RESULTADOS DE 60 AÑOS DE EXPERIENCIAS DE

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RESULTADOS DE 60 AÑOS DE EXPERIENCIAS DE REPOBLACION CON
Pinus jeffreyi Grev. Et Balf. y P. ponderosa Dougl. ex Laws. EN SIERRA NEVADA
LANJARON (GRANADA).
S. CUADROS TAVlRA
DEPARTAMENTO DE INGENIERÍA RURAL. ESCUELA TÉCNfCA SUPERIOR DE INGENIEROS
AGRÓNOMOS y DE MONTES. UNIVERSIDAD DE CÓRDOBA. APARTADO 3048. 14080. CÓRDOBA
RESUMEN
Se presentan los resultados obtenidos a partir de inventarios completos de todas las parcelas de
las dos especies americanas existentes en el monte de Lanjarón. Se adjuntan ecuaciones de
cubicación de una y dos entradas obtenidas a partir de árboles tipos medidos en las propias
parcelas.
P.e.: Repoblación, crecimiento, Pinus, jeffreyi, ponderosa, Sierra Nevada
SUMMARY
Summarized results from experimental plots of jeffrey and ponderosa pines after sixty years
from planting in southern expositions of Sierra Nevada (Spain) are exposed. Single and two-entry
volume tables are added.
K.W.: Pinus, jeffreyi, ponderosa, growth, yield, Sierra Nevada, Spain
INTRODUCCION
Tanto el pino de Jeffrey como el pino ponderosa son especies que formaron parte de la
estrategia puesta en práctica a través del Instituto Forestal de Investigaciones y Experiencias para
soslayar la escasez de pasta de celulosa provocada por el aislamiento internacional que sobrevino
tras la guerra civil española y que duró hasta el año 1.953. Consistió ésta en la búsqueda de
especies que, como había ocurrido en la comisa Cantábrica y Galicia con P. radiata y Eucaliptus,
proporcionasen buenos rendimientos maderables sobre terrenos, en este caso semiáridos, en los
que las especies indígenas productoras, se argumentaba, no encontraran las condiciones idóneas
para su desarrollo ya fuera por el tipo de suelo, la altitud u otra circunstancia adversa
(ELORRIETA, 1964). La amplitud del área nativa del pino ponderosa, el ser la segunda especie
productora de madera en Estados Unidos tras el abeto de Douglas y su extensión por la zona
californiana junto al pino de Jeffrey, fueron determinantes para la selección de esta especie y su
incorporación a los ensayos de introducción llevados a término en Lanjarón y otras localidades de
la geografía española. La robustez y resistencia a la sequía que se le atribuyen eran también avales
muy favorables para su prueba en las laderas de Sierra Nevada desnudas y orientadas al sur,
sometidas a fuerte insolación durante buena parte del año y de una xericidad acentuada en verano.
Del material reproductivo empleado con ambas especies sólo es posible asegurar su origen
norteamericana, pero no existe constancia de su procedencia aunque se infiere, por la insistencia
mostrada en memorias del Instituto Forestal, que se trate de semillas del área californiana debido a
la existencia de cierta homología o al menos afinidad climática. Las plantaciones con estas
191
especies, como era el uso, se hicieron en primavera, casi todas en marzo, empleando como
métodos de plantación el ahoyado manual y el barrón. De forma generalizada se presentaron
grandes pérdidas que pueden ser atribuidas a la combinación de sequía estival y desnudez del
terreno. No siempre fue posible reponer las marras producidas con ejemplares de la misma
especie al no existir semilla disponible, por lo que se recurrió en el caso de una de las parcelas a
ocupar los huecos con pino salgareño lo que ha dado origen a una masa mezclada si bien con claro
predominio de la especie que se pretendía ensayar.
La zona de estudio situada en el macizo de Sierra Nevada se integra en la unidad estructural de
la Cordilleras Béticas caracterizada por una complejidad tectónica soportada por un apilamiento
de mantos de corrimiento entre los que destaca el Complejo Nevado Filábride sobre la base de
materiales metamórficos, cuyo Manto del Veleta acoge todas las parcelas de esta especie. Los
materiales de este manto corresponden a micaesquistos grafitosos bastante homogéneos, con
alguna asociación puntual de cuarcitas sobre todo en las partes mas altas. Los suelos que se
originan son ácidos poco profundos, con abundante rocosidad, textura franco arenosa y
diferenciación de horizontes poco marcada. Al aumentar la cota y la pendiente disminuye el
espesor de estos suelos (DELGADO et al., 1982). Aunque inicialmente las parcelas se instalaron
sobre terrenos cultivados asentados sobre terrazas mas o menos anchas, es decir sobre suelos del
tipo antrosoles úrbicos, en la actualidad encontramos cambisoles y regosoles dístricos en la
parcela PJFl16 de Piedra del Diablo mientras que en el resto de las parcelas de la especie son
cambisoles y regosoles eútricos (SANCHEZ GOMEZ, 1990). Es de destacar el gran acúmulo de
restos vegetales a base de acículas y ramillos que presentan estas parcelas formando una capa de
humus en la que es posible distinguir tres niveles de descomposición y hasta un máximo de 30 cm
de profundidad en el horizonte orgánico.
Desde el punto de vista fitoclimático, todas las parcelas se encuadran dentro del tipo
Nemoromediterráneo genuino VI(IV)2 de ALLUÉ (1990) que corresponde a una fisonomía y
grado planicaducifolia marcescente y esclerófila ilicina procurando una vegetación climácica a
base de encinares y melojares lo que coincide con la realidad observando los remanentes del
entorno. La vegetación potencial corresponde según RIVAS MARTINEZ (1987) a la serie mesosupramediterránea filábrido-nevadense silicícola seca de la encina Adenocarpo decorticantisQuerceto rotundifoliae sigmetum (24d). La vegetación actual de sotobosque es muy escasa a
causa de la espesura del arbolado creado pero destaca una relativa abundancia de brotes o
brinzales de encina, mientras que en los escasos huecos o bordes donde llega la luz aparece la
rascavieja (Adenocarpus decorticans). De acuerdo a la tipología climático estructural de RUIZ
DE LA TORRE (1990) todas la parcelas se encuadrarían dentro de un conjunto clasificado como
tipo Subesclerófilo de nivel evolutivo 4.
MATERIAL YMETODOS
Antes de acometer el trabajo de inventario propiamente dicho se efectuó una delimitación e
identificación de las diferentes parcelas por medio de un reconocimiento detallado de los límites
actuales. Con el fin de disponer de un dato superficial preciso al cual referir los distintos
parámetros que se determinan en la parcela se procedió al levantamiento topográfico de las
parcelas obteniendo la superficie en proyección horizontal con precisión de un m 2.
En todos los casos se ha procedido a realizar un inventario diamétrico pie a pie, este nivel de
inventario se justifica por la escasa extensión relativa de casi todas las parcelas « 1 ha) y la
oportunidad de obtener mayor exactitud al determinar la distribución de un parámetro tan decisivo
como es el diámetro normal. Se tomaron con forcípula los diámetros normales en cruz con
aproximación al mm.
192
La obtención, en cada parcela, de los parámetros característicos relacionados con la altura total
se realizó sobre una fracción de muestreo compuesta de dos sub-muestras. Una de ellas para la
determinación de la altura dominante de Assman, utilizando para ello un número de pies por
parcela correspondiente a los 100 árboles más gruesos por hectárea. La otra sub-muestra está
orientada a la obtención de la altura media, siendo elegida sistemáticamente sobre la población de
pies vivos y fuste no deformado ordenada de mayor a menor diámetro normal y consistente en la
inclusión de uno de cada diez de estos árboles de modo que se selecciona una representación
proporcional de todas las clases diamétricas con mayor incidencia en aquellas que contienen
mayor número de pies, excluyendo los seleccionados en la sub-muestra anterior. Para determinar
el volumen con corteza se han utilizado tarifas y tablas de cubicación que se adjuntan mas
adelante y obtenidas en las propias parcelas a partir de árboles tipo seleccionados y medidos en
pie de acuerdo a las instrucciones LF.LE. (1964).
RESULTADOS
- Pino de Jeffrey (Pinus jeffreyi Grev. et Balf.). En la Tabla 1 se ofrece un resumen de las
principales variables e indicadores para las tres parcelas que han sido estudiadas para la especie,
teniendo en cuenta que para la parcela PJF98 se relacionan en primer lugar las estimaciones de
comportamiento aislado del pino de Jeffrey y entre paréntesis y cursiva los valores
correspondientes al conjunto de las especies los cuales, al menos para expresar la situación de
espesura en la que se desenvuelve la masa, se estiman mas acordes a la realidad que si se
derivasen de una repartición de la superficie entre especies. De todos modos las diferencias para
uno y otro caso no son marcadas aunque algunas variables en las que destaca en solitario el pino
de Jeffrey son minoradas por la presencia de pino salgareño en la masa como puede apreciarse en
la columna correspondiente.
La primera observación debe recaer en establecer si las diferencias de edad estimada en 3 años
entre la parcela PJF76 y las otras dos coetáneas, son superables a la hora de determinar el
comportamiento de la especie, tomando en cuenta que las distancias se atenúan conforme se aleja
el origen y se entra en tramos de comportamiento análogo. En nuestro caso se da la circunstancia
de que la parcela de menor edad es la que presenta una mejor pauta de conducta adaptativa
medida en términos de producción, por lo que en todo caso resultaría fuera de dudas su mejor
posición. En cualquier caso ambas parcelas presenta mucha similitud en el comportamiento de la
especie, siendo quizás mas representativa la parcela de Praorán por su mayor extensión que recoge
mejor las posibles variaciones en cuanto a suelo. La diferencia frente a la parcela situada a mayor
altitud es clara en los aspectos de crecimiento y en los principales valores indicativos
dasométricos como la altura dominante, el árbol de diámetro medio cuadrático o el árbol de
volumen medio, 10 que le ha permitido mantener una mayor densidad de pies, de todos modos
excesiva, y la misma área basimétrica que las otras parcelas reflejándose en unos indicadores
selvÍColas similares. Parece pues adecuado concluir que la especie se comporta muy bien en
altitudes comprendidas entre 1500 y 1700 m, pero las prestaciones que ofrece a mayor altitud son
también buenas. En todos los casos se estima que la espesura es excesiva no sólo a tenor de lo que
muestran los índices sino por el aspecto general de la masas y sería aconsejable intervenir con
claras para conducirlas a situaciones que permitan un mejor reflejo de las posibilidades reales de
la especie. Hasta el momento actual no se ha realizado actuación selvícola de cualquier índole en
estas parcelas. En el contexto del área de origen de la especie examinado a través de las curvas del
pino ponderosa que reflejan todas las posibles situaciones encontradas en la misma, los resultados
de las parcelas se sitúan en una posición intermedia de acuerdo a los índices de sitio (S.L 100) y
media alta si lo que introducimos como término de comparación son las producciones maderables
por unidad de superficie.
193
No se ha encontrado en el informe de ELORRIETA (1964) referencias a ataques de polilla
(Evetria) minadora de guías terminales (Rhyacionia buoliana) que condujeron al fracaso las
experiencias realizadas en Italia (ALLEGRI, 1962) del mismo modo que ocurrió con los ensayos
realizados en Béjar (Salamanca) por el Instituto Forestal de Investigaciones y Experiencias (INIA,
1984) a los que se sumaba la susceptibilidad a la procesionaria (Thaumaetopoea pytiocampa).
Esto puede quizás explicarse por la inexistencia de masas importantes de pinar en toda la zona en
el momento de comenzar la instalación de las parcelas lo que haría difícil el acceso de la plaga
minadora de yemas a las mismas, una vez consolidadas extensas superficies de repoblación
llegaría tarde para representar problemas destacables pero comenzaría a sentirse el conspicuo
ataque de la procesionaria.
- Pino ponderosa (Pinus ponderosa Dougl. ex Laws.). En la Tabla 2 se presenta un resumen de
las principales variables e indicadores para las tres parcelas que han sido estudiadas para la
especie, teniendo en cuenta que para la parcela PP068 se relacionan en primer lugar las
estimaciones de comportamiento aislado del pino ponderosa y entre paréntesis y cursiva los
valores correspondientes al conjunto de las especies los cuales, al menos para expresar la situación
de espesura en la que se desenvuelve la masa, se estiman mas acordes a la realidad que si se
derivasen de una repartición de la superficie entre especies. De todos modos las diferencias para
uno y otro caso no son marcadas aunque algunas variables en las que destaca en solitario el pino
ponderosa son minoradas por la presencia de pino salgareño en la masa como puede apreciarse en
la columna correspondiente. Un examen detenido de ambas columnas viene a decimos que se
trata de dos poblaciones que presentan valores muy similares tanto en producción como en
densidad, en este último caso considerando el conjunto de la especies. Una ligera ventaja se
decanta hacia la parcela de cota inferior si consideramos el S.I. so como mejor indicador para
solventar la diferencia de edad. Los volúmenes sin corteza coinciden muy aproximadamente con
los datos aportados por OLIVER y POWERS (1978) para plantaciones sin aclarar de pino
ponderosa en el norte de California, pero distan mucho de los ofrecidos por DUFF (1956) para
Nueva Zelanda en donde a los cincuenta años la peor calidad producía 521.5 m3 sin corteza por
hectárea.
En las conclusiones de los primeros inventarios con cierto nivel de detalle (ELORRIETA,
1964) se imputa un comportamiento extraordinario al pino ponderosa en las laderas expuestas de
Tello por contraposición a los resultados mas modestos de la parcela de Praorán, en teoría sobre
mejor sustrato y ello se atribuyó, en gran medida, a la diferente raza empleada, piña "púrpurea" en
Tello frente a piña "verde" en Praorán, todo ello sin dejar de pensar en el origen común
Californiano de ambas. No dejó de señalarse las circunstancias adversas por las que, durante los
años de la guerra civil, atravesó la parcela de Praorán al ser sometida a pastoreo descontrolado con
ganado cabrío y lanar en esas primeras edades, lo que sin duda tuvo efectos negativos en su
desarrollo. Sin embargo estas diferencias se han atenuado en el transcurso de los tres últimos
decenios y en la actualidad, aún persistiendo cierta disparidad, ambas poblaciones se han
aproximado hasta reducir su diferencial de calidad en función del S.I.so hasta el 3.7 %. En todo
caso hay que establecer la salvedad derivada de la diferente forma de estimar los parámetros
productivos para esta especie en concreto, ya que en un caso es absolutamente mayoritaria
mientras que en otro comparte superficie con otras especies y edades permitiendo una
representatividad mas restringida. Los ensayos llevados a cabo en Béjar con esta misma especie
fueron calificados de rotundo fracaso (INIA, 1984) tanto por la susceptibilidad a los ataques de
evetria (Rhyacionia buoliana) y procesionaria, como por su baja productividad (3.5 m 3 ha-laño- l, a
los 18 años). En resumen la especie que tratamos de evaluar presenta en esta ubicación nevadense
un comportamiento que es calificable de intermedio respecto de los que ofrece en su amplia área
de distribución originaria en la que son frecuentes los bosques mezclados con otras especies
principalmente resinosas.
/
194
CONCLUSIONES
El pino de Jeffrey es la especie que ofrece mejores resultados productivos de entre todas las
ensayadas en Sierra Nevada, tanto nativas como exóticas, superando ampliamente a su especie
hermana el pino ponderosa. Ambas especies americanas presentan buenos crecimientos en general
pero presentan problemas de susceptibilidad a plagas. Producen semilla fértil pero no se encuentra
apenas regeneración natural en zonas abiertas, ni ha existido expansión en las inmediaciones por
lo que no parecen presentar peligro de convertirse en invasoras. Con relación a sus áreas de
origen, el comportamiento productivo de ambas especies se sitúa en una posición intermedia de
acuerdo a los índices de sitio calculados, algo mas destacada en el caso del pino de Jeffrey.
RECONOCIMIENTOS
Este estudio se ha llevado a cabo en la Estación Experimental Forestal de Lanjarón como parte
del proyecto 8028 "Evaluación de las experiencias sobre adaptación y crecimiento de diversas
especies forestales en el montano mediterráneo español" financiado por el LN.LA. dentro del Area
de Producción Forestal del Programa Sectorial de Investigación Agraria. Mi reconocimiento a
todo el personal de la Estación Experimental cuya ayuda ha hecho posible este trabajo.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
ALLEGRI, E. (1962). La introduzione e la sperimentazione in Italia di specie forestali
esotiche a rapido cerscimiento.Monti e Boschi, 11-12.
ALLUÉ ANDRADE, J.L. (1990). Atlas Fitoclimático de España. Taxonomías. Monografías
INIA n° 69. MAPA-INIA. Madrid. 221 pp.
DELGADO R.,BARAHONA, E. y LINARES, J. (1982). Factores formadores de los suelos
de la cuenca alta del río Dílar (Sierra Nevada). Anales de Edafología y Agrobiología, 41(12) :21-37.
DUFF, G. (1956). Yield of unthinned Douglas fir, Corsican pine and Ponderosa pine in New
Zealand. New Zealand Forest Service. Wellington. 53 pp.
ELORRIETA, J. (1964). Ensayo de los pinos ponderosa y jeffreyi en la vertiente sur de Sierra
Nevada (Granada). Años 1922 -1962. LF.LE. Ministerio de Agricultura. Madrid. 128 pp.
I.F.LE. (1964). Instrucciones para el establecimiento de parcelas permanentes de
experimentación en montes españoles. Sección de Selvicultura y Ordenación de Montes. LF.LE.
(mecanograf.). 17 pp.
I.N.LA. (1984). Resultados de 50 años de experiencias sobre el crecimiento y adaptación de
diferentes especies forestales en el montano silíceo español (Béjar - Salamanca). Comunicaciones
INIA. Serie Recursos Naturales n° 25. Madrid.
OLIVER, W.W. & POWERS, R.F. (1978). Growth model for ponderosa pine: 1. Yield of
unthinned plantations in northern California. Res. Paper PSW-133, 21 pp. Illus. Pacific
Southwest Forest Range Exp. Stn., Forest Service. USDA. Berk
RIVAS MARTINEZ, S. (1987). Memoria del mapa de series de vegetación de España. Serie
Técnica. ICONA-MAPA. Madrid. 268 pp.
RUIZ DE LA TORRE, J. (1991). Mapa Forestal de España. Escala 1 :200.000. Hoja 5-1I.
Granada-Málaga. ICONA-MAPA. Madrid. 216 pp.
SANCHEZ GOMEZ, T. (1990). Aplicación del estudio de suelos a la dinámica de la cuenca
del río Lanjarón. Relación suelos-geomorfología. Tesis doctoral de la Universidad de Granada.
(Inédita).
195
ECUACIONES DE CUBICACIÓN DE VOLUMEN CON CORTEZA PARA Pinus jeffreyi G.&B.
Tarifa de cubicación de una entrada (Dnee )
Modelo
{V" (dm3 ); Dnee (mm)}
R2
Vce = 126.897145 - 1.433 Dnee + 0.009393 Dne/
0.9572
R2(aj.)
95.56
53
Tabla de cubicación de dos entradas (Dn m Ht)
Modelo
(V" (dm3); Dnee (mm); Ht (m))
C.e.
Vee = 100.982 + 2.95097 E-4 (Dne/ Ht)
0.9944
R2
0.9889
N
53
N
ECUACIONES DE CUBICACIÓN DE VOLUMEN CON CORTEZA PARA Pinus ponderosa Laws.
Tarifa de cubicación de una entrada (Dn ee )
Modelo
{Vee (dm 3 ); Dnee (mm)}
R2
Vee =68.376729 - 1.052827 Dnee + 0.009453 Dne/
0.9373
R2(aj.)
93.36
Tabla de cubicación de dos entradas (Dne" Ht)
Modelo
{Vec (dm3); Dnee (mm); Ht(m)}
e.e.
Vee = 22.0844 + 3.46065E-4 (Dne/ Ht)
0.9761
R2
N
0.9527
36
PARAMETROS DASOMETRICOS
Número de pies vivos por hectárea
Area Basimétrica (m 2 ha ')
Volumen maderable con corteza (m 3 ha'l)
Volumen maderable sin corteza (m 3 ha,l)
Crecimiento medio con corteza (m 3 ha'laño 1)
Crecimiento corriente con corteza (m3 ha'laño
INDICADORES DASOMETRICOS
Arbol de diámetro medio cuadrático (mm)
Arbol de volumen medio (dm 3)
Arbol de diámetro dominante (mm)
Altura media (m)
Altura dominante de Assman (m)
INDICADORES SEL VICOLAS
Relación de esbeltez o factor estabilidad
S.T.
1)
Edad
Altitud
100
Indice de Hart
Relación de espaciamiento de Hart-Becking
Densidad relativa
Indice densidad de masa o de rodales de Reineke
Superficie actual
PJF76
953
108.01
925.37
696.63
17.46
22.37
53 años
379.9
971.4
605.7
20.1
22.3
1545 m
53.0
32.0
14.5
15.6
121.6
735.6
1900 m 2
PJF98
755 (902)
98.33 (98.32)
882.78 (868.97)
674.82 (653.67)
15.49 (15.24)
21.50 (20.30)
57 años
407.1 (372.5)
1168.9 (963.07)
636.7 (616.3)
22.2 (21.5)
25.3 (24.6)
1665 m
54.53 (57.7)
33.5
14.4 (13.6)
15.5 (14.6)
107.0 (111.8)
651.6 (674.9)
7747 m 2
N
36
PJF116
1400
99.36
765.06
564.82
13.66
18.45
56 años
300.7
546.7
470.9
16.1
18.3
1960 m
53.4
24.4
14.6
15.7
125.8
742.2
4130 m 2
Tabla 1. Parámetros e indicadores dasométricos y selvÍcolas de las tres parcelas de pino de Jeffrey
PARAMETROS DASOMETRICOS
Número de IJies vivos por hectárea
Area basimétrica (m2 ha,l)
Volumen maderable con corteza (m3 ha'l)
Volumen maderable sin corteza (m3 ha'l)
Crecimiento medio con corteza (m3 ha'laño 1)
Crecimiento corriente con corteza (m3 ha'laño'l)
INDICADORES DASOMETRICOS
Edad
Arbol de diámetro medio cuadrático (mm)
Arbol de volumen medio (dm3)
Arbol de diámetro dominante (mm)
Altura media (m)
Altura dominante de Assman (m)
INDICADORES SELVICOLAS
Altitud
Relación de esbeltez o factor estabilidad
S.l. 50
Indice de Hart
Relación de espaciamiento de Hart-Becking
Densidad relativa
Indice densidad de masa o de rodales de Reineke
Superficie actual
PP0106
993
58.44
503.32
376.68
8.53
11.86
59 años
273.7
506.71
472.8
17.5
20.9
1635 m
64.0
18.3
15.1
16.3
77.5
453.1
7178 m l
PP068
946 (1303)
54.49 (54.49)
444.41 (470.01)
329.22 (339.23)
8.89 (9.40)
10.32 (12.02)
50 años
270.8 (230.8)
469.66 (360.8)
412.2 (405.0)
17.2 (14.6)
19.0 (18.4)
1535 m
63.5 (63.2)
19.0
17.1 (15.1)
18.3 (16.2)
72.7 (78.7)
424.2 (451.9)
5458 m :l
Tabla 2. Parámetros e indicadores dasométricos y selvÍcolas de las parcelas de pino ponderosa
196
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