03-tu.qxd 11/5/04 9:25 PM Page 1 3 La Plata, sábado 6 de noviembre de 2004 EN EL SAN JUAN DE DIOS Un preso se escapó del hospital porque los guardias se quedaron dormidos Estaba detenido acusado de asaltar un supermercado chino. Durante la huida se había tiroteado con la policía, resultando con un balazo en el hombro. Los efectivos que lo cuidaban hicieron una falsa denuncia. Dijeron que se había fugado con la ayuda de una pareja. Fueron suspendidos Un joven de 19 años quien se encontraba detenido e internado en el Hospital San Juan de Dios, logró fugarse luego de quitarse las esposas que lo sujetaban a la cama y ganar la calle. Por el hecho, dos policías fueron pasados a disponibilidad, ya que en un primer momento habrían denunciado que fueron víctimas de una pareja de delincuentes que los redujeron a punta de pistola para permitir la liberación del joven. El hecho tuvo lugar a las tres de la madrugada de ayer cuando Marcos Barrionuevo de 19 años, logró zafar de sus esposas y salir del edificio ubicado en 27 y 70. Según informaron fuentes policiales, el joven había sido capturado por personal de la comisaría Cuarta hacía sólo diez días, luego del asalto a un supermercado chino ubicado en 44 entre 147 y 148. Barrionuevo, presuntamente junto a un cómplice, habrían irrumpido en el local y tras enca- Dos policías por turno debían realizar su custodia. Según se informó ayer a la madrugada las guardias estaban a cargo de dos suboficiales, uno de la comisaría Cuarta o otro de la Quinta. Al parecer, el detenido se encontraba solo en la habitación cuando perpetró la fuga, ya que los custodias se habrían quedado dormidos. La gran mentira Una vez burlada la custodia, el ladrón escapó del hospital San Juan de Dios Ayer muy temprano, cuando trascendió la noticia sobre la evasión, las fuentes consultadas aseguraban que durante la madrugada, una pareja se había presentado en la habitación donde se encontraba Barrionuevo y a punta de pistola habían logrado sorprender y reducir a los policías. Los malvivientes habían logrado liberar al detenidos y habían fugado con las armas reglamentarias de los policías. Tras tomar conocimiento la comisaría Quin- Durante el enfrentamiento en el que Barrionuevo resultó baleado, también un policía sufrió una herida. El joven llevaba un revólver calibre 32 Una seguridad muchas veces vulnerada El robo había sido perpetrado por dos sujetos. Mientras Barrionuevo fue detenido, su cómplice escapó con los 300 pesos robados ñonar a los empleados se habían alzado con unos 300 pesos. Pero cuando ambos se daban a la fuga con el arma entre sus manos, los vio un efectivo del Grupo Halcón, que se encontraba franco de servicio y casualmente pasaba por el lugar. El policía, que estaba de civil, se identificó y dio la voz de alto. Lejos de acatar la orden, los sujetos partieron en distintas direcciones y uno de ellos (presuntamente Barrionuevo) disparó contra el policia, que resultó herido en una mano. El agente repelió el ataque e hirió al ladrón en el hombro. Pese a estar herido, el joven continuó con la huida hasta refugiarse en una vivienda de la calle 147 entre 50 y 52, donde fue apresado. En poder del detenido se secuestró el revólver calibre 32, pero no el dinero robado. Debido a la herida, el joven fue trasladado al Hospital San Juan de Dios, donde recibió las primeras curaciones y quedó internado. Si bien su estado de salud era bueno, el joven permanecería en el nosocomio hasta su total recuperación. Los antecedentes de fuga de presos alojados en hospitales demuestran que el actual sistema de custodia no es efectivo. Existe un proyecto aún sin aplicar ta, con jurisdicción en el hospital y escuchar el relato de los policías, se inició un rastrillaje en el lugar que permitió hallar las pistolas en un sector del ingreso al nosocomio donde se suponía habían sido abandonadas por los delincuentes. Sin embargo, el transcurso de las horas hizo trascender una nueva información: en realidad, las fuentes consultadas aseguraron que los policías en sus declaraciones habían entrado en contradicciones por lo que tras algunas horas habían decidido contar la verdad que habían ocultado para no perder su trabajo. La verdad era que se habían quedado dormidos y el preso logró salir por sus propios medios, presuntamente por la puerta principal, sin que nadie sospechara de él. El hecho motivó que se ordenara la disponibilidad preventiva para los dos policías hasta que se esclarezca el hecho. En tanto, la Policía inició la ardua busca del detenido, quien se cree se habría ocultado en la zona, ya que su familia vive en Las Quintas. Creen que su recaptura es inminente. El hospital San Juan de Dios cuenta con varios antecedentes de fugas de detenidos. El más insólito tuvo lugar en marzo de 2002 cuando un preso que estaba internado por sufrir de una grave enfermedad, se quitó las esposas y después utilizó una soga para escapar por una ventana. El caso se produjo poco después de las 6 de la mañana, en la Sala 2 del Servicio de Infectología, cuando Carlos Alberto Alegre Domínguez, quien está detenido en el marco de una causa por “robo calificado”, estaba esposado de una pierna a la cama, mientras que los dos custodios del Servicio Penitenciario Bonaerense se encontraban en la puerta de la sala. Según la versión de los investigadores, el preso habría logrado abrir la traba de las esposas, con lo que pudo levantarse y caminar hasta un baño. Con la ayuda de una soga, el hombre logró saltar a la calle a través de un pequeño ventiluz. Las sucesivas fugas de detenidos ponen otra vez en evidencia el riesgo que corre el actual sistema de sujeción de los detenidos, quienes deben permanecer ligados a la cama mediante la utilización de esposas de metal. Ante esta situación, un penitenciario ideó un nuevo sistema de sujeción que aún no fue aprobado para su utilización pero que propone un cambio fundamental en el sistema de seguridad y el tratamiento del detenido. El equipo consiste en el reemplazo de las esposas metálicas por un sofisticado mecanismo electrónico que permite la sujeción a una cama sin provocar lesiones a la persona, evitando el constante foco infeccioso y otorgando mayor seguridad. El prototipo fue bautizó “sujeción modular electrónica antievasión para detenidos hospitalizados”, y propone una doble solución al problema de los detenidos internados. Un antecedente cercano El antecedente más reciente y dramático de una fuga de detenidos de un hospital tuvo lugar hace sólo quince días cuando dos reclusos que estaban internados en el hospital de Marcos Paz tomaron como rehenes a dos pacientes y se entregaron después de atrincherarse durante dos horas. Uno de los presos estaba condenado por abuso sexual y tentativa de robo reiterado en tres hechos, mientras que el otro lo estaba por tenencia de arma. Todo se inició cuando los presos Jorge Condorí y Juan Juárez lograron zafarse de las esposas sin que la guardia penitenciaria lo advirtiera y tomaran como rehenes a dos pacientes y a un médico que en ese momento estaban en la habitación. Uno de los reclusos exhibió un cuchi-llo de cocina y, junto a su cómplice, pretendió huir del lugar, aunque inmediatamente se vio cercado por efectivos policiales.