El calendario musulmán El calendario musulmán empieza el año 662 de nuestra era, cuando Mahoma huyó de la Meca, su lugar de nacimiento al oeste de la península arábica, a Medina unos 350 kms. más al Norte. Sus doctrinas de un único Dios, Alá, que anunció le habían sido reveladas por el arcángel Gabriel, habían creado un auténtico revuelo en la Meca. En la Meca estaba la Kaaba, entonces dedicada al culto de varios dioses y un gran centro de peregrinación. Ocho años después Mahoma regresa a la Meca y empieza la gran expansión de la religión del Islam. Entraron en la península ibérica el 711, hasta que fueron derrotados por Charles Martel en Tours el 732. El esplendor científico y cultural musulmán empieza en Baghdad, cuando el 766 el califa al-Mansur funda allí su nueva capital. En una atmósfera tolerante y propicia, se fundó una nueva biblioteca que fue recogiendo los manuscritos que se habían salvado de de la persecución de las academias de Atenas y Alejandría y que se encontraban dispersos en distintos lugares del Oriente. Entre estos manuscritos estaban muchos de los textos de los antiguos griegos. El califa al-Mamun (813-833) fundó la "Casa de la sabiduría", un centro de estudio e investigación que duraría unos 200 años. Allí se tradujeron al árabe textos hindús y griegos. Entre ellos las principales obras de Euclides, Arquímedes, Apolonio, Diofanto y Ptolomeo. La matemática islámica desarrolló principalmente la aritmética decimal con fracciones decimales, que tomó de los hindúes, el álgebra, la trigonometría plana y esférica y la resolución numérica de ecuaciones y de sistemas de ecuaciones. Mucho de este desarrollo vino estimulado por uno de los grandes problemas de la astronomía y geodesia árabe, el de la qibla (o kibla), de deteminar la dirección a la Meca hacia donde debían mirar los creyentes durante sus oraciones. Entre los matemáticos más destacados están alKwarizmi (780-850), ibn al-Haytham (conocido en europa como Alzacén) (965-1039), al-Khayyami (1048-1131), al-Biruni (973-1055) y alKashi (1380-1429). De al-Kwarizmi, miembro de la casa de la sabiduría, viene la palabra "algoritmo". La palabra "álgebra" proviene de "aljabr", de la frase "al-jabr wa al-muqabala", que Kwarizmi utilizaba en sus escritos, "al-jabr" significa "trasponer" (de un lado al otrode la igualdad cambiando de signo), "wa" es " y", mientras que "al-muqabala" significa "simplificar". Por ejemplo al pasar de 3x+2=4-2x a 5x+2=4 es un ejemplo de "al-jabr", mientras que pasar de esta última a 5x=2 es "al-muqabala". Junto con Baghdad en Oriente, otro gran centro cultural apareció con el califato de Córdoba (9291031) en Andalucía. Su famosa Biblioteca del Palacio, llegó a contar con más de 400000 volúmenes. Entonces empieza el gran apogeo cultural español que llegaría a durar unos tres siglos. De entre sus más destacados astrónomos y matemáticos está Maslama de Madrid, Azarquiel de Toledo o al-Yyani de Jaén. Pero la edad de oro de las ciencias en la España musulmana fue entre 1036 y 1085, cuando el califato de Córdoba había ya desaparecido. Entre los distintos reinos de taifas en que se disgregó el califato, la de Zaragoza, controlada por la dinastía de los Banu Hud desde 1039 a 1110, sobresale especialmente. El tercer rey de esta dinastía, que reinó desde 1081 hasta su muerte el 1085, fue Abu Amir Yusuf ibn Ahmad ibn Hud, al-Mutamin. Este personaje, cuyos trabajos se han encontrado muy recientemente, parece haber sido uno de los más grandes matemáticos de la España musulmana. Al-Mutamin escribió una obra enciclopédica, el Kitab alIstikmal (Libro de perfección), de la que se han encontrado algunos fragmentos en Leiden, Copenague y el Cairo. Contiene la aritmética y geometría conocida hasta entonces, pero tiene una presentación novedosa y original. Entre sus temas están por ejemplo los números amigos, los números irracionales, la cuadratura de la parábola, etc. Una de sus aportaciones más interesantes es la presentación y simplificación de unos Lemas del libro de Optica de al-Haytham (escrito entre 1030-1040), cuando estudia la solución al famoso problema de Alhazen: Dadas la posición de un espejo circular (cóncavo o convexo), el ojo y un objeto, hallar los puntos de reflexión.