//T27 TENDENCIAS | LATERCERA | Sábado 30 de noviembre de 2013 80 mil años, muestran una competencia no alcanzada fuera del continente hasta decenas de miles de años después”, dicen las investigadoras en su paper. Es decir, en vez de adelantados, como se los creyó siempre, los homínidos europeos habrían estado más retrasados en este cambio cultural que sus pares de otros continentes. No todo fue tan rápido Según estas autoras, algún vacío debía existir en una teoría que marcaba un cambio tan repentino de condiciones, que habría hecho pasar a los humanos de poco más que “babuinos glorificados” (como llamó en 1989 el prestigioso autor Jared Diamond a los humanos premodernos) a seres capaces de manejar la complejidad del pensamiento abstracto y simbólico. Según un artículo publicado por la revista New Scientist, las primeras fallas de la teoría del “gran salto adelante” surgieron debido a una serie de intrigantes hallazgos en la cueva Blombos, en Sudáfrica. Artefactos de adorno, como cuentas de concha de huevos de avestruz y bloques grabados con formas geométricas, daban cuenta de la existencia del arte simbólico 30 mil años antes y 10 mil kilómetros más al sur del sitio de la conocida “explosión creativa” en Europa. No serían los únicos. Restos de rocas con grabados que seguían patrones en Sudáfrica de hace al menos 52 mil años, colecciones de conchas marinas en las cuevas de Qafzeh, en Israel, y la Grotte des Pigeons, en Marruecos, mostraban que los humanos modernos ya coleccionaban simbólicos ornamentos personales hace más de 80 mil años. El rastro llega aún más atrás. Johan Lind y su equipo en Estocolmo utilizaron un software comúnmente usado para trazar líneas genéticas y lo alimentaron con datos relativos a la aparición del gen FOXP2, cambios en el tracto vocal y pistas arqueológicas sobre la vida social moderna (uso del fuego y tecnologías complejas de uso de herra- mientas). Todos factores que requieren de las habilidades básicas que dieron vida al pensamiento simbólico. Gracias a esta metodología, en una investigación publicada este año, Lind asegura que la mente moderna nació hace al menos 170 mil años. Estos hallazgos abren una perspectiva completamente nueva. Tan antiguos han resultado algunos vestigios, que los expertos incluso están comenzando a considerar la posibilidad de que el pensamiento simbólico no sea propiedad exclusiva del Homo Sapiens. También podría haber existido entre los Neandertales, de los que siempre se pensó que eran eminentemente concretos. El profesor de Antropología y experto en el tema de la Universidad de Colorado, Thomas Wynn, explica a Tendencias: “Nuestras evidencias más antiguas de posible simbolismo preceden a los Neandertales, de modo que creo que es razonable concluir que ellos tenían habilidades simbólicas. De todas formas, hemos estado separados de ellos por casi medio millón de años, de modo que su forma de simbolismo ciertamente era distinta a la nuestra”. En la misma línea, Francesco d’Errico, investigador de la Universidad de Bordeaux, en Francia, dice a New Scientist que la falta de evidencia disponible sobre el pensamiento simbólico entre los Neandertales podría obedecer simplemente a la naturaleza propia de esos homínidos: “Quizás usaban plumas o pigmentos vegetales que no dejaron huellas”. Las verdaderas razones del “salto” La aproximación más razonable a la aparición de la “capacidad cultural” humana, dice Thomas Wynn, es una que entienda los cambios como graduales. El experto prefiere ver la mente humana moderna no como un fenómeno, sino como una serie de habilidades cognitivas discretas con diferentes tiempos de evolución. “Por ejemplo, la evidencia arqueológica indica que la cognición espacial moderna estaba instala- da hace ya 500 mil años, pero otros componentes de la cognición moderna evolucionaron más recientemente. La capacidad de la memoria de trabajo parece haberse vuelto moderna hace sólo 100 mil años o menos. Hay algunas señales de pensamiento simbólico hace quizás 300 mil años, en el uso de pigmentos minerales, pero eso no significa que el lenguaje ya estuviera instalado en ese timpo”, explica. Muchas culturas Sin embargo, resta responder una interrogante. Porque si bien las huellas pueden rastrearse hasta mucho antes de 40 mil años atrás, la evidencia indica que sí hubo un cambio en las habilidades simbólicas de los Homo Sapiens europeos en esa fecha. Una posibilidad es que justo en ese tiempo la población europea alcanzara un número tal, que se convirtió en una masa crítica que de alguna forma promovió la innovación. “Necesitas muchas culturas para hacer una nueva cultura”, comenta Lind a New Scientist. La razón del repentino aumento en el número de Homo Sapiens en Europa puede haber tenido que ver con el cambio de las condiciones climáticas hace unos 26 mil años, en el peak de la Era de Hielo, cuando el frío obligó a los hombres a moverse hacia el sur. Genevieve von Petzinger, antropóloga de la U. de Victoria en British Columbia, señala: “Este cambio hizo que de pronto, la gente viviera más cerca que antes. Y si estás con extraños, necesitas saber quiénes son y también debes preguntarte quién eres tú”. En ese sentido, la aparición de los símbolos puede haber tenido su origen en la necesidad de marcadores territoriales, que le permitiera a un grupo saber que un lugar ya estaba siendo ocupado. Esa sería la misma explicación para los signos abstractos encontrados en cientos de huesos paleolíticos. Sarah Evans, de la Universidad de Cambridge, construyó un “diccionario” para estas marcas y descubrió que frecuentemente los símbolos coincidían. Eso pudo haber sido crucial en ciertas situaciones. Al encontrarse con extraños cargando herramientas de hueso con grabados similares a los propios, cualquiera sabría que compartían algo y que, por tanto, no eran enemigos. “Las redes sociales han sido desde siempre un aspecto clave en nuestras vidas”, comenta Evans. A medida que siguen asomando nuevos y más antiguos hallazgos, las antropólogas McBrearty y Brooks continúan denunciando la necesidad de renunciar a la idea de la “revolución humana”: “Quizás sin darse cuenta, los investigadores crean así una separación entre los humanos y el resto del mundo biológico. Al hablar de la unicidad humana, realmente remueven el origen del Homo Sapiens. Los humanos, sin dudas, comparten elementos de su “El pensamiento simbólico habría estado presente entre los primeros miembros de nuestra especie, entre 170 mil y 200 mil años atrás”. JOHAN LIND, Centro para el Estudio de la Evolución Cultural y el Departamento de Zoología de la U. de Estocolmo. conciencia, como de su comportamiento, con sus parientes cercanos”. Por lo mismo, en ningún caso descartan que esto pueda emparentarnos con homínidos más antiguos. “Nuestros parientes cercanos extintos, los Neandertales, eran homínidos inteligentes que demostraron tener estrategias de supervivencia necesarias para vivir en un ambiente desafiante. No sería sorprendente si mostraran lenguaje o habilidades rudimentarias de simbolización, ya sea heredadas de un ancestro común, desarolladas en paralelo o aprendidas del Homo Sapiens, a través del contacto cultural”. T