COMUN ICADO DE LA CONFERENCIA DE LAS IGLESIAS ANGLICANAS DE AMERICA ACERCA DE SU MUTUA RESPONSABILIDAD EN LA MISION Febrero 22-27, 2009 "SORPRENDIENDONOS JUNTOS" Las delegaciones de las provincias de la Iglesia Anglicana del Brasil, la Iglesia Anglicana del Canadá, la iglesia Anglicana de la Región Central de América (IARCA), de la Iglesia Episcopal de los Estados Unidos (TEC), la Iglesia Anglicana de México, las Diócesis de Uruguay, Perú y Cuba se reunieron en San José, Costa Rica desde el 22 al 27 de Febrero de 2009. Presentes con el clero y el laicado en la conferencia estaban los Primados: Su Gracia Revdma. Mauricio Andrade, S. G. Revdma. Martín Barahona, S. G. Revdma. Fred Hiltz, S. G. Revdma. Katharine Jefferts Schori y S. G. Revdma. Carlos Touche Porter. Para esta conferencia histórica, invitamos a todas las provincias en las Américas y el Caribe para discutir nuestra responsabilidad mutua en la misión, para descubrir un sentido del asombro al estar juntos en el cuerpo de Cristo por medio de la oración, la reflexión y la vuelta a la acción, reafirmar la unidad de la iglesia, hacer de la comunión algo verdadero y tangible, y reafirmar la necesidad que tenemos de cada uno. Durante estos días juntos nos regocijamos en el amor de Dios. Enviamos saludos al Arzobispo de Canterbury, el Dr. Rowan Williams, a todas las Provincias de la Comunión Anglicana, a los Primados , a los Moderadores Anglicanos, y a todas nuestras hermanas y hermanos en Cristo en la Comunión Anglicana mundial. Estamos agradecidos con los Primados de las Provincias del Cono Sur y de West Indies, que nos dieron su permiso para invitar a sus diócesis de forma individual para que se reunieran con nosotros. Estuvo presente en la conferencia como el orador principal el Rev. Juan K. Kafwanka, Oficial para investigación y proyectos para Misión y Evangelización en la Comunión Anglicana, que desafió a los presentes a evangelizar de maneras eficaces y creativas. Durante nuestro tiempo juntos compartimos la Eucaristía, hicimos estudio bíblico, presentamos el trabajo en nuestras provincias, las Diócesis y de las iglesias locales, enfocando las Cinco Marcas de la Misión. Nos comprometimos en abogar con los pobres para un mundo que refleje más de cerca el Reino de Dios. También reflexionamos sobre las futuras posibilidades para la Misión dentro de los contextos de: * las relaciones y los esfuerzos hacia la unidad fomentada durante la Conferencia de Obispos en Lambeth 2008, * la necesidad de actuar en forma ecuménica, * las realidades políticas y económicas en el mundo que impactan nuestra capacidad de vivir la misión, * la urbanización cada vez mayor del mundo, * el deseo de conservar y de preservar nuestro ambiente, * el papel de la Comunión en promover los logros de las Metas del Desarrollo del Milenio, y * el papel emergente y cada vez mayor de los pueblos indígenas en la Iglesia. Hablamos sobre nuestras esperanzas y sueños, y compartimos una visión de nuestro futuro juntos como Iglesias en las Américas y el Caribe. Reconocemos que hay tensiones dentro de nuestra querida Comunión Anglicana pero con todo eso, sabemos que tenemos mucho más en común. Nuestra unidad comienza con nuestro bautismo el cual nos hace ministros de la gracia de Dios en el mundo. Compartimos un mundo, pero sabemos que la misión de Dios no tiene fronteras. La disparidad cada vez mayor entre ricos y pobres, la crisis económica de mundo, la degradación de la creación y la enajenación de nuestra juventud son desafíos para nuestras comunidades. En medio de estos desafíos, Dios nos llama para proclamar con acciones y palabras las Buenas Noticias del Reino a todos los que encontremos. Al hacer frente a estos tiempos críticos en las Américas y el Caribe, nos dirige la sabiduría espiritual que proviene de las historias y de las enseñanzas de los primeros misioneros cristianos en el libro de los Hechos, que estudiamos durante nuestro tiempo juntos. "Pedro dijo, 'plata y oro no tengo, pero lo que tengo te doy: En el nombre de Jesús de Nazareth, levántate y anda.'” Hechos 3:6. Hemos sido desafiados en el mensaje de Hechos para proclamar que "otro mundo es necesario y posible," pero también la urgencia de actuar para promover la plenitud de la Vida que Dios tiene para cada uno de nosotros. Dios ha dado a cada una de nuestras provincias muchos dones, y nos llama para compartirlos con nuestros hermanos y hermanas. Todos debemos aprender cómo recibir esos dones, y como dar esos dones a otros. Dios nos ha hecho a todos mutuamente responsables de su misión de reconciliar al mundo y nuestra interdependencia en Cristo hace esto posible. En el contexto de nuestro diálogo, pedimos al Consejo Consultivo Anglicano que acepte una propuesta que debe ser considerada durante su reunión en Kingston, Jamaica en mayo de 2009 para agregar una sexta Marca de la Misión: paz, transformación del conflicto y reconciliación. Agradecemos a todos los que hicieron esta conferencia posible, incluyendo el equipo de diseño, Iglesia Anglicana de la Región Central de América, y a nuestros anfitriones en la Diócesis de Costa Rica. Nos comprometemos en mantener y profundizar las relaciones que hemos hecho durante nuestro tiempo aquí. Nos Comprometemos para trabajar juntos para la Misión de Dios en esta parte del mundo y rogamos que podamos encontrarnos otra vez.