Tema 6: LA INTERVENCIÓN DEL ESTADO EN LA ECONOMÍA 1

Tema 6: LA INTERVENCIÓN DEL ESTADO EN LA ECONOMÍA
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EL SECTOR PÚBLICO: FUNCIONES
LA POLITICA ECONÓMICA
LA POLÍTICA FISCAL
EL PRESUPUESTO DEL ESTADO: INGRESOS Y GASTOS PÚBLICOS
1. EL SECTOR PÚBLICO: FUNCIONES
El Sector Público integra las actividades económicas de una nación que quedan dentro de
la esfera gubernamental. Debemos diferenciar Estado de Sector Público entendiendo que
dentro de este último se encuentran las empresas públicas que no son órganos de gobierno,
mientras que en el seno del Estado existen organismos que no son económicos, como por
ejemplo los tribunales de justicia. No debemos olvidar que el Sector Público pertenece a la
esfera gubernamental, y por ello posee respaldo político e institucional que le permite
ejercer el principio de autoridad atendiendo al interés general, e imponer sus criterios
frente a los demás agentes: familias y empresas.
Funciones del Sector Público
a) Función normativa: consiste en regular la actividad de los agentes económicos a través
de la emisión de normas jurídicas: leyes, decretos etc. De esta manera se pretende crear un
marco de actuación que proporcione la transparencia y certidumbre necesarias para el buen
funcionamiento de la actividad económica.
b) Función asignativa: consiste en facilitar bienes y servicios públicos, como por ejemplo
carreteras, transporte público, justicia, enseñanza etc.
c) Función fiscal: consiste en la fijación y recaudación de impuestos y con ello financia
gran parte de los gastos públicos.
d) Función redistributiva: consiste en la variación de la distribución de la renta entre las
personas, regiones y grupos sociales con el objeto de disminuir las desigualdades existentes.
e) Función estabilizadora: consiste en la intervención en las variables macroeconómicas
(producción, precios, empleo...) con el fin de suavizar las fluctuaciones que puedan
producirse.
2. LA POLÍTICA ECONÓMICA
Sabemos que la ciencia económica se divide en economía normativa y positiva. La
economía normativa es aquella parte de nuestra disciplina que estudia cómo se puede
modificar la realidad, atendiendo a juicios de valor o criterios subjetivos.
Podemos definir la política económica como la intervención del gobierno en los asuntos
económicos de un país con el fin de alcanzar determinados objetivos.
Los fines de la política económica
Un fin en política económica es cualquier aspiración de carácter general que una sociedad
pretende lograr. Estos fines los fijan los encargados de tomar las decisiones políticas, es
decir, los poderes públicos, basándose en los principios constitucionales y en las
preferencias sociales. En un sistema político democrático, estas preferencias las establecen
los representantes de los ciudadanos en los parlamentos y los gobiernos periódicamente
elegidos en los ayuntamientos, en las CCAA o en el Estado.
Entre los fines generales más destacados, a los que todas las sociedades democráticas
aspiran se encuentran: la justicia, la equidad, la libertad, la solidaridad, la paz, la
seguridad y el bienestar material.
Los objetivos de política económica
Los objetivos son la cuantificación económica de los fines propuestos. Estos objetivos se
pueden dividir en económicos y sociales. Los objetivos económicos, también llamados
puros, son aquellos que pretenden alcanzar el bienestar económico general a través de la
búsqueda del crecimiento económico, el pleno empleo, la estabilidad de precios, el
equilibrio de la balanza de pagos y la distribución equitativa de la renta y de la
riqueza. Los objetivos sociales tratan de aumentar el bienestar social mejorando la
educación, la sanidad, la protección del medio ambiente, la cooperación internacional, etc.
3. LA POLÍTICA FISCAL
Es el conjunto de modificaciones que el gobierno realiza en los ingresos y gastos
públicos para incidir en la actividad económica.
En la política fiscal, el gobierno actúa en función de la situación económica del país. Los
principales instrumentos de política fiscal son los gastos públicos y los impuestos. Esta
política influye en la demanda agregada de un país aumentándola o disminuyéndola según
las exigencias de los objetivos marcados por la política económica. A continuación
estudiaremos las distintas situaciones que se pueden plantear y la actuación de la política
fiscal en cada caso.
- Política fiscal expansiva: Si nos encontramos en una situación de baja producción y con
desempleo y queremos elevar el nivel de actividad a corto plazo, es necesario aplicar una
política fiscal expansiva. Para ello se utilizarán los instrumentos de la manera siguiente,
incremento del gasto público y/o disminución de los impuestos. Estas acciones tienen
efectos positivos que se manifiestan en una mayor cantidad de renta disponible que puede
dedicarse al consumo y a la inversión. Esto generará un incremento de la demanda agregada
del país con lo que aumentará la producción, el empleo y los precios.
- Política fiscal contractiva: Si nos encontramos en una situación inflacionista debida a un
exceso de demanda agregada y queremos rebajar el nivel de actividad a corto plazo
tendremos que aplicar una política fiscal contractiva o restrictiva. En este caso, el Gobierno
tomará las siguientes medidas, se disminuirá el gasto público en bienes y servicios, y se
incrementarán los impuestos. Como consecuencia de estas acciones disminuirá la renta
disponible, lo que ocasionará menos consumo e inversión y por lo tanto caerá la demanda
agregada del país con lo que disminuirá la producción, el empleo y los precios.
4. EL PRESUPUESTO DEL ESTADO
Los PGE son un conjunto de documentos donde se recogen los gastos y los ingresos que el
Sector Público central tiene previsto realizar durante un año. Los PGE deben aprobarse por
ley (Ley de los PGE) que elabora anualmente el Gobierno a través del Ministerio de
Economía y Hacienda. Esta ley se debate y aprueba en el Parlamento, y su ejecución
corresponde al Gobierno.
Los gastos públicos
Los gastos públicos son compromisos de pago que el Sector Público contrae como
consecuencia de su intervención en la economía. Por tanto su análisis detallado nos permite
averiguar las prioridades políticas del programa de gobierno de un país.
Agrupamos los gastos según un criterio económico atendiendo a su destino, siguiendo este
criterio podemos clasificar los gastos públicos en las siguientes subpartidas:
- Gastos corrientes: son los que se generan cada vez que el Sector Público compra bienes y
servicios, además de los gastos de personal que trabaja en empresas e instituciones públicas
y los pagos por intereses de la deuda pública. Con ellos se proporciona a los ciudadanos
bienes y servicios públicos como educación, asistencia sanitaria, administración de justicia,
defensa nacional etc.
- Gastos de capital: son las inversiones destinadas a mantener y ampliar el capital
productivo del país en infraestructuras tales como carreteras, puertos, aeropuertos, centros
educativos y hospitales.
- Otros gastos: esta partida incluye los gastos que el Sector Público realiza sin recibir nada
a cambio. Son por tanto, transferencias de fondos que pueden ir destinadas a personas físicas
(seguros de desempleo, becas) o a empresas con el fin de abaratar los costes de producción
de determinados bienes.
A través del manejo del gasto público la política presupuestaria cumple dos de las
funciones propias del Sector Público: por un lado, la asignación de recursos, ya que oferta
los bienes y servicios que el sector privado no cubre debido a su elevado coste o la falta de
rentabilidad; por otro, se redistribuye la renta al restar ingresos a unos grupos y enviárselos a
otros mediante el empleo de los impuestos y las transferencias.
Los ingresos públicos
Los ingresos públicos son recursos que recibe el Sector Público para hacer frente a los
compromisos de gastos reflejados en el presupuesto, y de este modo cumplir los objetivos de
la política económica que se haya propuesto.
Los ingresos públicos pueden agruparse en tres grupos:
- Ingresos fiscales o tributos: son los pagos que el contribuyente está obligado a efectuar a la
Administración Pública cuando realiza determinados hechos establecidos en una ley, tienen
pues carácter obligatorio. Constituyen la principal fuente de ingresos del Estado. En nuestro
país existen tres tipos de tributos: Tasas, que son pagos que el contribuyente hace a
cualquier administración pública como contraprestación a algún servicio previamente
solicitado (renovación de DNI). Contribuciones especiales, en España, son recaudadas por
los ayuntamientos y se deben de pagar cuando, sin que medie petición, una corporación
local realiza alguna obra o servicio público que beneficie o aumente el valor de los bienes
del contribuyente (mejora en las infraestructuras del agua). Impuestos, que son pagos
coactivos y sin contraprestación que se deben realizar a las administraciones públicas. El
motivo de la obligación del pago es la capacidad económica que demuestra el contribuyente,
siempre conforme a lo recogido en una ley. Por su volumen de recaudación, los impuestos
son la modalidad de tributos más importante, y constituyen el instrumento más eficaz de la
política fiscal.
- Las cotizaciones a la Seguridad Social, son las contribuciones que trabajadores y
empresarios hacen a este organismo con el fin de recibir determinadas prestaciones sociales:
sanidad, pensiones, subsidios de desempleo, etc.
- Otros ingresos, podemos incluir los siguientes: 1) los rendimientos patrimoniales
procedentes de la actividad de las empresas públicas, es decir de los beneficios de estas
compañías. 2) Los ingresos por ventas de empresas públicas, títulos de la deuda pública,
loterías y apuestas del Estado, etc. 3) Ingresos procedentes de la UE destinados a la
agricultura, las regiones, formación de empleo, etc.
El equilibrio presupuestario
El presupuesto se elabora con unas previsiones de ingresos que permitan hacer frente a los
gastos programados, es decir que al menos ambas magnitudes han de coincidir. En la
práctica, conforme avanza el periodo rara vez coinciden el total de gastos con los ingresos
previstos, lo que se conoce como equilibrio presupuestario.
Cuando los gastos públicos son superiores a los ingresos, se produce un déficit público. En
el caso contrario, si los ingresos son mayores que los gastos, la situación es de superávit. Es
más frecuente el déficit que el superávit, debido a que el Estado de Bienestar pretende cubrir
numerosas necesidades sociales y, por tanto, aumentan notablemente los gastos públicos.
La financiación del déficit público
Existen tres métodos para la financiación del déficit:
- Creación del dinero: esto supone una política monetaria expansiva que probablemente
produzca subidas indeseadas de precios.
- Establecimiento de nuevos impuestos: es una medida que resulta siempre impopular, ya
que reduce la renta disponible de las economías privadas.
- Emisión de deuda pública: es el método más utilizado. Consiste en obtener préstamos de
los particulares mediante la suscripción, por parte de éstos, de Letras del Tesoro, Bonos y
Obligaciones del Estado y otros títulos públicos. Recurrir al endeudamiento significa que el
Estado tiene que devolver las cantidades obtenidas más los intereses pactados, con lo que
aumentará el gasto futuro.
ACTIVIDADES
1. Explica las funciones del Sector Público.
2. Define Política Económica.
3. Completa la tabla:
Política Económica
Fines
Objetivos
4. Define política fiscal y explica cómo se aplica una política fiscal expansiva y qué efectos
tiene sobre la economía.
5. Concepto y clasificación de los gastos públicos.
6. Explica los distintos grupos en los que podemos agrupar los ingresos públicos.
7. ¿Cómo se puede financiar el déficit público?
8. Explica las siguientes situaciones: equilibrio presupuestario, déficit público y superávit
público.
9. Busca información relativa al déficit público español.