Usted necesita un buen(a) amigo(a)

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Semilla de Mostaza
Jorge Enrique Díaz
Fecha: 1/4/2015
Usted necesita un buen(a) amigo(a)
– David y Jonatán, Rut y Noemi
Base: 1 Samuel 18:1-4 y Ruth 1:16
Introducción
1. Jonatán y Rut son dos personajes que ilustran la clase de persona que son buenos
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amigos. Usted no necesita a “su mejor amigo” sino a un buen amigo. Usted, a su
vez, puede ser un buen amigo para alguien.
Durante el mes de febrero celebramos el Día del Amor y la Amistad. Es una
ocasión para reforzar los vínculos de cariño entre dos o más personas. En relación
con este ambiente me ha parecido oportuno buscar en la Biblia a personas que
expresaron una buena amistad para aprender cómo ser un buen amigo para
alguien.
David es conocido como el rey de Israel que terminó de conquistar la Tierra
Prometida. También es conocido por su grandeza y por haberle dado a Israel una
estructura socio-política que proyecto al pueblo hebreo como nación delante de
las naciones. También, sabemos que fue un músico, compositor, poeta y cantor.
Pero lo que muy pocos reconocen es que David tenía un gran amigo, un buen
amigo, Jonathan. 1 Samuel 20:17 nos dice: “Jonatán hizo jurar de nuevo a David,
a causa de su amor por él, porque le amaba con toda su alma”.
Jonathan fue el hijo del rey Saúl. Este joven según 1 Samuel 18:1-4, amó a David
como a sí mismo.
“El amigo que es como tu propia alma” o “tu íntimo amigo” según
Deuteronomio 13:6 es la definición bíblica de un verdadero amigo. Dicho de otra
manera, “nuestro amigo es como nuestro segundo yo” o “mi sombra”.
Es por eso que un amigo es leal aun cuando a usted se le hace difícil ser
leal.
Es el primero en llamar en los buenos tiempos o en los malos días.
Es el que te da y da y no espera que le pagues.
Es el que camina con uno en todas las estaciones;
camina en el invierno de la inconformidad;
camina en el verano de las soledad;
nos acompaña en el otoño de la edad y
camina con alegría en el tiempo de la primavera.
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Es la persona que nos ha visto desnudos, con todas nuestras deformaciones
y bellezas y nos ama de todas maneras.
Es la persona que sabe que deseamos algo y se esfuerza para que lo
tengamos.
Es la persona que nos baña con gracia y paciencia cuando nosotros no lo
merecemos.
Es la persona que se sacrifica a si mismo por usted.
Es la persona que como Juan el Bautista decide que usted es quien debe
crecer mientras él debe desaparecer.
Es la persona quien como Jesús decide morir en la cruz para demostrarnos
cuánto nos ama.
Es el que está dispuesto a poner su vida por sus amigos (Juan 15:13, 14).
Es de la persona de quien podemos cantar, “Oh que amigo nos es Cristo, él
llevó nuestro dolor…”.
Primero, Usted no necesita un “mejor amigo(a)”, usted necesita un “verdadero
amigo”
1. Jonatán es más que un compañero o un socio. El escritor de Proverbios (18:24)
nos advierte del peligro de confundir las relaciones entre un compañero y un
verdadero amigo. Leamos: “Hay algunas personas que juegan a ser amigos,
pero hay un verdadero amigo que es más fiel que un hermano” (Traducción de
JED). Relacionemos esta expresión con esta otra de Proverbios 17:17, “En todo
tiempo ama el verdadero amigo, y el hermano nace para ayudarnos cuando
más lo necesitamos”.
2. Un amigo del alma o un verdadero amigo es esa persona con quien podemos
compartir nuestras grandezas y nos aplaude con orgullo; es esa persona con
quien podemos compartir nuestras faltas y llora con nosotros mientras nos anima
a arrepentirnos y a restaurarnos.
3. Algunas personas al borde de la muerte han confesado que si pudieran volver a
vivir lo primero que harían es tener buenos y verdaderos amigos. Muchos
“grandes personajes” han muerto abandonados y sin nadie que les cerrara los
ojos o derramara una sola lágrima por su partida.
4. Si le pido que tome una hoja de papel y escriba el nombre de cinco personas a
quienes considera sus verdaderos amigos, esos que van a estar a su lado pase lo
que pase, ¿los nombres de quiénes escribirá?
5. Y usted, ¿imagina que su nombre estará en la lista de los verdaderos amigos de
algunas personas? ¿Cuántas se imagina?
Segundo, ¿Qué puede hacer para ser un verdadero amigo de alguien?
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1. Los verdaderos amigos son escasos. Alguien dijo que sobran los dedos de una
mano para contar a los verdaderos amigos.
2. En Rut 1: 16, 17 encontramos una amistad verdadera que se expone
abiertamente. Pero Rut respondió: -- No me ruegues que te deje y que me
aparte de ti; porque a donde quiera que tú vayas, yo iré; y donde quiera que tu
vivas, yo viviré. Donde quiera que tú pases la noche, yo te acompañaré. Tu
pueblo será mi pueblo, y tu Dios será mi Dios. Donde tú mueras y moriré; y allí
seré sepultada. Así me lo permita el Señor y aun me conceda que sólo la muerte
hará separación entre tú y yo.
3. Si usted desea ser un verdadero amigo, primero salga de “egolandia”. No, no es
el nombre de un parque de diversiones, es el ecosistema que usted ha creado
para sí mismo. En “egolandia” la ley más importante es “qué beneficio obtengo”
(en inglés hay un dicho que va más o menos igual, “What’s in It for Me?) Por
ejemplo, en nuestros días llamamos “amigos” a las personas que están en
“nuestra red” y que nos informan de oportunidades de trabajo, nos ofrecen
ideas sobre cómo progresar, nos abren las puertas para escalar el poder o la
fama – pero si no hace eso o algo mejor… buscamos otra “red de amigos”. Una
nueva red que provea para nuestras ideas egocéntricas.
Es lamentable que en la sociedad, en la iglesia y aun en la familia hemos perdido
el arte de hacer amigos por causa de nuestro “ego” desproporcionado. Yo
primero, yo segundo, yo tercero y siempre yo. En lugar de preguntarnos ¿qué
beneficio obtengo? Debiéramos preguntar como verdaderos amigos, ¿aquí hay
algún beneficio para ti? Solamente cuando bloqueamos y quitamos nuestro ego
del primer lugar y lo ponemos muy abajo entonces los intereses de la otra
persona van a ocupar el primer lugar y nos volvemos un Jonatán o una Rut, es
decir, verdaderos amigos.
Cuando un amigo tiene éxito, vaya para celebrar con él. Cuando un amigo
fracasa, vaya para llorar con él. Jesús dijo que gocemos con los que se gozan y
lloremos con los que lloran. Siempre me he preguntado qué es más fácil hacer,
reírnos con los que ríen o llorar con los que lloran. Cuando vivimos en egolandia
cambiamos las cosas y lloramos cuando otros ríen y nos reímos cuando otros
lloran.
4. Tercero, Si usted desea ser un verdadero amigo, recuerde que un elevador no
solamente sube, también baja.
Algunas personas tenemos más facilidad para hacer amigos que otras. Los
hombres generalmente caemos en desventaja en el departamento de “amistad”.
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Alguien dijo que la idea de buenos amigos de los hombres es “alguien a quien no
has visto por diez años”. Es decir que a los hombres nos gusta tomar el elevador
cuando sube, pero sufrimos significativamente cuando tomamos el elevador
cuando baja. Es por eso que al elevador lo llamamos “ascensor”, pero nunca nos
referimos a él como “descensor”.
El psicólogo clínico Dan Montgomery, (citado por Leo Sweet) usa la imagen
de tomar el ascensor para bajar para explorar lo que significan los niveles más
profundos de verdad y confianza en la relación entre dos personas. Permítanme
explicar la idea del ascensor que baja…
La intimidad del ascensor que baja comienza en el nivel de la apariencia. Aquí
las personas se relacionan a través de costumbres. Las conversaciones están
llenas con pequeñas informaciones sobre el clima, los deportes, los terremotos,
la familia y el estado del mundo. Este es un valioso y necesario nivel para
relacionarnos y hacer negocios con personas a quienes no conocemos bien.
El siguiente nivel al cual baja el ascensor es el nivel de compañerismo. Aquí
revelamos algunos de nuestros sentimientos personales y opiniones. Ahora
hablamos de nuestro punto de vista sobre política, religión, sexo y matrimonio.
En este nivel corremos el riesgo de ofender a alguien por pensar de manera
diferente a la nuestra. Sin embargo, muchas personas saben cómo participar en
estos intercambios sin tomarlos de una manera muy personal.
El tercer piso de bajada del ascensor es el nivel de amistad. Debemos estar
dispuestos a experimentar vulnerabilidad emocional. En este nivel compartimos
toda clase de sentimientos, aun exponemos algunos de nuestras emociones más
profundas. Buscamos compatibilidad, empatía y confianza mutua. Si todo va bien
y la otra persona responde en este mismo nivel, puede ser que escojamos bajar a
un nivel más el ascensor.
El cuarto nivel de nuestro viaje hacia abajo es el de la intimidad. Ponemos a la
luz lo que hemos mantenido en la obscuridad interior de nuestro ser. Las
memorias, las heridas y las emociones que nos hace ser quiénes somos y cómo
pensamos pero que podemos sentir algo de vergüenza de abandonarlas. Ahora
compartimos los deseos de nuestro corazón. Las personas que no llegan a este
nivel en su amistad o en su matrimonio puede ser que necesiten a un pastor
como consejero o a un terapista profesional que les ayude.
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5. Cuarto, Si usted desea ser un verdadero amigo, recuerde que hay que pagar un
precio o sacrificar algo.
Algunas veces el costo más alto que debemos pagar por ser amigos de alguien es
nuestro precioso y no renovable recurso: el tiempo. Se dice que Aristóteles tenía
el dicho que para que nuestra comida tuviera sabor debía tener una pizca de sal.
No hay comida sin sal. No hay amistad verdadera que no exija tiempo. En una
cultura como la nuestra en la cual se dice que “el tiempo es dinero” y “el dinero
es tiempo”, el “costo” de la verdadera amistad puede requerir un gran sacrificio.
A nosotros nos parece que una relación que demanda tanto sacrificio es mejor
no tenerla. De nuevo los que vivimos en una cultura de comodidad nos resulta
más fácil decir, “lo siento, tengo otro compromiso” que dejar la comodidad para
ser un verdadero amigo de alguien.
Se dice que el famoso padre del psicoanálisis Sigmund Freud preguntó: “¿Qué es
lo que más desea una mujer?” – Y él mismo responde: “Una mujer desea a un
compañero que se interesa por lo que ella desea”. Y hacer eso… sea una mujer o
un hombre puede demandar sacrificio y compromiso de vida.
Conclusión: Tengo unas preguntas para usted…
1. ¿Tiene usted algunas personas a quienes les puede decir, “amarte es un gran
honor para mí”? Escriba sus nombres.
2. Se dice que las mujeres están dispuestas a sacrificar un éxito personal a cambio
de una relación personal, pero que los hombres están dispuestos a sacrificar
una relación personal con tal de alcanzar un éxito. ¿Está usted de acuerdo? Por
qué si o por qué no.
3. Todas las relaciones entre dos personas tienen dimensiones sexuales, pero
solamente una intimidad conduce a la expresión sexual. ¿Por qué si o por qué
no usted está de acuerdo? Explique.
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