Como conseguir los mejores resultados

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Multilingual Matters
Kasper, G. and K. Rose (2002). Pragmatic Development in a Second Language.
Blackwell.
Pavlenko, A. and Lantolf, J. (2000). Second language learning as participation and the
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Norton, B. (1997). Language, identity, and the ownership of English. TESOL
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Schieffelin, B. and Ochs, E. (1986). Language socialization. Annual Review of
Anthropology 15, 163-191.
Como conseguir los mejores resultados
Título: Como conseguir los mejores resultados. Target: Primaria. Asignatura/s: ninguna asignatura en concreto.
Autor/a/es: Judith Domínguez Martín, Maestra Educación primaria, Diplomada en Magisterio Especialidad Educación
Infantil y Audición y Lenguaje.
C
uando nos incorporamos por primera vez a un centro educativo no conocemos a nuestros
alumnos/as y eso es una tarea difícil para los maestros/as, podemos encontrar mucha diversidad
en el aula y diferentes ritmos de aprendizaje, lo que supondría tener que adaptar el ritmo a cada
alumno/a.
Por eso debemos buscar las mejores estrategias para “ganarnos” a los alumnos/as y con ello
conseguir los fines que nosotros como docentes nos proponemos en un principio y los que los
discentes deben alcanzar en cuanto al aprendizaje y adquisición de conocimientos, sin olvidar las
normas de comportamiento.
Las normas de comportamiento se trabajan desde que los alumnos son escolarizados en infantil, y
se deben respetar para el buen funcionamiento de las clases. En las primeras reuniones de tutoría con
los padres se deben establecer unas normas básicas a cumplir, y debe haber una coordinación entre
los docentes y las familias.
Las normas básicas son: prestar atención
en clase, depositar la basura en la papelera,
no hablar con los compañeros, respetar a los
profesores y a los iguales, levantar la mano
para hablar, salir en fila y en orden, cuidar el
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material propio y de los demás, respetar el turno de palabra… y podríamos poner un sin fin de normas
más, pero luego cada maestro/a establece normas más individualizadas a su grupo-clase. Un ejemplo
es: cuando algún niño/a no hace los deberes se le apunta en una lista de clase que está a la vista de
todos, y cuando lleve cinco cruces, no podrá realizar la actividad extraescolar más próxima que se
realice con el grupo, teniendo que quedarse en el aula haciendo tareas.
Los alumnos/as recibirán por escrito las normas de comportamiento al empezar el curso escolar, y
hay que insistir mucho en que esas normas se lleven a la práctica, y para eso los docentes son los
responsables de hacer cumplir esas normas.
Los primeros días son imprescindibles para guiar una clase, si los alumnos/as nos ven con
inseguridad y no establecemos las normas desde el principio, pueden llegar a coger unas costumbres
irreversibles a lo largo de todo el curso, por eso debemos ser desde un principio firmes y reforzarles
sus comportamientos, tanto negativamente como positivamente.
Por eso debemos tener en cuenta estos dos conceptos que tienen una gran importancia:
REFUERZO NEGATIVO (castigo): es el tipo de condicionamiento que se da cuando la conducta no es
la adecuada y se pretende que disminuya la probabilidad de emisión y no se repita.
REFUERZO POSITIVO (premio): es el tipo de condicionamiento que se da cuando la conducta es
adecuada y se pretende que aumente la probabilidad de emisión de esa conducta.
Los maestros/as buscamos diferentes métodos para ganarnos la confianza de los discentes y
aunque no es fácil, cada uno busca sus refuerzos en función a las características de su grupo-clase.
Castigados sin recreos, de pie o mandar más deberes, son los castigos más comunes, pero no
debemos olvidar el castigo positivo como darles un caramelo o unas simples palabras como: ¡Qué
bien lo has hecho! , ¡Ánimo que seguro que te sale muy bien! Estos refuerzos motivan a los
alumnos/as lo necesario para seguir en esa línea e ir reduciendo las malas costumbres.
Pero… ¿Dónde está el principal problema?
Los padres se quejan de que los hijos sacan notas muy bajas, no hacen los deberes, reciben
continuamente notas por parte de los docentes diciendo que su hijo/a no hace los deberes o se
comporta mal, habla mucho, etc., pero cuando llegan a casa los niños no reciben ningún tipo de
refuerzo negativo y consiguen lo que quieren. Los padres se excusan diciendo que como trabajan todo
el día, y para un ratito que tienen para disfrutar de sus hijos/as no los van a castigar. Pero por el
contrario, si el niño viene con un examen con muy buena nota, les compran un regalito, o algo que el
niño/a lleva pidiendo durante mucho tiempo.
Entonces aquí está el problema: “si saco buena nota mis papás me comprarán algo” y los niños
estudian no porque se sientan obligados a estudiar, sino porque así tendrán un regalito, y saben que
aunque no aprueben o no hagan los deberes no pasa nada, porque sus padres les reñirán pero nada
más. Saben que al final no pierden nada.
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Ellos no se sienten responsables de nada, no son conscientes de la importancia que tiene la escuela
y el aprender, y en muchos hogares, ambos padres trabajan y no pueden dedicar mucho tiempo a los
hijos, quedando éstos bajo el cuidado de abuelos u otros familiares.
Hoy día los niños/as con el mínimo esfuerzo consiguen todo lo que quieren, no tienen hábitos ni
tareas asignadas. No se sienten obligados y los padres son los que realizan todas las tareas en casa.
No podemos generalizar pero somos conscientes de que en muchas familias ocurre esto.
Podemos seguir diferentes programas de reforzamiento con los alumnos, y en las tutorías
individuales con los padres, pueden estos llegar a un acuerdo con los docentes. Cada alumno/a es
diferente y cada uno necesita refuerzos diferentes.
Entonces podemos decir que el principal problema no está en la escuela sino en los hogares, y por
eso en la escuela se pretende que adquieran normas, y tengan obligaciones que cumplir, llegando a
un acuerdo con los padres para conseguir lo que se pretende, que es que los alumnos aprendan y
adquieran hábitos.
Entonces… ¿Podemos los maestros conseguir que nuestros alumnos en clase se comporten como
deben? ¿Y podemos conseguir que adquieran los conocimientos y aprendizajes previstos? Si, si
podemos pero debemos intentar también que desde los hogares pretendan lo mismo y actúen en
colaboración con el centro educativo. Los docentes en muchas ocasiones asumen roles que deberían
ser exclusivos de la familia, pero lo más adecuado sería que hubiera una colaboración entre padres y
docentes. ●
Bibliografía
Psicología del desarrollo. Infancia y adolescencia. Editorial Panamérica. Madrid. Kathleen Stassen.
Desarrollo socioafectivo e intervención con las familias. Editorial Itamar. España. Nuria Prat y Marisa del Río.
¿Por qué no leen? La importancia de fomentar la
lectura en los alumnos
Título: ¿Por qué no leen? La importancia de fomentar la lectura en los alumnos. Target: Secundaria. Asignatura/s:
Lengua y Literatura Española. Autor/a/es: María Sinnia González Alonso, Licenciada en Filología Hispánica.
E
l objetivo principal de este artículo es el tratar la importancia de fomentar el hábito lector en los
alumnos de hoy en día, para ello daremos unas pautas que creemos pueden ser útiles a este fin.
Los adolescentes de hoy poseen múltiples distracciones que los separan del mundo de los libros,
televisión con gran cantidad de canales, video consolas, internet etc. En su tiempo libre tienen
muchísimos recursos antes de coger un libro, que para la mayoría resulta aburrido.
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