CAPITULO SEXTO: LA CONSTRUCCIÓN DE TONALIDADES MAYORES La tonalidad de una canción es el conjunto de notas por el que se desenvuelve la melodía y a la vez el conjunto de acordes con se armoniza esta melodía. Este conjuntode notas se miden por su relación con una nota, que es la que da el nombre a la tonalidad y por tanto se la denomina tónica. De esta nota también se toma el acorde que da el tono a la tonalidad y se denomina por tanto tónico de forma que una canción siempre empieza y termina por este acorde, lo que implica que la melodía empieza y termina por una de las tres notas de la tríada que compone ese acorde y se ejecuta por las notas de la escala que toma por referencia la tónica de ese acorde. Existen gran cantidad de formas de componer tonalidades distintas, de hecho se han contabilizado más de quinientas escalas diferentes. En la música tradicional se usan las llamadas escalas diatónicas, de siete notas, pero existen más: como las cromáticas, con las doce notas, y las famosas pentatónicas, que se forman tan solo con cinco notas y son muy utilizadas para puntear en el rock, existen incluso formas músicales dividen la distancia entre los tonos con medidas más cortas que los semitonos. Todas ellas son útiles para hacer ejercicios de digitación porque componen la estructura sobre la que se ejecutan las melodías pero en las canciones de la música tradicional se utilizan tan sólo dos modalidades de tonalidad; la tonalidad mayor y la tonalidad menor melódica, aunque esta última es susceptible de tocarse con una cadencia natural o con una cadencia andaluza, utilizando de otra manera el orden e importancia de los acordes que se utilizan,es decir, utilizando el acorde dominante como acorde principal en vez del acorde tónico (ver más abajo). Así pues para construir una escala diatónica, con siete notas, vamos a nombrar a cada una de las notas con la posición que ocupan en la escala, lo cual nos informará rápidamente del intervalo (número de tonos) que registra en relación a la tónica. Dado que esta notación data de tiempos de los griegos no se utiliza el cero y se denomina primera nota a la propia tónica, de forma que la segunda, tercera, cuarta, quinta, sexta y séptima nota se construyen en referencia a esa primera nota, o a la octava, que es siempre la misma que la primera pero en un registro más alto. Tenemos que tener en cuenta además que cada una de las notas además de su nombre de intervalo recibe otro nombre según la posición que tenga haciendo este referencia a la funcion que ejerce esa nota en la propia tonalidad: Tónica la primera, supertónica la segunda, mediante la tercera, subdominante la cuarta, dominante la quinta, superdominante la sexta y sensible la séptima. Las escalas de las tonalidades mayores se forman con los intervalos que siguen: Posición 1 2 3 4 5 6 7 8 Nombre de la nota Nº de semitonos Tónica 0 Supertónica 2 Mediante 4 Subdominante 5 Dominante 7 Superdominante 9 Sensible 11 Tónica 12 Intervalo Primera Segunda Tercera mayor Cuarta Quinta Sexta Séptima mayor Octava De este modo se puede construir una escala mayor partiendo de cualquier nota simplemente calculando los intervalos entre cada una de las notas que componen la escala. De hecho, lo normal es aprenderse la digitación de la escala mayor tomando como referencia por ejemplo la nota más grave, para poder reproducir una escala mayor desde cualquier registro. También existen otras digitaciones que toman como referencia por ejemplo la tercera o cuarta nota, o en la guitarra la nota más grave de una determinada cuerda de manera que se puedan improvisar punteos en cualquier tonalidad. En la música tradicional verata no obstante los punteos se ejecutan con el laúd y la bandurria, y estos instrumentos están fabricados, al igual que la guitarra, pensando en una digitación propia para cada tondalidad que conviene memorizar: son las escalas. Estas nos proporcionaran la estructura de notas que vamos a emplear para tocar una canción en un tono determinado, sin perjuicio de que existirán muchas que tengan alguna salida de tono empleada como recurso para realzar una parte de la canción. De este modo si consruimos una escala mayor desde la nota Do, tenemos la reconocible escala compuesta de notas naturales (sin sostenidos ni bemoles) Do- Re- Mi-Fa- Sol- La Si Do. De hecho las notas recibieron en su día su nombre latino al bautizar con la primera sílaba de un canon gregoriano que ejecutaba una frase en cada nota de esta escala. Así pues, si desde Do calculamos un intervalo de segunda (un tono= dos semitonos) tenemos la segunda nota (RE), si calculamos un intervalo de tercera mayor (dos tonos = cuatro semitonos) tenemos la tercera nota (MI), y asi sucesivamente hasta calcular todas las notas de la escala. Si vamos haciendo esto desde otras notas vamos obteniendo la notas de las escalas correspondientes a cada una de las diferentes tonalidades mayores. En esta tabla recogemos las más utilizadas. Tónica Supertónica Mediante Subdominante Dominante Superdominante Sensible Nº alteraciones DO RE MI FA SOL LA SI 0 SOL LA SI DO RE MI FA# 1# RE MI FA# SOL LA SI DO# 2# LA SI DO# RE MI FA# SOL# 3# MI FA# SO# LA SI DO# RE# 4# SI DO# RE# MI FA# SOL# LA# 5# FA SOL LA SIb DO RE MI 1b Sib DO RE MIb FA SOL LA 2b Hemos añadido en la última fila el número de alteraciones, es decir, el número de notas con sostenidos o bemoles que tiene esa escala y que en el agunos instrumentos como los de viento, indicará la dificultad de la misma a tener estas notas otra forma de ejecutarse diferente, ya que en muchos de estos instrumentos la afinación no es cromática, sino que está pensada para tocar en un tono determinado, generalmente do. Se puede observar que la escala mayor que tiene todas las notas naturales es la de Do, pues no tiene ninguna nota con sostenidos o bemoles. La que tiene una sólo sostenido es la de de Sol, que tiene la sensible en una nota alterada Fa#. La que tiene dos sostenidos es la de Re, que además de Fa#, que en este tono ocupa la posición de mediante, tiene su sensible en una nota alterada, Do#. La que tiene tres sostenidos es la escala de La mayor, que además de Fa# (superdominante) y Do # (mediante), tiene su sensible en una nota alteradada, Sol#. La escala de Mi mayor tiene además Re# y la escala de Si mayor otro más al estar aumentada también su sensible: La#. Por el contrario, la escala de Fa mayor tiene también una sola alteración al tener todas las notas naturales excepto Sib, y la escala de Sib mayor tiene dos alteraciones al tener la propia Sib, y Mib. Esto hace que si tenemos en cuenta cual es la nota sensible de cada tonalidad podamos conocer perfectamente los nombre de las notas que la componen. Para ello basta con enumerar las notas desde la tónica y tener en cuenta cuales son las que tienen sostenido (comprobad con el cuadro de más arriba): DO: ninguna alteración SOL: un sostenido, la sensible, que es Fa# RE: dos sostenidos; Fa# y la sensible, que es Do # LA: tres sostenidos; Fa#, Do# y la sensible, que es Sol# MI: cuatro sostenidos: Fa#, Do#, Sol# y la sensible que es Re# SI: cinco sostenidos; Fa#, Do#, Sol#, Re# y la sensible que es La#. El truco para memorizar este orden es buscar estas notas en la guitarra, el laúd o la bandurria, puesto que estas notas están a una distancia de intervalo de cuarta en el cual se afinan estos instruemntos. De esta forma en la guitarra tenemos MI- SI- SOL- RELA- MI (entre la segunda y la tercera no existe esta relación por tener una variante en la afinación) y en el láud tenemos que las notas de los terceros trastes de cada cuerda son: DO-SOL-RE-LA-MI-SI. Este orden de las notas colocadas en intervalos de cuarta también nos servirá para memorizar la secuencia de acordes que utilizaremos para armonizar una canción ya que nos dará las distancias entre el acorde tónico, el dominante y el subdominante (ver más abajo) Por otro lado si las alteraciones son bemoles en vez de sostenidos tenemos. DO: ninguna alteración FA: una alteración: Sib SIb: dos alteraiciones, Sib y Mib Así pues, dado que en un pentragrama se pone al principio las alteraciones que lleva la tonalidad, basta con contar el número de sostenidos o bemoles que se colocan antes de que empiece la melodía para saber el tono por el que estamos tocando. GRUPOS DE ACORDES PARA TONALIDADES MAYORES Los acordes se utilizan para armonizar una canción de forma que se ejecuta el acorde siguiendo un ritmo en el que se distingue la cadencia del compás, (es decir, las partes fuertes y débiles del compás) y se cambia de acorde cuando se produce un acento en la melodía. La nota que pulsamos en ese acento siempre tiene que formar parte de las notas que componen el acorde al que hemos cambiado, de otro modo sonará desafinado al no corresponderse los sonidos del instrumento melódico (laúd, bandurria, flauta, violín o voz) del de acompañamiento (guitarra rítmica, pero también guitarro, requinto, ukelele, charango etc). Por eso si sabemos las notas que conforman un acorde podremos elegir la armonización más bella para una melodía, pero no hace falta recurrir a este tipo de artimaña ya que si conocemos las tonalidades estas nos informarán de los acordes que suenan bien y tan sólo con tres podemos armonizar casi cualquier canción que se toque por tonos mayores. De este modo para armonizar una tonalidad mayor usaremos principalmente un sistema de tres acordes también mayores, aunque en uno de ellos incluiremos la séptima nota de la escala y será por tanto un acorde de cuatro notas denominados “séptima”. Estos tres acordes reciben el nombre de tónico (lógicamente el que parte de la misma nota de la escala que conforma la tonalidad), otro que se denomina dominante y que es el que se utiliza con la séptima nota, y al que se considera el acorde principal, el subdominante, que se utilizará (al menos en la música tradicional verata) como acorde complementario. También podremos usar otros tres acordes llamados relativos menores asociados cada uno al mayor correspondiente, así, están el relativo menor, el relativo menor dominante, y el relativo menor subdominante. LOS TRES ACORDES PRINCIPALES Es conveniente saberse de memoria los grupos de acordes que corresponden a cada tonalidad, lo cual no es nada complicado porque estos acordes se sacan utilizando los intervalos de cuarta en los que están afinados la guitarra, el laúd y la bandurria, por lo que el acorde dominante será siempre el que está “encima” del tónico y el subdominante el que está debajo del mismo. Veamos ese proceso de forma más detenida. Hemos visto que el acorde tónico de una tonalidad mayor será el acorde mayor formado desde la nota de referencia que da nombre a la escala. Si es una tonalidad de Do mayor el acorde tónico será Do mayor, si la escala es La mayor, el tónico será La mayor, etc. Por el contrario, el acorde dominante, utilizado usualmente con séptima, se saca tomando por nota de referencia la quinta nota de las escala (siete semitonos), así el acorde dominante de la tonalidad de LA, será Mi7. Esto es muy sencillo pues la quinta nota es la que está situada en el mismo traste una cuerda más arriba cuando estamos en el laúd, la bandurria o en las cuatro cuerdas superiores de la guitarra. De la misma manera, el acorde subdominante se saca tomando por nota tónica la cuarta nota de la tonalidad (cinco semitonos). En este caso será la que está inmediatamente debajo. En la tonalidad de LA será Re el acorde subdominante. Como se puede ver, tanto la guitarra como el laúd están afinados en cuartas para que el acorde dominante sea el que cae justamente por encima del tónico y el subdominante el que cae por debajo, con lo que hace que resulte sencillo tocar con canciones de dos o tres acordes, que son abundantes en la música tradicional ya que sólo habrá que movers el acorde arriba y abajo. Si colocamos en un cuadro las notas colocadas en intervalo de cuarta, tal y como nos las encontramos en nuestro insrumento, tenemos una manera fácil de averguar cual es el acorde dominante y cual es el acorde subdominante de cada tonalidad. Para ello basta con añadir la séptima al acorde superior para utilizarlo como dominante y utilizar el inferior como subdominante. Tónica Si Mi La Re Sol Do Fa Sib (La#) Mib (Re#) Lab (Sol#) Reb (Do#) Solb (Fa#) Dominante Fa#7 Si7 Mi7 La7 Re7 Sol7 Do7 Fa7 Sib7 Re#7 Sol#7 Do#7 Subdominante Mi La Re Sol Do Fa Sib Re# Sol# Do# Fa# Si LOS RELATIVOS MENORES El caso es que con estos tres acordes mayores, el tónico, el dominante y el subdominante, se pueden armonizar casi todas las canciones que van por tonos mayores, pues contienen la totalidad de las notas de la escala, sin embargo muchas veces notaremos que para armonizar más elegantemente necesitaremos recurrir a los relativos menores pues los acentos recaen en notas del mismo acorde y necesitamos un cambio de acorde para armonizarlo.. Para ello determinaremos el acorde denominado relativo menor de la tonalidad y a partir de este buscaremos el relativo menor dominante y el relativo menor subdominante, que son los que nos posibilitaran ese efecto de introducir sonidos menores cuando se tocan por tonos mayores, aunque muchas veces se utilicen sólo como acordes de paso, para cambiar la sonoridad del tema que se esté armonizando. Para formar el relativo menor partiremos de la sexta nota (nueve semitonos), y a partir de este buscamos al que sería su dominante y su subdominante. El intervalo de sexta encuentra mejor usando su inversión, que nos es otro que un intervalo de tercera menor contado hacia atrás. Como se puede ver, al formar el relativo menor usamos la nota que da nombre a la tonalidad como parte del acorde, pues este se forma con la tercera menor (que será la tónica de la tonalidad) y la quinta (ver capitulo de acordes). Por tanto en la tonalidad de LA el relativo menor serrá Fa#m. El relativo menor dominante se consigue contando un intervalo de tercera mayor desde la que da la tonalidad o un intervalo de quinta desde la da el tono al relativo menor. En LA el relativo menor dominante será Do#m. El relativo menor subdominante se forma con un intervalo de segunda desde la tónica y un intervalo de cuarta desde la tónica del relativo menor. Este es Sim para el caso de LA. Como se ve en este caso todos los relativos menores se han de formar poniendo el dedo índice a modo de cejilla. Si colocamos la cejilla de verdad en el segundo traste, tocaríamos con las posturas de la tonalidad SOL para que sonara por LA y nos encontraríamos con menos acordes que necesitaran poner el dedo de cejilla. Así pues para tocar una canción de tres acordes partiremos de la tónica y subiendo a la postura de una cuerda más arriba estamos en el dominante y bajando una más abajo en el subdominante pues los instrumentos están diseñados para que sea sencillo manejarlos. Nos encontraremos con canciones de tres acordes en infinitud de ocasiones, muy pocas jotas usan más acordes. Pero las toná's, más antiguas, si que suelen moverse por los relativos menores. Como los acordes mayores suenan alegres, al cambiar los relativos menores se juega con el cambio a sonidos tristes, cambio que también se puede conseguir cambiando la tonalidad entera de la canción al modo menor (o al mayor si ya estábamos en él). Muchas veces cuando estamos en el acorde tónico y vamos a pasar al subdominante meteremos la séptima en aquel algún compás antes de hacer el cambio, esto le da una sensación de complemento muy lograda. EL ESTUDIO DE LAS ESCALAS MAYORES Para empezar a familiarizarse con las tonalidades mayores se recomienda empezar por la de Do mayor, por ser la escala que tiene todas las notas de la escala natural, y no tiene por tanto sostenidos ni bemoles. Luego lo usual es pasar a familiarizarse con la Tonalidad de Sol mayor, que tan sólo tiene un sostenido, Fa, que se corresponderá además con la séptima nota de la escala de sol. Posteriormente pasaremos a familiarizarnos con la escala de Re, que tiene dos sostenidos, uno de ellos será Fa, al igual que en la tonalidad de Sol, y el otro será la correspondiente a la séptima nota de su escala, o sensible, en este caso Do#. La tonalidad que tiene tres sostenidos es la de La, que además de Fa# y Do# presentes en Re tiene la séptima nota de su escala, o sea, Sol#. Finalmente nos familiarizaremos con la escala de Mi, con Re# además de Fa#, Do# y Sol# presentes en La. Sin embargo la ejecución de notas alteradas, sostenidos o bemoles, en el laúd y la bandurria no presenta ningún tipo de dificultad añadida, porque se encuentran situados en el diapasón al igual que las naturales. Consideramos no obstante que es conveniente empezar a practicar las escalas por Do para familiarizarnos con los nombres de las notas que las componen, pero que debemos centrarnos en conocer bien la escala de La mayor, por ser la más cómoda de tocar en el laúd, lo que la acaba convirtiendo en la más utilizada.