Transmilenio: ¿Qué ha pasado con la joya de la corona?.

Bromberg Zilberstein, Paul. (2006). Transmilenio: ¿Qué ha pasado con la joya de la corona? El
Tiempo.
Bogotá
D.C.
Disponible:
http://www.eltiempo.com/participacion/blogs/default/un_articulo.php?id_blog=3164&id_recurso=109
03&random=550
Transmilenio: ¿Qué ha pasado con la joya
de la corona?.
27/05/06|
Paul Bromberg
Haber gestionado el programa de cultura ciudadana
en su primera versión me permitió entender a fondo
qué tan compleja es nuestra ciudad y sus habitantes,
así como experimentar y medir qué quiere decir una
sociedad
plural
en
transición.
En una ocasión expuse a unos periodistas un juego de aritmética que
pensábamos que los maestros podían llevar a los niños para que ellos midieran el
ahorro como una tarea. Estábamos viviendo la emergencia del agua.
- Debe tomarse tal medición, restarla de tal otra y luego dividir por… - decía yo. En
ese
momento
escuché
un
grito:
- ¡Socorro! ¡Divisiones y restas! ¡La administración nos va a pedir que hagamos
divisiones
y
restas!
Por supuesto, olvidamos la idea. Descubrí que en “alfabetismo numérico”, como
ahora sé que se le llama técnicamente, los colombianos somos contrarios a
nuestro comportamiento político: mientras en el primero sabemos sólo sumar y
multiplicar, en el segundo en general solamente restamos y dividimos.
Recientemente encontré en La ilusión económica (Emmanuel Todd, Taurus, 1999)
una reseña de las mediciones de la Encuesta Internacional sobre la Alfabetización
de los Adultos, que intenta medir la “alfabetización efectiva”, es decir, “hasta qué
punto los adultos saben servirse de la información escrita para moverse en el
mundo”. Los resultados se agrupan en cinco niveles, desde el nivel 1, individuos
que tienen capacidad muy reducida, que por ejemplo tienen dificultades para
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entender instrucciones de un medicamento, nivel 2 equivalente a una educación
primaria, hasta el nivel 4 y 5, equivalente a una educación superior. He aquí un
trozo de la tabla que cita el autor:
Comprensión de textos esquemáticos.
Porcentaje de adultos (16-55 años) en
cada nivel
Nivel 1
Nivel 2
Problemático Primaria
Niveles 4
y5
25.9
Superior
19.0
Suecia 6.2
18.9
35.5
Polonia 45.4
30.7
5.8
EU
23.7
¡Casi el 50% de los habitantes adultos de los EU tienen dificultades – la mitad de
ellos están imposibilitados – para comprender un esquema! Lo de Polonia raya en
el escándalo. La tabla que transcribe Todd no tiene ningún país parecido al
nuestro.
¿Dónde
estaremos?
Cuando me enteré que la administración había preparado un nuevo modelo de
prestación del servicio de Transmilenio cuyas instrucciones venían en colores, me
imaginé un esquema muy claro, diseñado cuidadosamente para superar todos
esos escollos que tienen los bogotanos para asimilar información rápidamente. Al
fin y al cabo, Transmilenio es la joya de la Corona. Pero he aquí lo que me contó
María:
"Omaira se vino con el bebé del portal Usme. Alguna
persona con uniforme le dijo que cogiera el D20 que la dejaba en la 76. Resulta
que no, porque no para ahí, le tocó bajarse en el Polo. Esperó para coger uno de
regreso, un H20 que no paró en la 76, donde habíamos quedado de encontrarnos,
sino en Marly. Le informaron de otro y finalmente llegó a la 76. Perdimos la cita
médica.
El regreso fue peor. Le preguntamos a un señor de
chaleco rojo y nos dijo que cogiéramos el H60 que nos llevaba hasta la 40 sur y
preguntáramos. Allí le preguntamos a un auxiliar de policía y nos dijo que
cogiéramos el H73 y resultamos en el Tunal. Quedamos solas en el bus con
Omaira y el bebé. Le preguntamos al conductor que con grosería nos dijo “a mí
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qué, bájense y miran el mapa”. Mucha gente estaba mirando un mapa imposible
de leer. Nadie entendía y todos gritaban. Le preguntamos a otro señor de chaleco
rojo cómo regresábamos a la 40 sur. “Cojan ese, rapidito, rapidito”. Cuando nos
acercamos a la puerta en la 40 sur y nos alistamos para bajar, el bus siguió
derecho y paró hasta el Restrepo. Ya habíamos completado una hora yendo y
viniendo. Ensayamos con el H17 y tuvimos suerte. Por fin habíamos llegado. Yo
he visto a varias personas llorando por todo lo que tienen que pasar".
- María, venga yo le explico, déme el mapa – le dije, mientras pensaba en los
resultados
de
Todd
Al rato ahí estaba yo, tratando de interpretar el mapa, sin los afanes de Omaira
cargando un bebé, cómo ir desde el Portal de Usme hasta la estación El Virrey. Lo
miré 10 minutos: no pude. ¡Cómo sería de simpático que le hicieran un test de
esos
al
alcalde,
en
una
entrevista!
Yo
lo
perdí.
¿Quién ahorra con este nuevo esquema de rutas, unas que paran aquí y no allá
pero entre tal y tal hora pero tales y tales días pero en tales y tales condiciones
pero en tal y tal y tal…? ¿Qué hace tan necesario hacer todo esto tan complejo?
¿Quién gana? ¿Cuánto? ¿Qué tan correcto es atormentar al usuario por no
sabemos qué? No soy usuario de Transmilenio, pero me temo que ante el
aparente descuido, cada vez más quienes apoyan el sistema son quienes no
tienen que usarlo cotidianamente. ¿Qué pasó con la joya de la Corona?
por: metafora_99 - (29 comentarios )
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