caimari — lluc - Consell de Mallorca

ETAPA 5
GR 222 - ETAPA 5
CAIMARI — LLUC
DESCRIPCIÓN DEL ITINERARIO
Desde el mirador de las Rotes
de Caimari iniciamos la marcha
por un paisaje marcado por la
presencia de los bancales de
olivar que ocupan la parte baja
del Puig d’en Escuder y del
Puig de sa Creu.
La quinta y última etapa de la Ruta Artà-Lluc
(GR 222) actualmente sólo se puede recorrer
desde el mirador de las Rotes de Caimari hasta
el Santuario de Lluc. Este itinerario permitirá al
senderista conocer la principal vía de peregrinación de Mallorca y respirar la religiosidad y el
ambiente de leyenda que lo rodea.
El recorrido transcurre por un paisaje singular,
entre encinares y bancales, con un patrimonio etnológico muy interesante, propio de una época cada vez más lejana.
FICHA TÉCNICA (MIDE)
Inicio: mirador de las Rotes de Caimari, carretera Ma-2130 (213 m)
Final: santuario de Lluc (475 m)
Horario: 2 h 05 min
Severidad del medio natural:
1
Desnivel de subida: 467 m
Orientación en el itinerario:
1
Desnivel de bajada: 192 m
Dificultad en el desplazamiento: 2
Distancia horizontal: 8.122 m
Cantidad de esfuerzo necesario: 2
Tipo de recorrido: travesía
El itinerario se adentra en la
sierra de Tramuntana acercándose al curso del torrente de
Ses Mosqueres, para después
cruzar la carretera y ascender
por el camino escalonado de la
Camí Vell de Lluc
Costa Llarga. Unos cuantos
metros después de las casas de Son Canta, el camino viejo de Lluc continúa recto, pero
nosotros nos desviamos a la izquierda, por un sendero que discurre paralelo a la carretera y
evita tener que transitarla.
En poco tiempo alcanzamos el área recreativa de Sa Coveta Negra y, después de pasar por
debajo de la carretera, nos situamos en el vaguada del mismo nombre, dentro de tierras
comunales.
Dejaremos de lado una ramal que sale a nuestra izquierda y continuaremos por una pista
forestal muy empinada hasta que, después de salvar un pequeño collado, encontramos otra
vez el camino viejo de Lluc que seguiremos a nuestra izquierda. Este tramo llamado Sa Llengonissa está empedrado y nos lleva hasta la Bretxa Vella, magnífico mirador sobre la cordillera y el llano de Mallorca.
Continuando por este mismo camino, pasaremos por las casas de E Guix, desgraciadamente
sustituidas por una construcción moderna, y llegaremos al Coll de sa Batalla y a la carretera
de Lluc.
Después de superar el Pont des Guix y la zona de la gasolinera, encontramos la urbanización des Guix y continuamos hasta el final de la calle que sale a nuestra derecha. Empieza
aquí la finca pública de Son Amer y el camino que nos conducirá sin problemas a las casas y
al refugio. Situado en el jardín de la parte posterior de las casas veremos el camino empedrado que, en sentido descendente, se dirige a Lluc. Cruzamos poco después una pista forestal y seguidamente dejamos a la izquierda el molino de Lluc.
Una vez en la carretera, la cruzamos para transitar por una acera situada al otro lado. A un
centenar de metros de aquí alcanzaremos el final de la ruta, el Santuario de Lluc.
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PUNTOS DE INTERÉS
3. La Filosa de la Mare de Déu
1. Rotes de Caimari
Dice la leyenda que la Virgen hilaba en este lugar y cuando oía gente se refugiaba en las
cuevas cercanas; un día dejó la rueca y, cuando volvió, se había convertido en este peñasco.
El origen de este espacio singular proviene del establecimiento de tierras comunales procedentes de la desamortización que tuvo lugar en la primera mitad del siglo XIX. La consecuente parcelación y el trabajo de adecuación de las vertientes para el cultivo que realizó la
población local generó un conjunto de bancales, paredes, casetas y caminos, que fue declarado Bien de Interés Cultural en el año 2009.
2. Puig de n’Escuder
Cuenta la leyenda que sobre esta cumbre, de 573 metros, había una fortaleza donde se
refugiaron los últimos musulmanes rebeldes. Amet, un joven pastor sarraceno convertido al
cristianismo y bautizado Lluc, tropezó con ellos de vuelta del mercado de Inca. Huyó como
pudo y se escondió dentro de una cueva.
Descubierto desde lo alto del monte por los moros, estos soltaron a uno de los suyos dentro
de una tinaja sujetada con una cuerda. Al golpear con las rocas la tinaja se rompió, y su
ocupante cayó muerto delante de la cueva donde se encontraba Amet. "¿Estás bien?" Preguntaron los de arriba. "Bajad que yo estoy bien", contestó el niño fingiendo ser el atacante. Uno a uno fueron bajando, todos con el mismo resultado que el primero.
4. Camí Vell de Lluc
El camino viejo de Lluc es la principal vía de
peregrinación de Mallorca. Sus orígenes
datan del siglo XIII y su importancia histórica radica en ser el acceso al principal centro
espiritual de la isla: el Santuario de Lluc. Se
trata de un testimonio excepcional de la
evolución de la red viaria mallorquina a lo
largo de los siglos.
Encontramos todavía tramos de herradura,
anteriores al siglo XVIII, tramos empedrados del
camino Nuevo, construido alrededor de 1700 y
algunas muestras del camino vecinal proyectado a mitad del siglo XIX y, por último, la carretera, importante ejemplo del trabajo de los
ingenieros de finales del siglo XIX.
El tramo conocido como “sa Costa Llarga”
5. La Bretxa Vella y el Salt de
la Bella Dona
La Bretxa Vella es un estrecho paso abierto
con barrenos durante la construcción del
camino nuevo entre 1705 y 1714. Un centenar de metros más abajo se encontraba el
peligroso Pas des Grau donde el camino
remontaba la peña con un gran número de
curvas. En este punto, por donde pasa la
carretera actual y conocido como la Bretxa
Nova, se sitúa el milagro del Salt de la Bella
Dona. La leyenda dice que un hombre, sintiéndose traicionado por su mujer, la lanzó
al abismo. Llegado a la iglesia de Lluc la
encontró rezando delante del altar. La Virgen María la había salvado de la terrible
muerte.
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El Puig de n’Escuder
Rotes de Caimari
La Bretxa Vella
ETAPA 5
6. Son Amer
9. Es Porxets
La finca, antiguamente llamada Puig Ferrer,
es propiedad del Consell de Mallorca desde
1999. Las casas, situadas en lo alto de una
colina a 548 metros, disfrutan de una panorámica privilegiada sobre el valle de Lluc y se
han reconvertido en refugio donde se puede
comer y pernoctar.
En la finca quedan numerosos restos de las
actividades de los carboneros y diversas
fuentes: la Font del Puig Ferrer, que mueve
el molino de Lluc, la de Son Amer, que mueve el molino de Son Amer, y la Font de
s’Ermita, situada cerca del edificio que ocuparon los ermitaños de Sant Pere y Sant Pau.
Esta construcción ocupa prácticamente toda la vertiente de levante de la
Plaça dels Peregrins y fue construida
para dar albergue a los peregrinos y
sus caballerías. La planta es rectangular, con la cubierta a dos vertientes. La de poniente tiene dos alturas y
podemos acceder a la parte alta por
dos escaleras de piedra labrada y un
pasillo que descansa sobre pilastras.
La obra data de principios del siglo
XVIII y para financiarla los colegiales
aprovecharon los donativos de los
devotos.
7. Cruz de Ca s’Amitger
10. El monasterio de Lluc
Se trata de una reproducción de la cruz (la
original está en el Museo de Lluc) que antiguamente estaba situada en Ca s’Amitger y
Les casas de Son Amer
que fue trasladada a la plaza de los peregrinos cuando el estado requisó esta finca, en el año 1906. La cruz original es gótica y en el
capitel podemos observar los escudos del rey, el de la Universidad y el del militar Gregori
Sallambé. En el medallón, encontramos una representación de la Anunciación y en el reverso la Dormición de la Virgen.
Se sabe que ya a mediados del siglo
XIII había una capilla donde se veneraba a la Virgen Maria. Con el tiempo se fue extendiendo la devoción
hasta constituir el santuario más
importante de la isla. La iglesia actual, de planta basilical, empezó a
construirse en el año 1622 y finalizó
en 1724; las obras fueron dirigidas
por el maestro y escultor Jaume
Blanquer, autor también del retablo
mayor.
8. Cruz de Es Barracar
Situada delante de Ca s’Amitger, esta cruz es
uno de los medallones que estaban repartidos
por el camino Viejo de Lluc para acompañar a los
peregrinos en la subida al santuario.
Cuenta con elementos arquitectónicos de diferentes épocas como la
decoración de las bóvedas, realizada
en tiempo del obispo Campins
(1909-1914). En la capilla, detrás del
altar mayor, se encuentra el camarín
donde se expone la imagen de la
Virgen, probablemente del siglo XIV,
que cada año es visitada por miles
de peregrinos.
Su emplazamiento original estaba en la posada
des Barracar. Se trata de una cruz renacentista
con elementos góticos, hecha de piedra calcárea,
que consta de una base circular de tres peldaños, un fuste octogonal con el zócalo cuadrado,
y la cruz propiamente dicha, decorada con imágenes de la adoración de los Reyes y la ascensión de Cristo.
Cruz de Es Barracar
Es Porxets
El monasterio de Lluc
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