Biografía Benito Mussolini Mussolini nació en 1883. Fue maestro. Adhirió de joven al socialismo, fue dirigente del sector revolucionario de este partido y director del diario socialista Avanti. Combatió en la Primera Guerra Mundial en un regimiento de beryaglieri. Gobernó Italia entre 1922 y 1945. Entre 1925 y 1 935 obtuvo varios éxitos en política intemacional y en política económica, en el marco de la profunda recesión mundial provocada por la crisis del '29. En 1935 conquistó Abisinia (Etiopía) y en 1936 proclamo el Imperio italiano. Ese mismo año trasladó las tropas de Abisinia hacia España, para respaldar a Francisco Franco en la guerra civil. También ese año comenzó su imparable pérdida de popularidad. En 1937 viajó a Berlín y selló una alianza con Adolf Hitler. En 1945, con la derrota de Alemania y el fin de la República Social Italiana, Mussolini intentó fugarse, pero fue capturado, fusilado y colgado por una brigada de italianos antifascistas. Comentario Histórico: Italia a principios del siglo XX: A principios del siglo xx, Italia estaba gobernada por un régimen político liberal, sostenido por sectores de clase media. El resto de la sociedad no participaba del sistema político. La aristocracia católica se mantenía al margen, cumpliendo con una bula papal que prohibía la participación política de los católicos italianos hasta que se resolviera la relación entre el Papado y el estado. Los obreros de los centros urbanos pertenecían al Partido Socialista y a sus organizaciones sindicales, o al Partido Popular de orientación social-cristiana. En 1914, con el comienzo de la Primera Guerra, la mayoría de la sociedad italiana sostuvo una posición neutralista. El gobierno, los grupos nacionalistas y un sector minoritario del socialismo liderado por Benito Mussolini apoyaron la intervención en el conflicto. Para convencer a los italianos de las ventajas de la guerra, el gobierno aseguró que Italia obtendría grandes beneficios si participaba del lado de los países victoriosos. Cuando el conflicto concluyó, Italia se encontró con graves dificultades económicas y grandes expectativas sociales. Las promesas quedaron incumplidas y el descontento social creció. La “Revolución Fascista" (1919-1921) En mayo de 1919, Mussolini creó una agrupación político-militar: los fasci di combattimento, integrada por veteranos de guerra, artistas futuristas, estudiantes nacionalistas y algunos sindicalistas partidarios de la guerra. Los fascistas sostenían que, para Italia, la guerra había terminado con una "victoria mutilada", es decir, incompleta. Proponían "la defensa de la victoria" -como una forma de defender la dignidad de Italia- y la formación de un "sindicalismo nacional", ni socialista ni católico. Se manifestaban como anticapitalistas, antiburgueses, antiliberales, antisocialistas y anticlericales. Los fasci di combattimento fueron la base del movimiento fascista. Entre 1920 y 1921, muchos veteranos de guerra desocupados y pequeños propietarios rurales antisocialistas se incorporaron a los fasci. En particular, los propietarios rurales de las provincias y algunos sindicalistas organizaron escuadras fascistas que atacaban violentamente a sus adversarios, tomaban las sedes municipales, expulsaban a los gobernantes locales y destruían los sindicatos socialistas y católicos. El principal éxito de esta política fue la creación de un sindicalismo fascista. El fascismo se formó como un partido militarizado, violentos y movilizado. El financiamiento lo recibió de grandes propietarios rurales y de banqueros e industriales urbanos, que esperaban que los fascistas terminaran con las protestas sociales. En 1922, los dirigentes fascistas se prepararon para la toma del poder. Mussolini decidió realizar una movilización fascista desde distintos puntos del país hacia Roma. El 28 de octubre se inició la "Marcha sobre Roma", que culminó exitosamente el 30 de octubre, cuando el rey Víctor Manuel ni nombró Primer Ministro a Mussolini. El régimen fascista (1922-1943) Luego de marchas y contramarchas en las que endurecía y ablandaba las relaciones con la oposición, el 3 de enero de 1925 Mussolini proclamó la dictadura y clausuró el Parlamento. Al mismo tiempo, decidió reducir la influencia de los miembros de su partido en el gobierno. Los puestos claves de su gabinete fueron ocupados por dirigentes ultranacionalistas, a pesar de las protestas de los fascistas "históricos". El objetivo de Mussolini era subordinar todas las organizaciones sociales, el propio partido, los sindicatos fascistas, las organizaciones juveniles fascistas a la autoridad del estado. Todos los antifascistas -liberales, socialcristianos, socialistas o comunistas- fueron proscritos. Diez mil opositores debieron exiliarse y otros diez mil fueron encarcelados. El Partido Fascista ocupó una nueva función: fue encargado de custodiar la disciplina social y de mantener la sociedad movilizada en torno de los objetivos impuestos por el gobierno. El intento mas importante por subordinar la sociedad fue el corporativismo. El estado fascista creó veintidós corporaciones en las que se reunían representantes de los empresarios y de los sindicatos por rama de actividad (metalurgia, metalmecánica, química, vitivinícola, etcétera) controladas por un Consejo Nacional de Corporaciones y por un Ministerio de Corporaciones. De esa manera, el estado se proponía regular la actividad económica y las relaciones laborales. Un último paso fue la creación, en 1939, de una Cámara de las Corporaciones en reemplazo de la Cámara de Diputados. El corporativismo sólo sirvió para controlar los sindicatos, pero nunca a los grandes empresarios. La República Social Italiana (1943-1945) La alianza entre el fascismo y el nacional-socialismo alemán durante la Segunda Guerra Mundial significó el fin del régimen. La mayor parte de la sociedad estaba en contra de la guerra. En julio de 1943, el Rey y el Gran Consejo Fascista decidieron destituir y encarcelar a Mussolini, y negociar la paz con los aliados. Entonces Alemania invadió Italia, liberó a Mussolini y lo colocó a la cabeza de un gobierno títere, que en la práctica respondía a los generales alemanes. Esa experiencia -la más sanguinaria y cruel de todo el régimen fascista- se conoció como la República Social Italiana. Concluyó en 1945, con el fin de la guerra. http://www.loseskakeados.com