PLATÓN: “ LA REPÚBLICA

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PLATÓN: “ LA REPÚBLICA
DATOS SOBRE LA OBRA
“La República” es un diálogo platónico de madurez, una de sus obras más importantes.
Fue escrita entre los dos primeros viajes de platón a Siracusa, nuestro autor debía tener
entre cuarenta y cincuenta años (escrita, probablemente entre los años 389 –369 a. d. C.),
precisamente estos son los primeros años de funcionamiento de la Academia. En este
momento de su vida Platón desarrolla una filosofía original, y Sócrates, que es el
personaje principal del diálogo, expresa ya ideas totalmente platónicas.
Este diálogo filosófico se presenta como una investigación sobre el concepto de
JUSTICIA, que va extendiéndose a temas progresivamente más conceptos con lo que,
finalmente se tratan los aspectos fundamentales de la filosofía platónica de madurez;
teoría de las ideas, epistemología racionalista, intelectualismo moral...., pero el asunto
fundamental de la obra es de carácter político. Como indica el título, el diálogo es una
reflexión sobre el régimen político ideal y la relación que debe establecerse entre el
ciudadano y el estado para que sea posible una vida virtuosa y feliz.
Esta obra consta de diez capítulos o “libros”, en los cuales el tratamiento de ideas
políticas es recurrente, como queda claro al examinar la estructura general de la obra
En los primeros cuatro libros Platón se centra en el tema de la JUSTICIA, para ello
desarrolla su teoría de la composición tripartita del estado, de acuerdo con la constitución
del alma, y en la idea de Justicia como ARMONÍA
En los libros V al VII (en los que están los pasajes que vamos a leer), Platón analiza
bajo qué condiciones puede realizarse un estado justo, sobre todo aclara la importancia
que tiene, para conseguir la justicia social, el gobierno del sabio
En los últimos libros, del VIII al X, Platón explica cuáles son los distintos tipos de
gobierno injusto, para aclarara, finalmente la relación que existe entre la justicia, la virtud y
la felicidad auténtica.
Hay que entender el diálogo “La República” como un alegato a favor de un sistema
social y político que, por estar constituido según el modelo racional de las IDEAS, es
inmune a la degradación y a la corrupción que origina el transcurso del tiempo en el
mundo material y que, por ello, permite al ser humano desarrollar una vida virtuosa y feliz.
GUIÓN DE LECTURA DEL TEXTO
Con el fin de hacer más fácil la comprensión del texto, vamos a dividir cada uno de los
libros en una serie de partes. En el texto aparece esta división en partes y una
numeración en el margen izquierdo, esta numeración corresponde con los números que
hay, resaltados en negrita, en el guión de lectura, os servirán para relacionar cada
fragmento del texto con los comentarios y explicaciones del guión de lectura.
LA REPÚBLICA: RESUMEN ESQUEMÁTICO.
LIBRO VI, 508e-511e
Alegoría del sol.
Introducción: Con ella Platón pretende mostrar la primacía ontológica (es decir, en cuanto
a realidad) y epistemológica (en cuanto al conocimiento) de la idea de Bien. Platón
compara al Bien con el sol, las Ideas con los seres materiales sensibles, la inteligencia
con la vista, y el ojo -órgano que hace posible la visión- con el alma -elemento del ser
humano que hace posible el conocimiento. A continuación aclara la relación que existe
entre estos elementos, tal como se refleja en el esquema de abajo, igual que el sol aporta
la luz que hace posible que el ojo pueda ver los objetos sensibles, la Idea de bien aporta
la verdad necesaria para que el alma pueda conocer las Ideas. El sol es la causa de que
las cosas sean, y que puedan ser vistas, igualmente la Idea de Bien es la causa de que el
resto de las Ideas sean, y además de que puedan ser conocidas.
508-a,b,c,d
El sol, fuente de luz, es causa de la visión (el ojo es comparable al son ya que su poder
de visión procede directamente del astro rey, por emanación), sin embargo el sol mismo
puede ser también objeto de visión.
Explicación del sentido de la analogía. El alma, para conocer, precisa volverse hacia
objetos inteligibles iluminados por el Bien, del mismo modo que el ojo para ver necesita
volverse hacia objetos iluminados por el sol (esta analogía Bien=sol; fuente de
verdad=fuente de luz, se repite en el “mito de la caverna” en el libro VII)
508-e
Superioridad del Bien en el conocimiento y la realidad:
LUZ
SOL.......................OJO (VISIÓN).........................objetos sensibles iluminados (incluido el
sol)
IDEA DE BIEN.......ALMA (INTELIGENCIA)........objetos inteligibles verdaderos (incluido el
Bien)
VERDAD
508-c, 509-a y b
Platón utiliza la analogía para concretar, de forma negativa, la naturaleza del Bien:
- es fuente de conocimiento y de verdad, pero superior al conocimiento y a la verdad
-
es causa del ser y de la esencia del mundo inteligible, pero superior a este mundo
-
reina en el mundo inteligible como el sol en el mundo sensible
Analogía de la línea
509-d,e
dividimos una línea en dos segmentos y estos a su vez en otros dos: el segmento de lo
sensible, el primero, representa a las imágenes en el mundo sensible, el segundo
segmento representa a los objetos físicos de los que proceden las imágenes del primer
segmento.
Queda claro que en relación a la verdad, la primera división separa a lo
VISIBLE, o sensible que es objeto de la OPINIÓN (DOXA) y lo INTELIGIBLE, objeto de
la CIENCIA (o EPISTEME)
510-b
El segmento de lo inteligible se divide a su vez en dos partes, en la primera el alma se
sirve de los objetos visibles –figuras geométricas- como si fuesen imágenes –de los
conceptos geométricos que representan dichas figuras- tratándolos como hipótesis (es
decir, como si fuesen conocimientos verdaderos, aunque, por no haber alcanzado aún el
conocimiento de la idea de Bien, no sabemos distinguir con claridad la verdad de la
falsedad, que es el modo de operar del conocimiento MATEMÁTICO) hasta alcanzar un
principio no hipotético, sino REAL (es decir, un conocimiento libre de supuestos
hipotéticos, que descubre la VERDAD, Platón se refiere ahora al conocimiento
DIALÉCTICO)
510-c
A continuación Platón aclara cual es el papel de las matemáticas en el proceso de
conocimiento; esta disciplina tiene un carácter axiomático-deductivo. Su procedimiento es
el siguiente: a partir de axiomas (afirmaciones evidentes e indemostrables, cuya verdad
no se discute –por ejemplo “sobre un punto cualquiera del plano pasan un número infinito
de líneas rectas”), se construye un sistema, por deducción, en definitiva, las hipótesis son
utilizadas como si fuesen elementos ya conocidos. Por otra parte los geómetras recurren
a representaciones materiales de objetos ideales.
En resumen:
-
trabajamos con objetos inteligibles (entidades matemáticas) en un plano hipotético o
conjetural (las matemáticas se fundamentan en un conjunto de hipótesis)
-
usamos como herramientas (imagen) a los objetos materiales (geometría)
511 b y c
Por último Platón se centra en la DIALÉCTICA, que parte de las ideas tomadas como
hipótesis, es decir, como conocimientos cuya verdad está aún por demostrar, y se eleva a
un principio cuya verdad es absoluta: el Bien o la Verdad misma. A partir del
descubrimiento intelectual de la Verdad-Bien, comprendemos en su justa medida lo que
hay de bueno-verdadero en las ideas que anteriormente habían sido tomadas como
hipótesis.
La Dialéctica es por tanto la ciencia suprema, superior a las matemáticas, ya que:
-
no necesita recurrir a elementos sensibles para avanzar en sus conocimientos
-
proporciona una visión más clara de la verdad y del bien, esto garantiza el
conocimiento del resto de las ideas, ya que la verdad de estas últimas solo puede ser
determinada tomando como referencia a la idea de Bien.
-
Por lo tanto el Pensamiento, que es la facultad del alma de la que proceden las
Matemáticas, debe situarse entre la Creencia, de la que procede la Física, y el
Conocimiento, del que procede la Dialéctica, a que el Pensamiento tiene como objeto
lo inteligible, pero aún no consigue la verdad absoluta.
LIBRO VII, 514a-517c
El “mito de la caverna”
En esta alegoría Platón resume alguno de los aspectos más importantes de su doctrina.
Ilustra de forma intuitiva su concepción de la realidad, del ser humano y del proceso de
conocimiento
En el interior de la caverna los esclavos son incapaces de reconocer cual es la
verdadera forma de lo real, tomando por verdaderas lo que no son mas que sombras
desdibujadas de la verdad. Solo el prisionero que, liberado de sus cadenas, es capaz de
salir de la caverna, podrá descubrir la verdadera constitución del mundo y la situación
engañosa en la que se desarrollaba su vida anterior.
En este mito, Platón expone un estado de cosas; la situación en la que se encuentra la
humanidad y el modo de superar este estado. Los hombres se encuentran, durante toda
su vida, sumidos en un mundo de sombras y no son conscientes de su penosa situación
ya que jamás han tenido la oportunidad de acceder a otra realidad diferente. Estos
hombres creen que la realidad es su mundo de sombras y ecos.
515-c y d
Si un esclavo repentinamente fuese liberado de sus cadenas y obligado a salir de su
prisión, quedaría momentáneamente cegado, y en primera instancia creería haberse
vuelto loco, desearía volver al mundo de las sombras, al que seguiría considerando más
real.
Adaptación de la mirada al mundo de la verdad
El hombre liberado es obligado a salir al exterior, este es un proceso doloroso y gradual.
Desde la primera impresión , de deslumbramiento, irá poco a poco observando:
516b
-los objetos reales del mundo exterior
-la luz que ilumina todos los objetos: el sol, que es fuente de vida para los seres del
mundo exterior y que, además, hace posible la contemplación de éstos
516d, 517a
Cuando este hombre descubre la verdadera realidad, consciente de su anterior estado,
se considera feliz y afortunado, se da cuenta del error de los que, en la caverna se
llamaban a sí mismos “sabios”. Si, compadecido de la penosa situación de sus antiguos
compañeros, decidiese volver y liberarlos, podría ocurrir los siguiente:
-
quedaría cegado por las sombras al volver a introducirse en la caverna, ya que le
resultaría muy difícil adaptarse de nuevo a la oscuridad
-
al verle regresar tropezando, sus compañeros le tomarían por loco, no harían caso de
sus explicaciones y para mantener la seguridad de su pobre vida, podrían incluso
asesinarlo.
Explicación del sentido del mito, aplicación a los gobernantes
517 b y c
En este pasaje platón explica el sentido de la alegoría, metáfora que ilustra el proceso
del verdadero conocimiento, dirigido hacia la contemplación de la razón última de todo lo
existente: el Bien. Tal como refleja el mito, la contemplación de la Verdad es una
experiencia de tal carácter, que impide al que la ha tenido, retornar a los asuntos
humanos. Ahora bién, como expresará Platón más adelante, en este mismo diálogo,
también la contemplación del bien obliga al afortunado esclavo liberado a regresar y hacer
partícipes a los demás de su extraordinaria experiencia.
El
mito
SIMBOLOS
de
la
caverna
DEL INTERPRETACIÓN:
ANTROPOLOGÍA
MITO
PRISIONEROS
El ser humano, en la medida
en que vive prisionero en el
mundo sensible
LIBERACIÓN DEL
PRISIONERO. ASCENSIÓN Liberación del alma, del
Y RECONOCIMIENTO DE mundo material y
LA REALIDAD EXTERIOR descubrimiento de una
realidad trascendente
SOMBRAS Y ECOS EN EL
FONDO DE LA CAVERNA
OBJETOS DE LA
CAVERNA
FUEGO, EN EL INTERIOR
LOS OBJETOS
NOCTURNOS, LAS COSAS
EXTERIORES
ILUMINADAS POR EL
SOL, EL SOL MISMO
El ser humano tiene un
componente material (el
NECESIDAD DE LIBERAR cuerpo), que le inclina a
AL PRISIONERO (Se usan
permanecer en el mundo
expresiones del tipo: “si
material. El proceso de
forzáramos...”, “si se
liberación del alma, respecto
arrastrara..”)
al cuerpo obliga al individuo
a luchar contra esta
inclinación.
EL PRISIONERO
LIBERADO REGRESA AL
INTERIOR DE LA
CAVERNA. “CEGUERA”
EL PRISIONERO ES
ASESINADO POR SUS
ANTIGUOS
COMPAÑEROS
COMPRENSIÓN DE LA
FUNCIÓN DEL SOL EN EL
EXTERIOR
y
su
interpretación:
INTERPRETACIÓN:
CONOCIMIENTO Y
REALIDAD
INTERPRETACIÓN:
MORAL Y POLÍTICA
Los sofistas y todos aquellos
que viven sumidos en la
ignorancia, creen que el
conocimiento sensible es el
único modo de conocimiento
posible
Camino ascendente del
conocimiento, desde la Física
a la Dialéctica, pasando por
las Matemáticas
Todos aquellos que
viven apegados a valores
materiales y esclavos de
las sensaciones.
Reflejo distorsionado de la
verdadera realidad, captados
por los sentidos y que son la
base del conocimiento
conjetural o Doxa
Seres físico-materiales
El sol
Las ideas de objetos
matemáticos, las ideas de
virtudes morales y la idea de
Bien, estudiadas por la
Dialéctica.
El proceso de conocimiento
del mundo de las ideas es
traumático, se produce de un
modo gradual. Una serie de
disciplinas (Física,
Matemáticas..) preparan al
alma para la intuición
intelectual del Bien
Liberación del alma, de las
ataduras que la encadenan a
los valores materiales
(pasiones) y vuelta de la
mirada al mundo de las
virtudes morales
La Idea de Bien, “ilumina” la
actuación moral y política.
El destino del alma humana
es el mundo de las ideas, por
lo que es necesario llevar a
cabo una vida ascética,
renunciando a los placeres y
bienes materiales, a los que
nos sentimos inclinados, para
que el alma pueda alcanzar su
meta suprasensible.
El filósofo siente la
obligación moral de ayudar al
La vuelta al mundo material y resto del pueblo, poniendo su
a sus preocupaciones resulta sabiduría al servicio de la
difícil para el filósofo,
comunidad, y haciéndose
acostumbrado a la
cargo del penoso deber de
comprensión del Bien.
gobernar la polis.
La “ceguera” de los
atenienses, que no
comprenden el verdadero
sentido de la filosofía de
Sócrates, es la verdadera
Comprensión de que la Idea
causa de la condena a muerte
de Bien es la causa del ser y del maestro.
la verdad que hay en el resto Comprensión del papel que
de las ideas
tiene la Idea de Bien como
principio que dirige la vida
moral y la práctica política.
Comentario de texto resuelto: Platón
“- Pienso que puedes decir que el sol no sólo aporta a lo que se ve la propiedad de ser visto,
sino también la génesis, el crecimiento y la nutrición, sin ser él mismo génesis.
- Claro que no.
- Y así dirás que a las cosas cognoscibles les viene del Bien no sólo el ser conocidas, sino
también de él les llega el existir y la esencia, aunque el Bien no sea esencia, sino algo que se
eleva más allá de la esencia en cuanto a dignidad y a potencia.
-Y Glaucón se echó a reír:
- ¿Por Apolo! exclamó . ¿Qué elevación demoníaca!”
(Platón, La República VI)
1- Descripción del contexto histórico-cultural y filosófico que influye en el autor del
texto elegido.
En esta primera cuestión se nos pide que ubiquemos el texto en su marco histórico-cultural y filosófico.
Debemos darle la misma importancia al contexto histórico-y cultural que al filosófico ya que cada uno de
estos dos apartados tiene la misma puntuación. Los datos que aportemos en esta cuestión deben tener
relación con la filosofía del autor, es decir deben ser relevantes a al hora de comprender por qué el autor,
en este caso Platón, pensaba como pensaba. También hemos de procurar no extendernos demasiado, para
que no nos falte tiempo después. Contexto histórico-cultural:
Como se trata de una obra que tiene un marcado carácter político, no estaría mal, que al redactar el
contexto histórico, hiciésemos referencia especial a las circunstancias políticas que marcaban la vida
ateniense en la época y que influyeron en el pensamiento de Platón. Esquemáticamente, la respuesta a esta
cuestión podría ser como sigue:
- Explicar que este texto pertenece a la obra “La República”, escrita por Platón en el siglo IV a.d.C. Platón es
un filósofo ateniense que, junto con Aristóteles representa el apogeo de la filosofía clásica.
- Situación histórica de Grecia durante los siglos VI, V y IV antes de Cristo, nacimiento de la Democracia,
conflictos: guerras médicas y guerras del Peloponeso. “Edad de oro” de Atenas bajo el mando de Pericles
(S.V a.d. C), decadencia social y política en el s.VI adC.
- Situación política de Atenas en vida de Platón, corrupción y crisis de la democracia, instauración del
régimen de los “treinta tiranos” tras la derrota en Peloponeso, reinstauración de la Democracia y condena a
muerte de Sócrates. Influencia de estos tristes acontecimientos en Platón, quien decide dedicar su vida y su
obra a la consecución de un “estado ideal”.
- Vida y obra de Platón (brevemente y sin hacer referencia a datos anecdóticos), consideraciones sobre la
obra que estamos comentando como diálogo de madurez, observaciones sobre el estilo literario de los
escritos platónicos como diálogos o representaciones dramáticas de ideas filosóficas (homenaje a Sócrates)
- En el ámbito cultural, hacer referencia al apogeo del arte griego en el siglo de Pericles, nacimiento del
clasicismo y representación ideal del ser humano en la escultura de Fidias. Por otra parte la arquitectura (el
Partenón) y en general, en todas las manifestaciones artísticas se refleja el ideal clásico de belleza como
armonía (justicia) al que Platón, en su filosofía, da una dimensión ontológico-moral.
Contexto filosófico.
Puesto que esta es la época del nacimiento del pensamiento racional, habremos de hacer referencia a
este hecho y a las circunstancias sociales y económicas que lo hicieron posible. Dentro de esta primera
época de creación filosófica debemos destacar la figura de Parménides, al que se puede considerar, con su
teoría racionalista, un precedente de Platón. También inspiran el pensamiento platónico la filosofía de
Pitágoras y de Heráclito, de éste último Platón adopta su idea de Dialéctica como dinámica de la ciencia
suprema.
Tendremos que citar a los Sofistas y su relativismo ético y político, que fueron criticados por Platón.
También hablaremos de Sócrates, maestro de Platón, a quien este debe la doctrina del sabio gobernante,
ya que de Sócrates proviene la idea de que para hacer el bien (y, consecuentemente, diría Platón, gobernar
bien) hay que conocer lo que es el Bien.
Por último hay que reseñar a Aristóteles, discípulo de Platón, quien, a pesar de no estar de acuerdo con
las ideas de su maestro, siempre se consideró deudor suyo.
2- Comentario de texto:
a. Explicación de las dos expresiones subrayadas: debemos explicar el sentido general
del texto en la filosofía del autor y terminar indicando, brevemente, qué se dice, sobre el término
en el texto. Aquí tenemos que cuidar, no extendernos demasiado sobre el contenido del texto,
ya que corremos el peligro de repetir, en la cuestión B) cosas que ya hemos dicho en A), lo que
da impresión de pobreza de ideas.
“Cosas cognoscibles: Se refiere a las Ideas o Esencias. Frente a los objetos del mundo material, que
pueden ser percibidos pero no conocidos, las Ideas pueden ser conocidas por la razón. En el texto
Platón explica que las ideas deben su ser y no solo su verdad, a la Idea de Bien.
Bien: Idea suprema, realidad que es causa del ser del resto de las ideas. También es fuente de verdad y
hace posible el conocimiento, siendo, ella misma, objeto supremo de conocimiento. En el texto, Platón
destaca la superioridad del Bien, fuente de toda realidad y más real y perfecta que ninguna otra Idea.”
b. Exposición de la temática del texto: Es muy importante haber leído más de una vez el
texto, para tener claro a qué se refiere el fragmento. Un error en la determinación de la temática
del texto lastra el resto del ejercicio. También puede ser necesario contextualizar nuestra
explicación de las ideas del texto que estamos comentando en el tema general de la parte del
mismo a la que pertenezca, como en este caso: el texto está tomado del pasaje en el que
Platón compara la visión con el conocimiento racional para aclarar la superioridad del Bien.
“Se trata de un texto de carácter ontológico pues en él Platón subraya la superioridad de la Idea de Bien
ya que es la causa de que el resto de las Ideas sean. Platón compara el Bien con el sol –en un principio
para aclarar la función del Bien en el proceso de conocimiento: aportar verdad que haga posible el
conocimiento de las ideas, del mismo modo que el sol aporta la luz que hace posible la visión de los objetos
sensibles- y explica que, del mismo modo que el sol es fuente de vida en el mundo material, la Idea de Bien
es la causa del ser en el mundo de las ideas, el Bien es la esencia de la que todas las Ideas participan y así
hace posible que el resto de las esencias sean. De este modo concluye Platón su aclaración sobre la
primacía ontológica y epistemológica del Bien”
c.
Justificación de la temática desde la posición filosófica del autor. Aquí debemos
exponer qué es lo que el autor explica, en su filosofía, sobre el tema del texto. Solo se puede
hacer bien esta segunda parte de la pregunta si dominamos la filosofía del autor y tenemos una
visión de conjunto de las ideas del mismo, en este caso, puesto que el tema del texto es
fundamentalmente ontológico, debemos explicar el dualismo ontológico platónico y el por qué
de este dualismo. En general hay que aclarar cuales son las intenciones del autor, pues es lo
que da sentido a su pensamiento, así pues en este caso habría que hacer referencia a la
preocupación política de nuestro autor y su objetivo de justificar un gobierno de sabios como
solución a la corrupción en la Polis.
“El fragmento que estamos comentando tiene un sentido claramente ontológico, en él Platón refleja su
filosofía dualista según la cual la realidad se encuentra dividida en un mundo de esencias o ideas perfectas
que son modelo para un mundo material corruptible y cambiante. Con esta visión dualista de la realidad,
nuestro filósofo quiere justificar una utopía política que salve la polis ateniense de la situación de corrupción
e injusticia en la que se vivía su tiempo. Frente al relativismo de los sofistas, Platón, al igual que Sócrates,
defiende la existencia de valores morales absolutos, que son entidades reales y autosubsistentes en un
mundo aparte: las Ideas, perfectas e inmutables. En la cúspide de este mundo de Ideales morales se sitúa
el Bien, que es la Idea que el resto de las Ideas imita. Las Ideas son la esencia de los elementos del mundo
material, son por tanto la causa de su ser. Nuestro mundo debe su imperfección y corruptibilidad a la
materia de la cual todos los seres sensibles estamos hechos, por eso, en el ámbito de la moral y de la
política, el apego a las cosas materiales es la causa de la corrupción y de la injusticia. Platón propone un
sistema político en el que el gobierno de los sabios -quienes conocen mejor que ningún otro ciudadano el
mundo perfecto e incorruptible de las Ideas- garantiza la justicia social y la perfección moral de los
habitantes de la Polis. En su filosofía, nuestro autor explica que del mismo modo que en nuestro mundo
material los seres están formados por una materia corruptible y una esencia, nosotros estamos formados
por un cuerpo material y un alma racional que es nuestra esencia. Nuestro cuerpo percibe los seres físicos
por medio de los sentidos, y nuestra alma accede al mundo de las Esencias por medio de la Razón. Puesto
que el de las esencias es el único mundo verdadero, el único conocimiento verdadero es el racional, por eso
en el texto Platón utiliza la expresión “cosas cognoscibles” para referirse a las ideas. Pero el conocimiento
de las Ideas no está al alcance de cualquiera, a diferencia de Sócrates, quién defendía la posibilidad de que
cualquier persona alcanzase la verdad, por estar todos los seres humanos dotados de razón, Platón
defiende que solo unos pocos, los mejor dotados, pueden tener acceso al conocimiento de las realidades
superiores. El resto de las personas están demasiado “atadas” al mundo material como para poder elevar su
razón por encima de las cosas sensibles. De este modo, en la analogía de la línea y en el mito de la
caverna, Platón explica el difícil recorrido del alma en su búsqueda de la verdad y del conocimiento de la
Idea de Bien, una vez alcanzado este objetivo, el sabio estará preparado para proyectar en la polis sus
conocimientos y garantizar la justicia social, ya que actuará de acuerdo con el Bien.
(Este sería un enfoque general, luego cada uno en función de lo que el texto sugiera puede desarrollar más
el aspecto del pensamiento platónico que considere conveniente)
3- Relación del tema elegido con otra posición filosófica y valoración razonada de su
actualidad. En este apartado debemos resolver dos cuestiones, en primer lugar, relacionar el tema
del texto con el tratamiento del mismo tema por parte de otro autor o corriente, se valorará con 2
puntos. La segunda cuestión es aclarar la actualidad del tema del texto, que se valora con 1 punto.
En este caso relacionaremos el tema del texto, por ahora, con la filosofía de Aristóteles, y en cuanto
a la actualidad, debemos intentar reflexionar sobre sentido que, en nuestros días tiene el problema
filosófico planteado en el texto. En caso de que el texto no nos sugiera ninguna relación con
problemas actuales, podemos intentar una valoración de la actualidad del pensamiento platónico en
general. Debemos evitar que esta última cuestión se resuelva como la exposición de una opinión
personal, subjetiva y más o menos arbitraria.
Según la explicación del tema del texto, expuesto en el apartado b) de la pregunta anterior, el tema del
texto es ontológico, por tanto debemos desarrollar
1) Quién es Aristóteles y su relación con Platón.
2) Crítica de Aristóteles al dualismo ontológico de su maestro
3) Alternativa aristotélica, teoría hilemórfica y explicación del movimiento como paso de la potencia al
acto
4) Conclusión:
comparación
de
la
noción
de
bien
en
Platón
y
Aristóteles.
Material de apoyo para el comentario de texto.
Apartado 1: Contexto histórico, cultural y filosófico del texto
No se trata de algo exacto y riguroso, pero yo creo que el contexto debería de contener las
siguientes informaciones:
1. Un 25 % de Contexto Histórico:
1.1 Las guerras del Peloponeso y la hegemonía de Atenas.
1.2 Pericles y la Democracia Ateniense.
2. Otro 25 % de Contexto Cultural:
2.1 Esplendor de la Literatura Clásica: La tragedia y la comedia.
2.2 Esplendor de la arquitectura: El Partenon y la Acrópolis.
2.3 Esplendor de la escultura: Fidias y el ideal del cuerpo humano.
3. Un 50 % de Contexto Filosófico:
3.1 Breve repaso de la vida y las obras de Platón.
3.2 Las Influencias que recibe Platón:
3.2.1 Las matemáticas de los Pitagóricos.
3.2.2 El Nous de Anaxágoras.
3.2.3 El Ser de Parménides.
3.2.4 El Devenir de Heráclito.
3.2.5 Y sobre todo, las enseñanzas de su maestro Sócrates, frente a los
Sofistas: antirelativismo, esencialismo, diálogismo e intelectualismo moral.
3.3 Las influencias de Platón: la Academia y su discípulo Aristóteles. (este es menos importante)
Yo creo que nunca habría que hacerlo por este orden. La forma es muy importante. Mi consejo es
que tomes uno de los contextos como “argumento”, “hilo conductor” (por ejemplo la vida de
Platón), y sobre él redactes, incorporando estas informaciones, tu contexto.
Por último, algunos consejos:
1 - No te equivoques en las fechas o los nombres, si no estás seguro al 100 %, no los pongas.
✗ - No te inventes nada, no pongas nada que no hayas comprobado por ti mismo, no te fíes de los
contextos que te pasen los compañeros o lo que tienes en los apuntes de clase
✗ - No Cuentes la vida de otros autores o sus teorías sin explicar porqué vienen
a cuento, sin justificar porqué las pones.
✗ - No cometas faltas de ortografía y/o presentación sucia, sin márgenes y con tachaduras. No
cometas errores de sintaxis o expresión en general.
✗ - No repitas las mismas cosas varias veces.
✗ - Evita caer en contradicciones y en falta de claridad en lo que cuentas.
✗ - Que no parezca la “lista de la compra”, una pura acumulación de datos, nombres y fechas sin
orden ni concierto.
Por último, recuerda que en el examen de la PAU son sólo dos puntos, no deberías de tardar más
de 15 o 20 minutos en escribirlo, y por tanto no debería de exceder de un folio, como muchísimo
(dependiendo de la letra de cada uno).
Tomado de Miguel Pineda, del I.E.S. Pintor Juan Lara del Puerto de Santa María (Cádiz)
Un ejemplo de contexto histórico, cultural y filosófico puede ser el elaborado por el Grupo de
Trabajo de Profesores de Filosofía de Almería. No se trata de que lo copies sino de que te
sirva como modelo. El contexto tiene que ser algo personal.
1. Contexto cultural
La filosofía nace en Grecia en torno al siglo VI a.C. favorecida por la peculiar concepción
de la religiosidad griega donde no había libros sagrados, ni casta sacerdotal, ni dogmas de fe.
Incluso dioses y hombres se encuentran sometidos a la moira (o destino) que “adjudica a cada
uno su parte”, así a unos les toca ser dioses y a otros hombres.
Los dioses son seres con las mismas pasiones y deseos que los humanos, pero
inmortales. Algunos son los olímpicos, ya que situaron su morada en el monte Olimpo: Zeus es el
padre de todos ellos; Ares es dios de la guerra, hijo de Zeus; Afrodita es la diosa del amor... Otros
no eran dioses del Olimpo pero jugaron un papel destacado en la religiosidad griega, como Apolo,
dios de las artes y máximo portador de los oráculos divinos; Dionisos, dios de la embriaguez, la
sexualidad y, en general, de todo lo pasional, o Hades, dios del mundo subterráneo donde moran
las almas de los muertos.
La relación entre dioses y hombre se establecía a través de los oráculos, que tenían una
finalidad adivinatoria o profética. Eran muy importantes en la vida pública, ya que determinadas
actividades (guerras, viajes, etc.) no se realizaban sin antes consultar con el oráculo. De este
modo, las prácticas religiosas estaban muy vinculadas a la vida pública (la plegaria, el sacrificio y
la purificación) aunque coexistían con otro tipo de prácticas en las que únicamente podían
participar los iniciados. Se las conocen como cultos mistéricos, porque los participantes tenían
prohibido revelarlas bajo pena de muerte. El orfismo es un culto de tipo mistérico que pregona la
inmortalidad y la transmigración de las almas, concibiendo el cuerpo como una especie de cárcel
para el alma. Esto nos recuerda plenamente a Pitágoras y Platón en su teoría del alma.
En el mundo griego, la religión se identificaba con la mitología, cuya divulgación estuvo,
sobre todo, en manos de los poetas. El mito es una narración en la que fenómenos naturales y
sociales son explicados por la intervención caprichosa de los dioses y hombres heroicos. Lo que
se narra en ellos no significa que algo concreto ocurrió y pasó, sino que el relato es vivido como
atemporal, como algo que recrea algún aspecto de la naturaleza humana, y que como tal “ha sido,
es y será”. El mito es un paradigma, un modelo de comportamiento ofrecido a los hombres.
El poeta griego no se diferencia mucho del oráculo. Como él, es una especie de médium
que conoce el destino. El mito pretende reflejar una situación intemporal, que forma parte del
pasado, del presente y del futuro. Platón hace un uso frecuente de los mitos en sus escritos, pero
su intención es más que nada didáctica, es decir, facilitarnos la comprensión.
2. Contexto histórico
En el siglo V a.C. la sociedad griega alcanza su apogeo y Atenas, vencedora de las
guerras médicas, representa el esplendor cultural y político de la democracia (cosmopolita y
comercial) que ha dejado atrás a la vieja sociedad aristocrática y agrícola.
La acrópolis de Atenas, que los persas destruyeron en el 482 a.C. fue reconstruida y
engrandecida bajo el gobierno de Pericles (del 443 al 429). El arquitecto Ictinos y el escultor Fidias
fueron los encargados de poner en práctica las obras durante diez años. Las esculturas del
periodo clásico (s. V y IV a.C.) se caracterizan por las proporciones corporales perfectas, la
idealización de las figuras, la serenidad y el equilibrio entre movimiento y estabilidad, (ejemplo: el
discóbolo de Mirón). Más adelante, debido a la popularización de esculturas para adornar
viviendas privadas y a los cambios históricos, sociales y filosóficos que supone el Helenismo, se
potencia mucho más la expresividad: el dolor, el desenfreno, la sensualidad, etc. (ejemplo: la
Venus de Milo, Laocoonte).
También el siglo V a.C. representa en Atenas la culminación de la tragedia griega y del
género histórico. La tragedia se originó en torno al culto a Dionisos, cuya evolución ya con
Sófocles (496-406 a. C.) y Eurípides (480-400) adquiere la forma clásica de personajes y coro con
que la conocemos hoy. Herodoto (484-420 a.C.) y Tucídides (460-400 a.C.) fundan el saber
histórico como seña de identidad colectiva del pueblo.
Platón nace en Atenas en el 427 a.C. en seno de la más alta aristocracia. Toma parte a los 18
años como soldado en la última etapa de la guerra del Peloponeso, que termina con la derrota de
Atenas ante Esparta y la instauración del régimen oligárquico de los 30 tiranos. Así, al periodo de
auge cultural, político y económico de la Atenas del siglo V a.C. sucede una época de crisis que
concluirá con la pérdida definitiva de la hegemonía de Atenas al ser sometida la ciudad al imperio
macedónico de Alejandro.
Inclinado en un principio hacia la política, su amistad con Sócrates, a quien acompañó en los
últimos años de la vida de éste, le hará orientarse definitivamente hacia la filosofía. Tras la muerte de
Sócrates en 399 por la recién instaurada democracia ateniense, Platón decide refugiarse en Megara.
Hacia 390 Platón visita las ciudades del sur de Italia, tomando allí contacto con el pitagorismo,
y Sicilia, donde traba amistad con el joven Dion, cuñado del tirano de la ciudad, Dioniso I, a quien
intentará influir en su gobierno. Con el fracaso de su primera aventura política, Platón regresa a
Atenas (387) y abre una escuela, la Academia, donde se dedica durante veinte años a la enseñanza.
Por dos veces más regresará de nuevo a Siracusa tentado por la oportunidad de realizar un
gobierno de filósofos, hasta que el asesinato de Dion le hace renunciar definitivamente a la práctica
política. A partir del 361 deja casi por completo la dirección de la Academia en manos de Heráclides
de Ponto. Sus últimos años fueron dedicados a escribir, muriendo en el 347 a.C.
3. Contexto filosófico
Al compás de su vida, la obra de Platón, casi toda ella en forma de "diálogos", se suele dividir
en tres períodos:
Diálogos socráticos: escritos entre la muerte de Sócrates y su primer viaje a Sicilia. Estos
diálogos, auténticas obras literarias, expone sobre todo el pensamiento de Sócrates y contienen
pocos elementos propiamente platónicos: Apología, Protágoras, Gorgias: (de transición).
Diálogos doctrinales: escritos durante su etapa en la Academia, hasta su segundo viaje a
Sicilia. Sócrates, que sigue siendo el personaje central del diálogo, expone una doctrina a base de
preguntas y respuestas ilustrándola a menudo mediante mitos. En este período se muestra el
pensamiento maduro de Platón, la teoría de las ideas: Menón, Banquete, Fedón, República, Fedro.
Diálogos críticos: Platón somete a dura crítica todo su pensamiento, tanto su doctrina
política como la teoría de las ideas y su cosmología: Parménides, Sofista, Político, Timeo, Leyes.
El pensamiento de Platón es el intento de superar la escisión que en la tradición filosófica ha
supuesto la sofística: el relativismo y escepticismo sofístico imposibilitan la búsqueda de la verdad y
la ciencia y, por tanto, de la filosofía.
Platón quiere encontrar algo permanente e inmutable que escape al carácter cambiante y
múltiple de las cosas sensibles, sólo así podría sentarse un saber estable y duradero, la ciencia. La
respuesta la encuentra en que, si bien las cosas sensibles nacen y mueren, cambian y se componen
de múltiples partes, la especie de la cosa es permanente y es una y la misma en todas las cosas de
la especie. Aunque un caballo muera, su esencia seguirá presente en otros caballos. A esto
inmutable que está presente de algún modo en todas las cosas de la misma especie lo llama Platón
idea, que quiere decir figura, lo visible. Naturalmente la idea no puede verse con los ojos del cuerpo
sino con los del alma, con la inteligencia. De este modo, Platón entiende que la idea es fija,
permanente, no cambia. Por el contrario, la cosa deviene, cambia, es y no es.
Así Platón elabora su teoría de las ideas recogiendo toda la herencia de los primeros
filósofos griegos y también de Sócrates. El inmovilismo del Ser de Parménides es tomado para
construir un mundo de ideas permanente e inmutable, aunque múltiple, ya que son muchas las
ideas que lo pueblan, a diferencia del Ser unitario parmenídeo. Del pitagorismo, tomará la
inmortalidad del alma y el preludio matemático en el acercamiento a las ideas. El espíritu de
Sócrates empapa toda la filosofía de Platón al concebir el conocimiento como conocimiento de lo
universal, defender el intelectualismo moral y centrar su interés en cuestiones de tipo éticopolítico.
Por otro lado, el mundo de las cosas sensibles recogerá los caracteres de movilidad,
materialidad y relatividad propios de Heráclito, el atomismo y la sofística, respectivamente.
La República es la obra fundamental del pensamiento platónico maduro en la que se
encuentra la exposición más elaborada de la teoría de las ideas. El título de la obra traduce el término
griego Politeía, esto es, que trata de los asuntos de la polis. En el diálogo se van desgranando los
temas relativos la justicia, exponiendo cuáles son las clases sociales que componen la ciudad y
cuáles las partes del alma humana, con sus correspondientes virtudes propias, resultando la justicia
como armonía del conjunto social o individual. Especial atención se dedica a la educación del
gobernante-filósofo y cómo éste mediante la dialéctica ha de alcanzar la idea del Bien. Siendo la
mejor forma de gobierno el de los más sabios (aristocracia), cualquier otra ha de ser degeneración de
aquella.
3º PREGUNTA: RELACIONE EL TEMA DEL TEXTO CON OTRA POSICIÓN FILOSÓFICA
(Relación de la filosofía platónica con la aristotélica)
El tema tratado en este texto puede ser relacionado con las ideas del que fue el discípulo más
aventajado de Platón en la Academia: Aristóteles
Platón defendió, en su “teoría de las ideas”, la división de la realidad en dos mundos: el de seres
físicos materiales, que es una copia desdibujada de un mundo de Ideas o esencias inmateriales y
perfectas. Desde el punto de vista de Platón, el mundo de las Ideas es más real y verdadero que
el mundo material, por eso el conocimiento racional que capta estas “Ideas” o esencias, es
superior al conocimiento sensible, que solo puede aprehender las apariencias materiales de las
cosas.
Aristóteles no estaba de acuerdo con estas teorías filosóficas de su maestro, y a ellas opuso su
“teoría hilemórfica” sobre la constitución de los seres reales. Aristóteles pensaba que, al dividir la
realidad en dos mundos, su maestro había complicado la explicación de la realidad. En su teoría
dualista sobre el mundo, Platón afirmaba que el cambio y la multiplicidad acontecen en el mundo
material, pero, al como no es posible una explicación racional sobre el mundo físico, tampoco es
posible explicar racionalmente la multiplicidad y el cambio. Por último, pensaba Aristóteles, ¿cómo
es posible que la esencia de los seres habite en un mundo distinto y separado de los propios
seres?.
Por todas estas razones Aristóteles defendió, en su filosofía, una concepción de la realidad
distinta a la de su maestro: la “teoría hilemórfica”. Según esta filosofía, los seres naturales están
compuestos de materia (hilé) y forma (morfé), por “forma” o “esencia”, Aristóteles entiende el
modo en que la materia se organiza y estructura, por ello la esencia nunca puede subsistir
separada de la materia que conforma,
como decía Platón. Para Aristóteles solo existe una
realidad, en la que la esencia está en los seres, igual que la materia.
Nuestro conocimiento es conocimiento de esta realidad única, Aristóteles sostiene una teoría
empirista sobre el conocimiento, según él la información sensible que llega a nuestro
entendimiento es el materia la partir del cual generalizamos y formamos conceptos generales
sobre cómo son las cosas, es decir, sobre su esencia. Aristóteles da mucha importancia al papel
de la sensibilidad en el conocimiento, precisamente porque piensa que la esencia de las cosas se
expresa en la materia de la que los seres estamos hechos, y el primer conocimiento que tenemos
de los seres procede de los órganos sensibles.
Del mismo modo que la ontología y la epistemología de Platón y Aristóteles tiene poco que ver,
la ética y la política de ambos filósofos tienen también importantes diferencias. En su ética
Aristóteles explica que el “Bien” consiste en el cumplimiento perfecto de las posibilidades
esenciales de un ser. El “Bien” no es para Aristóteles una idea abstracta y alejada de los seres
materiales, como lo era para Platón, sino algo que está estrechamente vinculado a cada ser
natural. Para el ser humano el bien consiste en la realización de la racionalidad, que es su
cualidad natural y distintiva, y esto se consigue a través del ejercicio de la razón, que delibera
cotidianamente para adoptar, en cada momento la actitud más moderada. Por ello, Aristóteles
define la virtud como la “elección del justo término medio”. La virtud no es algo que se consigue a
través de una vida de ascetismo y conocimiento abstracto, tal como decía Platón, sino una
cualidad accesible a través de la vida cotidiana, al alcance de cualquiera que se lo proponga.
En lo referente a la política, sabemos que Platón nunca acepto a los sistemas políticos que
existían en su época, ya que todos le parecían corruptibles, por ello defendía, en el texto que
estamos comentando y en otros muchos, el establecimiento de un estado utópico, en el que
gobernaran los filósofos. Aristóteles, por el contrario, pensaba que la vida política debía regirse
por una norma general: la consecución en el estado de el bien común, el bienestar material y
espiritual para todos los ciudadanos, de modo que cualquier forma de gobierno es aceptable,
siempre y cuando el estado se proponga como objetivo la consecución de este “bien común”, por
encima de el bien particular de los gobernantes
Relaciones de Platón con otros filósofos o corrientes de pensamiento
Influencias en Platón:
La originalidad de los primeros filósofos griegos radica en buscar el arjé o principio de las cosas
en la naturaleza, no en la voluntad de un ser divino. De los pensadores que le precedieron,
Platón acepta la división que Parménides hace de la experiencia: el camino de los sentidos
fuente de opinión (doxa) y el camino de la razón, vía de la ciencia (episteme). Contra Heráclito
argumenta que si no existe algo permanente no se puede explicar el ser de las cosas. De
Heráclito asume también la dialéctica como método que nos ayuda a leer y comprender la
realidad. De los pluralistas toma Platón el elemento ordenador (Nous) presente en la doctrina de
Anaxágoras, pero rechaza la teoría del caos y el azar presente en el atomismo de Demócrito.
Parece también muy vinculado con el pitagorismo, tras sus viajes a Italia. Por ejemplo, el mundo
de las ideas participa de la estructura organizativa y modélica que Pitágoras otorga a los
números.
Pero el influjo más cercano le viene de su maestro Sócrates y de los sofistas, que son sus
contemporáneos. Todos ellos son personajes centrales en los Diálogos platónicos. De Sócrates
aprende la necesidad de definir los conceptos y su intelectualismo moral. Con los sofistas
comparte la idea de la necesidad de la educación para hacer de los hombres buenos ciudadanos,
pero la contraposición con los sofistas se pone de manifiesto en la forma de entender la
educación: no se trata de introducir conocimientos en la mente del educando, sino en enseñar a
mirar hacia donde merece la pena mirar.
Influencia de Platón en Aristóteles
En el tema del conocimiento, o en el de la ética y la política, un referente obligado por la
inmediatez que existe entre las ideas de ambos, coincidentes en algunos temas o radicalmente
opuestas en otros, es Aristóteles. En el tema del conocimiento, el realismo aristotélico choca
frontalmente con el idealismo platónico. Para explicar la realidad Aristóteles no postula, como
Platón, un mundo inteligible (el mundo de las ideas) por encima del mundo de las cosas
sensibles, porque ello implicaría duplicar innecesariamente la realidad. Él sustituye las ideas
platónicas por la noción metafísica de forma, principio activo, que uniéndose a la materia,
elemento pasivo e indeterminado, da lugar a la constitución de un ser o de una sustancia
concreta. Se conoce esta teoría como "doctrina hilemórfica".
Con su teoría de la reminiscencia Platón explica el conocimiento como el recuerdo de lo visto
anteriormente por el alma en el mundo de las ideas. Mientras que según Aristóteles, la mente es
como una tabla rasa, y el contenido de su conocimiento tiene su origen en la experiencia.
Platón y Aristóteles comparten la idea de que hay que ser respetuoso con las leyes para ser feliz.
Pero hay también notables diferencias entre ellos. Al hablar de las virtudes que regulan la
actividad del alma, Platón propone la práctica de tres virtudes, una para cada parte del cuerpo:
la prudencia de la razón, la fortaleza del ánimo y la templanza de la concupiscencia. Solamente
practicando estas virtudes podrá el hombre mantener en equilibrio sus facultades, es decir,
realizar la justicia y conseguir así la felicidad. Para él la justicia no es una virtud ética
específica, sino el resultado de mantener en equilibrio las distintas facultades del hombre. En
cambio, Aristóteles considera a la justicia como una virtud ética o práctica importante e
independiente, y entra en matizaciones como la distinción entre lo que es justo por ley y lo que
es justo por naturaleza, o señalando las características entre distintas clases de justicia. En el
caso de la prudencia, ésta es para Aristóteles una virtud intelectual, no una virtud práctica que
haya de presidir las decisiones de los gobernantes.
En Política, el modelo aristotélico no es utópico como la República platónica, sino elaborado a
partir del estudio de las Constituciones existentes en ese momento. Hay coincidencia entre
ambos filósofos a la hora de señalar las diferentes formas de gobierno. Para Platón el modelo
ideal es el gobierno presidido por los sabios, filósofos. Para Aristóteles no basta con tener en la
mente un gobierno perfecto, sino que ha de ser realizable y adaptable a todos los pueblos.
Según Aristóteles, el mejor gobierno es aquel en el que prevalece la clase media, pues es el más
alejado de los excesos que se cometen cuando el poder cae en manos de los que no poseen nada
o de los que poseen demasiado. Es en el equilibrio entre la ley y la libertad donde se halla el
ideal de gobierno democrático que los atenienses pusieron en práctica en tiempos del legislador
Solón y con Pericles
Repercusión y actualidad del pensamiento político platónico.
En cuanto a la repercusión de las doctrinas de Platón, en el siglo II nos encontramos con el
neoplatonismo (Plotino), que es una mezcla de la doctrina platónica con la de Aristóteles y el
estoicismo. El cristianismo, en especial el agustinismo (San Agustín), utilizará múltiples
elementos del platonismo para organizar su cuerpo doctrinal.
Algunos han visto en la República platónica un modelo de utopía política capaz de contribuir a
crear una sociedad justa e igualitaria. La palabra "utopía" no nace hasta el año 1516, con la
obra de este título del inglés Thomas Moro. Desde entonces se llama utopía a toda descripción
de la sociedad que se supone perfecta en todos los sentidos.
Los pensadores del siglo XVII consideran la República platónica como una quimera. Por el
contrario, los pensadores socialistas del siglo XVIII (Cabet, Viaje a Icaria) tratan a Platón como
un defensor de la igualdad y la comunidad. Por su parte, Marx interpreta las "clases" de la
República como una idealización del régimen de castas egipcio.
Bertrand Russell considera, en el año 1920, que el gobierno leninista está "mucho más próximo
que cualquier otro paralelo histórico al de la República de Platón. El partido comunista
corresponde a los guardianes de la ciudad platónica; existe en Rusia un intento de tratar la vida
de familia de la misma manera que Platón sugirió".
En el ámbito del nazismo, Hildebrant afirma que la Alemania hitleriana es la realización
finalmente iniciada de la ciudad platónica.
En el mundo anglosajón Toynbee acusa a Platón de ser un defensor de un Estado fuerte de castas
rígidas, en el que una casa privilegiada gobierna paternalmente, controlando con los oportunos
medios técnicos a la mayoría del "ganado humano".
Karl Popper, en su obra La sociedad abierta y sus enemigos, considera el platonismo como el
germen de las doctrinas totalitarias contemporáneas. (Ver tema 10 del curso pasado: “la
sociedad y el estado”, apartado: Política y utopía en el siglo XX, para repasar la crítica de
Popper a los modelos utópicos de sociedad. Resumiendo muy brevemente Popper explica que el
modelo político cerrado y autoritario de Platón, que hace primar los intereses del Estado sobre
los de los individuos, ha estado enfrentado hasta nuestros días con el modelo socrático y
aristotélico de una sociedad abierta basada en el acuerdo racional entre los hombres.
Actualidad de Platón:
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El filósofo y matemático inglés, A.N. Whitehead afirmó que la tradición filosófica europea bien
podía describirse como una serie de notas a pie de página sobre Platón, refiriéndose a que
nuestro filósofo abre una problemática que ha sido objeto de reflexión y debate desde el siglo
IV a.d.C. hasta nuestros días.
Epistemología: la filosofía platónica defiende la posibilidad, frente al relativismo de los sofistas,
de un conocimiento racional del mundo y de sus causas: para Platón el fundamento de
nuestro mundo es un universo de formas o esencias, de las cuales somos copias, y que
explican porqué las cosas son como son, las matemáticas abren a la razón el camino hacia la
comprensión de la verdadera naturaleza de lo real. Hoy en día la posibilidad de una
explicación precisa del funcionamiento del mundo es objeto de debate filosófico, el desarrollo
de la mecánica cuántica en el siglo XX, cuestiona la posibilidad de un conocimiento objetivo de
la realidad, se habla de incertidumbre y probabilidad, de un conocimiento que solo puede ser
aproximado, de la realidad. Por otra parte, los descubrimientos en el ámbito de la biología –
selección natural- cuestionan claramente la existencia de un fin último o perfección ideal, en
los procesos naturales.
Educación: Platón es partidario de un modelo educativo adelantado a su época, por su
defensa de una educación universal y pública. Sin embargo este modelo educativo se opone
claramente al actual por su carácter selectivo. En la propuesta platónica solo una minoría
alcanzará estudios superiores, y es la élite de los sabios (y esto es lo importante) quien
decide qué alumno o alumna puede continuar estudios superiores para alcanzar la cima del
conocimiento y la capacidad de gobernar. En otras palabras, quién está destinado a formar
parte de la élite dominante y quién no. De este modo Platón defiende un modelo de
tecnócratas o expertos muy alejado del ideal democrático actual. El ideal educativo actual es
opuesto, persigue la formación integral de todos los ciudadanos sin más limitaciones que las
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que ellos mismos se impongan, defiende la formación de una ciudadanía democrática, crítica y
participativa, capacitada para intervenir activamente en la vida política con madurez y
responsabilidad, evitando, de acuerdo con el ideal ilustrado, cualquier tipo de tutela.
Política: Platón quiere sentar las bases de una sociedad justa, rechaza la democracia porque
es un sistema político que se fundamenta en un error: la igualdad de todas las personas, que
explica que todos seamos iguales ante la ley (isonomía). Como hemos explicado, platón
entiende que las personas no somos iguales, la naturaleza de nuestra alma marca diferencias
constitutivas innatas que justifican el establecimiento de un sistema político basado en esta
desigualdad. Solo con el gobierno de los mejores se logra evitar la corrupción política y
alcanzar la justicia social. Sin embargo, en la actualidad los sistemas democráticos, sin negar
la desigualdad natural entre las personas establecen los mecanismos necesarios para evitar la
corrupción manteniendo la igualdad de los ciudadanos ante la ley. No se trata de establecer
una élite política infalible –como defendía Platón- sino de reconocer la falibilidad del ser
humano y la tendencia de cualquiera a utilizar el poder en provecho particular. Por ello en la
actualidad se aplica la propuesta de Montesquieu, la “división de poderes” como mecanismo
democrático que asegurando la participación de cualquier ciudadano en el gobierno, evita que
ningún grupo utilice el poder en beneficio particular.
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