GLOSARIO DE TEORÍA DE LA IMAGEN

GLOSARIO DE TEORÍA DE LA IMAGEN
FUENTE:
Rudolph Arnheim: El poder del centro, Alianza, Madrid, 1988.
Anclaje: dependencia de un objeto visual respecto de una base cuyas fuerzas influyen en la dinámica del
objeto. El peso visual, por ejemplo, puede verse afectado por un centro de atracción al cual esté anclado el
objeto.
Anisotropía: asimetría del espacio gravitatorio en virtud de la cual la naturaleza y el comportamiento de los
objetos perceptuales varía según su posición y la dirección de las fuerzas que emite y recibe.
Arte: capacidad de los objetos o acciones perceptuales, sean naturales o artificiales, de representar, través de
su aspecto externo, constelaciones de fuerzas que reflejan aspectos importantes de la dinámica de la
experiencia humana. Una obra de arte es una creación humana con la que se pretende representar tales
aspectos dinámicos mediante una forma ordenada, equilibrada y concentrada.
Campo: alcance de un sistema de fuerzas. Al aumentar la distancia a los centros generadores, el campo se
reduce a un espacio vacío.
Cartesiana, cuadrícula: sistema de rectas perpendiculares, sea en una superficie bidimensional, sea en el
espacio tridimensional.
Cartesianas, coordenadas: sistema de referencia de dos ejes en la superficie plana o de tres en el espacio
tridimensional. Coincidentes en el centro y perpendiculares entre sí, las coordenadas pueden servir de marco
de referencia para situar objetos en la composición visual. Dinámicamente, estos ejes se cortan en el centro de
equilibrio de la composición, sirviendo también de bases para las fuerzas visuales. Lo que está situado sobre
los ejes posee un máximo de equilibrio visual.
Centrado, sistema: sistema organizado en torno a un centro, sea bidimensionalmente, sea
tridimensionalmente.
Centro: geométricamente, el centro se define exclusivamente por su posición como el punto equidistante de
todos los puntos homólogos de una figura regular. Desde un punto de vista físico, el centro es el fulcro en
torno al cual se equilibra un objeto. Perceptualmente, el centro de equilibrio es el punto en que se hallan en
equilibrio todos los vectores que constituyen un esquema visual. En un sentido más general y con
independencia de la ubicación, todo objeto visual constituye un centro dinámico por ser la sede de las fuerzas
que surgen de él y convergen hacia él.
Composición: distribución de elementos visuales que crea un todo autónomo, equilibrado, y estructurado de
manera tal que la configuración de fuerzas refleja el sentido del enunciado artístico. La composición de la
forma se refiere a la distribución de elementos en el espacio bi- o tridimensional; la composición del color se
basa en relaciones sintácticas tales como la semejanza, la complementariedad y el contraste, así como en las
relaciones entre los matices primarios y secundarios.
Constancia: medida en que los objetos del mundo físico parecen poseer la misma forma y el mismo tamaño
que tienen físicamente. El espacio objetivo (q. v.)* tiene un cien por cien de constancia, en tanto que el
espacio proyectivo (q. v.) carece de ella. Las experiencias visuales reales poseen un grado de constancia
intermedio.
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Desplazamiento: el emplazamiento visual del punto central o de un eje central puede desviarse de su posición
geométrica. Tal cosa ocurre, por ejemplo, cuando una masa, o una columna, o una línea divisoria usurpan la
función de un eje central vecino, o cuando los componentes de un esquema se equilibran en torno a un punto
algo apartado del centro geométrico.
Desviación: es frecuente percibir las formas o las direcciones como desviaciones de una norma. Ciertas
elipses parecen desviaciones de la circunferencia. Es posible asimismo que una línea inclinada parezca pugnar
por acercarse a la base de referencia o por alejarse de ella. La desviación es la principal fuente de la dinámica
(q. v.) visual.
Dinámica: tensión dirigida que se percibe en los objetos visuales. Los portadores de la dinámica son los
vectores (q. v.).
Equilibrio: estado dinámico en el que las fuerzas que constituyen una configuración visual se compensan
mutuamente. La mutua neutralización de las tensiones dirigidas produce un efecto de inmovilidad en el centro
de equilibrio.
Espacio: medio constituido por la totalidad de las relaciones de forma, color y movimiento. En toda
experiencia visual participan las tres dimensiones del espacio. La percepción de lo plano es el caso límite en
que la profundidad, la tercera dimensión, alcanza un mínimo. El espacio pictórico posee el grado de
profundidad que la proyección (q. v.) aporta. Lateralmente, el espacio pictórico puede estar confinado por un
marco o extenderse un poco por detrás y más allá de dicho marco.
Estructura: configuración de fuerzas, en tanto que cosa distinta de un esquema de meras formas, desprovista
de dinámica. El arte y la ingeniería se interesan por la estructura; la geometría no.
Explicitación: representación real de rasgos estructurales por medio de material estimular, por ejemplo, un
punto negro que señala el centro o una pared que señala una partición.
Expresión: capacidad de la dinámica visual para representar la dinámica de los estados del ser mediante los
atributos de forma, color y movimiento. Gracias a la expresión pueden actuar las obras de arte como
enunciados o proposiciones.
Figura y fondo: distinción entre los objetos perceptuales y el espacio que los circunda. Por regla general una
figura observada parece estar delante de un fondo ininterrumpido –la representación más elemental de la
profundidad en el dibujo y la pintura. Dinámicamente, las figuras y los «espacios negativos» del fondo son
centros de fuerzas que se equilibran mutuamente.
Formato: forma y orientación espacial de un cuadro enmarcado, especialmente en cuanto a la diferencia entre
un rectángulo vertical y otro horizontal. El formato lo determina la razón entre anchura y altura.
Gestalt: campo cuyas fuerzas están organizadas en un todo autónomo y equilibrado. En una gestalt los
componentes interactúan de tal manera que un cambio en el todo influye sobre la naturaleza de las partes y
viceversa.
Goma elástica, efecto de la: reforzamiento del tirón dinámico al aumentar la distancia de un objeto visual a la
base de atracción a la que está anclado. La resistencia a este tirón hace que el objeto gane en peso visual.
Hemisférica, especialización: diferencia existente entre las funciones psicológicas que cumplen cada uno de
los hemisferios cerebrales. En términos generales, parece que la mayor parte de las funciones lineales las
llevan a cabo los centros nerviosos del hemisferio izquierdo, en tanto que la sinopsis espacial la efectúan
principalmente los del derecho. La síntesis de estas capacidades coadyuva al correcto funcionamiento de la
mente, en el arte y en todo lo demás.
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Horizontal: dirección perpendicular a la vertical (q. v.). Por estar simétricamente orientada con respecto a la
atracción gravitatoria, la horizontal proporciona el emplazamiento más equilibrado. Coordina objetos, más que
subordinarlos. La horizontal central es una de las coordenadas cartesianas (q. v.). El punto en que se corta con
la vertical central define el centro de equilibrio. Como divisorias, las horizontales separan las zonas superiores
e inferiores de la composición.
Imaginación: término que suele usarse para describir la capacidad de la mente para crear imágenes de cosas
no dadas por la estimulación perceptual directa o para completar perceptos no del todo dados. En las artes, la
imaginación es la capacidad de presentar objetos, comportamientos o ideas mediante la invención de una
forma elocuentemente apropiada.
Inducción: un objeto visual puede venir dado enteramente por los efectos dinámicos que surgen de su
entorno. El centro de una circunferencia o de un rectángulo funciona como objeto visual aunque no esté
señalado por estímulo óptico alguno. Un rasgo visual inducido genera su dinámica visual lo mismo que una
forma dada explícitamente.
Intuitiva, apreciación: evaluación de las relaciones fundamentada en el sentido perceptual del equilibrio y el
orden estructural, en tanto que cosa diferente de la evaluación por medición u otros cánones definidos.
Invertida, perspectiva: errónea idea de que la técnica de hacer converger las caras laterales de los objetos, en
lugar de divergir, hacia la parte delantera es una variante del principio de la perspectiva central. En realidad,
este recurso para hacer visibles las caras laterales suelen emplearlo generalmente artistas que desconocen la
perspectiva central.
Jerarquía: escala de poder, peso o importancia creada visualmente por gradientes perceptuales. La altura a
que está situado un objeto, su tamaño, la distancia del espectador, etc., son factores que determinan la posición
de un componente en la escala jerárquica.
Microtema: versión en pequeño y fuertemente abstraída del asunto de una pintura. Ubicado por lo común en
las proximidades del centro de la composición, el microtema suele estar encarnado en la acción de las manos.
No mimético, arte: uno de los varios términos que se aplican a las obras de arte que no representan los
objetos tal como se dan en la naturaleza. Otros adjetivos empleados a tal fin son los de abstracto, concreto, no
representativo –ninguno llega a ser plenamente satisfactorio.
Nodos: lugares de densidad estructural obtenidos mediante la concentración y el entrelazamiento de vectores.
Los nodos y sus interrelaciones constituyen el esqueleto básico de una composición.
Objetivo, espacio: en el arte representacional, el caso teórico en que se ve una batería de objetos cuyos
tamaños y distancias son exactamente las mismas que tienen en el espacio físico. En la práctica nunca se llega
a obtener el efecto de espacio objetivo.
Objeto: un objeto visual es una entidad individual que se percibe como parte de un esquema visual.
Pasador: forma, u otro rasgo visual, que traspasa una línea central para contrarrestar la división.
Perspectiva: medio de representar proyectivamente en una superficie plana objetos tridimensionales. La
perspectiva crea profundidad visual modificando la forma y la interrelación espacial de los objetos mediante la
superposición, la deformación, el cambio de tamaño, etc. La perspectiva central imita algunos de los atributos
de la proyección óptica mediante un constructo geométrico en virtud del cual algunos sistemas de aristas o
líneas objetivamente paralelas convergen en puntos de fuga. En la perspectiva unipuntual se utiliza un único
punto de fuga, mientras que en la bipuntual dos haces de paralelas convergen cada uno a su propio punto de
fuga. En principio se cuenta con un número ilimitado de puntos de fuga, porque las paralelas pueden
converger hacia cualquier posición del espacio pictórico.
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Peso: física y cinestésicamente, el peso es el efecto de la atracción gravitatoria. Visualmente, es el poder
dinámico intrínseco que posee un objeto en virtud de su notabilidad, tamaño, forma, ubicación, etc.
Pistón, efecto de: efecto dinámico que se produce cuando una forma compositiva presiona allende la divisoria
establecida por la horizontal o la vertical centrales.
Proyección: imagen óptica creada en una superficie por los rayos de luz reflejados por un conjunto de objetos
situados en el espacio tridimensional. El espacio proyectivo es el caso teórico en que tal conjunto visual
aparecería totalmente plano, es decir, en completo acuerdo con su proyección óptica. El efecto de espacio
proyectivo nunca llega a alcanzarse en la práctica.
Retiniana, presencia: término aplicado a los objetos representados en el campo real por estímulos reales de
forma, color o movimiento, y no, por consiguiente, a través de la mera inducción (q. v.).
Símbolos: interpretación visual de algo más abstracto mediante la traducción de los rasgos dinámicos en
atributos de forma, color y movimiento. Conviene distinguir los símbolos de los meros signos, que son
formas, colores, acciones u objetos convencionales con los que se pretende transmitir mensajes normalizados.
Simetría: la correspondencia exacta de forma y configuración constitutiva en las partes opuestas de una línea
o plano divisorios o en torno a un centro o eje. Un eje vertical produce una simetría visual más fuerte que uno
horizontal.
Ubicación, punto de: emplazamiento de los ojos del espectador en el espacio físico. El punto de ubicación
adecuado para completar un cuadro se encuentra en el plano sagital que pasa por el centro geométrico del
cuadro. El punto de ubicación ópticamente correcto para un sistema de perspectiva unipuntual se halla situado
frente al punto de fuga y a una determinada distancia del cuadro.
Vectores: fuerzas generadas por las formas y configuraciones de los objetos visuales. Un vector viene
caracterizado por su magnitud, dirección y punto de apoyo. Los vectores visuales parecen orientados en ambas
direcciones a menos que algo especial determine el punto de apoyo del vector y, por consiguiente, su
dirección. No todos los vectores están sustentados por una presencia retiniana (q. v.) explícita. No lo está, por
ejemplo, la dirección de la mirada.
Yo: la conciencia que un espectador tiene de su posición en el espacio y de la dirección de su actividad.
Aunque esté fuera del ámbito de la obra de arte, la posición del yo determina el aspecto espacial de las obras
tridimensionales y a él se adaptan las bidimensionales. El yo actúa como un centro de fuerzas en el campo (q.
v.) que contiene al espectador y a la obra de arte.
* Las siglas q. v. proceden de la expresión latina quod vide, que significa “véase”.
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