Comunidades indígenas Embera Katio luchan

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17.03.2005
Colombia: Comunidades indígenas Embera Katio luchan por sus derechos
En Bogotá, 372 indígenas de las comunidades Embera Katio del Alto Sinú,
Departamento de Córdoba continúan protestando contra la construcción de la
hidroeléctrica Urra I. Hace varias semanas, las comunidades están solicitando al
gobierno que cumpla plenamente la Sentencia de la Corte Constitucional que ordenó
la reparación integral para los indígenas. En noviembre se llevaron a cabo
negociaciones entre las comunidades y el gobierno; sin embargo, éstas fueron
interrumpidas por el gobierno. La intransigencia de las autoridades bloquea una
solución al problema, agravando la situación de los indígenas.
Una acción internacional en este momento es importante para solicitar al
gobierno colombiano la protección y garantía de los derechos humanos de las
comunidades Embera Katio. Por favor, escriba al presidente de la República de
Colombia, Dr. Álvaro Uribe Vélez, solicitando que adopte las medidas de
protección y garantía necesarias, que negocie con las comunidades y que respete
su derecho a manifestarse. Envíe copias al Ministerio del Ambiente y a la
Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC).
Contexto
El proyecto hidroelétrico Urra I entró en operación el año 2000 y desde entonces, ha venido afectando
a las comunidades indígenas, campesinas y pescadores del Alto e Bajo Sinú, Departamento de
Córdoba, noroeste de Colombia.
El 10 de noviembre de 1998 la Corte Constitucional emitió la sentencia T-652 tutelando los derechos
fundamentales del pueblo Embera-Katío (http://www.gratisweb.com/embera_katio/T652-98.htm),
lesionados por la construcción de la represa y la violación del derecho a la consulta previa establecida
por el Convenio 169 de la OIT, el cual fue ratificado por ley 21 de 1991 de Colombia. Esta sentencia
sólo ha sido cumplida parcialmente por el gobierno y la empresa Urrá S.A. y mientras tanto, 17 líderes
del pueblo Embera Katío del alto Sinú han sido asesinados o desaparecidos.
A pesar de que la Corte ordenó que no se minimizarán los riesgos previsibles para la salud y la
supervivencia de los Embera-Katio del Alto Sinú, y a pesar de que los impactos socio-ambientales
negativos eran conocidos por el gobierno, en 1999, el Ministerio del Ambiente, Vivienda y Desarrollo
Territorial otorgó la Licencia Ambiental a la empresa Urrá S.A., sin consentimiento de las
comunidades Embera Katio, en abierta violación del Convenio 169 de la OIT y la Ley 21 de 1991.
Desde entonces, la implantación del proyecto hidroléctrico Urra I provocó innumerables violaciones a
los derechos de las comunidades indígenas, campesinas y de pescadores. La extinción de los peces, el
deterioro de las tierras cultivables, el desmoronamiento de las riberas de los ríos, entre otros, violan el
derecho a alimentarse de las comunidades. Ellas están sufriendo violencia, represión y asesinato de sus
líderes.
El fuerte proceso de presión ejercido en los últimos años por los indígenas Embera Katio y por las
organizaciones internacionales, entre ellas FIAN, y la ocupación por los indígenas de los jardines del
Ministerio de Ambiente entre diciembre de 1999 y el 19 de abril de 2000 condujo a la firma de
acuerdos. Sin embargo, la empresa URRA y el gobierno no están cumpliendo con los acuerdos
firmados y los acuerdos han resultado ser insuficientes. El gobierno y la empresa ni siquiera cumplen
la totalidad de las normas definidas por la licencia ambiental otorgada. De igual manera, el gobierno
no está cumpliendo con las decisiones de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que
considera el pueblo Embera Katío merecedor de un tratamiento especial debido a su vulnerabilidad, y
recomienda encarecidamente al gobierno adoptar las medidas cautelares necesarias para proteger sus
derechos fundamentales.
Debido a la agudización de los impactos causados por la represa, de la insuficiencia de las propuestas
y acuerdos de mitigación, y de la inercia del estado de Colombia en ofrecer alternativas al pueblo
Embera Katio, las comunidades decidieron movilizarse en Asamblea Permanente para poder negociar
con el gobierno y exigirle el cumplimiento pleno de la sentencia y los acuerdos. La comunidad exige
que el Ministerio del Ambiente realize una evaluación seria de los impactos generados por la
hidroeléctrica. Además exige la respectiva modificación de la licencia ambiental y suspención o
revocación inmediata si la empresa URRA S.A. no cumpliera con las condiciones de la misma, a fin
de garantizar los derechos fundamentales de todas las comunidades que siguen afectadas en la cuenca
del río Sinú. El gobierno todavía sigue intransigente, poniéndose del lado de la empresa Urrá S.A.
Mandato de FIAN
Colombia es Estado parte del Pacto Internacional sobre Derechos Económicos, Sociales y Culturales,
y de esta manera, está obligado a proteger el derecho a la alimentación de la población. El
procedimiento del gobierno colombiano debe ajustarse a los principios establecidos en el Pacto, que
exigen el respeto a los derechos de los recursos productivos y a una alimentación adecuada de las
comunidades indígenas.
Fin de la acción: El 17 de mayo, 2005
Dirección:
Doctor
Álvaro Uribe Vélez
Presidente da la República
Carrera 8 n. 7-26 Palacio de Nariño,
Santafé de Bogotá - Colombia
Fax: +57 1 5662071
email: [email protected]
Mensajes cortos: http://www.presidencia.gov.co/correo/formulario.php
Copias:
Doctora
Sandra Suarez
Ministra del Ambiente
Ministerio del Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial
Calle 37, no. 8-40
Santafé de Bogotá, Colombia
Fax: +571 288 9892
email: [email protected]
Sírvase informar al secretariado de FIAN de todas respuestas a sus correos
Doctor
Álvaro Uribe Vélez
Presidente da la República de Colombia
Carrera 8 n. 7-26 Palacio de Nariño,
Santafé de Bogotá - Colombia
Excelentísimo Sr. Presidente:
He recibido informaciones preocupantes sobre la situación de derechos humanos de
las comunidades indigenas Embera Katio del Alto Sinú en relación con la
implantación del proyecto hidroeléctrico URRA I. La insuficiencia de las medidas de
mitigación, la falta del gobierno de hacer cumplir a la empresa con sus obligaciones
adquiridas tanto bajo la licencia ambiental como bajo el fallo de tutela de la corte
constitucional (T-652) y la falta del gobierno de ofrecer alternativas, están violando
los derechos fundamentales de esas comunidades.
Estoy informado que las comunidades están buscando el diálogo y la negociación
con las autoridades nacionales para solucionar el problema. Lamentablemente, el
gobierno se mantiene intransigente, cerrado a cualquer diálogo y adoptando los
instrumentos de represión.
Considerando que Colombia es Estado Parte del Pacto Internacional de Derechos
Económicos, Sociales y Culturales, está obligado a respetar, proteger y garantizar
estos derechos a toda su población. El derecho a alimentarse implica la protección
de los recursos alimentarios de estas comunidades. De esta manera, solicito a su
Excelencia:
- buscar soluciones negociadas con la comunidad indígena Embera Katio;
- que incumba el Ministerio del Ambiente para que éste realice una evaluación
seria de los impactos generados por la hidroeléctrica, y la respectiva
modificación de la licencia ambiental y suspención o revocación inmediata si
la empresa URRA S.A. no cumpliera con las condiciones de la misma, a fin de
garantizar los derechos fundamentales de todas las comunidades que siguen
afectadas en la cuenca del río Sinú;
- tomar medidas para garantizar la vida y libre expresión de las comunidades
indígenas en Colombia.
Atentamente,
cc: Dr. Sandra Suarez, Ministra del Ambiente