«Bazon tiene t contestaron a u n tiempo los curiosos, que al oirlo volvieron la cabeza, para saber de donde procedía aquella voz hueca y cascada. «Razón tengo» añadió el vejete, volviendo á colocarse ante los ojos unos enormes lentes. Y dirigiendo su vista hacia el cartel, de este modo prosiguió : ¿Díganme sus mercedes si merece Tan mal pago del público el ahinco ? Testigo es el cartel de hoy veinte y cinco, De que no entra en vereda don Javier. Tres de Gavina y tres , según parece , De Tellez de León. Los picadores Alvarez y Martin: los matadores í- f Lavi, Sanz y Muñoz vuelven á ser. ' ' Y todo porque la época avanzada en que se verificó la subasta de la plaza, continuó el viejezuelo , le ha impedido á la empresa llevar adelante sus buenos propósitos; aunque no el conservar los exorbitantes precios que antes tenían los asientos , en lo cual apenas ha nacido, ha comenzado á manifestar poi; lo claro que tiene también como su antecesora, muy desarrollado el órgano taurómaco-adquisitivo. Y dio el grupo alborotado . U n a fuerte carcajada, ,,, Y cada cual por su lado Se marchó sin decir nada. Y en esto, llegado el día como se fuese acercando la hora , comenzaron á cruzar coches y calesas por las calles, y á estacionarse ómnibus y faetones en la Puerta del Sol; y ya mas tarde el pueblo aficionado se puso en movimiento, marchando en dirección del redondel, donde dentro do muy poco se dio principio á la función en esta forma. .i.¡; Dio su redoble el timbal, Salió ufano el alguacil, Y entre mil gritos y mil, Abrióse, al dar la señal, El cerrojo del toril. :'-;',}:! Y salió el primer toro, de Gaviria, retinto, buen mozo, y bien armado. Tomó seis varas, tres de Martin y otras tres de Alvarez, á quien mató un caballo. Le pusieron luego dos pares y medio de banderillas , y se presentó en la palestra el hermano Lavi, que vestía un lindo traje verde, bordado de plata. Fuese al hicho en seguida como un héroe , Díüle un pase , y tras él con mucho garbo , Una buena, arrancando á un mismo tiempo : Y queriendo después descabellarlo , Lo logró á la primera , y mil palmadas A un tiempo en todo el circo resonaron. Y hé aquí que se oyeron de nuevo los timbales, á cuyo redoble se presentó el segundo toro, de TeUez de León, pelo castaño, ojinegro y feo. Aunque de calidad blando, tomó quince varas, nueve de Martin y seis de Chola • que perdió un jamelgo. Cargó aclo continuo con cuatro pares y medio de rehiletes, y después de su correspondiente brindis, le salió al encuentro Cayetano, que vestía azul turquí y plata. Descompuesto el becerro de cabeza , Díóíe algo en qué pensar ; mas de un pinchazo I artiendo á volapié , y de otro idem, Dejándolo en el acto descordado , Sin decir tus ni mus , ni oste ni moste , Lo mandó á descansar al otro barrio. Hermano del segundo por su descendencia, pelo, estamy calidad era el tercero. Se contentó con ocho varas, repartieron por mitad ambos gínetes , si bien solo bailo de Cliola fue la triste victima de este combate; y luego que le hubieron clavado cuatro pares , le dio porte Lavi, después de dos pinchazos, de una buen cibiendo. Al tercero siguió el cuarto, que fué de Gaviria , retinto, corniabierto y brabucon. Mucho le gustaba á este animalito atacar por retaguardia al enemigo ; y asi fué que de diez varas que tomó, seis de Chola y cuatro de Martin, mató tres caballos ; uno á esle y dos al otro : el primero en un recargo por la espalda , después de la vara ; y el segundo lo mismo en un descuido. Llevó en castigo cuatro pares de banderillas, que , por los saltos que daba , se conocía que no le habían sabido á almendras , y le mató Cayetano de un volapié muy bueno. Merece mención un pase de pecho forzoso al toro en un arranque que dio buscando el bulto. El quinto , no matar. No fué sin embargo de este modo de pensar el toro de Gaviria que siguió al cuarto , retinto oscuro , cornícorto y de no muy buen trapío , pero el héroe de la fiesta á no dudarlo. Salió de estampía , y aun estuviera corriendo , si Lavi no le hubiese quebrado algo las piernas con tres buenas suertes de capa que le hizo. Aunque empezó un poco blando , Tal dio luego en cornear , ti , i,i-1 i Que con él los picadores '' "' ' " '^" No hicieron mas que rodar. ' ' ',' Trece varas le puso Chola , y ufras tantas ^eros ó pocas menos vino ú tierra , perdiendo en ellas cuatro jacos; siendo de notar una de las caídas en que con grande serenidad y no menos peligro le sacó de entre las astas del toro uno de los monos sabios , ó sea mozo de la plaza , lo cual nos mueve á hacer de él mención honorífica en esle articulo. No mas feliz Martin , le puso nueve, rodó también de lo lindo, y perdió dos caballos. La señal de banderillas dio fin á tan repetidas catástrofes, y después de fres pares que le clavaron Volvió Lavi á coger trapo y espada, El toro de las tablas no salía, Y el doncel con su panza muy sacada Lo miraba tranquilo y se reía. iíb'íidBd:-':- Pero como pronto se le agotó la paciencia, se tiró á él como un alano y le empampiruló un volapié , que fue demasiado alto, por babor precipitado ía suerte. Aunque muy entero todavía, quiso descabellarlo y hubo de suceder un lance en que solo su buena estrella le salvó. Al obligar al toro á que humillase, arrancó éste, y ya Lavi entre las astas le metió el estoque por donde pudo y cayó el hicho descordado y muerto, única salvación posible en aquel caso. Sin esta tan notable casualidad no sabemos que hubiera sido de la barriga del valiente matador. El sesto toro de Tellez, albardado, corniveleto y blando, nada hizo de provecho. Recibió cinco varas, tres do Martin y dos de Chola á quien, sin saber cómo le despachó un caballo. Aplicáronle en seguida tres pares y medio de rehiletes y lo mató íianz de una buena recibiendo en hueso y de otra baja. Este toro saltó la barrera. La función, sí no os enoja, Como la tarde , fue fria , Y según lo merecia La entrada bastante floja. Los de á pie por lo mediano^', Los de á caballo fatales, Y en fortuna casi iguales' '•' ' :• '• • Don Lavi y don Cayetano:' •' - f '• Trece caballos sin vida Quedaron en la refriega , Mas ni así ni con mas llega A regular la corrida. ' Parece que el lunes próximo veremos á Ci/chitrcs. el martes por consiguiente nos reservamos , dia en fin de dar la descripción de todas ellas , fijamos ia del periódico, mientras duran las funciones.