno gracias a su capacidad afectiva y por lo tanto de resonancia, modela reforzando o inhibiendo un determinado aprendizaje, podemos comprender la influencia notable que este "medio" tiene en la capacidad total de maduración que el ser humano lleva en si mismo. La calidad y la cantidad de los estímulos que el niño reciba, marcará el grado de desarrollo de cada una de sus múltiples funciones. Al valorar un nivel de maduración cualquiera tendremos en cuenta tanto el potencial de desarrollo que cada niño puede poner en marcha como el medio donde se ha desarrollado. III) Aprendizaje A partir de la experiencia vivida o sentida y del resultado práctico que se derive, diremos que el aprendizaje es la modificación permanente de un comportamiento a la búsqueda de una mayor eficacidad. El aprendizaje es la experiencia que se obtiene a través de la acción que desencadena un estimulo, la cual incide sobre una función que previamente existía en relación a este estimulo. En el mismo momento, además, aumenta el conocimiento gracias a la valoración de la respuesta que se produce, al desarrollarse la función estimulada y la actitud de refuerzo positivo o negativo, según si la respuesta es de satisfacción o aversión al ser aceptada o diferida por parte del individuo estimulado. Hay dos tipos de aprendizaje: a) Aprendizaje clásico, que implica un estimulo especifico y le corresponde una respuesta especifica, el alimento (estimulo especifico) produce una salivación (respuesta especifica). La salivación siempre se producirá al ingerir el alimento. Por lo tanto el acontecimiento (estimulo) siempre precede a la respuesta y es su causa. FUNCIONES BIOLÓGICAS a) Funciones automáticas 1) Equilibrio 2) Deambulación 3) Coordinación motora 4) Sincronización motora b) Funciones sensitivas 1) Táctiles 2) Cenestesia 3) De la presión 3) Del dolor c) Funciones sensoriales 1) Sentido del gusto 2) Sentido del olfato 3) Sentido del oído 4) Sentido del tacto 5) Sentido de la vista d) Maduración psicomotriz 1) Capacidad de coger 2) Capacidad de soltar 3) Capacidad de acariciar 4) Capacidad de pegar 5) Capacidad de escaparse 6) Capacidad de alejarse 7) Capacidad de volver b) Aprendizaje instrumental o operante, el cual no esta en relación con un estimulo especifico, como el descrito con anterioridad. La respuesta que se obtiene no esta ligada al estimulo sino al fenómeno llamado de "refuerzo", depende por lo tanto de la función que desencadena y no del estimulo que la precede. Así el comportamiento estará determinado por sus efectos, o sea por los acontecimientos que se desencadenan (el niño que hace una buena acción es recompensado por sus padres) La estructuración de la personalidad, no tan solo consistirá en un proceso de sumación de aprendizajes sin mas, sino que además, estará ligada a la imbricación y conexión de estos aprendizajes entre si, junto a la presencia de una situación afectiva favorable y a una capacidad de memorización y retención, que permita la repetición de lo aprendido. La vivencia fantasmática (experiencia y conocimiento que se obtiene a través de la ilusión y el fantasear), junto a la percepción de la realidad en cada individuo, produce un conjunto permanente de reacciones emocionales, que son la manifestación explícita de lo que le acaba de ocurrir a este individuo. También la vivencia fantasmática constituye aquello que por ser lo que se desea, esta a punto de ocurrir. Así se convierte en uno de los estímulos mas importantes para que algo ocurra (la ilusión de tener algo, desarrolla las acciones necesarias para tenerlo). IV) Emoción La emoción es un fenómeno integrado por dos componentes fundamentales: a) Componente afectivo: Definimos el afecto como la vivencia psíquica de los distintos momentos existenciales. Se reconocen tres tipos fundamentales de vivencias. De sus variaciones y combinaciones se derivan los restantes: 1) El placer: Sensación de agradabilidad ligada íntimamente a la satisfacción de una necesidad. 2) La cólera: Sensación de malestar mas o menos violenta ligada a una necesidad cuya satisfacción no se ha conseguido 3) El miedo: Sensación de amenaza, tanto si es del interior psíquico como del exterior, y que puede generar reacciones de pánico, de fuga, de ataque, de bloqueo o de perplejidad b) Componente neurofisiológico: Las manifestaciones neurofisiológicas de tipo emocional, están ligadas al sistema nervioso autónomo (simpático y parasimpático), por ello todas las reacciones que se desprenden de estos sistemas es posible que aparezcan ligadas a las experiencias existenciales que generan una emoción. 1) Aparecerá por afectación del simpático: - Sudoración abundante - Aceleración del ritmo cardíaco (taquicardia) - Disminución del peristaltismo intestinal 2) Y por afectación del parasimpático: - Enlentecimiento del ritmo cardíaco (bradicardia) - Hipersecreción de clorhídrico - Hiperperistaltismo intestinal c) Otros centros del sistema nervioso central también están imbricados en la emoción: - Sustancia reticular (bulbo, protuberancia y mesencéfalo) - Hipotálamo V) Motivación La motivación es la fuerza o la energía que origina toda acción como si fuera un motor de arranque. Viene generada por un entramado de necesidades insatisfechas que determinan que la realización de un acto se dirija hacia una finalidad previamente sentida por el sujeto. Una necesidad motiva una acción y pone en juego una serie de medios y sistemas para conseguir un fin concreto, ligado directa o indirectamente a esta necesidad previa. Las motivaciones pueden ser de origen innato o adquirido; serán innatas aquellas que son necesarias para la supervivencia del individuo y en este caso tendrán un claro substrato anatomo-fisiológico (alimentación, sexualidad, entre otros). Adquiridas serán aquellas no necesarias para la supervivencia pero si imperativas desde un punto de vista psíquico para el individuo (necesidad de éxito, necesidad de afecto, necesidad de aprobación social, etc). VI) Desarrollo cognitivo La maduración de la personalidad también depende del desarrollo de las capacidades cognitivas del sujeto, en cada situación la relación entre el individuo y el medio es absolutamente particular y singular. Esta singularidad está regida fundamentalmente por las capacidades cognitivas. En este aspecto, será de gran trascendencia, el desarrollo del pensamiento lógico y el desarrollo del juicio moral. La evolución del pensamiento lógico y del juicio moral va a la búsqueda de conseguir, el equilibrio necesario entre el egocentrismo (total y necesario en el recién nacido para su supervivencia) hasta el alocentrismo que se consigue con la madurez (el sujeto se somete a una permeabilidad permanente con el entorno en función de la necesidad propia y de los demás). Lo que el individuo a lo largo de su desarrollo va asimilando, tiene por finalidad facilitar la acomodación propia al entorno. Así partimos de un estado en que todo hace referencia a uno mismo, lactanciainfancia, y vamos hacia un estado en el que tenemos que considerar que la madurez consiste en ser parte del todo. A) Desarrollo del pensamiento lógico El paso del estadío de los reflejos, a la posibilidad de la abstracción como función última de la inteligencia se realiza en cuatro etapas fundamentales (Piaget) 1) Etapa sensoriomotriz (0 a 2 años) 2) Etapa del pensamiento intuitivo (2 a 7 años) 3) Etapa del pensamiento concreto (7 a 12 años) 4) Etapa del pensamiento formal y lógico (12 en adelante) 1) Etapa del pensamiento sensoriomotriz (0 a 2 años) En el inicio el recién nacido tiene limitada su actividad inteligente simplemente a un conjunto de actos reflejos, que progresivamente va adquiriendo una organización mas compleja al ir apareciendo la integración de percepciones, y el aprendizaje de hábitos, que le permiten reconocerse a si mismo como un ser distinto de los demás individuos de su entorno y al mismo tiempo como una parte del ambiente que le rodea. Hacia el final de este período percibe los objetos como algo que está fuera de si mismo, no formando parte de él y intenta atraerlos hacia sí (éste es el proceso básico del pensamiento sensoriomotriz) 2) Etapa del pensamiento intuitivo (2 a 7 años) La inteligencia evoluciona en este estadío desde la coordinación sensoriomotriz hacia un pensamiento que se constituirá gracias a la ideación que aboca a la configuración progresiva de la comunicación y el lenguaje. Hay una autentica transformación intelectiva en el paso que va desde el grito (llanto) a la expresión del pensamiento a través de un sistema de símbolos verbales y signos gestuales (comunicación preverbal), que en complexificación progresiva constituyen la capacidad de comunicación del individuo. Esta evolución que aparece en el niño depende tanto de los substratos neurobiológicos como de la relación afectiva del entorno hacia él, y está íntimamente ligada a la capacidad estimulativa de los que le rodean. La simbolización adquirida en este momento permite la representación mental de los acontecimientos, aunque todavía no podrá, ahora, realizar generalizaciones ni tampoco, comparaciones El niño en esta etapa puede realizar afirmaciones pero no es capaz todavía de establecer relaciones que le permitan elaborar una demostración. Su capacidad ideativa es cada vez mas realista y positivista; su funcionamiento mental es todavía muy egocéntrico y por ello le resulta muy difícil entender que las apreciaciones de la realidad que él establece no coincidan con la de los demás o bien que los demás no compartan su criterio, sobre cualquier cosa. 3) Etapa del pensamiento concreto (7-12 años) A partir de ahora y durante esta etapa cada vez puede precisar y distinguir mejor su criterio del de los demás, con lo que le resulta mas fácil seguir las reglas de un juego y al mismo tiempo someterse a ellas, respetándolas si es que es necesario. También es en este período cuando el razonamiento en su sentido más estricto inicia su desarrollo. Se establece la capacidad de realizar los primeros silogismos para poder razonar y aparece a su vez la capacidad de concausalidad y reversibilidad. A lo largo de esta edad también se establecerán un grupo de normas o valores más o menos fijos con función y finalidad moral que permitirán una referencia constante de tipo ético. 4) Etapa del pensamiento formal y lógico (12 años en adelante) El pensamiento formal y lógico inicia su desarrollo, partiendo del pensamiento que se ha establecido en la fase anterior de lo objetivo y lo real, y permite empezar ahora en el pensamiento de lo posible. Así, toma cuerpo el pensamiento hipotético-deductivo, y se adquiere la capacidad de abstracción y del operar lógico. Aparece, gracias a todo ello, la facultad de conocer, de comprender, de concebir, de discernir, de reflexionar, de juzgar, etc. En las teorías genéticas sobre el origen de la inteligencia, ésta se comprende como el resultado de los procesos de asimilación y acomodación, que se realizan imperativamente para el restablecimiento de un equilibrio, o sea de una nueva adaptación. La necesidad (dará origen a la motivación) y la tendencia a su satisfacción representan por una parte el componente afectivo que se organiza y por otra se estructura intelectivamente hacia la acomodación operativa que permite la satisfacción de la "necesidad origen" (nuevo equilibrio). VII) Desarrollo del juicio moral Al igual que el desarrollo del pensamiento, el juicio moral también se desarrolla a través de una sucesión de etapas. Parte del egocentrismo inicial de la infancia para abocar a un código moral social (del adulto). La percepción previa de lo que es bueno o malo, agradable o desagradable para uno mismo desde un punto de vista físico, evoluciona hacia la percepción de lo que es bueno o malo para "el otro". Posteriormente se produce la concienciación de lo que es lo bueno y lo malo hacia el grupo, con lo que aparece la evolución de lo biológico (conciencia física de bienestar o malestar) a lo cultural (conciencia moral de lo bueno y lo malo). 1) Moralidad egocéntrica - Estadio pre-moral En esta etapa el niño no concibe que "otro" pueda tener una opinión distinta a la suya, sus actos están determinados únicamente en relación a sus deseos y necesidades, sin poder concebir el que deba justificarse de sus acciones con los demás. 2) Moralidad centrada en la obediencia y el castigo Progresivamente el niño descubre que existe otro criterio diferente al suyo, y a su vez una forma de razonar distinta a la suya, pero aún no es capaz de hacer un juicio moral del bien o del mal; por ello lo que cuenta, como referencia directiva es la autoridad del otro. 3) Moralidad fundamentada en la reciprocidad Después el niño empieza a valorar el bien y el mal en función de la interacción con los demás (es la ley de Talión la que rige su comportamiento) 4) Moralidad fundamentada en la convivencia Mas tarde el niño descubre que puede existir una comunidad de interés y de relación mutua que permite mantener un entendimiento con los demás, el bien es comprendido en el "no hagas a los demás, lo que no desees para ti" 5) Moralidad orientada hacia el mantenimiento del orden moral y social El bien ya se define en función de lo que está bien para la mayoría, se acepta la necesidad determinada por el convencionalismo social que corresponda en función de una cultura Todo grupo social vehiculiza su sistema de valores, sus temores, sus prohibiciones, sus normas de comportamiento a través de la relación básicamente afectiva y gracias a los mecanismos de gratificación/punición. Cada comunidad construye un sistema de funciones gracias a diversos grupos de signos y símbolos que deben interpretar cada uno de sus individuos. El patrimonio cultural sirve para el adoctrinamiento, y la calidad de relación afectiva entre una persona (el niño) y otra persona significativa para él (padres) que constituye la base de este adoctrinamiento. VIII) Teorías dinámicas de la personalidad El funcionamiento del aparato psíquico se fundamenta en tres aspectos fundamentales: a) Económico b) Tópico c) Dinámico a) Económico: El individuo no puede funcionar psíquicamente mas que partiendo de cierta cantidad de energía, que emana de la motivación individual, y que le conducen a utilizar distintos medios para conseguir diferentes fines o objetivos. Así consigue eliminar las tensiones producidas por diversas excitaciones, con lo que consigue de nuevo la calma o el reequilibrio. Si a través de un comportamiento individual, podemos apreciar que los actos se producen inmediatamente después de sentir el deseo, o sea que presentan un aspecto pulsional, diremos que la motivación de base es la satisfacción inmediata de sus necesidades y que la acción se ha efectuado bajo el principio del placer, su funcionamiento mental se catalogara entonces como proceso primario (la energía se libera, de forma inmediata y total, prescindiendo de los requerimientos de la realidad). Cuando la satisfacción llega, la necesidad desaparece, y la vivencia de placer aparece; pero, si no se puede satisfacer la necesidad, entonces sube la tensión y aparecen sentimientos de ansiedad, temor, angustia, hostilidad, odio, o frustración; con lo que puede desencadenarse cualquier reacción desde la fuga a la frustración. O bien se produce una adaptación a la situación, la energía se libera a través de otros fines y no tan solo del placer, así se produce una acción la cual se sitúa en el principio de la realidad y el psiquismo funciona bajo los mecanismos de un proceso secundario (se tienen en cuenta los requerimientos de la realidad). b) Tópico: Corresponde a la comprensión de que la estructura psíquica funciona con otras subestructuras de características diferentes y con funciones diferentes, en uno se sitúa el consciente, el inconsciente, el preconsciente; y en el otro, el ello, el yo, y el super-Yo. Inconsciente: Se llama inconsciente, todo lo que escapa al conocimiento, y que no se consigue rememorar de ninguna manera. Engloba todo los contenidos o vivencias rechazadas Preconsciente: Engloba todo aquello que no esta presente en la conciencia, pero que resulta accesible a la rememorización, bajo el esfuerzo y la atención. Consciente: Se refiere a todo lo que esta presente en el conocimiento. Ello: Constituye el polo pulsional del individuo, su contenido depende por una parte de lo instintivo, de lo heredado, de lo rechazado, por cualquier razón. Constituye la reserva primordial de energía psíquica. Por ello es un centro fundamental de motivación. El ello funciona por el principio del placer y es rechazado por el super Yo fundamentalmente. Super Yo: Es el polo opuesto al ello, es el juez, el censor, la norma, es donde se mantienen y transportan los valores del medio cultural en el cual se desarrolla el niño. Se construye a través de las exigencias y de las prohibiciones de cada grupo social. Se trasmiten en primer lugar por los padres y luego por todas las personas que jueguen un papel relacional afectivo con el sujeto Yo: Es la instancia mediadora entre el ello y el Super Yo, se mueve entre el principio del placer y el de la realidad. Expresa el compromiso validable entre la pulsión (ello) y la normal o realidad (super Yo) c) Dinámico: El Yo para asegurarse de una protección contra una excesiva tensión emocional o una ansiedad excesiva, que viniera de un conflicto entre lo pulsional y la realidad, elabora unos mecanismos para defenderse o bien para facilitar la adaptación, que al tiempo que resultan eficaces pueden convertirse también en fuente de estructuración psicopatológica, al dar solidez a la estructura neurótica. Mecanismos de Defensa: 1) Rechazo: Mecanismo con el cual se rechaza y se mantiene la pulsión no deseada en el inconsciente, para evitar que produzca angustia, al no poderla satisfacer o reelaborar 2) Negación: el sujeto se defiende de ciertos deseos, pensamientos o sentimientos, negando simplemente que son suyos.("no quería decir esto..." etc) 3) Conversión: Mecanismos gracias al cual ciertos conflictos se expresan a través de la sintomatología orgánica, motora o sensorial. 4) Desplazamiento: La intensidad de una representación o de un mecanismos se separa de su interés primario y se resitúa en otras representaciones menos ansiógenas, y así resultan menos amenazadoras. 5) Proyección: Se atribuyen a los demás sentimientos y deseos que uno rechaza en si mismo, y por lo tanto que no reconoce como suyos. 6) Identificación: Mecanismo por el cual se asimila un atributo, un mecanismo de otro sobre sí mismo. 7) Introyección: El sujeto de forma fantaseada hace pasar lo de fuera a dentro, es semejante al de la identificación solo que el proceso es de interiorización total 8) Aislamiento: Proceso de seccionar un pensamiento una representación o una imagen y desligarla de su contexto para inactivarla totalmente. 9) Anulación retroactiva: Proceso de desestructuración ordenada de lo hecho, se realiza la inversión del acto. 10) Formación reactiva: Mecanismo que consiste en la elaboración de un comportamiento inverso a un deseo rechazado, y constituye una reacción mantenida contra este. 11) Intelectualización: Se busca dar una formulación racional, a los conflictos y a las emociones para dominarlos. De hecho son todos los pretextos justificativos que podemos esgrimir para hacer aceptable lo inaceptable. 12) Sublimación: Mecanismo por el cual todas las tendencias son desplazadas a otras tendencias que pueden ser utilizadas para fines validos, útiles y aceptables. Estadios del Desarrollo Psicosexual: Para Freud, la maduración del niño es un sucesión de etapas, a las que denominó fase oral, anal, fálica, edípica, de latencia y por último la pubertad (o de genitalización). Cada una de estas etapas caracteriza por facilitar concretamente la resolución de un determinado tipo de conflictos relacionales entre el niño y el entorno, en relación a las fuerzas en tensión en cada momento. La no resolución de los conflictos inherentes, supone la existencia ulterior de un conflicto que favorecerá por fijación o regresión la génesis de perturbaciones neuróticas, futuras, en el sujeto. La fijación, podríamos definirla como una dependencia intensa hacia una persona, objeto o imagen, que fue significativa en una determinada etapa del desarrollo. Por lo que tiene un específico significado relacional. Permanece como conflicto permanente en el sujeto y le priva de progresar madurativamente, en todo aquello que presupone que tal dependencia no debiera existir. La regresión, viene a indicar, la vuelta por parte del individuo a una etapa anterior del desarrollo afectivo y cognitivo, cuando ya está en un estadío mucho mas avanzado del proceso de maduración (búsqueda de un reestablecimiento de formas mas arcaicas de relación que la actual para favorecer una necesidad cuya satisfacción no esta coseguida en la evolución presente). d) Criterios de Erikson: Describe ocho etapas en el desarrollo, para la maduración de la personalidad, cada una implica una crisis de crecimiento, en la que se superan determinados tipos de relación, se añaden nuevas necesidades y aparecen nuevos equilibrios. De cada etapa la personalidad, saldrá enriquecida, con un grado de seguridad y de vulnerabilidad mas o menos eficaz de acuerdo con lo adecuadas que puedan ser las soluciones que ha aprendido a través de los conflictos que ha vivido, en las etapas previas. Etapas: a) Confianza o desconfianza primaria (reacciones generalizadas de temor o entrega hacia el entorno) b) Autonomía (aparece la duda, la vergüenza) c) Iniciativa (favorecerá la aparición de la culpabilidad) d) Actividad (sentimiento de inferioridad o de impotencia) e) Identidad (se consigue la asunción y aceptación de roles f) Intimidad (comprensión de la soledad aceptación del aislamiento) g) Creatividad (pasividad, rutina) h) Integridad personal (desesperanza) INTEGRACIÓN DE LAS DIVERSAS TEORÍAS SOBRE EL DESARROLLO a) Estadío oral (0-14 meses): Toda la evolución organizativa se establece alrededor y bajo la influencia de la sensibilidad bucal, la relación familiar se centra en la satisfacción alimentaria, hay una relación de dependencia total del lactante hacia sus padres, básicamente hacia la madre, centrada por las necesidades nutritivas. En esta etapa se establece la confianza y la desconfianza hacia el entorno, hacia si mismo, por parte del lactante. A través de la satisfacción de las necesidades se establece una forma de estar tanto consigo mismo como con la fuente de nutrición y de bienestar, que permite el progreso madurativo, el conocimiento del malestar (ausencia del bienestar) y también de lo indeseable. Los modelos de aproximación hacia el niño, la forma de relacionarse con él dependen de su entorno afectivo, por lo tanto de los determinantes culturales, que son los que establecerán lo que es útil, innecesario, correcto o incorrecto del comportamiento de los adultos que se relacionan con él y del niño. La insatisfacción de las necesidades en esta etapa dará lugar a un estado de malestar y de desconfianza, con inseguridad importante, tanto hacia los demás como hacia si mismo. Hacia el final del primer año, el lactante, empieza a ser capaz de someter sus necesidades a la realidad inmediata, obteniendo un discreto dominio corporal. Hacia el final de esta etapa, a la exploración, ya se pueden apreciar los rasgos fundamentales que se obtienen como consecuencia de una buena (satisfactoria) o mala (insatisfactoria) relación: a) Presenta una actitud sonriente, de optimismo, y confianza. Se siente seguro, sabe que se le ayudará frente a las dificultades, es generoso con los objetos que posee y fácilmente los entrega o los comparte, la persona que le cuida, cuando se obtiene éste tipo de comportamiento es una persona que suele ser generosa, segura de sí misma, con gran capacidad de protección y afectividad. b) En otras ocasiones presenta una actitud de desconfianza y de avidez afectiva notable. Con rasgos claros de dependencia, actitud de insatisfacción relacional, desconfianza hacia los demás y hacia sí mismo (no se atreve a "a hacer", a "actuar", busca ayuda siempre), y presenta además, envidia, celos, impaciencia e impulsividad b) Estadío anal (14 meses a 3 años) En esta fase el niño se enfrenta al entrenamiento para el control de sus esfínteres, aprende a través de este control el valor y la satisfacción del "retener" y del "soltarse", se adquiere así una cierta autonomía, y en su defecto, si se provoca un fracaso, aparecerá una actitud dubitativa y una incapacidad de decisión que permanece de no establecerse el nivel de maduración psicoafectivo suficiente en este período. Todavía se mantiene una dependencia del entorno notable y sigue siendo muy necesario un clima de bienestar y agrado a su alrededor que le suministre confianza y seguridad. Es en éste período cuando inicia su primera ejercitación de control sobre si mismo, gracias a una nueva capacidad recientemente adquirida que consiste en la emisión voluntaria o en la retención, tanto urinaria como fecal. También ahora aparecerán las actitudes oposicionistas hacia los padres, con el "no" se inicia la delimitación de su espacio de acción, se define de forma totalmente primitiva su individualidad. La actitud oposicionista le permite "negociar" actitudes con los padres, adquiere noción de que existe una cierta versatilidad en las propuestas que el ambiente le propone o exige. Su autonomía viene además favorecida, por los progresos psicomotrices, junto a los del lenguaje y además por cierta capacidad de discriminación que adquiere ahora. Progresivamente reconoce sus deseos y presenta mayor cantidad de impulsos, que a su vez se diversifican notablemente, iniciando la emancipación progresiva de los otros. Gracias a toda esta trama de adquisiciones; favorecida en parte por las adquisiciones neurobiológicas que corresponden a este período y por otra al desarrollo psicoafectivo, motivador del desarrollo funcional que permite satisfacer las nuevas necesidades, el niño va adquiriendo una noción de individualidad mas clara de si mismo y se establecen las bases del "poder escoger" y de alguna manera también "dirigir" su futuro. La relación con el niño por parte de padres y educadores, debe estar plena de seguridad, coherencia y constancia; para permitir que a través de sus aciertos y errores pueda discernir con prudencia como debe conseguirse la satisfacción de sus deseos. Debe evitarse el control excesivo, la anticipación, ya que facilitan la creación de actitudes dubitativas, inseguras, que llevan a la perdida del control en la direccionabilidad de la acción y crean un sentimiento progresivo de impotencia e incapacidad. Los rasgos de personalidad, ahora aparecen en total dependencia a las modalidades de la relación existente entre los padres, el entorno y el niño en función de las actitudes educativas hacia: a) Control esfinterial b) Actitudes y forma de tratar las actitudes oposicionistas del niño c) Tolerancia y aceptación de la autonomía del niño d) Grado de "caricia" y juego La no resolución satisfactoria de esta etapa y el mantenimiento de las características estructurales que la definen darán lugar a dos tipos de personalidad una por exceso y otra por defecto, en función de la exigencia en la satisfacción de la necesidad de placer. a) Una impregnada por la necesidad de satisfacción del placer, que no por la necesidad de resolución de los conflictos de la realidad, caracterizada por actitudes de obstinación (autoritarismo, tenacidad, perseverancia), fijación hacia los objetos (escasa generosidad, avaricia, mezquindad), tendencias hacia el coleccionismo, el desorden, a la rebeldía, al enfrentamiento con la autoridad. b) Otra, que aparece como mecanismo de adaptación sin resolución de la necesidad de satisfacción, será, sumiso, resignado, con tendencia marcadas de prodigalidad, limpieza, orden (meticulosidad, puntualidad, perfeccionismo, fidelidad a los compromisos adquiridos, sentido del deber muy desarrollado, tendencia a la duda, escrupulosidad) c) Estadío fálico o edípico (3 a 6 años) Constituye la fase de la iniciativa y la culpabilización, la iniciativa aparece por consecuencia de la identificación con los padres y los procesos psicoafectivos relacionales, tanto con el padre como con la madre, a través del reconocimiento de la triangulación relacional familiar, que definirá su individualidad completa en el seno de la familia. Su evolución psicológica y psicoafectiva se realizará gracias a tres vectores básicos de la maduración: a) El perfeccionamiento del desarrollo locomotriz, puede desplazarse según quiera, alejarse, ir y volver, desaparecer, con lo que su campo de acción se amplia extraordinariamente en relación a la etapa previa. b) La maduración y extensión del lenguaje, que le permite la comunicación rica y variada sobre multitud de situaciones, objetos o personas, que le facilita realizar las preguntas necesarias para satisfacer u curiosidad o su ubicación en relación a las cosas, le permite entender lo que ocurre. c) La imaginación. El desarrollo del sistema locomotriz y su perfeccionamiento junto al desarrollo del lenguaje permite proporcionar al niño nuevos roles y funciones: actuar, proponer, organizar, decidir o arrepentirse y dejar de hacer; con lo cual desarrolla la satisfacción de lo que ambiciona o de sus ilusiones. Este vector madurativo viene favorecido además por el estado de sincretismo en el que se encuentra en el que el niño no diferencia lo que es real de lo que es imaginario La iniciativa, factor preponderante de este estadio, comporta la aparición de la rivalidad y también el enfrentarse necesariamente a la prohibición, no todo esta permitido, no todo puede hacerse; aparece por tanto la norma y la conciencia de lo que se puede y no se puede hacer, se general la culpabilización de forma mas amplia y ello conlleva el enriquecimiento del super Yo o conciencia normativa, cuya génesis se remonta a otros estadios. El rasgo de personalidad, más sobresaliente, también es la iniciativa y su desarrollo correcto da lugar a una actitud positiva de capacidad de acción y de noción de autolimitación no excluyente totalmente positiva. Según los sistemas de relación entre el niño y los padres que se establezcan aparecerán rasgos mas o menos normales (según su intensidad) de personalidad, que consistirán en: a) Necesidad de seducción, necesidad imperiosa de gustar b) Necesidad de llamar la atención, demanda afectiva egocéntrica. A través de la saturación de estas necesidades aparecen diversas actitudes que se manifiestan con: a) Descargas emocionales intensas, bajo la forma de crisis de agitación nerviosa, manifestación colérica, crisis de desconsuelo y llanto. b) Conductas de manipulación y chantaje. c) Actitudes y comportamientos sugestionables, fácilmente influenciables que ponen de manifiesto la falta de voluntad autodirectiva, con personalidad inestable e inconsistente. d) Predomino de la actividad relacional imaginaria con presencia de fabulaciones, mentiras, actitudes teatrales, mitomanía e) Pueden aparecer problemas de asunción de rol y de relación sexual, de no resolverse los conflictos propios a esta fase d) Estadío de latencia (de los 6 años a la pubertad) Tal denominación, dada a partir de la teoría dinámica de la personalidad, se refiere a una latencia (período de espera), en la evolución de la libido. La denominación de latencia en esta fase no se refiere a la maduración de la personalidad en su sentido global, puesto que la maduración ahora es muy rica en matices. También se ha llamado etapa de la actividad y de la inferioridad, es la edad escolar por excelencia y el momento de la identificación a rol funcional de relación tanto desde un punto de vista social-afectivo como lúdico. En la escuela vive las primeras experiencias totales fuera del medio familiar, aprende a funcionar en grupo, a relacionarse con sus semejantes con respeto a la individualidad del otro. El niño se identifica en sus trabajos y en lo que hace. Aprende rápidamente, participa en las distintas obligaciones que se le indican, con disciplina y con voluntad de finalizar bien los encargos que se le hacen. Admira a sus maestros, a sus compañeros, a sus padres y a todos los que ve actuar y los intenta imitar. Esta etapa se centra sobre la actividad, gira alrededor de ella como eje fundamental de desarrollo, sobre el aprendizaje de técnicas y habilidades, la experimentación, la planificación y la participación. Es comprensible que si el niño encuentra problemas de confianza, limitación excesiva hacia su autonomía o dificultades frente a sus iniciativas, desarrollará sentimientos de impotencia e inferioridad. "La firmeza en la relación debe contener la potencial anarquía y el entorno afectivo debe cuidar de protegerlo contra los sentimientos de inseguridad y fracaso" Los rasgos de personalidad se enriquecen y se reafirman a lo largo de este período, con predomino de los mecanismos de adaptación de rechazo, identificación y sublimación e) Pubertad y adolescencia Es la etapa de la crisis de identidad, reaparecen las pulsiones agresivas y libidinales, se reactivan los conflictos infantiles y reaparece el conflicto de la elección. La identidad se afirma a través de un conjunto de elementos como: Los gustos y aficiones, sus afinidades, reconocimiento corporal, imagen de si mismo, función sexual, tendencia religiosa, política, social, profesional, etc. Cuando se adquiere una plena confianza en si mismo y en los demás es cuando podrá aceptar creer en ciertos hombre y en ciertas ideas. Si ha madurado correctamente en la etapa de la iniciativa, habrá desarrollado una fuerte imaginación, útil para la relación con los demás, para la realización de sus aspiraciones y para desarrollar su planes, en general, de acción. La gestión de la acción, le permiten adquirir el gusto de la creatividad, a través de la eficacia objetivada. Estas experiencias le llevarán hacia la elección de un oficio o de una profesión. El peligro radica en la confusión de identidad o en la confusión de funciones que se derivaría de un fracaso en la elección de las distintas tentativas para establecer relaciones interpersonales, o en elegir una función sexual específica, una orientación profesional adecuada