07-HE CTORBERLIOZ 1803-1869 Francia Es uno de los compositores románticos por excelencia; fue un destacado renovador del género sinfónico. Nació en Francia en pleno periodo napoleónico. Su padre era médico de provincias, que no veía convencido el futuro de su hijo como compositor. Fue un innovador que se topó con la intransigencia de la mayoría de los músicos en casi todos los temas, desde su apoyo al saxofón, hasta su apoyo a la visión dramática de Wagner. Tuvo una vida excéntrica y apasionada. Ganó el premio de Roma, el más importante que había dentro de la música en Francia en su época; pero no lo ganó por la creación de su Sinfonía Fantástica, sino por una cantata que hoy está casi olvidada. Su obra musical es antecesora de estilos musicales que se confirmarían más tarde. Además de compositor, defiende sus postulados sobre programática como columnista. Tuvo un éxito relativo principales capitales europeas donde estrenó su obra, menos suerte en su propio país. También escribió un corregiría Richard Strauss. música en las aunque "Tratado de Instrumentación" que reeditaría y PRINCIPALES OBRAS: • Ocho escenas de Fausto de Goethe -1828 • Sinfonía Fantástica -1830 • Sinfonía: Harold en Italia - 1834 • Benvenuto Cellini (ópera) - 1838 • Romeo y Julieta (sinfonía dramática) - 1839 • El Carnaval Romano (obertura de concierto) - 1844 • La Condenación de Fausto (leyenda dramática) - 1846 • Te Deum - 1855 • Las Troyanas - 1862 Sinfonía Fantástica Pocas obras y pocos compositores representan tan fielmente el espíritu del Romanticismo como lo hacen la Sinfonía Fantástica y su autor Héctor Berlioz. Subtitulada “Episodio de la Vida de un Artista” e inspirada por la que fuera su “amor a primera vista”, la actriz irlandesa Harriet Smithson, la obra describe las distintas alucinaciones por las que pasa un joven artista enamorado tras intentar suicidarse a base de ingerir láudano y entre las que se incluyen “un baile”, una “escena campestre”, una “marcha hacia el suplicio” y un “aquelarre” final. Historia de la sinfonía Fantástica Un joven músico desesperado se ha envenenado a sí mismo con opio y en un largo sueño, tiene una serie de visiones y pesadillas, la idea de su amada viniendo una y otra vez a su cabeza. Recuerda las alegrías y depresiones del pasado, antes de que ella entrase en su vida, y luego el neurótico celoso en que se convirtió cuando ella entró en su vida, teniendo el único consuelo de la religión. El segundo movimiento evoca la música de un baile, en el que con los giros de la danza, vislumbra a su amada otra vez. El tercer movimiento fue muy difícil para Berlioz. En el campo, dos pastorcillos entonan una melodía con sus flautas para llamar a sus vacas. Todo es tranquilidad hasta que la amada aparece de nuevo, provocando inquietud en el héroe. El otro pastorcillo toca su flauta, pero esta vez no hay respuesta. En ese momento, el sol se pone acompañado de un trueno distante. Luego, predomina el silencio en la escena. La marcha del cadalso fue escrita en una sola noche. Nos trae el sueño del asesinato de la amada, por el que el héroe es condenado a muerte. La marcha, con su paso regular tiene sus momentos más salvajes, mientras la comitiva se abre paso entre la multitud que se agolpa para ver la muerte del héroe. La amada aparece en el momento en el que el hacha desciende hacia el cuello del héroe. El movimiento final es un aquelarre, una salvaje orgía de una celebración demoníaca. La imagen de la amada parece ahora una agudísima burla. Las campanas de la muerte se oyen por encima del himno Dies Irae del juicio final y se mezclan con la danza. La música de las campanas de la muerte en este movimiento ha sido utilizada por Wendy Carlos en las bandas sonoras de La Naranja Mecánica y El resplandor.