Juan Manuel Quintana Juan Manuel Quintana, viola da gamba

Concierto nº5
Jueves 10 de marzo. [III Semana de la viola da gamba]
Juan Manuel Quintana
Centro de Músicas Históricas. Convento de Santa Clara. 20.30 horas
La edad de oro del bajo de viola
Jean Lacquemant (dit Du Buisson) (1622/23-1680?): Suite en re mayor
Prélude – Allemande – Courante – Sarabande – Gigue – Ballet
Dietrich Stöeffken (?-1673): Suite en sol menor
Prelude – Allemande – Courante – Sarabande – Gigue
Jean de Sainte Colombe (c.1640-c.1701): Suite en re menor/mayor
Prelude – Allemande – Courante en bourrasque – Sarabande – Gigue – Petite pièce – Vielle
Monsieur De Machy (siglo XVII): Suite en sol mayor
Prélude – Allemande – Courante – Sarabande – Gigue – Gavotte en rondeau – Chaconne
Monsieur de Sainte Colombe le Fils (c.1660-1720?): Fantaisie en Rondeau & Gavotte
Marin Marais (1656-1728): Chaconne en re mayor
Juan Manuel Quintana, viola da gamba
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Pasada su época de esplendor en Italia, la viola da gamba se asentó en Inglaterra e
inmediatamente en Francia, donde la tradición fue importada por un tal André Maugars, quien a
principios del siglo XVII había viajado por Italia, España e Inglaterra, es decir, se había
acercado a las fuentes del instrumento. A ello habría que unir el gran desarrollo de las técnicas
laudísticas en Francia, ¿no es acaso la viola un gran laúd que se toca con arco? No se sabe si
Maugars creó realmente una escuela de viola en París, pero sí lo hizo su estricto
contemporáneo Nicolas Hotman, maestro de la segunda generación de gambistas franceses a la
que pertenecen Monsieur de Machy y Jean de Sainte-Colombe, a su vez profesor por unos
meses de Marin Marais, la gran figura internacional de la viola, antes de que la última
generación de grandes maestros del instrumento en Francia, encabezada por Antoine
Forqueray, irrumpiera con una fuerza inusitada, imponiendo un virtuosismo extremo y una
italianización de su lenguaje, lo que vino a corromper las bases del tradicional estilo local.
Juan Manuel Quintana ha planteado su recital como un recorrido por la gloriosa historia de la
viola en Francia. Así, parte de un contemporáneo de Hotman, enlace vital con las dos siguientes
generaciones, Jean Lacquemant, que recientemente Jonathan Dunford ha relacionado con uno
de los Du Buisson activos en Francia a mediados del XVII, y que pudo llegar a tocar con el
joven Marais. Lacquemant no publicó una sola obra, aunque su nombre aparece asociado a la
viola como intérprete y como compositor de piezas diversas, de las que han sobrevivido más de
un centenar en seis manuscritos que hoy están desperdigados por Europa y Estados Unidos. De
uno de ellos, Quintana compone una suite en la que no falta ni el tradicional preludio non
mesuré ni las cuatro danzas de la suite clásica, que aparecen por primera vez en la obra de
Monsieur Du Buisson en el orden que luego se hizo corriente (esto es, Allemande-CouranteSarabande-Gigue). Dietrich Stöeffken nació en Alemania, pero trabajó mucho tiempo en la corte
inglesa (y también en el continente). Su música se ha conservado en diversos manuscritos y
presenta influencias variadas: el preludio es típico de la música alemana, mientras que en la
courante se deja ver la mano de Hotman. Algo atípica resulta la suite de Sainte-Colombe, en la
que no falta el preludio, pero figuran también piezas de carácter descriptivo ( Vielle) que refleja
bien la flexibilidad de la viola en materia tímbrica y su capacidad de mimetizarse en otros
muchos instrumentos, en este caso, en uno de carácter rústico como la zanfoña.
Como Sainte-Colombe, De Machy estudió con Hotman. El estilo del maestro se hace muy
evidente en una forma de escritura que tiene reminiscencias de las formas laudísticas como el
empleo del style brisé, una forma de arpegiar acordes típica del laúd en la Francia del siglo
XVII. De Machy publicó en 1685 un libro de Pièces de violle que incluía ocho suites, cuatro en
notación convencional y otras cuatro en tablatura. En su libro, la suite recoge la forma ya
asentada desde Du Buisson, con un largo preludio sin barras de compás, que en origen tendría
carácter improvisado, como manera de fijar la tonalidad del resto de las piezas, y con las cuatro
danzas clásicas a las que unía una gavota y un minueto, salvo en la número 4, justo la que
escucharemos hoy, que sustituye el minueto por una chacona. Si enigmático es en gran medida
Jean de Sainte-Colombe, más resulta serlo aún su hijo, sin duda porque a la natural discreción
de la familia (protestante de religión) unía su condición de ilegítimo. Se sabe que SainteColombe hijo emigró a Inglaterra, donde fue un apreciado profesor de viola en una época en la
que en las islas el instrumento había caído ya en desuso. Allí, en la catedral de Durham, al
norte del país, aparecieron junto a un tratado teológico firmado por el pastor Henri Auger de
Sainte-Colombe, familiar sin duda del músico, seis suites firmadas por Sainte-Colombe hijo en
copia de un canónigo de la catedral. Las obras, para viola sola, sin continuo, presentan la
estructura y el lenguaje característico del estilo francés, aunque a las danzas características de
la suite clásica suele añadir otras, como la gavota, la bourrée, el minueto o diversas piezas en la
forma, típicamente también francesa, en rondeau.
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El recital se cierra con música de uno de los grandes genios del instrumento, Marin Marais,
músico en el Versalles del Luis XIV, autor de cinco libros de piezas para viola que sirvieron para
explotar al máximo las posibilidades del instrumento, y su presencia llega con una de las danzas
que sin formar parte de la suite clásica más predicamento tuvo en la Francia del tiempo: la
chacona, cuyo bajo armónico ha fascinado a compositores de todo tiempo y lugar.
Pablo J. Vayón
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CURRÍCULO
Nacido en Buenos Aires, realiza sus estudios de viola da gamba con Ricardo Massun, Ariane
Maurette, Paolo Pandolfo y Christophe Coin.
Se ha presentado en las más prestigiosas salas de Europa, Estados Unidos, América Latina y
Japón junto al Concerto Vocale, Les Musiciens du Louvre, Hespèrion XX, Ensemble Vocal de
Lausanne, entre otros, participando en numerosas grabaciones.
Desde 1999 ha realizado para Harmonia Mundi France diversas grabaciones recibiendo
distinciones de la crítica especializada internacional.
Entre 1999 y 2005 asistió a Marc Minkowski en la Ópera de Paris, Aix en Provence, Viena y
Zurich. Ha dirigido numerosos proyectos en Argentina y el exterior incluyendo las tres óperas de
Monteverdi, asi como Agrippina y Rodelinda de Haendel.
En 2009 es galardonado con el premio Konex de platino en la ciudad de Buenos Aires.
Es profesor de viola da gamba en el consevatorio Manuel de Falla de Buenos Aires y es invitado
regularmente a dictar cursos en España, Chile y Brasil.
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