Presencia de las mujeres en cargos de decisión y en los partidos políticos en Chile Las mujeres representan la mitad de la población mundial y, sin embargo, se encuentran evidentemente sub-representadas en los espacios de toma de decisión pública y en los partidos políticos. Este Informe hace un repaso general a los factores de diverso tipo que limitan su presencia, da cuenta de los antecedentes nacionales y comparados sobre participación femenina en cargos ejecutivos y en municipios, y atiende a la realidad de las mujeres en los partidos políticos nacionales. Biblioteca del Congreso Nacional. Contacto: Mariano J. Ferrero - Departamento de Estudios, Extensión y Publicaciones Email: [email protected], Anexo: 1862. 17-05-2012. Serie Informes Nº 26-12. i Tabla de Contenido I. Antecedentes generales......................................................................... 1 II. Factores que limitan el incremento de la presencia política de las mujeres en Chile ................................................................................................... 2 III. Participación política femenina en Chile: Gobierno nacional y municipios...... 4 3.1 3.2 IV. Mujeres en el Poder Ejecutivo nacional................................................. 5 Mujeres en los Municipios ................................................................... 8 Presencia de las mujeres en los partidos políticos de Chile ......................... 9 Índice de Tablas Tabla 1. Porcentaje de mujeres en los gabinetes ministeriales en América Latina.... 5 Tabla 2. Carteras con Ministras como titulares en el mundo y en los dos últimos gobiernos de Chile .......................................................................................... 6 Tabla 3. Porcentaje de mujeres en los gabinetes ministeriales en los dos últimos gobiernos de Chile .......................................................................................... 8 Tabla 4. Porcentajes de mujeres en cargos municipales en América Latina, 2010.... 8 Tabla 5. Mujeres en los Municipios en Chile - Elecciones 2004 y 2008 ................... 9 Tabla 6. Electividad candidatas por partido político 2009 ................................... 11 Tabla 7. Parlamentarias electas en 2009, por partido político ............................. 12 1 I. Antecedentes generales Las mujeres representan la mitad de la población mundial y, sin embargo, se encuentran evidentemente sub-representadas en los espacios de toma de decisiones tanto en el sector público como privado. En materia de representación política y acceso a los cargo de decisión pública, concretamente, existe una evidente desigualdad de género ya que las mujeres no alcanzan los dos dígitos en el porcentaje que representan de los máximos cargos ejecutivos (jefe de Estado y/o gobierno) en el mundo. La situación es relativamente semejante si se analiza la proporción de mujeres parlamentarias1, presencia femenina en carteras ministeriales o desempeño en cargos públicos a nivel de los gobiernos locales. En Chile, el debate sobre el incremento de la presencia femenina en la política ha estado signado por un hecho de la máxima trascendencia. La elección presidencial de 2006 marcó el acceso de la primera mujer al cargo de Presidenta de la República y, con ella, la decisión de conformar un gabinete paritario.2 A lo largo de todo su mandato, la presencia de mujeres en las carteras ministeriales fue numéricamente significativa y, a su vez, Michelle Bachelet concluyó su período de gobierno con los niveles de apoyo ciudadano más altos de la historia, algo por encima del 80% según los principales sondeos de opinión. Esta experiencia, sin dudas, ha incidido en el imaginario social consolidando un cambio respecto a la valoración del rol político de las mujeres, como muestra la reciente encuesta CEP. En efecto, comparando los años 1995 y 2012, aumenta sensiblemente el número de personas que considera que hombres o mujeres pueden desempeñar por igual los siguientes cargos: alcalde (56% vs. 76%), senador o diputado (57% vs. 82%), ministro (51% vs. 81%), y Presidente de la República (33% vs. 80%). Más aún, en el caso de la primera magistratura se considera que, si se opta entre sexos, las mujeres deben ser consideradas como mejores para desempeñar el cargo (12% frente a 8%).3 No obstante ello, las mujeres siguen estando sub-representadas en la vida política chilena, tanto en el poder ejecutivo como en el parlamento y en los municipios. También es evidente su situación desaventajada en los propios partidos políticos, que son la principal forma de organización a través de la cual puede optarse a cargos públicos en los sistemas democráticos actuales, lo que refuerza otros 1 Se estudia en detalle el caso de los cargos parlamentarios en: BCN, La composición del Congreso Nacional de Chile: ¿Dónde están las mujeres?, Serie Informes Nº 19-12, Departamento de Estudios, Extensión y Publicaciones, Santiago, 26-04-2012. 2 Para una reflexión sobre esta etapa, Castillo, Alejandra, Democracia, políticas de la presencia y paridad. Estudio sobre participación política de mujeres en el Ejecutivo (2006-2010), Serie Género y Política, Corporación Humanas, Santiago, Junio de 2011, disponible en: http://www.humanas.cl/wpcontent/uploads/2011/12/democracia-politicas.pdf [acc. 15/05/12]. 3 En todos los demás cargos, prevalece levemente la opción por el sexo masculino, siempre muy por detrás de la opinión de que ambos pueden desempeñarlo por igual. CEP, Estudio Nacional de Opinión Pública. Abril 2012, Centro de Estudios Públicos, Santiago, 10-05-2012, pp. 9-10, disponible en: http://www.cepchile.cl/dms/archivo_5007_3141/encuestaCEP_abril2012.pdf [acc. 11/05/12]. 2 factores que vienen a limitar la presencia de las mujeres en la escena política. Este Informe hace un repaso general a esas limitaciones de diverso tipo, para atender posteriormente a los antecedentes nacionales y comparados respecto a la participación femenina en los cargos ejecutivos y en los municipios. Por último, centra la atención en la realidad de los partidos políticos nacionales y la presencia de mujeres en cargos directivos de los mismos, así como su nominación para candidaturas parlamentarias. II. Factores que limitan el incremento de la presencia política de las mujeres en Chile La realidad de la escasa presencia femenina en la vida política chilena -por lo demás, una situación que no es exclusiva de nuestro país- remite a un conjunto de factores subyacentes que han sido objeto de investigación y análisis en distintas sociedades de todo el mundo. De ese modo, se han identificado grandes dimensiones de obstáculos que impiden, de manera sistemática, el incremento sustancial de la participación de las mujeres en la esfera política, lo que debe ser tenido adecuadamente en cuenta. En este sentido, la politóloga Marcela Ríos sintetiza estos factores limitantes en tres grandes dimensiones4: 1) dimensión estructural: reúne aquellas desigualdades de género producidas en el orden socioeconómico, tales como la participación en el mercado laboral, las brechas de ingreso, o los niveles educacionales, que incidirían negativamente en la representación política femenina; 2) dimensión cultural o ideológica: hace referencia a las creencias sobre el rol de las mujeres en la sociedad, en particular asociado a la división sexual del trabajo, y sus efectos en la capacidad, interés y oportunidades de las mujeres para acceder a la actividad política; 3) dimensión político-institucional: está vinculada a las instituciones que organizan y rigen los comportamientos políticos, como los sistemas electorales y los sistemas de partidos políticos. En relación con la dimensión estructural, sostiene la citada autora, las investigaciones más recientes muestran una baja incidencia sobre la representación política femenina. Por lo demás, en el caso chileno es evidente que la escasa presencia en la esfera política afecta transversalmente, en buena medida, a mujeres de diferente condición socioeconómica. Por otra parte, la CEPAL ha constatado reiteradamente una tendencia general en la región, y cuya incidencia es muy clara en Chile, que marca un incremento generalizado en los niveles de escolaridad de las mujeres, cuyas tasas de matrícula son iguales o superiores a la de los hombres en todos los niveles educativos. Sin embargo, esos adelantos no han ido acompañados de una reducción de la brecha entre los salarios medios de hombres y mujeres, ni de un acceso más equitativo al mercado laboral o a la vida política. 4 Ríos Tobar, Marcela, “Introducción”, en Marcela Ríos Tobar (Ed.), Mujer y Política. El impacto de las cuotas de género en América Latina, IDEA International - FLACSO-Chile - Catalonia, Santiago, 2008, pp. 13-23, en p. 14. 3 De este modo, esas dimensiones tendrían una incidencia indirecta, en tanto condicionan el contexto general en que perviven o cambian las barreras surgidas de predisposiciones culturales y en que operan los mecanismos político-institucionales que facilitan o dificultan el ingreso femenino al ámbito de la política. Por su parte, la dimensión cultural o ideológica abarca factores que pueden resultar disuasivos para que mujeres entren al mundo político. En este sentido, un estudio elaborado por encargo de la UIP identificó las responsabilidades domésticas como el factor de disuasión más importante para las mujeres, en tanto se les hacía más difícil equilibrar sus vidas familiares con sus responsabilidades políticas y, por lo general, iniciaban la carrera política en una etapa más tardía de sus vidas. El segundo factor era, derechamente, “la actitud cultural frecuente sobre los roles de la mujer en la sociedad […] seguido de cerca de la falta de apoyo de la familia y la falta de confianza percibida”.5 Esos factores, por cierto, no eran los más importantes disuasivos para los políticos hombres. Por lo demás, estos patrones culturales se expresan en la propia forma en que está construido el mundo político, esto es, en base a un modelo masculino predominante. Ello se manifiesta en ciertos obstáculos que, en base a una encuesta a mujeres parlamentarias, identifica el politólogo David Beetham. Por un lado se encuentra la “auto-selección negativa”, es decir, que las mujeres desisten de participar en política por su carácter competitivo y confrontacional6, y por el sacrificio que implica para su vida familiar. En relación con este último punto, por otro lado, se refiere a “la hora de las reuniones”, los cuales se desarrollan por las tardes y en fines de semana, lo que dificulta la participación para las que tienen responsabilidades familiares.7 En la base, por supuesto, tenemos la continuidad de la división sexual del trabajo que deja a las mujeres las responsabilidades domésticas con carácter prácticamente exclusivo, y/o que obliga a altos costos personales y familiares a las mujeres que ingresar al mundo político. Ahora bien, la incidencia de las dos dimensiones antes señaladas se halla mediada por los mecanismos político-institucionales que pueden generar condiciones facilitadoras, y/o que incentiven, el aumento en la participación femenina o, por el contrario, incrementar los obstáculos para su acceso efectivo a los ámbitos de toma de decisiones. Entre este tipo de factores se cuentan el tipo de sistema electoral, el funcionamiento de los partidos políticos y la existencia de mecanismos de acción positiva (como las leyes de cuotas, en el caso de las elecciones a cuerpos 5 Ballington, Julie, Igualdad en la Política: un estudio sobre Mujeres y Hombres en los Parlamentos, Serie Informes y Documentos Nº 54, Unión Interparlamentaria, Ginebra, 2008, pp. 17-18. 6 Sin duda, esta afirmación del autor debería ser relativizada toda vez que parece remitir a una explicación esencialista de las conductas políticas de los géneros. 7 Beetham, David. Parliament and Democracy in the Twenty-First Century. A Guide to Good Practice, Inter-Parliamentary Union (IPU), Geneva, 2006, p. 22, disponible en línea: http://www.ipu.org/PDF/publications/democracy_en.pdf [acc. 22/07/09]. En este mismo sentido, en el informe Parlamentos sensibles al género de la UIP se presta especial atención a este tipo de ‘microprácticas’ que condicionan las opciones de participación política femenina, entre ellas la forma en que están organizadas las sesiones de los cuerpos parlamentarios en cuanto a horarios y modos de funcionamiento. UIP, Parlamentos sensibles al género. Resumen Ejecutivo, Unión Interparlamentaria (UIP), Ginebra, 2011, pp. 13-14. 4 colegiados), todos los cuales se retroalimentan.8 En cuanto a los sistemas electorales, los estudios comparados muestran que los sistemas de representación proporcional son más favorables a la representación femenina que los sistemas mayoritarios -basados en circunscripciones uninominales. Cuanto mayor sea el tamaño de los distritos en un sistema proporcional, además, las condiciones serán más favorables a la inclusión de mujeres ya que aumenta la “magnitud de partido”, esto es, el número de escaños que cada partido obtiene en ese distrito.9 Por otra parte, existen factores asociados a la estructura y funcionamiento de los partidos, tales como los mecanismos para reclutar candidatos, y el grado en que se favorece el acceso de mujeres a cargos de decisión en cada partido, entre otros. Con este panorama, se han destacado algunos factores político-institucionales que refuerzan las barreras de acceso que enfrentan las mujeres para entrar al mundo político en Chile. En especial, se apunta a la incidencia negativa del sistema binominal para el ingreso de las mujeres a la vida parlamentaria. La elección de representantes al Congreso en Chile está regida por el sistema binominal que, si bien es una variante de los sistemas proporcionales, pero, dado que acontece en circunscripciones que sólo escogen dos representantes, tiene fuertes efectos mayoritarios tanto entre las listas como dentro de las listas (de una coalición). Por lo mismo, produce varios efectos negativos para la representación femenina, a saber10: a) genera incentivos para que los partidos seleccionen candidatos “seguros”, dado que tienen pocas opciones para presentar candidaturas, por lo cual privilegian el patrón cultural que favorece a los hombres; b) los bajos niveles de competencia que genera el sistema electoral, y las altas tasas de reelección dificultan el ingreso de nuevos candidatos -y, en concreto, de mujeres- que desafíen al parlamentario incumbente; c) en tanto el sistema genera más competencia dentro de cada coalición que entre listas opositoras, se refuerza el poder de las cúpulas partidarias, fuertemente masculinas, para definir las listas de candidatos. A ello se suma el comportamiento tradicional de los partidos políticos en Chile en lo relativo a la presencia política en cargos directivos o de decisión dentro de las estructuras partidarias, asunto al que se hace referencia más adelante. III. Participación municipios política femenina en Chile: Gobierno nacional y Dejando a un lado la presencia de mujeres en el Congreso Nacional, que es la realidad más habitualmente analizada, se puede constatar un panorama similar de sub-representación femenina en otros cargos de elección popular y/o de decisión 8 A este respecto, seguimos el estudio de Ríos Tobar, Marcela (Ed.), Cuotas de Género: Democracia y representación, FLACSO-Chile - IDEA International, Santiago, 2006. 9 Este, entre otros factores, hace que los sistemas proporcionales se han mostrado más eficaces en la aplicación de las leyes de cuotas. Ibid., pp. 17-19. 10 En este sentido, Fuentes, Claudio y Marcela Ríos, Efectos del Sistema Binominal: una reforma necesaria, 2ª Ed., FLACSO-Chile, Santiago de Chile, 2007, p. 16. 5 pública en el sistema político chileno. En ese sentido, se hace referencia a la situación en el Poder Ejecutivo nacional y en los municipios -alcaldes y concejalescon algunas referencias comparativas a las realidades de la región y el mundo. 3.1 Mujeres en el Poder Ejecutivo nacional La presencia femenina en los Gobiernos ocupando cargos de decisión pública ha ido en aumento, en términos relativos, en los últimos años. Hace un lustro, se señalaba que las mujeres ocupaban entre un 4% y 5% de los máximos cargos ejecutivos (jefe de Estado y/o gobierno) en el mundo, y representaban en torno al 16% en las carteras ministeriales.11 Los datos más recientes, entregados por ONU-Mujeres y la UIP, muestran que existe un 5,3% de Jefas de Estado electas y un 7,3% de Jefas de Gobierno en los 193 países miembros de las Naciones Unidas que se analizan.12 En América Latina y el Caribe, hay 3 mujeres que ejercen el cargo de Presidenta (jefa de Estado y de gobierno) -Argentina, Brasil y Costa Rica- sobre un total de 33 Estados, lo que sitúa el porcentaje de presencia femenina en la más alta función del Estado en un 9,1%. A su vez, en relación al ejercicio del cargo de Jefa de Gobierno se debe incluir el caso de Trinidad y Tobago, lo que eleva el porcentaje a un 12,1%. En cuanto a la participación en gabinetes ministeriales se puede constatar, también, una tendencia creciente. A nivel mundial, las cifras marcan que en cuatro países se alcanza, al menos, el 50%, esto es la paridad en el reparto de los cargos de ministros entre hombres y mujeres. De los 188 Estados de los que se consignaron datos, en 16 países las ministras representan porcentajes iguales o superiores al 35% en los gabinetes.13 Por su parte, en América Latina y el Caribe, las cifras de la CEPAL indican que las mujeres ocupan un 20,8% de los cargos ministeriales en promedio en la región14 y Chile se sitúa cercano a esa media regional. En la siguiente tabla se entregan los datos relativos a los países latinoamericanos y el promedio de participación ministerial femenina que, excluido el Caribe, se sitúa en 26,2% según se consigna a continuación: Tabla 1. Porcentaje de mujeres en los gabinetes ministeriales en América Latina PAÍS % MINISTRAS % MINISTROS Nicaragua 55,6 44,4 Costa Rica 45 55 Bolivia 37,7 62,3 Ecuador 34,3 65,7 Perú 32,7 67,3 Colombia 30,8 69,2 Brasil 27,5 72,5 11 Fernández Poncela, Anna M., “Las mujeres en la política latinoamericana. Nuevos liderazgos, viejos obstáculos”, Nueva Sociedad, Nº 218, noviembre-diciembre 2008, pp. 57-71, en pp. 57-58. 12 UIP - ONU-Mujeres, Mujeres en la política: 2012. Situación a 1 de enero de 2012, Poster, Unión Interparlamentaria, Ginebra, 2012, disponible en: http://www.ipu.org/pdf/publications/wmnmap12_sp.pdf [acc. 16/05/12]. 13 Ibidem. 14 Considerando 31 países sobre los que cuenta con información. CEPAL, “Poder ejecutivo: porcentaje de mujeres en los gabinetes ministeriales”, Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe, cifras actualizadas a 26-04-2012, http://www.cepal.org/oig/adecisiones/ [acc. 16/05/12]. 6 Argentina América Latina (promedio) Honduras Venezuela Cuba El Salvador Panamá Chile Paraguay México Guatemala Rep. Dominicana Uruguay Fuente: Elaboración propia, en base a CEPAL 27,3 26,2 25,6 23,7 22,5 21,4 21,4 20,6 20 15,2 13,9 12 10,5 72,7 73,8 74,4 76,3 77,5 78,6 78,6 79,4 80 84,8 86,1 88 89,5 Asimismo, los datos permiten realizar una cartografía relativa al tipo de carteras ministeriales que le son confiadas a las mujeres, donde destacan generalmente los asuntos sociales, educación y cultura, y empleo. Mientras tanto, en aquellas relacionadas con la gestión económica y financiera, la proyección política (asuntos parlamentarios, información y medios) y los aspectos de seguridad y defensa aparece como menos probable que sean nominadas ministras. Así parecen indicarlo las cifras de mujeres en carteras ministeriales en todo el mundo en la actualidad15, lo cual puede compararse con el número de ministras con que han contado en cada área de carteras los dos últimos gobiernos de Chile.16 Tabla 2. Carteras con Ministras como titulares en el mundo y en los dos últimos gobiernos de Chile A NIVEL GOBIERNO GOBIERNO CARTERAS MUNDIAL BACHELET PIÑERA Asuntos sociales 98 2 Familia / Infancia / Juventud / Tercera 79 edad / Discapacitados Asuntos de la Mujer / Igualdad de 73 2 1 Género Educación 68 2 Empleo / Trabajo / Formación 68 1 2 Profesional Medio Ambiente / Recursos Naturales / 62 4 2 Energía Comercio / Industria 60 Sanidad 58 1 Cultura 52 1 Relaciones Exteriores (con inclusión de 40 asistencia al desarrollo) 15 Esto es, un total de 1.065 carteras en 188 países, con información a 1 de enero de 2012; UIP - ONUMujeres, Mujeres en la política: 2012…, op. cit. 16 Se ubican en las categorías provistas por UIP y ONU-Mujeres a las carteras ministeriales existentes en Chile, contabilizando el total de ministras que formaron parte del gobierno de Bachelet en algún momento de sus cuatro años de mandato, y las que lo han hecho en el gobierno de Piñera hasta la fecha de esta Minuta, es decir, promediando su mandato. 7 Justicia Agricultura / Alimentación / Silvicultura / Pesca Obras Públicas / Planificación del Territorio Investigación y Desarrollo / Ciencia y Tecnología Interior / Inmigración (con inclusión de integración y refugiados) Finanzas / Presupuesto Administración local Turismo Vivienda / Asuntos Urbanos Comunicaciones / Telecomunicaciones / Correos Economía / Desarrollo Derechos Humanos Administración Pública / Servicio Público Deportes Transportes Información / Medios de comunicación Asuntos Parlamentarios Defensa y Veteranos Ministras sin cartera Población Fuente: Elaboración propia, en base a datos UIP Chile17 39 37 1 36 31 28 25 24 22 20 1 1 20 20 1 20 18 17 15 10 2 1 8 1 7 1 5 5 ONU-Mujeres; Castillo, 2011; Gobierno de En este sentido, por tanto, es interesante constatar que mientras ciertas materias parecieran ‘naturalmente’ apropiadas para su participación, otras quedan en buena medida ‘vedadas’ en la distribución por género de las carteras ministeriales. A este respecto, sería relevante correlacionar el tipo de asuntos en que las mujeres participan en las comisiones parlamentarias con aquellas en las cuales le son asignadas carteras ministeriales, ya que podría haber subyacentes ciertos estereotipos de género que se van perpetuando. Por último, en vista de la experiencia del gabinete paritario implementado por la Presidenta Bachelet al iniciar su mandato, puede resultar de interés analizar la composición en términos de género en su gabinete de ministros a lo largo del período. Para ello, se toman tres momentos -inicio, mitad de mandato, final- lo que, adicionalmente, permite comparar la situación con dos momentos en lo que va de la Presidencia de Sebastián Piñera -inicio y mitad de período. 17 Ver: http://www.gobiernodechile.cl/ministros/ [acc. 16/05/12]. 8 Tabla 3. Porcentaje de mujeres en los gabinetes ministeriales en los dos últimos gobiernos de Chile PERÍODO % MINISTRAS % MINISTROS Gobierno Bachelet - Marzo 2006 (inicio) 50 50 Gobierno Bachelet - Marzo 2008 (mitad) 40,9 59,1 Gobierno Bachelet - Marzo 2010 (final) 45,45 54,54 Gobierno Piñera - Marzo 2010 (inicio) 27,27 72,72 Gobierno Piñera - Marzo 2012 (mitad) 18,18 81,81 Fuente: Elaboración propia, en base a datos Gobierno de Chile y Castillo, 2011 3.2 Mujeres en los Municipios La realidad no es muy diferente si se pone atención a la presencia femenina en los municipios, tanto en cargos de alcaldes como de concejales, en Chile y en el conjunto de la región. Se trata de un espacio político con menor visibilidad18 y, con algunas excepciones, los resultados son semejantes o inferiores a los parlamentos nacionales o los gabinetes ministeriales. En el contexto regional, Chile se ubica algo por encima del promedio en relación a las mujeres en cargos de concejala y de mujeres alcaldesas de la región, con cifras nacionales que han tenido escasas variaciones desde las elecciones municipales de 1992, las primeras tras el retorno a la democracia. Tabla 4. Porcentajes de mujeres en cargos municipales en América Latina, 2010 PAÍS % ALCALDESAS % CONCEJALAS Argentina 10 s.d. Bolivia 7 13,4 Brasil 9,2 12,5 Chile 12,5 23, 2 Colombia 9 14, 5 Costa Rica 11,1 43, 4 Ecuador 2,8 29, 7 El Salvador 10,7 25, 2 Guatemala 1,8 8, 8 Honduras 3,4 17, 5 México 5,5 32,9 Nicaragua 8,6 24 Panamá 9,3 11,1 Paraguay 7,5 21,9 Perú 3,9 29, 6 Uruguay 22 17,8 Venezuela 18,2 18,2 América Latina y el Caribe 10,1 21,5 Fuente: Elaboración propia en base a CEPAL19 18 De hecho, uno de los indicadores en la meta sobre igualdad de género de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), hace referencia a la “proporción de escaños ocupados por mujeres en el parlamento nacional”, pero ignora a los municipios. Ver: http://www.un.org/spanish/millenniumgoals/gender.shtml [acc. 05/04/10]. 19 CEPAL, “Poder local: porcentaje de mujeres alcaldesas electas” y “Poder local: porcentaje de mujeres concejalas electas”, Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe, cifras correspondientes a 2010, http://www.cepal.org/oig/adecisiones/ [acc. 16/05/12]. 9 Por su parte, en base a un estudio nacional sobre las elecciones municipales de 2008, y con cifras marginalmente distintas, el Observatorio Género y Equidad que coordina Teresa Valdés20, ofrece un panorama general de la variación en la representación femenina a nivel local en relación a la elección precedente. Tabla 5. Mujeres en los Municipios en Chile - Elecciones 2004 y 2008 2004 2008 Cargo Nº electas Porcentaje Nº electas Porcentaje Alcaldesas 41 11,9% 43 12,5% Concejalas 444 20,9% 493 23,0% Total 485 19,6% 536 21,6% Fuente: Elaboración propia, en base a OGE, 2008 Por lo tanto, en base a estos datos se puede calcular la presencia femenina en el poder político local, incluyendo ambas categorías, lo que arroja un porcentaje que se incrementó en dos puntos porcentuales entre las dos últimas elecciones municipales. IV. Presencia de las mujeres en los partidos políticos de Chile En el informe Parlamentos sensibles al género, encargado por la UIP, se señala que la incorporación de la perspectiva de género requiere aumentar la responsabilidad de los partidos políticos, dado que son las organizaciones primordiales a la hora de hacer avanzar la igualdad entre hombres y mujeres. También, resultan esenciales para garantizar una representación equitativa a ambos sexos en las candidaturas a cargos de elección popular, en la nominación a carteras ministeriales, y en la designación para desempeñar ciertos cargos o participar en ciertas comisiones y grupos de trabajo en los órganos colegiados. Según constata el informe, “a pesar de la retórica de estar abiertos a la participación de las mujeres, los partidos siguen siendo dominados por hombres”.21 En un estudio22 que aborda los mecanismos institucionales y las prácticas informales de funcionamiento de los partidos políticos chilenos con representación parlamentaria, se constata que existen obstáculos que impiden, en buena medida, la presencia de las mujeres en los principales espacios de toma de decisiones internos. En efecto, si bien todos los partidos -excepto la UDI y RN- cuentan con instancias partidarias específicas de/para mujeres, ellas quedan confinadas a un segundo plano en cuanto a participación en los máximos órganos de decisión partidaria. Adicionalmente, la importancia que tienen prácticas informales de 20 Basado en datos de www.elecciones.gov.cl; OGE, “Elecciones Municipales 2008: Los partidos y las candidaturas de mujeres. Anexo Resultados votación 2004-2008”, Observatorio Género y Equidad, disponible en: http://www.observatoriogeneroyliderazgo.cl/images/adjmun/anexo%20resultados%202004%202008.pdf [acc. 31/03/10]. 21 UIP, Parlamentos sensibles al género…., op. cit., p. 16. 22 Núñez G., Claudia, “Representaciones de género y participación de las mujeres en los discursos y prácticas de los partidos políticos chilenos”, en Largo, Eliana (Ed.), Representación Social de las Mujeres en los Partidos Políticos y Medios de Comunicación en Chile, Serie Género y Política, Corporación Humanas, Santiago, Junio de 2011, pp. 21-52. 10 negociación entre los grupos de poder interno, liderados casi en su totalidad por hombres, conducen a reforzar la escasa presencia decisoria femenina, pese a que se suele reconocer su destacada actuación en los ámbitos locales de la organización partidaria. Por tanto, la situación al interior de los distintos partidos políticos nacionales no dista mucho de lo que ocurre a nivel del sistema político. Así, pese a que las mujeres representan en torno a la mitad de los afiliados de los partidos, ellas tienen escasa presencia en los ámbitos de decisión partidarios. Con datos correspondientes a 2006-2007, el SERNAM constataba que 6 mujeres desempeñaron cargos en las directivas centrales -Presidente, Secretario y Tesorero- de un total de 48 cargos en las directivas partidarias.23 La realidad actual no es muy diferente ya que, según los datos que entrega el SERVEL, en la totalidad de partidos políticos legalmente constituidos solamente hay 6 mujeres para 39 cargos en las directivas centrales.24 Entre los partidos con representación parlamentaria, hay tres mujeres en cargos de tesorera (MAS, PRI, PC) y una que ejerce el cargo de presidenta (PPD), aunque ésta dará paso en breve a un nuevo presidente hombre en su partido. Ello es así, pese a que tres partidos (PPD, PDC y PS) cuentan con “cuotas de partido”, esto es, han adoptado medidas voluntarias que establecen cuotas de género para la elección de sus órganos internos de dirección (60/40)25 y para los cargos de elección popular (80/20). Sin embargo, en los hechos se han instalado prácticas que obstaculizan el sentido de dichas normas internas y hacen que no se cumplan de manera efectiva, tanto en la designación de autoridades como en la selección de candidatos, ya que, por lo demás, no se contemplan mandatos de posicionamiento ni están previstas sanciones reales para su vulneración. Por su parte, el PRSD derogó en 2002 una medida de acción positiva que aseguraba una cuota (25%) en su Comité Ejecutivo Nacional a las mujeres, que desde entonces vieron reducida su presencia. Finalmente, la UDI y RN han mostrado un claro rechazo a las medidas de acción positiva, por lo que no contemplan ningún tipo de “cuotas de partido” ni apoyan la aprobación de leyes de cuotas.26 Asimismo, ciertas prácticas informales instaladas en la cultura institucional de los partidos presentan también un sesgo de género que desfavorece a las mujeres. Por 23 La información hacía referencia a los 14 partidos que existían formalmente en esa época (Partido Demócrata Cristiano, Partido Socialista, Partido Radical Socialdemócrata, Partido por la Democracia, Unión Demócrata Independiente, Renovación Nacional, Partido Regionalista de los Independientes, Partido Comunista, Partido Humanista, Izquierda Cristiana, Movimiento Amplio Social, Partido Ecologista, ChilePrimero, Fuerza País). SERNAM, Directivas Centrales de Partidos Políticos, Estadísticas del Servicio Nacional de la Mujer, disponible en línea: http://www.sernam.cl/cedocvi/basemujer/docs/CON(3)_20080704_162554.xls [acc. 31/03/10]. 24 Los datos corresponden a 13 partidos políticos (Partido Demócrata Cristiano, Partido Socialista, Partido Radical Socialdemócrata, Partido por la Democracia, Unión Demócrata Independiente, Renovación Nacional, Partido Regionalista de los Independientes, Partido Comunista, Partido Humanista, Movimiento Amplio Social, Partido Ecologista Verde, Partido Progresista, Partido Igualdad). SERVEL, Partidos Constituidos, disponible en: http://www.servel.cl/controls/neochannels/Neo_CH41/neochn41.aspx [acc. 16/05/12]. 25 El Congreso General del PS aprobó aplicar el criterio de “paridad” para conformar sus órganos colegiados, en mayo de 2011. 26 Núñez G., Claudia, “Representaciones de género y participación…, op. cit., pp. 24, 32-33 y 46-48. 11 eso, ellas tampoco suelen ocupar, regularmente, cargos de decisión dentro de los grupos que identifican y nominan a los candidatos, es decir, donde se define no sólo quiénes podrán optar a un cargo de elección sino también si lo hará ocupando una posición privilegiada dentro de la plantilla electoral. En ese sentido, como producto de entrevistas en profundidad con hombres y mujeres de los distintos partidos, se constata que esas decisiones suelen adoptarse en espacios informales en que “no participan mujeres porque en general estas no dirigen grupos de poder y porque la dinámica de tales espacios se basa en prácticas que en ningún caso favorecen su participación (horarios, lugares de reunión)”.27 Ello se traduce en que las mujeres, pese al grado de eficiencia electoral igual o superior a los hombres que han demostrado, no han variado en demasía su presencia en las candidaturas. Así, en los últimos 20 años, las candidatas a cargos parlamentarios que presentan los partidos se han mantenido por debajo del 20%28, y cifras similares se pueden encontrar en materia de elecciones municipales.29 En efecto, en las elecciones parlamentarias de 2009 participaron 81 candidatas a parlamentarias, 73 de ellas a la Cámara de Diputados y 8 al Senado; sólo 1 concurrió en una candidatura independiente. Esas cifras representan, respectivamente, el 17% y 15% de las candidaturas al Congreso.30 En cuanto a la electividad demostrada por las candidatas frente a sus pares hombres, en la última elección se observa un índice más reducido entre las mujeres (28,6% frente a 35,4%). De acuerdo a su distribución por partidos, los resultados son desiguales, a saber: Tabla 6. Electividad candidatas por partido político 2009 Partido Político Electividad Mujeres Electividad Hombres UDI 33,3% 35,7% RN 55,6% 68,1% PRI 10,0% 3,8% DC 50,0% 48,6% PPD 66,7% 66,7% PRSD 0,0% 41,7% PS 50,0% 44,4% PC 0,0% 37,5% Fuente: Elaboración propia, en base a Corporación Humanas, 2009 Por lo demás, en 2009 las candidaturas femeninas al Congreso representaron un 16,3% del total, lo que implica una cifra algo menor que en los comicios precedentes.31 Así, los principales conglomerados presentaron una escasa 27 Ibid., p. 40. 28 Cifra que resulta del estudio de la Corporación Humanas, Mujeres y elecciones 2009: Análisis de las elecciones parlamentarias y presidenciales 2009, Corporación Humanas, Santiago, diciembre de 2009, p. 6, disponible en línea: http://www.humanas.cl/wp-content/uploads/2010/01/ANALISIS-ELECCIONES2009.pdf [acc. 31/03/10]. 29 Al respecto, ver: OGE, “Elecciones Municipales 2008…”, op. cit. 30 31 Corporación Humanas, Mujeres y elecciones 2009…, op. cit. Largo, Eliana, “Introducción”, en Largo, Eliana (Ed.), Representación Social de las Mujeres en los Partidos Políticos y Medios de Comunicación en Chile, Serie Género y Política, Corporación Humanas, Santiago, Junio de 2011, pp. 5-19, en p. 5. 12 proporción de candidaturas femeninas en sus listas, e incorporaron mujeres al Congreso en una proporción muy similar. Mientras la Concertación presentó un 14% de mujeres y logró elegir un 13% de diputadas del total de escaños que obtuvo, la Coalición por el Cambio postuló un 17% de mujeres para incorporar un 16% de parlamentarias en su bloque.32 En cuanto al número de parlamentarias electas por cada partido en 2009, se puede realizar el siguiente ranking: Tabla 7. Parlamentarias electas en 2009, por partido político Partido Político Diputadas Senadoras Total UDI 7 0 7 PPD 4 0 4 PS 2 1 3 RN 2 1 3 DC 1 1 2 PRI 1 0 1 PRSD 0 0 0 PC 0 0 0 Fuente: Elaboración propia, en base a datos de Munita y Gillmore, 200933 y prensa Los estudios y antecedentes aportados muestran las dificultades para incluir a las mujeres en sus directivas partidarias, en los grupos que definen las nominaciones de candidatos, y en las listas de cargos de elección popular que han tenido los partidos políticos en Chile. En consecuencia, se puede señalar que los comportamientos y prácticas tradicionales de los partidos políticos chilenos constituyen factores limitantes para avanzar en la participación política igualitaria en términos de género, tal como avizora a nivel mundial el informe Parlamentos sensibles al género de la UIP. 32 RADIO COOPERATIVA, “Corporación Humanas lamentó déficit de representación femenina en el Congreso”, Radio Cooperativa, 16-12-2009, http://www.cooperativa.cl/corporacion-humanas-lamentodeficit-de-representacion-femenina-en-el-congreso/prontus_nots/2009-12-15/205723.html [acc. 05/04/10]. 33 Munita, Roberto y Constanza Gillmore, Elecciones Parlamentarias 2009: Efectos y Consecuencias, Informe Especial, vol. XX Nº 215, Instituto Libertad, Santiago, diciembre de 2009, p. 17, disponible: http://www.institutolibertad.cl/ie_215_Parlamentarias_2009.pdf [acc. 05/04/10].