La limpieza de muebles de melamina Técnica básica para eliminar

Anuncio
50
La limpieza de muebles de melamina
Un material de fácil mantenimiento pero que requiere
de ciertos cuidados para una larga duración
La melamina se ha convertido en uno de
los materiales más utilizados para fabricar
muebles en los últimos años, por su prolongada
duración y la resistencia que presenta ante
las condiciones externas. Es preferida debido
a que mantiene la integridad de su forma sin
deteriorarse mucho, aunque de vez en cuando
también necesita ser limpiada.
Aunque su mantenimiento es bastante
sencillo, debe llevarse a cabo con las
precauciones necesarias para que este sea
eficiente. Para limpiar una superficie de
melamina, basta con usar un trapo nuevo
y limpio humedecido ligeramente con agua
y algún tipo de jabón o desinfectante de
composición sencilla (para no agredir el color
natural).
Además de la limpieza profunda de la
superficie, es recomendable estar pasando
cada cierto tiempo un trapo seco, de preferencia
paños con cargas electroestáticas que atraigan
naturalmente el polvo, que retire la suciedad
antes de que se acumule y así agilizar a su
debido tiempo la limpieza a fondo.
Con un buen mantenimiento, la melamina
puede mantener su condición original
proporcionando una apariencia de fábrica; es
por su resistencia que muchas veces también
son empleados en muebles de cocina.
Proceso:
Se humedece levemente la superficie
con un primer trapo húmedo.
Se limpia con otro trapo diferente y
seco, después de la primera pasada
que humedeció.
Se recomienda por lo menos una
segunda pasada con el trapo seco
Se verifica que quede
totalmente seca la superficie.
Para sacar o mantener el brillo en la
melamina, los líquidos limpia cristales o
antigrasa funcionan bien, aplicándolos
con moderación con un trapo especifico
par cada componente.
Técnica básica para eliminar
el moho de la madera
Antes de que el problema crezca,
se deben tomar medidas adecuadas
Precauciones:
La melamina nunca debe tener grandes
cantidades de liquido sobre ella, es por
eso que con un trapo humedecido, y no
mojado, basta.
Las grandes cantidades de agua
deterioran el aglomerado y provocan
que este se hinche, por eso si se llega
a empapar por accidente la melamina,
limpiar inmediatamente con un trapo
seco varias veces.
La melamina es un material que no
debe estar expuesto directamente a la
luz solar, pues se decolora.
Las ceras y aerosoles no son
recomendables para usar en la limpieza
de melamina, ya que solo ralan y
saturan su superficie; para sacar
brillo, es mejor usar limpia cristles o
antigrasas.
Generalmente el moho va a aparecer siempre
en alguna etapa de la vida de la madera, sobre
todo cuando esta se encuentra almacenada o
en bruto, ya que es más propensa a contraer
hongos causantes. Es necesario detectar y
eliminar instantáneamente cualquier mancha
antes de que se agrave e inutilice la pieza de
madera por completo.
Es importante considerar que la madera
puede limpiarse de moho solo si este se
detecta a tiempo, de ser muy tarde lo más
factible será reemplazar la pieza o bien
desecharla. Luego de limpiar el moho de la
madera esta tiene que estar en un entorno
libre de mucha humedad y temperatura
controlada, con buena ventilación, para que
el hongo no reincida.
El moho de superficie, puede ser limpiado
con lejía, aunque es recomendable solo si la
madera no forma parte de una decoración, ya
que la lejía puede decolorar un poco.
Por el contrario si es moho muy arraigado,
se puede eliminar lijando y posteriormente
limpiando, al último aplicar capa de fungicida.
Descargar