Jesús les decía: “Síganme” - Recursos Escuela Sabática

Casa Publicadora Brasilera
Comentarios de la Lección de Escuela Sabática
III Trimestre de 2016
El papel de la iglesia en la comunidad
Lección 11
(3 al 10 de septiembre de 2016)
Jesús les decía: “Síganme”
Dr. Wagner Kuhn
Mg. Eraldo Guedes da Costa 1
El cristianismo es una de las tres religiones abrahámicas. La revelación cristiana está
en las Sagradas Escrituras. En Antioquía, los discípulos fueron llamados por primera
vez como “cristianos” (Hechos 11:26). Sin embargo, el cristianismo se inició en Jerusalén, cuando los discípulos proclamaron que Jesús era el Mesías. El movimiento
comenzó siendo pequeño, pero luego de la muerte de Cristo, se esparció rápido y
poderosamente. La primera iglesia cristiana tuvo cerca de ciento veinte miembros
(Hechos 1:15).
Según E. Glenn Hinson, los primeros conversos en Jerusalén, que era un grupo
conformado por diversas etnias surgidas del Pentecostés, fueron un preludio a la
expansión del cristianismo en todas partes: Samaria (Hechos 8:4-25), lo que condujo
al bautismo de Simón, el mago (Hechos 8:9-24); Gaza y Cesarea (Hechos 8:26-40);
Damasco (Hechos 9:25; Gálatas 1:17); Galilea (Marcos 16:7). Posteriormente fue
adoptado en Antioquía de Siria (Hechos 11:18-13:3) y en toda Asia Menor (Hechos
13:1-14:28).
Alister McGrath parece sorprendido con el hecho de que, aunque el cristianismo tuvo
un origen tan humilde, se haya convertido en la mayor religión mundial.
Hinson, viendo la diferencia existente entre la filantropía pagana y la caridad cristiana, destaca: “Entre los fuertes eslabones de la cadena cristiana, estaban su caridad
y su asistencia social, ofrecidas con escasa discriminación. Aunque los romanos
practicaban la generosidad, procuraban algo a cambio”. 2
Siendo que la misericordia y la compasión fueron virtudes primigenias del cristianismo, reflexiona en cómo eso –en la práctica– podría revolucionar la comunidad en la
cual tu iglesia está insertada.
1 Wagner Kuhn es profesor de Misión y Estudios Interculturales en la Facultad de Teología de la Universidad
Andrews (EUA), así como decano del Doctorado en Misiología y de Posdoctorado en la misma Universidad.
Eraldo Guedes es Licenciado en Teología. Actuó como pastor distrital durante diez años en Brasil, obteniendo
una Maestría en Misiología. Actualmente cursa el Doctorado en Religión en la Universidad Andrews.
2 E. Glenn Hinson, The Early Church: Origins to the Dawn of the Middle Ages [La iglesia primitiva:
Orígenes del amanecer de la Edad Media]; Nashville, TN: Abingdon Press, 1996, p. 140.
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Conocen su voz
En un discurso ante líderes del partido comunista, Karl Marx afirmó: “El propósito del
comunismo es transformar el mundo”. Para Marx, el comunismo era la última y más
elevada etapa del desarrollo.
Podemos ver que el comunismo fracasó en su “misión”. Dios le encomendó una
misión a su iglesia, y le corresponde al remanente impactar al mundo, haciendo que
la voz de Cristo sea conocida a todos los que perecen sin Dios.
El famoso evangelista D. L. Moody, escuchó a alguien decir: “El mundo todavía no
vio lo que Dios puede hacer con un hombre totalmente comprometido con Él”. Y
como respuesta a esas palabras, Moody declaró: “Yo seré ese hombre”. A través del
ministerio de Moody, multitudes se convirtieron a Cristo. Piensa en esa frase de
Moody. “El mundo todavía no vio…”. ¿No te gustaría ser ese hombre, o esa mujer?
Pero recuerda, apreciado amigo, que antes que el mundo lo vea, tu familia, tus amigos, tus compañeros de trabajo, tus maestros, toda tu comunidad debe ver a esa
persona totalmente comprometida con Dios.
Necesitamos crear lazos afectivos con las personas de nuestra comunidad, si queremos que ellas escuchen la voz del Buen Pastor a través de nosotros. No obstante,
“un evangelio sin amor, es una contradicción: un mar sin agua, un sol sin luz, la miel
sin dulzura. El evangelio no es otra cosa que la expresión del amor infinito de Dios
por nosotros”. 3
Debemos buscar
“Los rabinos tenían el dicho de que hay regocijo en el cielo cuando es destruido uno
que ha pecado contra Dios […] Muchas almas descienden a la ruina por falta de una
mano que se extienda para salvarlas. Los que van errantes pueden parecer duros e
indiferentes; pero si hubieran tenido las mismas ventajas que otros han tenido, habrían revelado mayor nobleza de alma, y mayor talento para la utilidad. Los ángeles
se compadecen de ellos. Los ángeles lloran mientras los ojos humanos están secos
y los corazones cerrados a la piedad. ¡Oh, la falta de simpatía profunda y enternecedora por los tentados y errantes! ¡Oh, más del espíritu de Cristo, y menos, mucho
menos del yo!”. 4
La misión del remanente ¡está muy clara! La misión de Cristo es nuestra misión.
Jesús vino para servir. No podemos separar las palabras de los actos en la misión
que Cristo dejó a su iglesia.
El puente
En un programa se la sociedad JA, la líder de jóvenes percibió que había una familia
“nueva” en la iglesia. Con mucho entusiasmo, dijo: “Estoy notando que una familia
nos está visitando en nuestra iglesia. ¡Queremos darle la bienvenida!”. Fue entonces
que alguien de aquella familia “visita”, respondió. “Les agradecemos la bienvenida,
3
4
Reinhard Bonnke
Elena G. de White, Palabras de vida del gran Maestro, pp. 149, 150.
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pero hace tres meses que estamos asistiendo a esta iglesia”. Es probable que hayas
presenciado o escuchado historias semejantes a esta…
Hacia el final de su ministerio, Jesús estaba pasando por Jericó por última vez.
Aquella era su última semana de vida en la tierra. Aunque la multitud se apretujaba
para ver a Jesús, la Biblia relata que dos personajes tuvieron un encuentro con Él.
Un ciego que estaba a la vera del camino, que había sido olvidado y despreciado por
la iglesia (Lucas 18:35), y otra persona que estaba subida a un árbol, odiada por los
religiosos de aquellos días (Lucas 19:5). En muchas ocasiones, nosotros actuamos
del mismo modo que ellos. Parece que tenemos una clasificación para los pecadores: los aceptables y los no aceptables. ¿Cómo sería tratado un reconocido comerciante respetado por la comunidad al entrar en tu iglesia? Por otro lado, ¿de qué
modo tu iglesia trataría a un homosexual, o a una musulmana vestida con su ropaje
típico? ¡Dios no hace acepción de personas! Jesús, al ver a Zaqueo, lo llamó y fue
hasta su casa.
¿Somos una iglesia que invita a los pecadores a comer con nosotros, o somos una
iglesia impiadosa, condenadora, murmuradora, apática hacia los “de afuera”, una
que llega a decir: “Este sujeto es sucio, indigno y ladrón” (Lucas 19:7)?
El pedido
Pablo testificó de Cristo ante el rey Agripa. Sus palabras, cargadas de apasionamiento, conmovieron el corazón del gobernante. El rey se vio forzado a exclamar: “Por
poco me persuades a ser cristiano” (Hechos 26:28). Y así como sucedió con Pablo,
los demás apóstoles y la iglesia primitiva, nosotros también tenemos el privilegio, el
deber, y la solemne obligación de testificar. “No podemos dejar de decir lo que hemos visto y oído” (Hechos 4:20).
En un sermón que fue denominado “Operación Andrés”, el pastor Emilio Abdala
explicó cómo conducir a personas a Cristo mediante la así llamada “Operación Andrés”. Dice: “Andrés era alguien especializado en conducir personas a Jesús […]
Querían crucificarlo, pero Andrés se sintió indigno de ser crucificado con la misma
cruz que Jesús, entonces fue crucificado en una cruz en forma de X, que hoy es
llamada ‘cruz de San Andrés’. La tradición afirma que él permaneció en la cruz durante tres días. Durante todo ese tiempo, constantemente llamó a la multitud que allí
se apiñaba a que se entregaran a Jesús”. 5
Luego de que Andrés se encontrara con Jesús, su gran motivación fue la de traer a
otros al Maestro (Juan 1:40-42; 6:8; 12:20-22). Recordemos que la misión que Cristo
nos dio ¡es integral! Como Andrés, todos podemos hallar personas y conducirlas a
los pies de Cristo.
Buscad, y hallaréis
El Titanic fue el más grande navío de su época. Fue considerado insumergible. Pero
en la noche del 14 de abril de 1912, mientras navegaba en el océano, chocó con un
Para consultar el sermón completo, http://docslide.com.br/documents/a-operacao-andre.html (en
portugués).
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iceberg. Debido a que estaba equipado con pocos botes salvavidas, al hundirse,
murieron 1513 personas. Un pasajero, John Harper, intentando mantenerse a flote
en las aguas del mar, nadó en dirección a un joven que se aferraba a un trozo de
madera. Harper le preguntó: “Joven, ¿eres salvo?”. Y el muchacho le contestó: “No”.
Una ola los separó momentáneamente. Luego de algunos minutos, se acercaron
nuevamente, y Harper preguntó: “¿Estás en paz con Dios?”. Y el joven respondió:
“Todavía no”. Una ola cubrió a John Harper, y nunca más fue visto. Pero las palabras
“¿Eres salvo?” quedaron resonando en los oídos de aquél joven. Dos semanas más
tarde, el joven daba su testimonio en un encuentro evangelístico en Nueva York. Al
narrar su historia, dijo: “Yo soy el último converso de John Harper”. 6
Jesús quiere trabajar por medio de ti. ¿Qué contribución darás a la predicación del
evangelio? Como destaca la Lección, Jesús quería tocar la comunidad a través de su
vida. No alcanza con ser sólo buenos vecinos, necesitamos tener un propósito. Si no
estás involucrado en la proclamación del evangelio, ¿qué excusas has usado para
justificar esta negligencia? ¿Qué puedes hacer a partir de ahora para tener una experiencia diferente en el cumplimiento de la misión?
Dr. Wagner Kuhn
Profesor – Dir. de Posgrado
Universidad Andrews
Estados Unidos
Mg. Eraldo Guedes da Costa
Doctorando en Religión
Universidad Andrews
Estados Unidos
Traducción: Rolando Chuquimia
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