Conferencia General Octubre 1979 EL ARTE DE TOMAR DECISIONES por el élder L. Tom Perry del Consejo de los Doce Durante las ultimas conferencias, al abandonar el tabernáculo después de la sesión del sábado por la tarde, me ha sorprendido ver las largas filas formadas por hermanos deseosos de poder entrar a la sesión del sacerdocio, aun tres horas antes de que esta comenzara. Me he detenido a conversar con algunos de ellos, y para mi sorpresa, noté que la mayoría de ellos eran jóvenes poseedores del Sacerdocio Aarónico. Esta noche quisiera rendir homenaje a todos vosotros por vuestra devoción, sois una generación escogida, real sacerdocio, y quisiera dirigiros mis palabras en esta sesión de nuestra conferencia. Cuando recibí la asignación de hablar en la sesión del sacerdocio, llame al élder Backman, el nuevo director del programa de Hombres Jóvenes, y le pregunté si él deseaba sugerir algún tema que considerara de especial interés para los poseedores del Sacerdocio Aarónico Unos días mas tarde, recibí una nota del élder Backman con su respuesta, la cual decía lo siguiente: "La juventud se encuentra en el momento más interesante de su vida. Pronto le llegara el momento de tomar las decisiones mayores, las que moldearan su futuro, tales como ir a una misión, asistir a la universidad, escoger una profesión, contraer matrimonio, etc.". Su consejo era que hablara en cuanto al arte de tomar las decisiones correctas. Adjunto a su mensaje se hallaba una tira cómica de unos personajes muy conocidos, "La pequeña Lulu" y su amigo Memo, en la que este contempla una bola de nieve que tiene en las manos y observando la situación, Lulu le dice: "La vida esta llena de decisiones. Puedes decidir si lo deseas, tirarme esa bola de nieve, o no tirármela. Si decides tirarme la bola, te enterrare las narices en la tierra, pero si decides no hacerlo, te perdonaré la vida". Entonces Memo, tirando la bola de nieve a un lado con un poco de disgusto en su semblante, dice: "La vida esta llena de decisiones, pero yo nunca tendré la oportunidad de tomar una". Memo esta en lo correcto al pensar que la vida esta llena de decisiones, pero me doy cuenta que esta equivocado en la segunda parte. Las decisiones se hallan ante nosotros a cada paso. En la película El hombre y su búsqueda de la felicidad el hermano Richard L. Evans dijo lo siguiente: "La vida nos ofrece dos de los dones más preciosos, uno de ellos, el tiempo; el otro, el libre albedrío: la libertad de comprar con nuestro tiempo lo que queramos. Tenemos la libertad de canjear nuestro tiempo por emociones. Podemos darlo a cambio de deseos bajos, podemos invertirlo en la avaricia. Con él podemos comprar la vanidad podemos dedicar nuestro tiempo a la adquisición de cosas materiales conferenciageneralsud.wordpress.com Conferencia General Octubre 1979 Nuestra es la libertad de escoger. Pero no pensemos que esto es una ganga, porque en ello no encontraremos satisfacción duradera." Al principio del Libro de Mormón se encuentra un relato acerca de una familia que tuvo que tomar graves decisiones. Sólo imaginaos que sois parte de la familia de Lehi, y que vivís en aquellos tiempos en Jerusalén, en una casa bastante cómoda y segura, rodeados de las muchas cosas buenas que la vida ofrece. Al levantaros por la mañana, vuestro padre os llama a una reunión de familia, declara que ha tenido un sueno la noche anterior, y os comunica algo sorprendente: "Tomad con vosotros vuestras tiendas de campaña y todas las provisiones que podáis cargar en vuestras espaldas. No os preocupéis por el oro y la plata y vuestras cosas de valor, no tendremos lugar para ellos. El Señor me ha mandado que partamos para el desierto". Los registros dicen: "Y abandono su casa, la tierra de su herencia, su oro, plata y objetos preciosos, y no llevo consigo mas que a su familia, provisiones y tiendas, y se dirigió al desierto. " (1 Nefi 2:4.) Habéis marchado solo una distancia corta cuando vuestro padre tiene otro sueno. Os llama, y os dice: "He aquí, he tenido un sueno, en el que el Señor me ha mandado que tu y tus hermanos volváis a Jerusalén. Porque Labán tiene en su poder los anales de los judíos así como la genealogía de tus antepasados; y se hallan grabados sobre planchas de bronce. Por lo que el Señor me ha mandado que tu y tus hermanos vayáis a la casa de Labán para procurar conseguir los anales y traerlos aquí al desierto." (1Nefi 3:2-4.) Esta tarea asignada a los hijos era muy difícil, porque Labán era un hombre muy rico y poderoso. Ellos murmuraron contra su padre y dijeron que era cosa muy dura la que les pedía, pero uno de los hijos dijo a su padre: "Iré y haré lo que el Señor ha mandado, porque sé que él nunca da ningún mandamiento a los hijos de los hombres sin prepararles la vía para que puedan cumplir lo que les ha mandado." (1Nefi 13:7.) Estos jóvenes tuvieron que tomar muchas decisiones para acercarse a Labán a fin de obtener los registros. Es interesante para mi saber la forma en que lo hicieron. Primero, decidieron echar suertes para ver cual de ellos iría a la casa de su tío, y el azar señaló a Lamán. Este fue a verlo y se sentó a hablar con él, explicándole sus deseos de recuperar los registros que habían sido escritos en planchas de bronce. Esta petición irritó a Labán, quien enfurecido lo echó de su presencia y no le permitió que tomara los registros. Le dijo: "He aquí, eres un ladrón, y te voy a matar" (1Nefi .3:18). Eso fue suficiente para Lamán; huyó y les contó a sus hermanos que no estaba dispuesto a arriesgarse por ese trabajo. Entonces Nefi tuvo que tomar otra decisión para buscar la forma en que podían obtener las planchas. Pensó en todas las riquezas que habían dejado en su casa, el oro, la plata y todas las cosas preciosas, pensó que quizás pudiera juntar todas conferenciageneralsud.wordpress.com Conferencia General Octubre 1979 aquellas riquezas mundanas y comprar con ellas los registros; de manera que fueron a buscarlas, las llevaron a la casa de Labán donde le mostraron el oro y la plata y se los ofrecieron a cambio de las planchas de bronce. Cuando él vio todas aquellas cosas que eran extremadamente valiosas, las codició. Comparando a aquellos muchachos con la fuerza de todos sus criados, era fácil determinar que podía retener las planchas y apoderarse al mismo tiempo de las riquezas; envió a sus siervos para que mataran a los jóvenes, así es que estos tuvieron que huir dejando todas sus pertenencias. Las cosas mundanas no lograron conseguir los registros. Los hermanos de Nefi habían estado a punto de perder la vida dos veces, tratando de obtener los registros, de manera que ya no tenían confianza en Nefi, pero este tampoco se daba por vencido, y trato de hacerles razonar: "Volvamos a Jerusalén, y seamos fieles en guardar los mandamientos del Señor, porque él es más poderoso que todo el mundo. ¿Por que pues no ha de ser más poderoso que Labán con sus cincuenta, o con sus decenas de millares?" (1Nefi 4:1.) ¿Quién se atrevería a oponerse a tal razonamiento? Por supuesto, el Señor era más poderoso que Labán con todos sus criados. Así es que por la noche Nefi condujo a sus hermanos a las afueras de Jerusalén. Se introdujo sigilosamente en la ciudad, dirigiéndose a la casa de Labán; esta vez no podía confiar en la suerte, ni en las riquezas, sino en la fe. El dijo: "Iba guiado por el Espíritu sin saber anticipadamente lo que tendría que hacer." (1Nefi 4:6.) Al acercarse a la casa de Labán, vio a un hombre que había caído al suelo porque estaba borracho, al acercarse al, descubrió que era su tío y comprendió que este había sido puesto en sus manos para que pudiera obtener las planchas. Tomar decisiones con la confianza puesta en el Señor, da resultado. ¡Hay mucho que aprender de la decisión que tomaron los hijos de Lehi. Por supuesto, tomar una decisión al azar no es un método aceptable. Recuerdo en cierta ocasión cuando me encontraba en la Infantería de Marina, en una base de California, tuve que tomar al azar una decisión que estuvo a punto de colocarme en una situación un poco desagradable. Casi cada fin de semana mis amigos habían estado insistiendo en que los acompañara a bailar y pasar un buen rato en un salón en Los Angeles. Continuamente me instaban a que fuera, y después de varias semanas de negarme pensando que no era un lugar apropiado para mi, decidí acompañarlos aunque fuera una vez, dejándolo todo librado a la suerte y con la curiosidad de ver lo que sucedía. Esa noche nos dirigimos al gran salón en donde tendría lugar el baile. Nos encontrábamos viajando en un ómnibus; y cada vez que este se detenía en cada parada, subían varias señoritas. No era el tipo de jóvenes con las que siempre me había relacionado; eran totalmente distintas. Me sentía muy incomodo con ellas a mi alrededor, y cuando se me acercaban, optaba por apartarme, lo que era una actitud completamente extraña en un soldado. En los asientos traseros del ómnibus se conferenciageneralsud.wordpress.com Conferencia General Octubre 1979 hallaban cuatro jóvenes con una apariencia completamente diferente a las otras. Les pregunte si se dirigían al baile, a lo que me contestaron: "Si, pero no al mismo que va usted"; y luego agregaron: "Vamos al Barrio Adams, a un baile de los mormones. ¿Conoce la Iglesia Mormona?" Me sorprendí, sentí alivio y gustosamente me bajé con ellas del ómnibus, y pasé una noche encantadora en el Barrio Adams. Tened mas confianza en vosotros mismos en vez de permitiros dejar las decisiones al azar. La decisión que tomaron Nefi y sus hermanos de poner la confianza en las cosas del mundo, prueba que este enfoque falla tanto como cuando se actúa confiando en la suerte. Después de asistir a una conferencia de estaca, me puse a conversar con el padre de una jovencita, y este me habló de las malas influencias que habían tratado de impulsar a su hija a seguir los caminos del mundo, y de la forma en que la joven había decidido no dejarse dominar por ellas. Era la única chica miembro de la Iglesia en su clase; era una jovencita muy popular con los muchachos, y tenia muchas oportunidades de salir con varios de ellos. Los jóvenes en su clase no vivían de acuerdo con las enseñanzas de la Iglesia; por lo tanto, decidió que a cada chico que la invitara a salir, le hablaría de las normas por las cuales dirigía su vida; si deseaban salir con ella, debían comportarse de acuerdo con tales normas. Siempre obtenía una promesa de los jóvenes antes de aceptar cualquier invitación. Un día, uno de los mejores jugadores de fútbol, la estrella del equipo, se dirigió a ella un poco antes del baile especial del año y le dijo: "Sabes, me gustaría pedirte que fueras conmigo al baile, si te olvidaras un poco de tus normas". La chica no vaciló al contestarle: "Con salir contigo ya estaría olvidando mis normas". Al tomar vuestras decisiones, sed lo suficientemente valientes para no seguir los caminos del mundo. Nefi tuvo éxito cuando tomó la decisión de tener fe en el Señor y seguir Su camino. Hace algunos años, en el periódico de la Iglesia llamado Church News salió un artículo muy interesante acerca de un joven que había tomado la decisión de confiar en las vías del Señor. El articulo decía: "El presidente Spencer W. Kimball es una inspiración constante para la Iglesia, no por las cosas que dice, sino por lo que hace. Cuando dirigió su discurso en la Conferencia de Area en Estocolmo, reveló el secreto de su éxito. Dijo: 'Cuando me hallaba solo, ordenando las vacas, o apilando el heno, siempre tenia tiempo para pensar. Medité una y otra vez, y tomé la siguiente decisión: Yo, Spencer Kimball, nunca beberé ninguna clase de licor. Yo Spencer Kimball nunca fumaré ni tomaré café, ni te no por que pueda explicar por que no debo, sino porque lo ha mandado el Señor. El ha dicho que esas cosas son una abominación, y hay muchas otras que también lo son y que no están en la Palabra de Sabiduría; y así tomé una decisión. Lo hice cuando aun era un niño prometiendo que nunca participaría de esas cosas; y habiéndolo fijado en mi mente, fue mucho mas fácil seguir esa norma, y no conferenciageneralsud.wordpress.com Conferencia General Octubre 1979 ceder. Nos acosan muchas tentaciones, pero ni siquiera las analizo, ni me detengo a medirlas y a decir, ¿debo o no debo? Siempre me digo: Ya tomé la decisión de no hacerlo, por lo tanto no lo haré. Deseo decir únicamente que pronto pasará otro año y jamas he tomado te, café, o probado tabaco, licor ni drogas de ninguna clase. Posiblemente suene un poco vanidoso para vosotros, pero solamente he tratado de enfatizar este punto: Si todo joven, al ir creciendo y madurando y volviéndose mas independiente de sus amigos, familia, y de todo, puede decirse a si mismo no cederé, no importa la tentación que sea, ha hecho su decisión y eso estará ya establecido"' (Church News, 4 de octubre de 1975. Conference Report, Conferencia de Area en Dinamarca Finlandia, Noruega y Suecia agosto de 1974.) Si todos siguiéramos su ejemplo de tomar decisiones basadas en nuestra fe en el Señor Jesucristo, habría un gran cambio en nuestra vida. Juventud de noble linaje, tomad vuestra decisión aquí esta noche: "Iré y haré las cosas que el Señor me ha mandado"(1Nefi 3:7). Hay poder en Sus vías. No hay mayor gozo en esta vida que estar al servicio del Señor. Os doy mi testimonio solemne, de que si tomáis la decisión de vivir de acuerdo con Sus leyes, tendréis la vida eterna. En el nombre de Jesucristo. Amen. conferenciageneralsud.wordpress.com