Nuestras bazas son el trato humano y la atención rápida

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SALUD EXTREMADURA
Mayo de 2005
ENTREVISTA
Luis Mendoza Torres
Médico de Urgencias
«Nuestras bazas son el trato
humano y la atención rápida”
Luis Mendoza Torres es el coordinador de Urgencias del Complejo
usuarios de urgencias; natural de Capileira, un pueblo de la Alpujarra
Hospitalario Llerena-Zafra, Complejo con los mejores resultados de
granadina, este profesional nos ofrece algunas pinceladas del servicio
satisfacción extraídos de la encuesta de ámbito regional realizada a los
que coordina y por el que apuesta
Natural de Capileira, un pueblo de la Alpujarra granadina,
Luis Mendoza Torres reconoce
que desde que “se recuerda”
quiso ser médico, nunca otra
profesión, ¿por qué médico de
urgencias hospitalarias?
-A mí siempre me gustó la medicina intensiva. Sin embargo, las
plazas MIR de esta especialidad
que podía elegir estaban demasiado lejos, y quise quedarme cerca
de mi familia, por lo que decidí
hacer Familia, siempre con la
pretensión de más tarde seguir
con Intensiva. Sin embargo,
estando de residente comencé a
conocer las urgencias hospitalarias y descubrí que me gustaban.
Las urgencias tienen el encanto
de la imprevisibilidad, no me
gusta la monotonía que puede
acarrear la asistencia a los mismos pacientes o ver las mismas
patologías. En urgencias no hay
un paciente igual que otro, ni una
patología igual a otra.
-El amplio abanico del que
Mendoza habla se amplía dada
su responsabilidad en este servicio de urgencias, por lo que
tiene que compaginar la asistencia con tareas de coordinación y organización. El teléfono
suena y las incidencias se suceden..., el ritmo es trepidante...
-Las urgencias son 24 horas al
día. Además hay que tener en
cuenta que hacemos noche cada
dos o tres días. Nuestro ritmo de
trabajo nos hace pasar poco tiempo en casa, y el que tenemos lo
dedicamos a descansar, porque
aquí hay que estar siempre alerta,
muy despierto. Pero compensa
porque estamos encantados con
lo que hacemos.
-El área de Llerena-Zafra disfruta de los datos más positivos
que se desprenden de la encuesta de satisfacción realizada a
los usuarios de los servicios de
Urgencias, ¿qué hacen para
que así sea?
-Tras la encuesta yo me esperaba
buenos resultados, pero no tanto.
Estuvimos debatiendo el tema, y
la verdad, es que un hospital
pequeño, muy accesible, y el trato personal son factores que
influyen en esta alta satisfacción.
Y es que esta satisfacción se nota.
Hay temporadas de meses y
meses en las que no recibimos ni
una sola reclamación. Otra factor
es la rapidez en la atención y en
las pruebas. De hecho la demora
sólo en los hospitales, ya que un
médico de Primaria puede resolver hasta un 90% de la patología,
el resto es la que se deriva a
segunda opinión, a especializada,
a pruebas complementarias...
Luis Mendoza Torres, en su despacho de Urgencias en el Hospital de Llerena.
“Ayudar a bien morir no se traduce en inducir
a la muerte, sino en alivio del sufrimiento”
-¿Cuándo se debe usar un servicio de urgencias?
-Siempre que corra peligro la
vida del paciente, cuando éste
sienta la necesidad de acudir, o en
cualquier caso tras la derivación
de Primaria. Desde luego nosotros tenemos que ver al paciente
siempre con los medios disponibles que tengamos. Meditamos
cada paso que damos dos veces.
Sin embargo, somos humanos y a
veces no supimos, no pudimos...,
sin embargo el procedimiento
asistencial se cumple siempre, el
problema está cuando no se cumplen las expectativas del paciente
o de su familia. A pesar de que
estamos obligados a poner todos
los medios a nuestro alcance, no
podemos prever resultados. Retomando el uso de urgencias, ya no
sólo estamos atendiendo exclusivamente patología propia de
urgencias, sino también servimos
de segunda opinión, para hacer
pruebas complementarias, por lo
que somos un apoyo fundamental
para Primaria en cuanto a estas
pruebas.
“El enfermo terminal también
es paciente de urgencias en
cuanto la familia decide ingresarlo porque aun hay mucha
gente que no entiende la muerte
en casa. Por supuesto que más
de 36 horas no se permanece en
Urgencias, si la familia insiste
en no llevarse a casa, se hospitaliza en planta. La atención a
este tipo de pacientes está protocolizada en el sentido de ayu-
dar al terminal a bien morir, y
con esto no se está induciendo a
la muerte, sino a que se le alivie
el sufrimiento, no es ir en contra de la naturaleza, no se trata
de acelerarle la muerte. Si el
enfermo necesita sedación, la
muerte que le sobreviene lo
hará sin agitación, sin dolor.
Hay que ver morir a muchos
enfermos para que tú intérpretes esa mirada, esa angustia. La
sedación únicamente propicia
que esa transición sea serena.
Trabajar tan cerca de la muerte
cambia la escala de valores.
Durante los veintidós años que
llevo en Urgencias he visto casi
de todo lo que se puede ver.
Pero también salvar vidas de
enfermos críticos es precisamente el estímulo que me lleva
a pensar que voy a estar otros
22 años más”.
en la primera atención es cero, a
veces estamos con el historial del
enfermo en la mano esperándolo
en la puerta a que llegue. Además, la sectorialización de la
población tras la apertura del
Hospital de Zafra, también nos
permite tener menos presión asistencial.
lizado, la mitad de los usuarios
para Zafra, la otra para Llerena.
Esto podría redundar en un mejor
servicio. Sin embargo, cada año
aumenta la frecuentación. Por
ejemplo, Llerena recibe el mismo
número de pacientes que antes de
la apertura, y en Zafra ocurre algo
similar.
50% y el resto procede de pacientes que llegan por iniciativa propia. La accesibilidad al servicio
hace que el usuario lo use sin
medida.
-¿Qué os diferencia de otros
servicios de Urgencias?
-Al ser un complejo hospitalario
comarcal, no tenermos aún UCI
como tal, pero sí tenemos material y recursos humanos. Nos
caracteriza la organización de
unos Cuidados Intermedios que
nos permiten cuando llega un
enfermo crítico darle cuidados
intensivos para estabilizarlo. En
Zafra, estos cuidados intermedios
responde a la Unidad de Cuidados Especiales, una zona ambivalente para reanimación, observación y cuidados intermedios. La
futura UCI dará una gran proyección a nuestra área de salud.
-Al hilo de esto, ¿qué ha significado el nuevo hospital para las
urgencias del área?
-Con su apertura hemos duplicado los recursos, ya que se trata de
un servicio de urgencias paralelo
con otros ocho médicos; el área
no se ha partido, pero sí sectoria-
-Las estadísticas cantan que las
Urgencias crecen exponencialmente, ¿a qué se debe?
-Porque si duplicas la oferta,
aumenta la demanda. Antes el
90% de las urgencias venían derivadas de Atención Primaria. Ahora este porcentaje baja hasta un
-¿Habría entonces que educar
al usuario?
-Por supuesto. Y la labor fundamental de esta concienciación
sería del profesional que está más
cerca de ellos como ocurre con el
médico de Familia. No puede
seguir aumentando esta frecuentación porque los recursos, como
todos, son limitados. Hay que
decirle al usuario que no es cierto
que la buena medicina se hace
-Y vosotros como servicio, ¿qué
aportáis a este área?
-Urgencias es el espejo del hospital en concreto, y del área en
general. Hay que tener en cuenta
que más de la mitad de la población pasa alguna vez al año por
urgencias, dato que se eleva en
una zona con una población
envejecida. Y la impresión que se
lleva está marcada por el trato
humano que ofrecemos.
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