Juzgado de lo Social núm. 1. Sentencia núm. 73/2008 de 12 junio AS\2008\1763 DESPIDO NULO: discriminación por motivos ideológicos: pertenencia a un determinado partido político. ANTIGÜEDAD: cómputo: inclusión de los servicios prestados de forma no ininterrumpida: Convenio Colectivo para el Personal Laboral del Ayuntamiento de Cuenca. Jurisdicción: Social Procedimiento núm. 155/2008 Ponente: Ilmo. Sr. D. Ramón González de la Aleja El Juzgado de lo Social núm. 1 de Cuenca estimala demanda interpuesta por doña ............... contra el Excmo. Ayuntamiento de Cuenca, en autos promovidos sobre despido y lesión de derechos fundamentales. En la ciudad de CUENCA, a doce de junio de dos mil ocho. D. RAMÓN GONZÁLEZ DE LA ALEJA GONZÁLEZ DE LA ALEJA, MagistradoJuez del Juzgado de lo Social n.° 1 de CUENCA, tras haber visto los presentes autos sobre DESPIDO/DERECHOS FUNDAMENTALES entre partes, de una y como demandante Dña. ..............., que comparece asistida por el letrado D. ................., y de otra como demandado EXCMO. AYUNTAMIENTO DE CUENCA, representado por el letrado ......................., EN NOMBRE DEL REY, compareciendo en representación del MINISTERIO FISCAL .........................., ha dictado la siguiente SENTENCIA ANTECEDENTES DE HECHO PRIMERO Con fecha 29-2-08 tuvo entrada en este Juzgado de lo Social de Cuenca demanda formulada por Dª ............... por la que, en base a los hechos y fundamentos en ella expuestos, suplica se dicte sentencia que declare la nulidad de su despido, por vulneración de derechos fundamentales o por defectos formales, o, subsidiariamente, su improcedencia con los efectos correspondientes a una u otra declaración y, de estimarse a nulidad por vulneración de derechos fundamentales, al abono de 12.000,00 € en concepto de indemnización por daños y perjuicios. SEGUNDO Admitida a trámite la demanda, se señaló para el acto de juicio la audiencia del día 4-608. Presentes las partes, la actora se afirmó y ratificó en su demanda, oponiéndose la demandada; recibido el pleito a prueba y en trámite de conclusiones, las partes elevaron las suyas a definitivas conforme al acta obrante en autos, manifestando la representante del Ministerio Fiscal no haber quedado acreditada la vulneración del derecho fundamental alegada. TERCERO La cuestión debatida ha sido: Despido de la actora, calificación y efectos. HECHOS PROBADOS PRIMERO Que la actora, Dª ..............., con DNI n.° NUM000, ha prestado sus servicios profesionales para el Excmo. Ayuntamiento de Cuenca en los siguientes períodos: Del 16 de diciembre de 1991 al 30 de junio de 1994; del 1 de julio de 1994 al 15 de diciembre de 1995; del 2 de enero de 1996 al 31 de diciembre de 1996; y del 2 de mayo de 2000 al 31 de diciembre de 2007, fecha de efectos del despido que trae origen a las presentes actuaciones. Percibiendo un salario diario de 74,97 euros, con prorrateo de pagas extras. SEGUNDO Que la actora firma con la demandada un contrato de trabajo de duración determinada, para obra o servicio determinado, siendo su objeto "Gestión del Convenio Ciudades Saludables, suscrito con la Consejería de Sanidad", para prestar sus servicios como "Monitor hábitos saludables" incluido en la categoría/nivel de "Técnico auxiliar", a tiempo completo, con fecha de inicio de 2 de mayo de 2000 y finalización el 31 de diciembre de 2000, y demás condiciones que se contemplan en el citado contrato que se encuentra unido a las actuaciones y se da por reproducido. Las mismas partes firmaron nuevo contrato de trabajo, con idénticas condiciones, con la actualización salarial correspondiente, con fecha de inicio el 1 de enero de 2001 y hasta el 31 de diciembre de 2001. Igual contratación, en idénticas condiciones se produjo en fecha 1 de enero de 2002, con finalización el 31 de diciembre de 2002, prorrogándose el mismo para los años naturales 2003, 2004, 2005, 2006 y 2007. TERCERO Que con fecha 16 de mayo de 2007, se publica en el Boletín Oficial de la Provincia de Cuenca las bases que han de regir la selección para la provisión en propiedad por el sistema de concurso-oposición de una plaza de "Monitor de Hábitos Saludables" de la plantilla de personal laboral del Ayuntamiento de Cuenca, en el marco de proceso de consolidación de empleo temporal. Asimismo, en fecha 7 de abril de 2008 se aprueba por la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Cuenca las bases para la selección de dos plazas de "Inspectores de Medio Ambiente", a cubrir como funcionarios interinos. Siendo, en ambos casos, gran parte de las funciones laborales a desempeñar similares a las que venía desarrollando la actora, según consta en la documental obrante en las actuaciones y que se tiene por reproducida. CUARTO Que en el Presupuesto General de la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha para el año 2008 se encuentra aprobada la partida correspondiente para seguir financiando el presente año el Convenio de Colaboración del Proyecto "Ciudades y Pueblos Sostenibles" que la Consejería de Medio Ambiente y Desarrollo Rural realiza anualmente con el Ayuntamiento de Cuenca, y así le fue comunicado a éste en fecha 5 de diciembre de 2007. Sin embargo, sin existir denuncia previa en tiempo y forma, el Ayuntamiento de Cuenca no ha firmado con el Gobierno Autonómico el citado Convenio Colaboración para el año 2008, renunciando con ello al percibo de la cantidad económica que conlleva. QUINTO Que la actora ha colaborado como "coordinadora y responsable de la Agenda-21 Local" en el Ayuntamiento de Cuenca con la Red de Ciudades y Pueblos Sostenibles de Castilla-La Mancha, desde el año 2000 hasta enero del año 2008. SEXTO Que con fecha 11 de diciembre de 2007, el Ayuntamiento demandado envía carta de cese a la actora, con fecha de efectos de 31 de diciembre de 2007, por finalización del contrato de trabajo. SÉPTIMO Que la actora mantiene desde hace varios años un vínculo conyugal con D. Ignacio, siendo ambos progenitores de un hijo nacido el día 1 de junio de 1997. D. Ignacio ha sido Concejal, en el Grupo Socialista, en el Ayuntamiento de Cuenca desde el 25 de junio de 1991 al 13 de marzo de 2001; con posterioridad, hasta el 21 de julio de 2003 ha sido Delegado de Obras Públicas en Cuenca de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, y como Delegado Provincial de Bienestar Social de Cuenca del 22 de julio de 2003 al 17 de julio de 2007. OCTAVO Que en las últimas Elecciones Municipales se produjo un cambio de gobierno en el Ayuntamiento de Cuenca, dejando de ser gobernado por el Partido Socialista Obrero Español, y pasando a serlo por el Partido Popular. NOVENO Que el programa de "Ciudades Saludables de Castilla-La Mancha" tiene por objeto facilitar una mejor calidad de vida en los municipios de Castilla-La Mancha, creando las condiciones adecuadas para lograr hábitos de vida más saludables en beneficio del bienestar de sus ciudadanos. DÉCIMO Que las funciones de los coordinadores municipales de las ciudades de la Red de Ciudades y Pueblos sostenibles de Castilla-La Mancha son las de establecer la intercomunicación entre los municipios de la Red, las actuaciones de carácter técnico comunes a todas las ciudades, la propuesta de planificación de carácter anual, la discusión sobre el desarrollo del Informe General de estado de salud de la Ciudad, la propuesta de establecimiento de las actividades formativas de carácter anual y, en general, de todas aquellas propuestas de actuación que de forma coordinada fomente la participación y el desarrollo de la Red. Asimismo, tiene como misión establecer los cauces adecuados entre la Comisión de Coordinación, el Comité de las Ciudades y la Consejería de Medio Ambiente y Desarrollo Rural; impulsar la coordinación técnica y aportar la ayuda precisa para poder cumplir homogéneamente los acuerdos aprobados por el Comité de las Ciudades; elaborar, junto a la Comisión de Coordinación, la memoria anual de la Red; y coordinar, junto con la Ciudad designada, la celebración de los Congresos de la Red. Dicha Red de Ciudades y Pueblos sostenibles de Castilla-La Mancha tiene cono intención la implementación a nivel local de las recomendaciones acordadas en la "Declaración de Atenas para Ciudades Saludables" de 23 de junio de 1998, en la "Cumbre de Río" (Agenda 21), en la "Conferencia Internacional para la Población y el Desarrollo", en la "Cumbre de Beijing" y en la "Carta de las Ciudades Europeas hacia la Sostenibilidad" (Carta de Aalborg), de 27 de mayo de 1994. UNDÉCIMO Que la actora no ocupa, ni ha ocupado en el año anterior, cargo alguno de representación legal de los trabajadores. DUODÉCIMO Que se ha agotado el trámite de reclamación previa a la vía judicial. FUNDAMENTOS DE DERECHO PRIMERO El relato fáctico se ha obtenido en su integridad de la documental obrante en las actuaciones y de la prueba practicada en el acto de juicio oral. SEGUNDO La institución de la "inversión de la carga de la prueba" que prevé el artículo 17 9, párrafo 2º, de la Ley de Procedimiento Laboral ( RCL 1995, 1144, 1563) , en aquellos procesos en los que se alegue la vulneración de un derecho fundamental (como ocurre en el presente caso en el que se alega la existencia de un despido discriminatorio por razones ideológicas), supone que, una vez constatada la concurrencia de indicios de que se ha producido la violación de un derecho fundamental (artículos 14, 16, 17 y 24 de la Constitución Española [ RCL 1978, 2836] ), corresponderá al demandado a aportación de una justificación objetiva y razonable, suficientemente probada, de las medidas adoptadas y de su proporcionalidad. Pero sin que dicha presunción pudiere implicar que la mera alegación de dicha violación de un derecho fundamental determine la presunción plena (iuris et de iure) de violación, sino que la parte actora precisa probar uno o varios indicios (hechos indiciarios) de los que no llegue a poder presumirse de modo completo que existe la violación, pero de los que sí puede deducirse la probabilidad de su existencia. Por tanto, al no existir una presunción plena de violación, sino un simple juicio de probabilidad, no puede decirse que al demandado corresponda destruir una presunción, sino que el hecho indiciario y la probabilidad son el presupuesto para que exista la inversión de la carga de la prueba ( Sentencias del Tribunal Constitucional 80/2001, de 26 de marzo [ RTC 2001, 80] ; y 190/2001, de 1 de octubre [ RTC 2001, 190] ). En el supuesto de Autos, la negativa del Ayuntamiento demandado de no prorrogar para el año 2008 el Convenio de Colaboración del Proyecto "Ciudades y Pueblos Sostenibles" que la Consejería de Medio Ambiente y Desarrollo Rural de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha realiza anualmente con el citado Ayuntamiento de Cuenca, cuya partida presupuestaria ya estaba aprobada a nivel del Gobierno autonómico, ha conllevado, según el propio Ayuntamiento, que al carecer el puesto de trabajo de la actora de la justificación causal de su existencia, sin objeto que ampare el mantenimiento del contrato de obra o servicios, así como de la correspondiente subvención necesaria para el mantenimiento de su puesto de trabajo para el año 2008, la misma haya cesado en la prestación de sus funciones laborales en la fecha de finalización del último de los Convenios de Colaboración suscrito entre ambas Entidades Públicas (año 2007). Sin embargo, dicha consecuencia causal, extintiva de la relación laboral de la actora pretendida por la demandada, no es conforme a derecho por varias razones, que se analizarán a continuación. En primer lugar, el Ayuntamiento demandado no ha expuesto razón o motivo alguno que pudiere justificar la causa por la que habiendo recibido comunicación de la Consejería de Medio Ambiente y Desarrollo Rural de la Junta de Comunidades de Castilla- La Mancha de que estaba aprobada por las Cortes el Presupuesto General de la Comunidad Autónoma para el año 2008 en el que se incluía la renovación de los fondos económicos del Convenio de Colaboración del Proyecto Ciudades y Pueblos Sostenibles existente con dicho Ayuntamiento, el mismo no lo aceptara, sin que la denuncia de la prórroga de su vigencia hubiera sido realizada conforme estipula el citado Convenio (Estipulación Novena). Sin que por ello se entienda qué razón pudiere asistir al demandado para que, sin implicar gasto propio alguno y dado el déficit presupuestario del Ayuntamiento, se negare a recibir dicha ayuda económica externa, prefiriendo, en cambio, que las funciones que realizaba la actora fueran realizadas por otras personas, pero con cargo a los propios presupuestos municipales. Por otra parte, la negativa del Ayuntamiento demandado a prorrogar el citado Convenio -sin que hubiera cumplido con los requisitos formales establecidos para ello- ha implicado que la ciudad de Cuenca se haya descolgado de la denominada "Agenda 21", esto es, de la Red de Ciudades y Pueblos Sostenibles de Castilla-La Mancha -hecho por otra parte insólito, con escasos antecedentes, como se ha acreditado por la prueba realizada-, y, por tanto, del programa regional que tiene por objeto facilitar una mejor calidad de vida de sus propios ciudadanos, sin querer seguir manteniendo para el año 2008 las condiciones adecuadas para lograr hábitos de vida más saludables en beneficio del bienestar de los mismos. Cuestiones y compromisos de la suficiente entidad, incidentes en la salud de sus propios vecinos, como para, al menos, justificar adecuadamente tan inopinada decisión municipal. Siendo la exigencia de razón de dicha justificación que la misma supone, en definitiva, la consecuencia del cese de la actora por el motivo alegado. Es decir, partiendo de la base de que los regidores municipales de cualquier Ayuntamiento lo que pretenden, entre otros objetivos fundamentales, es mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos, y estando ya la ciudad de Cuenca participando en la Red de Ciudades y Pueblos Sostenibles de Castilla-La Mancha desde hace varios años, cuya única justificación y máxima pretensión es la de facilitar una mejor calidad de vida de los ciudadanos en la misma integradas a través de sus respectivos Ayuntamientos, para lograr hábitos de vida más saludables en beneficio del bienestar de los mismos, y sin que dicha participación suponga gasto, carga económica o humana, o distracción de bienes o personal a su cargo alguno; y sin que tampoco, para disipar dichas evidencias, la demandada haya compartido en el Acto de Juicio Oral las razones o motivos que justificasen, aún mínimamente, tan contraria actuación a su propia naturaleza jurídica y razón de ser, en contra de sus propios intereses y de su ciudadanos, no queda otra opción que considerar y aceptar que lo con ello pretendido es la crear, artificiosa y fraudulentamente, la apariencia de legalidad a la consecuencia ineludiblemente pretendida, que es la sustraer o eliminar el amparo justificativo, causal y material, del contrato de la actora. Si lo que se ha pretendido es obtener el efecto de extinguir la relación laboral de la actora, la única causa antecedente que lo podría provocar es la negativa a recibir los fondos económicos extrapresupuestarios que lo sostienen. Como consecuencia de todo lo anterior, y de la doctrina constitucional reseñada, ante la absoluta carencia en la exposición de la parte demandada que pudiere servir de excusa, justificación o explicación, de cualquier naturaleza y/o razonabilidad, más o menos creíble, que pudieren amparar tan importante decisión municipal, con las importantes consecuencias negativas que la misma acarrea para la salud de las personas que viven en la ciudad de Cuenca, en general, y para la actora en particular -esto es, la aportación de una justificación objetiva y razonable, suficientemente probada, de las medidas adoptadas y de su proporcionalidad, en palabras de la ley-, no cabe sino atender las alegaciones formuladas por la demandada, al significar las mismas la concurrencia de indicios de que se ha producido la violación de los derechos fundamentales de la actora denunciados. Y en este sentido, la demandante aduce que la única causa que ha motivado dicha decisión ha sido la de buscar cobertura jurídica bastante para rescindir la relación laboral que a ambas partes unía, siendo la inconfesable razón última del Ayuntamiento demandado, gobernado desde las últimas elecciones municipales por el Partido Popular, la de extinguir su vinculación laboral por razón de su ideología política, contraria a la que en la actualidad rige la Alcaldía de dicho municipio, y estando la actora vinculada sentimentalmente desde hace varios años, y siendo ello un hecho conocido, con un alto cargo local del Partido Socialista, anterior responsable político de dicha Alcaldía. Justificación de dicha ruptura de la relación laboral, amparada en diferentes pruebas obrantes en las actuaciones, que no sólo es perfectamente atendible en base a criterios de razón, sino que procesalmente implica la aportación de indicios de suficiente entidad como para invertir la carga de la prueba en estos supuestos ( Sentencias del Tribunal Constitucional 293/1993, de 18 de octubre [ RTC 1993, 293] ; 85/1995, de 6 de junio [ RTC 1995, 85] ; 82/1997, de 22 de abril [ RTC 1997, 82] ; y 202/1997, de 25 de noviembre [ RTC 1997, 202] ). Sin que, en su contra, como se ha expuesto con anterioridad, la carga probatoria que por ello debe soportar la demandada (onus probandi), haya sido satisfecha en modo alguno por la demandada, sin que ni siquiera la demandada haya intentado destruir los indicios exhibidos de contrario, basados en suficientes y acreditados hechos indiciarios, justificativos del juicio de probabilidad exigido a la parte actora; sin que por ello, dada la absoluta pasividad de la demandada de eludir los citados indicios racionales, despejando las dudas planteadas por su torcida actuación, pueda tampoco evitar las necesarias consecuencias jurídicas que ello implica y deba asumir. Por todo lo antedicho, asumiendo como veraz la alegación de que la extinción de la relación laboral que a ambas partes unía ha tenido como único motivo el desvincularse contractualmente de la actora por su ideología política, contraria a la del Ayuntamiento demandado, no queda sino calificar dicha extinción como un despido nulo (ex artículos 55.5 del Estatuto de los Trabajadores [ RCL 1995, 997] , y 108.2 de la Ley de Procedimiento Laboral) al tener como móvil una causa discriminatoria prohibida en la Constitución, al atentar centra el artículo 14 de la Constitución Española, que impide que nadie pueda ser discriminado por motivos ideológicos, así como producido con violación de derechos fundamentales de la trabajadora, al contravenir el derecho amparado en el artículo 16 de la misma, donde se reconoce la libertad ideológica de los españoles; con las consecuencias que se expondrán en la parte dispositiva de esta resolución judicial según lo establecido en la normativa de necesaria aplicación (artículos 55.6 del Estatuto de los Trabajadores y 113 de la Ley de Procedimiento Laboral). TERCERO Sobre lo ya determinado, en su abundamiento, y en contestación a lo contenido en la demanda, es necesario exponer que los contratos de trabajo suscritos por la actora lo han sido en fraude de ley, al ser la causa que los motiva contraria a la norma que los ampara [artículos 15.1a) del Estatuto de los Trabajadores ( RCL 1995, 997) y 2 del Real Decreto 2720/1998 ( RCL 1999, 45) ], por cuanto el objeto de estos contratos es la realización de obras o la prestación de servicios determinados, con autonomía y sustantividad propias dentro de la actividad de la empresa, y cuya ejecución, aunque limitada en el tiempo, es, en principio, de duración incierta. La actividad que responde a la normal o permanente de la empresa debe ser atendida por trabajadores fijos, porque lo esencial en la naturaleza de este contrato es que la obra debe presentar sustantividad o autonomía dentro de la empresa y así la necesidad que se pretende atender debe quedar satisfecha mediante la terminación de la obra o el servicio ( Sentencias del Tribunal Supremo de 21 de abril de 1988 [ RJ 1988, 3008] ; y de 19 de marzo de 2002 [ RJ 2002, 5989] ). En el supuesto de autos la actora fue sucesivamente contratada, desde el año 2000 hasta el 2007, de forma ininterrumpida y bajo idéntica cobertura contractual, como "Monitor hábitos saludables", realizando su función como colaboradora/coordinadora de la Red de Ciudades y Pueblos Sostenibles de Castilla-La Mancha, así como responsable de la "Agenda 21 Local" en el Ayuntamiento de Cuenca, sin que la causa amparadora de los mismos estuviere justificada, por cuanto la obra o servicio contratado no tendría autónoma ni sustantividad propia, deviniendo por ello en fraudulento (artículo 6º.4 del Código Civil [ LEG 1889, 27] ; y artículo 15.3 del Estatuto de los Trabajadores) al ser los servicios prestados actividades permanentes dentro de las propias del Ayuntamiento (específicamente cuando la empleadora es una Administración Pública: Sentencias del Tribunal Supremo de 20 de enero de 1998 [ RJ 1998, 4] ; de 19 de julio de 1999 [ RJ 1999, 5797] ; y de 21 de septiembre de 1999 [ RJ 1999, 7534] ), persiguiendo la extinción de la relación laboral en base a causas inexistentes y que se tratan de eludir bajo un aspecto de legalidad con la finalidad de conseguir un resultado prohibido por el ordenamiento jurídico (Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha de 18 de marzo de 1994, Rec. n° 85/94 ). Sin que tampoco pueda justificar su temporalidad ni causalidad que la misma estuviera pendiente de las anuales subvenciones autonómicas, pues las mismas se han ido sucediendo, como le impone la propia norma al Gobierno autonómico, continuándose con posterioridad al cese de la actora a prestación del mismo servicio a la comunidad, por tanto, sin que, en última instancia, la obra o servicio para la que la trabajadora fue contratada hubiera finalizado, como se deduce del dato de que la demandada haya realizado provisión en propiedad por el sistema de concurso-oposición de una plaza de "Monitor de Hábitos Saludables" de la plantilla de personal laboral del Ayuntamiento de Cuenca, en el marco de proceso de consolidación de empleo temporal y, asimismo, que en fecha 7 de abril de 2008 se hubiera aprobado por la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Cuenca las bases para la selección de dos plazas de "Inspectores de Medio Ambiente", a cubrir como funcionarios interinos, con similares funciones y cometidos que los que la actora venía realizando. Por otra parte, la Estipulación Novena del Convenio de Colaboración firmado entre la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y el Excmo. Ayuntamiento de Cuenca para el año 2007 establecía que "El presente convenio tendrá vigencia desde la fecha de su firma hasta al 31 de diciembre del 2001, excepto para la justificación final contemplada en la cláusula sexta [justificación final de gastos], debiéndose prorrogar expresamente, por períodos anuales, salvo denuncia de alguna de las partes realizada al menos con treinta días de antelación a la terminación de cada ejercicio". Y en el supuesto de Autos el Ayuntamiento demandado no denunció en tiempo y forma el citado Convenio, por lo que es consecuencia de dicho irregular proceder entender que la vigencia del mismo se extendía automáticamente para el año 2008, teniendo la actora amparo causal suficiente para entender amparada la vigencia y objeto de su contrato de trabajo. Por todo ello, no cabe sino entender que el Ayuntamiento demandado ha pretendido realizar un acto amparado por una norma, que jurisprudencialmente se ha venido a denominar como "Ley de cobertura" (contratación temporal), pero persiguiendo un resultado prohibido por el ordenamiento jurídico o contrario a él -"Ley defraudada": obra o servicio sin autonomía ni sustantividad propia dentro de la actividad de la empresa- ( Sentencia del Tribunal Supremo de 19 de mayo de 1997 [ RJ 1997, 3887] ), debiéndose calificar, en consecuencia, ejecutado en fraude de Ley (artículo 6.4 del Código Civil [ LEG 1889, 27] ). Lo que obliga a considerar que el contrato de trabajo que unía a la actora con la empleadora pública ha de entenderse celebrado por tiempo indefinido, tal y como inveterada doctrina jurisprudencial ha establecido en estos supuestos ( Sentencias del Tribunal Supremo de 27 de julio de 1992 [ RJ 1992, 5663] ; de 29 de marzo de 1993 [ RJ 1993, 2218] ; de 22 de septiembre de 1993 [ RJ 1993, 7026] ; de 24 de enero de 1994 [ RJ 1994, 865] ; y de 19 de mayo de 1997, entre otras); y su cese irregular bajo el amparo de una causa temporal inexistente ( Sentencias del Tribunal Supremo de 7 de octubre de 1996 [ RJ 1996, 7492] ; de 10 de diciembre de 1996 [ RJ 1996, 9139] ; de 19 de enero de 1999 [ RJ 1999, 810] ; de 26 de enero de 1999; de 3 de febrero de 1999 [ RJ 1999, 1152] ; de 23 de abril de 1999; de 19 de julio de 1999; de 13 de octubre de 1999 [ RJ 1999, 7493] ; de 18 de octubre de 1999 [ RJ 1999, 8147] ; y de 20 de marzo de 2002 [ RJ 2002, 3808] , entre muchas). CUARTO Es imprescindible que, a la hora de fijar los salarios dejados de percibir por la actora desde la fecha del despido (artículo 113 de la Ley de Procedimiento Laboral [ RCL 1995, 1144, 1563] ), se entre a valorar cuál es la cuantía diaria de los mismos, siendo una variable decisiva para su cálculo la antigüedad de la actora. Pues aunque en el Acto de Juicio Oral la representación legal de la demandada no ha cuestionado la cantidad determinada sobre ello en la demanda de 74,97 euros diarios, sí que, empero, ha mostrado discrepancia con respecto a la antigüedad de la actora, lo que implica la obligación de centrar a analizar dicho extremo fáctico. El artículo 26 del Convenio Colectivo del Personal Laboral del Ayuntamiento de Cuenca (publicado en el Boletín Oficial de la Provincia de Cuenca de 16 de agosto de 2004 [ LEG 2004, 4286] ) establece que el plus de antigüedad "Se devengará por cada 2 años de servicio prestados en la Administración Pública. El valor del bienio será del 6% sobre el salario base. Una vez reconocidos los dos primeros bienios, la antigüedad se devengará por quinquenios con una cuantía del 9% sobre el salario base. Dicha antigüedad será también aplicada al personal laboral contratado, con el servicio reconocido en el Ayuntamiento de Cuenca". Por tanto, el concepto del que parte el reconocimiento de la antigüedad es el de "servicios prestados", sin que en dicho apartado de la norma convencional, ni en ningún otro, se limite dicho concepto laboral a que dichos servicios deben ser prestados de forma ininterrumpida, ni se condicione su devengo a que la vinculación laboral sea indefinida o temporal, en cualquiera de sus modalidades contractuales. Y dicha conclusión procede alcanzarse por varios motivos, acumulativos y coincidentes, no enervados por ningún otro dato o lectura que pudiera darse de la norma que destruyera tal conclusión: Así, en primer lugar, atendiendo a la propia literalidad del precepto, y a su espíritu y finalidad(«ex» artículo 3º del Código Civil ( LEG 1889, 27) ; dado que las partes creadoras y signatarias de la citada norma convencional no han expresado de forma limitativa su aplicabilidad, ni de la lectura de dicho apartado ni de ningún otro del bloque normativo convencional de referencia se puede obtener la interesada y sesgada interpretación que presenta la demandada. En segundo lugar, existen Sentencias de otros Juzgados (de la Jurisdicción Contencioso-Administrativa, de Cuenca, de fechas 4 de abril de 2006, de 8 de noviembre de 2005 y de 15 de mayo de 2006) y de este mismo de lo Social (de fecha 18 de diciembre de 2007, núm. 349/07, que, en interpretación del citado Convenio sobre el mismo concepto de la antigüedad para el pago de los derivados premios, considera que el concepto de "años de servicios" son todos aquellos que se tengan por realizados a la entrada en vigor de la norma convencional, sin que tampoco en las citadas resoluciones judiciales se establezca distinciones discriminatorias según sea la norma, continuada o interrumpida, de la prestación de los mismos. En tercer lugar, en aplicación en el Orden Social de la Jurisdicción, del importante principio "in dubio pro operario", que establece que en caso de duda razonable en orden a la interpretación y aplicación de una norma, legal o convencional, y de sus consecuencias aplicativas, debe prevalecer la que resulte más favorable a los intereses del trabajador. En cuarto lugar, incluso aplicando el sentido común, pues si lo que el citado extremo normativo pretende es premiar los años de fidelidad de los servicios prestados al Ayuntamiento, concediendo una gratificación especial por antigüedad, no sería conforme al espíritu y finalidad de la misma que se diferencie y se enerve su aplicación a aquellos trabajadores que, habiendo cumplido los respectivos tramos temporal de prestación de servicios, los mismos no hubieren sido prestados de forma ininterrumpida, incluso por causa no imputable a ellos mismos o contrarios a su voluntad; sin que sea dable admitir que, contrariando todos los argumentos anteriormente expuestos, sea la propia causante de las interrupciones laborales reseñadas la beneficiaria de una consecuencia no establecida expresamente por la norma y contraria al espíritu, razón de ser y finalidad para la que fue concebida. Reconocido el derecho de la actora a que los servicios prestados para el Ayuntamiento de Cuenca se computen en su integridad, y dado que la actora acredita haber prestado sus servicios para la demandada durante 4.588 días (más de 12 años), ello supone, en consecuencia, que la actora ha prestado sus servicios para el Ayuntamiento demandado durante dos bienios (6% para cada uno) y un quinquenio (9%), lo que genera el derecho al percibo de un 21% sobre el salario base por dicho concepto. De lo que se deduce, en aplicación del citado artículo 26 del Convenio Colectivo, que la actora tiene derecho a que, a efectos de antigüedad, tenga reconocida la cantidad mensual de 296,08 euros, cantidad que se corresponde a lo calculado por este concepto en la demanda. En consecuencia, si al salario mensual que la actora ha percibido en su última nómina de 1.953,08 euros (con prorrata de pagas extras) se le añade 296,08 euros correspondientes a la antigüedad debida, el salario diario a tener en cuenta a efectos de lo determinado para su pago por el despido nulo es el de 74,97 euros diarios, con prorrata de pagas extras. QUINTO El último de los pedimentos contenidos en la demanda solicita la condena al Ayuntamiento demandado del pago de una indemnización (conforme a lo preceptuado en estos casos en el artículo 180.1 in fine de la Ley de Procedimiento Laboral [ RCL 1995, 1144, 1563] ), en cuantía de 12000 euros. Teniendo en cuenta que la reparación del daño o sufrimiento moral no atiende a la reintegración de un patrimonio, sino que va dirigido, principalmente, a proporcionar en la medida de lo humanamente posible una satisfacción como compensación al sufrimiento que se ha causado ( Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de las Islas Canarias/Las Palmas de 17 de julio de 2007 [ AS 2007, 2185] ), y en atención a lo impuesto en el artículo 181 de la Ley de Procedimiento Laboral, se entiende que el daño moral producido a la actora por el despido efectuada por su empleadora, vulnerándole su derecho fundamental a la libertad ideológica (artículo 16 de la Constitución [ RCL 1978, 2836] ), siendo discriminada por su opinión política (artículo 14 de la Constitución), violentando el ámbito propio y reservado de la actora, debiendo hacer público para articular adecuadamente su defensa circunstancias íntimas de su vida (separación conyugal y posterior relación sentimental, opinión política, filiar, patrimonial, académica, laboral, etc.), defendiéndose de una Entidad Pública como es el Ayuntamiento de la localidad donde reside, que debe velar y ser el máximo exponente de garantía de los derechos fundamentales de sus ciudadanos, viéndose asimismo abocada a sufrir el estrés derivado, no sólo de la pérdida de un trabajo que creía legítimamente consolidado al menos un año más, y de su incertidumbre laboral, sino de la carencia de rentas económicas que ello supone para soportar su economía familiar, se estima, por todo ello, adecuada y razonable, dentro de los parámetros legales, la solicitud de la indemnización derivada del despido nulo por violación de los derechos fundamentales mencionados en la cuantía expuesta en el Suplico de su demanda en la cantidad de 12000 euros. SEXTO Se advertirá a las partes que contra la presente sentencia cabe recurso de suplicación, conforme a lo dispuesto en el artículo 189.1 de la LPL ( RCL 1995, 1144, 1563) (Ley de Procedimiento Laboral). FALLO Vistos los preceptos citados y demás de general y pertinente aplicación, Estimo íntegramente la demanda formulada por Dª. ..............., sobre DESPIDO/DERECHOS FUNDAMENTALES, contra el EXCMO. AYUNTAMIENTO DE CUENCA, y en su consecuencia declaro la existencia de vulneración del derecho fundamental a la igualdad y del derecho fundamental de libertad ideológica de la actora cometido por la demandada, y NULO el despido de la actora. Asimismo condeno a la demandada a que readmita inmediatamente a la actora al puesto de trabajo que desempeñaba, en las mismas condiciones que tenia con anterioridad al despido y contempladas en la presente Sentencia; a que satisfaga a la actora los salarios dejados de percibir desde la fecha del despido (el 31 de diciembre de 2007) a la de notificación de esta sentencia, que a la fecha de dictarla suman la cantidad de 12.295,08 euros; a que mantenga a la actora en alta en la Seguridad Social durante el mismo período; y, finalmente, a que le abone la cantidad adicional de 12000 euros por el concepto de indemnización por los daños morales causados. Notifíquese la presente sentencia a las partes, haciéndoles saber que contra la misma pueden interponer recurso de suplicación a través de este Juzgado y ante la Sala de lo Social de Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, anunciándolo en el plazo de los cinco días siguientes a su notificación, bastando para ello la mera manifestación de la parte o de su abogado o representante, o por medio de comparecencia o escrito de las partes o de su abogado o representante, de acuerdo con lo dispuesto en los artículos 192, 227, 228 y 229 de la Ley de Procedimiento Laboral ( RCL 1995, 1144, 1563) . El nombramiento de Letrado debe hacerse ante el Juzgado en el momento de anunciar el recurso. Así, por esta mi sentencia, lo pronuncio, mando y firmo.