U N INVENTO R EN RENTERIA Don Jesús I!<in iii IIrtigusa, premimlo en Bruselas E ra algo qu e le fa lta b a a n u estro pueblo: un inventor. Y he a q u í que ya tenem os uno. ¿V endrán o tro s d etrás? T o d o puede ser. N u e stro pu eb lo da de todo. Y — sabem os que v a m os en c o n tra de los e tern o s pesim istas— m ás de bu en o q u e de m alo. Un p eriód ico de San Sebastián del día 18 de m arzo p asad o nos hacía saber, p o r su prim era p ágina, que don Jesús G arcía O rtigosa. vecino de R entería, h a b ía o b tenido un galard ó n en la X E xposición In tern acio n al de Inventores, de Bruselas. La noticia nos llenó de satisfacción. H oy, la R evista O A R SO se h o n ra en trae r a sus p ág in as las d e c la ra ciones q u e, p a ra sus lectores, ha tenido la am ab ilid ad de hacernos. Jesús G a rcía O rtigosa — n o so tro s a n uestros convecinos les q u itam o s ráp id am en te el «don»— respo n d e aten ta y am ab lem en te a nuestras preg un tas. — ¿E n qué consiste el invento que te han prem iad o en B ruselas? — Se tra ta de u na especie de llave fija que sirve p a ra a p re ta r y a flo ja r tuercas de varias m edidas. — ¿A lgo sem ejante a la llave inglesa? — T ien e un ligero parecid o, pero es distinta. N o es reg ulable y la pinza no es del m ism o sistem a. E n cu e n tro que la m ía tiene varias ven tajas sob re la inglesa. ¿D ó nd e naciste? El 30 de diciem bre de 1925, en A rróniz. do el m undo. — ¿H an sido p rem iad os en esta ocasión, o en o tra, inv ento res guipuzcoanos? — Q ue yo sepa, no. — ¿Se h a interesad o alg un a in du stria p or tu invención? — Sí, dos. U n a francesa, de P arís, y o tra del — A esta p a la b ra parece que le falta o tra: «mago». Sé a lo que te refieres. E fectivam ente, de allí es Jesús A brego. P o r cierto, que a la fam ilia del «brujo» y a la m ía les u nía, y les une, una buena e íntim a am istad. — Buen p ueblo este de A rró n iz p ara p ro - C an ad á. — ¿Piensas v en der la p aten te? — E stoy en trato s con la casa de París. — ¿Q ué siente uno cuand o consigue inven- ducir a rtista s... —En A rró n iz yo no viví m ás qu e cinco meses. N o c o n ta b a aú n m edio añ o cu an d o me llevaron a A zcoitia. A q u í residí h asta los diez años, y c u and o me casé vine a vivir a R entería. — ¿Te consideras g u ip u zco an o ? —Pues, sí. — ¿Y re n te ria n o ? —T am bién . Mi esposa, ren te ria n a ; mis tres hijos, ren terian o s; y m is diez años de residencia, m e convierten en ren terian o , si no de nacim iento, sí de ad o pció n y de corazón. — ¿C uál es tu p ro fesió n ? Proyectista m ecánico. b astante considerable. E stan d o en m is dudas, leí, p o r casu alid ad , una frase que me dio el em p u jó n definitivo: «D ecídete y serás libre.» — ¿E sp erab as que te p re m iara n el in ven to ? —T en ía esperanzas. — ¿Q ué prem io te han concedido? — M edalla de P lata. En la p ren sa, p o r eq uivocación dijeron que m e h a b ía n concedido la d e O ro. — ¿Q ué c ateg orías de prem io s se conceden? — O scar y m edallas de oro, p lata y bronce. — ¿Q ué im presión te causó la noticia? — Buena. Pensé que este prem io p o d ría in flu ir fav o rab lem en te p ara la venta de la p a tente. — ¿C óm o te en teraste? — P o r el periódico. — ¿ C o n cu rrían m ás g u ipu zco ano s a la X E x posición de Inventores? — C o n c u rría m o s dos de G u ip ú zco a — uno de San S eb astián — , sesenta y seis m ás de toda E sp añ a y seiscientos veintitrés, en total, de to - D o n Je sú s G a r c ía O r t ig o s a — ¿C ó m o se te o cu rrió acud ir a Bruselas? — Yo ten ía p a te n tad o mi invento, y el re p resen tan te de la A gencia que tram itó el asunto de la p aten te m e hizo la sugerencia en este sentido. E n princip io lo dudé b astan te, pues el c o n cu rrir a B ruselas supone un desem bolso ta r algo? — U na gran satisfacción. Es difícil ex p licarlo, pero yo d iría que es algo así com o la llegada a una cim a en la que se respira con desahogo y tran q u ilid ad . — ¿M ás inventos a la vista o en estudio? — V arios. — ¿Q ué o tras aficiones tienes? — M úsica, lib ro s y — q uizá te choque un p o co — tem as y asuntos de agricu ltura. — ¿E chas algo de m enos en R entería? — E scasez de sociedades y m ovim ientos culturales. — ¿Y de m ás? — U n a a b u n d an c ia excesiva de chiquiteo. ¡Qué afición al «taberneo»..! — ¿Q ué opina un in vento r del invento de la rued a? — Que fue algo sencillam ente sensacional. Y fu n d am en tal. La rueda es el fu n d am en to del m ecanism o. — ¿Es fácil in v en tar algo? — Si se po ne uno a pensar y a tra b a ja r de firm e, sí. A n oso tros, qu e nos parece q u e todo está ya inventado y que si algo fa lta otro s lo inventará n , nos da cargo de conciencia que un inv en to r m algaste el tiem po en atendernos. N u estra en h o rab u e n a, un fu erte ap retó n de m anos, y ... le dejam os que siga pensando. D e ta lle d e v a r ia s p ie z a s d el in v e n to p a te n ta d o d e n u e stro in te rv iu v a d o Y trab a ja n d o . ANTONTXU y su a p lic a c ió n en la práctica. -4 1 — /