EMIGRACIÓN A FINES DE R U S I A A LA A M É R I C A LATINA DEL SIGLO XIX, COMIENZOS DEL SIGLO X X Por Ν. V. Κ o r o 1 e ν Nosotros consideramos el problema de la emigración de Rusia junto al problema del desarrollo del capitalismo, de la separación de los trabajadores de los medios de producción, de la sobrepoblación relativa agraria. Precisamente tales procesos tuvieron lugar en nuestro país después de la abolición de la servidumbre en el año 1861. En busca de trabajo, salvándose de la miseria y del hambre, la población superflua de los campesinos arruinados y de los artesanos se marchaban a las ciudades. Para la ilustración de este fenómeno citamos informaciones exactas de la entréga de «pasaportes a largo plazo» a los campesinos que se marchaban a los trabajos prolongados. En los años 1861—70 fueron extendidos 59.200 pasaportes cada año, y en los años 1891— 1900, 1.850.000 cada año 1 . Estas decenas y cientos de miles de hombres desdichados se convirtieron en emigrados que a menudo para siempre abandonaban su país. La emigración de Rusia fue el resultado de los complejos procesos que tenían lugar en la vida social, económica, política y espiritual del país. Un papel importante en la emigración de Rusia lo jugaron las persecuciones por motivos políticos, nacionales y religiosos. Un gran número de los emigrados de Rusia se trasladaron a los Estados Unidos y la América Latina. Entre los países latinoamericanos que recibieron a los emigrados, Argentina ocupó el primer lugar y Brasil el segundo lugar. En los años 1857—1909 a Argentina llegaron 106.114 personas. En los años 1835—1905 al Brasil emigraron de Rusia 40.165 personas. En cuanto la procedencia nacional de las personas emigradas de Rusia, eran polacos, lituanos, alemanes, hebreos, ucranianos, bielorrusos, rusos. La emigración procedió sobre todo de las provincias occidentales y suroccidentales. Hamburgo y Bremen fueron los puertos principales *) Π . H . JlflmeHKO. HCTopufl HapogHoro MocKBa, 1956, CTp. 26. xossÄCTBa CCCP. Tom Unauthenticated Download Date | 11/20/16 5:38 PM II. Nicolai Korolev 32 donde los emigrados se embarcaron rumbo a América. Por los puertos mencionados pasaron cerca de dos tercios de todos los emigrados. En el año 1899 desde Hamburgo partieron 64.214 personas y desde Bremen 80.780 personas 2 . En el año 1907 por ambos puertos cita — dos salieron de Rusia a los países latinoamericanos 5.830 personas, en el año 1908, 10.602 personas (a Argentina 9.538 personas, al Brasil 2.941 personas) 3 . En cuanto a la instalación de los colonos de Rusia, ellos se establicieron sobre todo en las provincias de Argentina Santa Fe, Buenos Aires y Entre Ríos. En el Brasil se instalaron en los estados Rio Grande do Sul, Paraná, Sao Paulo, Minas Gérais, Mato Grosso, y en Uruguay en el departamento Rio Negro. Un reducido número de emigrados rusos se dirigió también a Venezuela, Paraguay, Colombia, Ecuador, Chile, México, Bolivia y a otros países. Los originarios de Rusia, pero sobre todo sus descendientes de la segunda y tercera generación, componen ahora un elemento importante en la población de los países latinoamericanos. En el año 1959 50 mil rusos habitaban en el Brasil, 50 mil en Argentina, 12 mil en Uruguay, en otros países de la América Latina, 7 mil. En ese mismo año 60 mil ucranianos vivían en Argentina, 50 mil en Brasil, 10 mil en Paraguay, 6 mil en Uruguay, en otros países de América Latina, 5 mil. En Argentina vivían 5 mil bielorrusos 4 . Los gobiernos de los países latinoamericanos, los propietarios de las empresas industriales y los latifundistas se esforzaban por atraer a los emigrados, particularmente de Rusia. El Brasil desarrolló esta actividad con máxima energía. En octubre del año 1908 su gobierno envió a París una «Comisión brasileña del desarrollo económico» bajo la dirección de Paulo Ramos. La Comisión organizó en todos los países exposiciones, conferencias y sobre todo, propagaba anuncios, folletos, libros en todos los idiomas europeos, en los que el Brasil se mostraba como la tierra de promisión. La Comisión estableció contacto con algunas compañías náuticas, por ejemplo, con la «AustroAmericana» (Trieste), «Hamburg—Südamerika» (Hamburgo), «Norddeutscher Lloyd» (Bremen), * L l o y d Real Holandés» (Amsterdam). *) CöopHMK KOHcyjifcCKMxflOHeceHHM.BbinycK III, 1900 r. στρ. 249. ') CßopHMK KOHCyjibCKHX soHeceHMü. BbinycK IV. 1910 r. CTp. 283. *) HiicjieHHoCTb M paccefleHwe HapoflOB M upa. Hapo^bi Miipa. SxuorpaφιΐΗθοκκβ onepKH. nofl oßmeJi peflaKi^neft hji. κορ. AH CCCP C. Π. TojiCToro. H3FL. A H C C C P , MOCKBS, 1962, CTp. 4 1 8 . Unauthenticated Download Date | 11/20/16 5:38 PM 33 Emigración de Rusia a América L a t i n a Las compañías náuticas por su parte aprovechaban los servicios de las oficinas de reclutamiento. La agencia de Misler era la oficina más importante. Por cada pasajero el <rNorddeutscher Lloyd» pagaba a Misler 15 marcos de la colecta de comisión (su beneficio global fue en el año 1900 de 1.600.000 marcos). «La Comisión brasileña» creó sus oficinas de reclutamiento con el número necesario de agentes que por todos los medios buenos y malos atrapaban a los hombres crédulos en sus redes. Como escribió A. S. I o η i η , las agencias de emigración «en nuestro siglo sustituyeron a las compañías comerciales que transportaban al ganado obrero, los negros, a América» 5 . Las oficinas de reclutamiento desarrollaron su actividad en Rovno, Brest-Litovsk, Odessa, Kishinev y otras ciudades, sobre todo, en las provincias occidentales y suroccidentales de Rusia. Las oficinas mencionadas a menudo· cambiaban su residencia, se enmascaraban imitando ser talleres, almacenes etc. Debido a esta causa era difícil descubrir y liquidar la actividad ilegal de las organizaciones citadas. En el año 1913 el gobierno ruso consiguió la lista de los agentes secretos que habitaban en Rusia (170 personas), reclutando a los rusos para la emigración a América y asegurándoles el paso ilegal de la frontera. Las autoridades iniciaron la investigación, tanto más, que los agentes de reclutamiento de la mercancía viva a veces se dedicaban al espionaje. El gobierno ruso intentó limitar la emigración, porque significaba la pérdida de la mano de obra, causaba daño a la economía del país. Con este fin fue creado un sistema complicado de formalización de los documentos para la salida al extranjero. Con el tiempo los círculos superiores de Rusia comenzaron a cambiar su actitud hacia el problema de la emigración, empezaron a oirse voces a favor de la liquidación de los obstáculos para la emigración. Este punto de vista se explicaba por el crecimiento de las acciones agrarias, de los movimientos de campesinos, que amenazaban a los terratenientes. La culminación llegó durante la revolución del año 1905. Fue necesario deshacerse del «elemento inquieto», mandándolo a Siberia o a la emigración. s ) A. C. ΗΟΗΗΗ. cip. 76. ΠΟ lOxHOft AiiepiiKe. Β flsyx TOMax, τ. 1, ΟΠΕ, 1892 r. Unauthenticated Download Date | 11/20/16 5:38 PM 34 Nicolai Korolev En estas condiciones surgió el problema de la emigración temporal, de la salida para los trabajos de temporada. Aparecieron los partidarios del «sistema de golondrinas», tomando en consideración la diferencia entre las condiciones climáticas en Rusia y Argentina: los campesinos rusos llegaban a la Argentina cuando allá era verano y en Rusia, invierno; regresaban a casa al comienzo de los trabajos agrícolas, cuando en Argentina hacía frío. La Comisión especial constituida junto a la sociedad «El grano ruso» inició la regulación de la emigración temporal. Pero el «sistema de golondrinas» también tropezó con objeciones. Se indicaba que la salida de los emigrados rusos contribuiría al fortalecimiento de Argentina en calidad de competidor de Rusia en el mercado mundial de cereales. Una gran actividad fue desarrollada por la «Sociedad hebrea de colonización» fundada en Londres en el año 1891 por el barón Hirsch. Según su juicio, Argentina debería ser la patria de los hebreos. Durante 25 años intentó trasladar allá cerca de V-U de milliones de hebreos de Rusia. «La sociedad hebrea de colonización» estableció sus relaciones con ambos gobiernos interesados, el de Argentina y el de Rusia. A la «Sociedad hebrea de colonización» se le permitió fundar en Petersburgo un Comité Central, crear Comités en algunas ciudades de Rusia y también nombrar a mandatarios locales. Todas las familias recibieron el derecho de salir al extranjero. Pero la emigración hebrea real no concordaba con los planes del barón Hirsch. A pesar de la enérgica propaganda de la idea de emigración, los hebreos nos no mostraron interés especial en ella. La cantidad global de la población hebrea en Argentina, originarios de Rusia, en el año 1909 era solamente de 70 mil personas®. Como ha sido dicho, los círculos de la burguesía y terratenientes de los países de América Latina mostraron vivo interés por los emigrados rusos. Pero no les crearon las condiciones necesarias de vida. Tomemos por ejemplo Argentina. Formalmente existieron las reglas de ingreso de los inmigrados, que estipulaban la instalación al principio en los hoteles (las casas de inmigrados), la alimentación, la higiene y la seguridad. Las autoridades de inmigración se obligaron a transportar la gente y su equipaje al lugar de residencia, a buscarles ( ) Η. Α. ΚριοκοΒ. ApreHTHHa. CejibCKoe XOSHÜCTBO Β ApreHTWHe pa3BMTneM crpaHbi. IIeTep6ypr, 1911, crp. 226. CBH: C O6IHHM Unauthenticated Download Date | 11/20/16 5:38 PM Β 35 Emigración de Rusia a América Latina trabajo a los artesanos, a segurar la tierra para los campesinos. Los inmigrados gozaron de todos los deredios concedidos por la constitución a los argentinos. Pero la situación real fue otra. «Los hoteles» no eran cómodos. Los hombres después de conocerlos les daban la característica justa de «cuadra para el pobre rebaño humano» 7 . En cuanto a la comida, contrariamente a las normas, era muy escasa, porque el dinero gastado por el gobierno en parte «quedaba en las manos de los empleados locales; sólo una cantidad, muy moderada llegaba a su destino» 8 . Además de los sufrimientos físicos los emigrados se expusieron a los traumas morales, a las humillaciones de la dignidad humana. Los plantadores y los industriales tomaban a los trabajadores más fuertes y de alta estatura. N o andaba bien la cuestión de la entrega de la tierra a los campesinos inmigrados. El gobierno poseía los fondos necesarios, pero esta tierra se encontraba en sitios lejanos y poco cómodos, a donde era difícil de arribar, tanto más de elaborar la tierra, porque los colonos extranjeros disponían de posibilidades materiales muy limitadas. En cuanto a las mejoras tierras esas habían sido hacia tiempo usurpadas por los latifundistas que las entregaban en arrendamiento en condiciones leoninas por el término de 3—5 años. ¿Cuándo el colono habiendo puesto un trabajo enorme, recogía la primera cosecha, «llegaba el fin del arrendamiento, y al trabajador cultivador no le quedaba nada»®. En general, la situación de la mayor parte de los campesinos inmigrados fue muy mala. Sólo algunos campesinos lograron colocarse bien y enriquecerse. En su mayor parte los colonos se encontraron en situación de peones de los terratenientes y en situación de trabajadores asalariados de los industriales en las ciudades. La situación se agravaba por la discriminación nacional. En cuanto a la vida en Brasil, la situación de los inmigrados fue más difícil que en Argentina. Ante todo se resolvía mal el problema de la instalación de los inmigrados recién llegados. Por ejemplo, en Pòrto Alegre, en unas barracas especiales podían instalarse al ma7 ) M a p K B a c a m o * . 3aMeTKn SMurpairra β IOacHoft AMepwce. C. 6 y p r , 1 9 0 2 , CTp. 2 0 5 . Πβτερ- · ) M a p K E a c a H H H . 3 a M e T K M 3 M n r p a H T a β IOjkhoä A M e p m t e . C . Π β τ β ρ 6 y p r , 1 9 0 2 , CTp. 2 0 5 . ·) C ö o p H H K KOHcyjibCKHX flOHeceHHü. B w n y c K I V , 1910, CTp. 328. 3 a - r m c K a c e x p e T a p n KOHcyjibCTea β AjieKcaHflpnH JI. PeaejiH0TTH. Unauthenticated Download Date | 11/20/16 5:38 PM 36 Nicolai Korolev ximum 2.500 personas, pero se hallaban allí 5.000 personas. A causa de tal densidad, de la alimentación deficiente y de las enfermedades, se observó una gran mortalidad. En condiciones espantosas los hombres pasaban meses enteros antes de recibir la tierra. La tierra se puso a disposición de los campesinos con familia por un plazo de cinco años y debían pagar intereses. Si la deuda no era pagada a tiempo se fijaban multas que alcanzaban al octavo año el 100 °/o10. A los hombres solitarios se les entregaba un lote de tierra que debían pagar al contado. Las parcelas se daban en sitios lejanos e incómodos. En cuanto a los instrumentos agrícolas puestos a disposición de los campesinos por el gobierno a crédito, eran muy primitivos (picos, hachas). Al llegar al lote concedido el inmigrado no podía iniciar inmedistamente el trabajo, debía primeramente limpiar la tierra de bosque. Por eso se perdía complementariamente mucho tiempo y mucho trabajo. El inmigrado recibía un subsidio de los fondos gubernamentales, pero no al contado, sino en bonos. Las dificultades de los inmigrados de Rusia se agravaban por la discriminación nacional. A diferencia de los inmigrados de otros países ellos no gozaban del viaje gratuito desde el lugar de desembarco (Rio de Janeiro, Santos, Rio Grande do Sul) hasta el lugar de residencia futura. En tales circunstancias la mayoría de inmigrados rusos caían en la esclavitud de los latifundistas, de los empresarios en las construcciones de ferrocarriles, puentes, fábricas. El trabajador adulto ganaba en la construcción ferroviaria un milréis (60 kopeks) diario, las mujeres recibían medio milréis, y los trabajadores menores de edad recibían un tercio de milréis. Los trabajadores eran obligados a comprar los productos alimenticios en la tienda del patrón, donde los engañaban cruelmente. El salario diario en las plantaciones de café era solamente de un milréis, más la comida escasa. A causa de la mala alimentación y del clima duro los inmigrados frecuentemente caían enfermos. Sobre todo sufrían la fiebre amarilla, de la que sólo en el año 1892 en la zona de la ciudad Campinas (estado Sao Paulo) murieron 7 mil hombres. Quejarse de la injusticia, del trabajo difícil, tanto más para los extranjeros era asunto inútil. " ) CôopHKK KOHCyjibCKKx flOHecetnrik. BtinycK II, 1905, erp. 87. Ä ° n e - cemie M, IXpo3opa na Pno-fle-Xaiieftpo. Unauthenticated Download Date | 11/20/16 5:38 PM Emigración de Rusia a América Latina 37 Era muy difícil trasladarse de un estado a otro o en general abandonar el Brasil y a veces eso era imposible lograrlo, porque los inmigrados estaban cargados de deudas. Las tentativas de fuga eran rigurosamente castigadas. Además los inmigrados no sabían el idioma portugués, no conocían el terreno y las vías de comunicación. Estaba prohibida escribir en las cartas a la patria acerca de la mala vida. Las cartas eran sometidas a censura y destruidas. Las cartas que contenían invitaciones a los parientes y conocidos de llegar al Brasil eran estimuladas. En este caso se daba dinero. Y no sólo las cartas, sino cada paso de los inmigrados se hallaba bajo vigilancia de la administración local. Las dificultades de la vida de los inmigrados rusos comparándolas con las de los originarios de otros países se agravaban por la falta de diferentes sociedades y organizaciones que pudieran aliviar su triste suerte. Los inmigrados ingleses, franceses, alemanes, italianos, españoles, suizos y otros tenían sus sociedades de ayuda mutua, clubs, hospitales, orfanatos, asilos, uniones deportivas etc. Ellos recibían cierto apoyo y alguna ayuda de la patria, de organizaciones diferentes y de sus gobiernos, que muchas veces defendían a sus ciudadanos de los abusos desmesurados. Aunque este apoyo y esta ayuda eran escasos, los rusos sin embargo no recibían ni eso, estando bajo el dominio de la arbitrariedad. Las difíciles condiciones de vida en el extranjero forzaban a muchos inmigrados a regresar a la patria. Muchas veces los consulados rusos en la América Latina, por ejemplo, en Rio de Janeiro y Buenos Aires literalmente eran atacados por los inmigrados, que suplicaban les mandaran de regreso a casa. Pero las peticiones enviadas a los consuldados rusos sobre la repatriación por cuenta de estado eran rehusadas a causa de la falta de recursos. Solamente algunos inmigrados lograban regresar a la patria. La emigración causó un daño enorme a Rusia. Salían al extranjero los hombres más capaces para el trabajo, físicamente muy fuertes. En otras palabras, eso fue una prodigalidad de los recursos humanos. Sus consecuencias podían resultar desfavorables para el futuro del estado. La gran Revolución socialista de octubre puso fin a ese proceso, ya que abolió las causas económicas, sociales y políticas de la emigración en masa, abriendo ante los pueblos de la Unión Soviética posibilidades ilimitadas del derecho al trabajo, las perspectivas de la construcción de una nueva vida, basada en los nuevos principios. Unauthenticated Download Date | 11/20/16 5:38 PM