PACÍFICO COLOMBIANO Conflicto armado y violencia En este artículo se caracterizan el estado actual de la confrontación en la región, las implicaciones de la continua disputa entre actores ilegales y los factores que propician una continuidad del conflicto armado. región E IRENE CABRERA C NOSSA Investigadora Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales [email protected] l incremento en el número de asesinatos, masacres y sabotajes en los cuatro departamentos del Pacífico colombiano difícilmente se puede desligar de la evolución reciente del conflicto armado nacional. Los operativos militares en la región andina del país forzaron la relocalización paulatina de los grupos guerrilleros y paramilitares hacia territorios de la periferia, donde pudieran garantizar su supervivencia. En medio de esta dinámica, el Pacífico colombiano no quedó excluido, pues se convirtió rápidamente en una zona apetecida por los grupos irregulares para trasladar su estructura militar y financiera. A pesar del mayor esfuerzo estatal por recuperar el control de numerosos municipios, en la actualidad se siguen descuidando las ventajas político-militares de otras zonas distantes de las ciudades principales, que pueden aprovechar los grupos irregulares. Al observar los recientes estudios de Echandía y Pécaut1, es posible considerar que la administración de Álvaro Uribe ha incurrido en una subestimación de otros escenarios que pueden utilizarse para la prolongación del conflicto. En particular, el suroccidente y las fronteras terrestres de Colombia se han convertido en posiciones de elevado valor estratégico por facilitar actividades como el repliegue y el abastecimiento. Según esta afirmación, el Pacífico merece especial atención si se detallan las manifestaciones recientes del conflicto y la violencia a lo largo del Chocó, Valle del Cauca, Cauca y Nariño. Estado reciente de la confrontación en el Pacífico En la región del Pacífico, los grupos irregulares2 aún desbordan la capacidad militar del Estado; en los departamentos del occidente colombiano, los combates en los que han intervenido las fuerzas militares sólo han sobrepasado las acciones de los grupos irregulares en el año 2007 (gráfico 1). Las Farc han sido la guerrilla más activa a nivel armado en los cuatro departamentos de la región, el ELN ha perdido protagonismo militar por la mayor ofensiva del Estado y de los paramilitares, y estos últimos han tenido una actuación residual sobre la totalidad de incidentes armados registrados en el Pacífico durante los últimos diez años (gráfico 2). El departamento que ha concentrado un número mayor de acciones irregulares es Cauca, seguido de Nariño, Valle del Cauca y Chocó. Mientras en el 2005 se presentó un repunte de incidentes armados en Cauca y Nariño, en el Valle del Cauca y el Chocó los años con mayores acciones armadas fueron 2006 y 2002, respectivamente, lo cual puede explicarse por la actividad de las Farc. Esta guerrilla, a través de sabotajes contra la infraestructura pública y pequeñas emboscadas, aún representa un desafío para la capacidad militar del Estado. r e v i s t a d e l a u n i v e r s i d a d e x t e r n a d o d e c o l o m b i a ·f a c u l t a d d e f i n a n z a s , g o b i e r n o y r e l a c i o n e s i n t e r n a c i o n a l e s 84 contenido Número de acciones actualidad Fuente: Gráfico elaborado con datos del Observatorio de Derechos Humanos de la Vicepresidencia de la República de Colombia. correo de brujas editorial region Dinámicas del narcotráfico y la violencia Uno de los elementos decisivos en la mayor intensidad del conflicto y la violencia en el Pacífico colombiano es el narcotráfico. A lo largo de esta costa los grupos irregulares y el crimen organizado aprovechan los puertos legales e ilegales para embarcar la droga, introducen insumos químicos indispensables para la transformación de los cultivos ilícitos y procuran el control de las zonas fronterizas que son útiles para el narcotráfico y entrada de municiones. economía y finanzas imagomundi contrasena Esta persistencia armada de los grupos irregulares se debe a que los operativos militares emprendidos por la administración de Álvaro Uribe (desde el año 2002) no han sido los mismos en número y contundencia en el Pacífico. Del total de 170 municipios donde se ha presentado algún tipo de incidente armado en la región, un 52,9% registró más acciones armadas de los grupos irregulares que combates por iniciativa del ejército durante el gobierno de Pastrana (1998-2002). Esta tendencia se ha mantenido en los últimos seis años, si se toma en cuenta que en el primer período presidencial de Uribe en un 58,8% de los municipios hubo superioridad armada de los grupos irregulares cifra que bajó a 53,5% en lo que va corrido de su segundo mandato (2007 y 2008). Como resultado de esto, en el Pacífico se presenta una continuidad de la confrontación armada que aún favorece a las guerrillas y los paramilitares, lo que permite cuestionar que la política militar de la actual administración sea congruente con los hechos recientes del conflicto en el Pacífico, cuando se presenta una actividad irregular que tiende a persistir en el tiempo. cultura y sociedad Fuente: Gráfico elaborado con datos del Observatorio de Derechos Humanos de la Vicepresidencia de la República de Colombia. ventana global Autodefensas 85 región De acuerdo con el más reciente informe de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Onudd) publicado en junio de 2009, en el Pacífico han aumentado las hectáreas cultivadas con coca. Claramente, esto va en contravía de la tendencia nacional (mapa 1). Desde hace cinco años, señala el informe, se presenta una tendencia ascendente, y su pico se ubica en 2008, con un aumento del 15% frente al 2007. Tal incremento y concentración de cultivos ilícitos en el Pacífico se explica en buena medida por el repliegue reciente de los grupos irregulares hacia esta región (ver mapa de página opuesta). En particular, las Farc y el ELN al reubicar su presencia armada en aras de garantizar su supervivencia, también trasladaron su principal economía de guerra en la actualidad (el narcotráfico) hacia espacios donde pudieran integrar las zonas de producción y exportación3. Por supuesto que el Pacífico resulta útil por su salida al mar y la colindancia con otros países como Ecuador y Panamá que facilitan la conexión con puntos clave de exportación. Por otra parte, cabe señalar que la región se ha convertido en una zona en disputa para la producción y tráfico de cultivos ilícitos. Alrededor del narcotráfico se han tejido alianzas pero también amplios enfrentamientos entre toda clase de organizaciones armadas que ejercen una violencia homicida en función de monopolizar esta actividad ilícita. Precisamente, la búsqueda de un control de los territorios de vital importancia para el negocio, también conlleva un incremento de los asesinatos y masacres en la población de la región e incluso contra los habitantes de los países limítrofes. Siguiendo las investigaciones de Stathis Kalyvas4 se corrobora que en las zonas donde no es claro el predominio de uno u otro grupo (incluido el Estado) resulta frecuente el uso de una violencia masiva. Así, en la actualidad, las zonas en disputa a lo largo y ancho del Pacífico se constituyen en escenarios con altas tasas de homicidios debido a que aún está en juego el control armado de varios municipios ya sea con fines políticos o económicos. Hasta el momento, la lucha por el control estratégico de territorios claves del Pacífico para huir de la confrontación y adelantar actividades ligadas al narcotráfico, ha generado un creciente flujo de desplazados5 y el incremento de las tasas de homicidios de los departamentos de la región6. Aquí tiene sentido la frase que menciona que «la violencia aparece cuando el poder está en riesgo». Pues bien, en el Pacífico no hay un control claro ni del Estado ni de los grupos ilegales al margen de la ley. Perspectivas para la región La evolución reciente del conflicto en el Pacífico y las manifestaciones subyacentes de violencia deberían ocupar un lugar central en la agenda político-militar del Estado. El continuo registro de homicidios, masacres de indígenas Awás y ataques a la infraestructura pública en el occidente del país, ponen en evidencia la disputa por corredores hacia el mar Pacífico y la ausencia de un poder estatal capaz de contener el accionar armado de los grupos irregulares. A pesar de los mayores esfuerzos de la administración de Uribe por someter a los grupos armados y en particular a la guerrilla, aún no es claro a quién favorece la correlación de fuerzas en los departamentos del Pacífico. A lo largo de esta región, las guerrillas, paramilitares y el crimen organizado, recrudecen la violencia contra la población civil e incluso se multiplican los homicidios y desplazamientos de los civiles que habitan en las zonas limítrofes con Ecuador y Panamá. En esta región se han subestimado las ventajas militares que otorgan las fronteras, el complejo sistema hidrográfico y montañoso, así como los puertos y territorios aptos para el narcotráfico. Desde luego, es posible afirmar que la inacabada confrontación en el Pacífico y la creciente violencia a cargo de las retaguardias del paramilitarismo y las organizaciones criminales, favorecen una prolongación del conflicto armado a pesar del discurso triunfalista de la administración presidencial. r e v i s t a d e l a u n i v e r s i d a d e x t e r n a d o d e c o l o m b i a ·f a c u l t a d d e f i n a n z a s , g o b i e r n o y r e l a c i o n e s i n t e r n a c i o n a l e s 86 contenido actualidad correo de brujas editorial !" ventana global economía y finanzas region 1. Camilo Echandía, Dos décadas de escalamiento del conflicto armado en Colombia 1986 - 2006, Bogotá, Universidad Externado de Colombia, 2006 y Daniel Pécaut, Las Farc, ¿una guerrilla sin fin o sin fines?, Bogotá, Ed. Norma, 2008. 2. Estos grupos irregulares son las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc); el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y los paramilitares. 3. Camilo Echandía, op. cit. 4. Stathis Kalyvas. «La violencia en medio de la guerra civil. Esbozo de una teoría», Análisis Político No. 42, Iepri- Universidad Nacional, 2001. 5. El Tiempo, «Ahora son 780 los desplazados en Nariño», 9 de septiembre de 2009. 6. Mientras que el Valle del Cauca presenta tasas de homicidio que históricamente han superado las tasas de homicidio a nivel nacional, en Chocó este indicador de violencia no es tan significativo aunque ha aumentado en años recientes. Por su parte Cauca y Nariño presentan un incremento sustancial de las tasas de homicidio que desde el año 2006 superan la tasa de homicidio a nivel nacional. contrasena Notas cultura y sociedad Fuente: Gobierno de Colombia - Sistema de monitoreo apoyado por UNODC. Los límites, nombres y títulos usados en este mapa no constituyen reconocimiento o aceptación por parte de las Naciones Unidas. imagomundi 87