¿QUIÉN ES REALMENTE ENRIQUE ALFARO? ¿Quién es Alfaro? En atención de las demagogias, mentiras, deslealtades, intolerancia y la volubilidad del presunto candidato ciudadano y ante sus bravuconerías, sus despropósitos o sus berrinches, quiero denunciar y exponer aquí algunos hechos y valoraciones que lo definen claramente como: Demagogo. Ha pertenecido durante toda su vida pública a la clase política de los partidos. Él mismo ha hecho todo cuanto ha sido necesario (incluida la abyección, adulación y zalamería) para pertenecer o al menos mantenerse cerca de los liderazgos y estructuras políticas partidistas. Siempre se ha beneficiado de la celebración de acuerdos que luego incumple (en función de sus intereses personales) con quienes él hoy denuncia como poderes fácticos. Nunca ha sido un ciudadano de a pie, ni lo que pretende definir con esto, como alguien sin intereses políticos personales o de grupo, que orienta sus acciones e ideas sólo en virtud de la defensa del ?interés superior general?. Con Emilio González Márquez es evidente su complicidad para obtener inversión de recursos públicos en Tlajomulco a cambio de silencios a modo y ninguna crítica o cuestionamiento por los pésimos resultados de la que ha sido la peor administración en la historia de Jalisco. Con el PRI, intentó volver al redil del cual salió y hasta reservó su lugar para el senado, pero les dio la espalda. Con las dirigencias nacionales del PT y Movimiento Ciudadano obtuvo la postulación a la gubernatura de Jalisco. Dos partidos sin estructura ni base social en la entidad, que buscan alcanzar su registro colgados de la demagogia del discurso ciudadano. Así, en los hechos su proyecto busca engrosar las filas de la partidocracia con la trampa discursiva del alejamiento de ella y el trato desdeñoso a los partidos. Hasta convenientemente se le olvida que el PT lo apoya y nunca lo menciona. Es decir, mama y da de topes. Por un lado, construye su carrera política al amparo de los partidos y los llamados poderes fácticos como el del SNTE en su versión más retardataria en Jalisco; y por otro, denuncia y acusa que esta forma de hacer política exista y beneficie a quienes la practican. Tal vez sea un desorden bipolar que merece atención, pero se trata de un vulgar intento de engañar a la ciudadanía y una retórica para disfrazar y promover un proyecto político que nada tiene de ciudadano, democrático o liberal y mucho menos de progresista o de izquierda. O peor aún, puede estar en la víspera de sacar sus compromisos inconfesables con Emilio González y asumir plenamente que siempre fue su candidato, ante el calculado naufragio político de Fernando Guzmán. Así, recogerá una enorme carga de compromisos, yerros y omisiones que terminarán por sepultar su discurso de campaña y harán de su supuesta oferta política una doble decepción en la próxima jornada electoral. Mentiroso. Condición evidente durante el escándalo suscitado tras su viaje a Cuba en compañía del presidente y un consejero del IEPC y al menos tres funcionarios de primer nivel de Tlajomulco. Según él, no hubo ilegalidad alguna en el viaje, pero se comprobó que violó la ley al ausentarse por más de 72 horas, sin informar oficialmente al ayuntamiento y que el arrendamiento del jet privado era extraordinariamente alto (55 mil dólares) para el salario de un munícipe. Entonces se justificó arguyendo que un ?amigo? le había prestado el jet y que nada malo había en ello, pero se comprobó que el ?amigo? era socio de empresas ganadoras de contratos millonarios en Tlajomulco. Evasivas y mentiras predominaron en sus declaraciones pero ninguna simple y llana verdad; en cambio, descalificó a quienes desnudaron sus mentiras y se victimizó una vez más. Desleal. La mejor muestra de ello es el trato que dedica y el tono con que se dirige al PRD, sus dirigentes, militantes y simpatizantes. En mi partido lo aceptamos luego de su defección del PRI. Lo postulamos para diputado local en la LVIII legislatura, contribuimos decididamente a su triunfo y al término de su periodo legislativo apoyamos sus pretensiones para ser munícipe de Tlajomulco. Y ganó de nuevo con nuestras siglas, recursos, estructura, militantes, simpatizantes y plataforma. Luego de su triunfo, el pago dado a los militantes del partido que le acompañaron con su trabajo, aportaciones, confianza y voto, fue darles la espalda. Intolerante. Producto de su inmadurez, la intolerancia e irascibilidad son su principal característica, es de vox populi la facilidad con que pierde el control contra aquel que se arriesga a plasmar un punto de vista diferente al de él, o se atreva siquiera a cuestionarlo. En su reciente visita a la banqueta del CUCSH un reportero lo cuestionó sobre la interpretación de que su presencia fuera tomada como una provocación. La respuesta fue una agresión directa al periodista. O la andanada de insultos, descalificaciones y acusaciones sin fundamento contra Milenio Diario Jalisco, por la divulgación de la encuesta levantada por Gabinete de Comunicación Estratégica en todo el estado y que lo coloca en cuarto lugar de las preferencias electorales con 5.9% de la intención de voto. Voluble. Muestra fehaciente de su volubilidad, falta de rigor analítico y proclividad a la provocación fue la ocurrencia que lanzó a la opinión pública, hace unas semanas, sobre la creación de lo que llamó la Universidad de Jalisco, cuando ésta ya existe y se llama Universidad de Guadalajara. Lanza la chuscada sobre la base de su ignorancia, sobre la organización de la máxima casa de estudios de Jalisco, la importante labor docente y de investigación que realiza, la calidad de su planta académica y de sus egresados, los esfuerzos de descentralización y cobertura que no tienen comparación con ninguna otra universidad pública estatal y la exitosa apuesta hecha en el terreno de la promoción y difusión cultural. La ?ingeniosidad? del ?candidato ciudadano? no podía ser peor. Su nulo conocimiento sobre la educación superior y las instituciones públicas que la sostienen lo llevó a pronunciar este dislate que en nada resuelve los temas medulares del sector: ampliación de la matrícula, mayores recursos e inversión en infraestructura, consolidación de los cuerpos docentes y de investigación e incentivos para la vinculación con la sociedad y el sector productivo. Así, desde hace unos días recula de la sarta de tonterías declaradas contra la Universidad de Guadalajara y plagia la frase de la organización estudiantil de esta casa de estudios para declararse ?León de corazón?. Para terminar? Por cierto, vale la pena preguntarnos en qué momento Alfaro, ha hecho campaña a favor del candidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador, excepto en las visitas realizadas a Jalisco, en ningún momento se ha escuchado que Enrique Alfaro promocione el voto a favor de AMLO. Es tal su incongruencia que en los hechos no sabe cómo desmarcarse de él. Para desuscribirse de nuestra lista haga Click aquí