El Apartheid Extraído de Escuelapedia La palabra apartheid significa «separación» o «identidad propia». Sirvió para designar el régimen político de Sudáfrica, que, durante décadas, impuso el dominio de la minoría blanca (o de la aristocracia blanca) sobre otros grupos étnicos, compuesto en su mayoría por negros. El apartheid no debe interpretarse simplemente como «racismo» porque era un sistema constitucional de segregación racial que cubría el desarrollo social, económico y político de la nación sudafricana mediante el establecimiento de criterios para diferenciar los grupos. El origen histórico del apartheid es muy antiguo y data de la época de la colonización de África del Sur. Los primeros colonos bóers (también llamados afrikáner) se compone de los grupos sociales europeos que vinieron de Holanda, Francia y Alemania y se instalaron en el país en siglos XVII y XVIII. La ideología nacionalista Los nuevos colonos diezmaron la población local (grupos de pueblos indígenas) y arrebataron sus tierras. Los líderes de la comunidad afrikáner manipularon y sometieron sus acciones a un precepto religioso cristiano, que, en principio, establecía la segregación como un modo de defender y preservar a las poblaciones tribales de la influencia de los blancos. Más tarde, convertida en ideología, predicaría la separación racial y la desigualdad. El grupo de colonos se percibían a sí mismos como la verdadera y auténtica nación. El color y las características raciales determinaron el dominio de la población blanca sobre los demás grupos sociales y la imposición de una estructura basada en la esclavitud. La política racial En las regiones dominadas por los colonos, se estableció una política racial que diferencia a los europeos (población blanca) de los africanos (nativos no-blancos conocidos como bantú). Incluso los grupos sociales compuesto por inmigrantes asiáticos, en particular los indios, sufrían de la política de discriminación racial. Sería erróneo suponer que la expansión de los colonos sobre la población no-blanca de África del Sur fuese un proceso libre de conflictos. Por el contrario, se produjeron numerosas guerras con las poblaciones nativas que hicieron resistencia a los blancos, entre ellas las tribus xhosa, zulú y shoto. En el siglo XX, Sudáfrica pasó por un intenso proceso de modernización que intensificó los conflictos entre blancos y no blancos. Sin embargo, la minoría blanca fue capaz de aprovechar los conflictos entre tribus (que afloraban entre los diferentes grupos étnicos) para avanzar el dominio de los afrikáners.