Creo en ser honrado

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C R E O EN SER
HONRADO
por Judy Edwards
7 ú puedes ser como un miembro del ejército de
Helamán; puedes seguir el ejemplo de los lamanitas
rectos y ser honrado y fiel.
Y trátense h o n r a d a m e n t e todos los
h o m b r e s " (D. y C. 51:9).
En el Libro de Mormón se relata la historio de un
grupo especial de personas que eran honradas y fieles a
sus convicciones. Eran tamañitas que habían escuchado
el Evangelio de Jesucristo, que habían tenido fe en El, se
habían arrepentido de sus pecados y habían sido
bautizados en Su iglesia. Se llamaban a sí mismos antinefidehitas. Porque sabían que no era bueno pelear,
enterraron sus armas de guerra e hicieron un convenio
con nuestro Padre Celestial de que "nunca más volverían
a usar armas 1 ' (Alma 24:18). Eran tan fieles en el
cumplimiento de este convenio y de todos los
mandamientos, que se les conocía por ser
"completamente honrados y justos en todas las cosas"
(Alma 27:27).
Instrucciones
Colorea la figura de la página siguiente. Despega la
página de la revista y pégala sobre cartulina gruesa.
Relata la historia de los anti-nefidehitas valiéndote de
esta pintura así como de las Escrituras que se
mencionan.
Ideas p a r a el T i e m p o p a r a C o m p a r t i r
í. Defina lo que es la honradez- ¿Qué es una persona
honrada? Una persona honrada ama la verdad y la justicia;
es honrada en sus palabras así como en sus acciones; no
miente, roba ni hace trampas. Por medio de situaciones con
las que los niños estén mejor familiarizados, ayúdelos a
encontrar la mejor solución, y luego a dramatizar el incidente
que se vaya a analizar. Por ejemplo: (/) ¿Qué harías si
encontraras una billetera lirada? (2) ¿Qué harías si fueras a
la tienda a comprar algo y el dueño te diera cambio de más?
(3) ¿Qué harías si desde el patio de tu casa pudieras alcanzar
las manzanas del árbol de tu vecino?
Los anti-nefidehitas enseñaron a sus hijos a ser
honrados; deseaban que sus hijos e hijas fuesen fieles al
evangelio y justos en sus relaciones con los demás y con
nuestro Padre Celestial Debido al buen ejemplo de sus
padres, jos hijos deseaban ser tan honrados y fieles al
evangelio como ellos.
2. Analice con los niños la idea de que aprendemos desde
pequeños a ser honrados y a cumplir con las promesas que
hacemos. A medida que vamos creciendo, hacemos convenios
con nuestro Padre Celestial, tales como el del bautismo y los
del templo. Pida a los niños que mencionen algunas de las
promesas que hacen a su familia y amigos, y los convenios
que hacen con nuestro Padre Celestial. Hágales ver que
cumplir con las promesas que hagan les ayuda a prepararse
para guardar convenios sagrados.
En el Libro de Mormón se encuentra la descripción
de estos jóvenes: "Y todos ellos eran jóvenes, y
sumamente valientes en c u a n t o a intrepidez, y también
en c u a n t o a vigor y actividad; mas he aquí, esto no era
todo; eran hombres que en todo m o m e n t o se
mantenían fieles a cualquier cosa que les fuera
confiada" (Alma 53:20).
Estos jóvenes anti-nefidehitas llegaron a ser
conocidos como los "dos mil soldados jóvenes de
f lelamán".
3. Relciíeles cuentos de niños que a muy temprana edad
empezaron a decir la verdad y a vivir honradamente. (Vea.se
í Samuel 3 : / - 1 0 , 19-20; Alma 56: encabezamiento,
45-56; Daniel / : 3 - l 7 . ) C I
A causa de su honradez y fortaleza espiritual fueron
cié gran ayuda para su pueblo.
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Porque los anü-nej i-leiiiías sabían que no era bueno
pelear, enterraron sus armas de guerra e hicieron un convenio con
nuestro Padre Celestial de que "nunca más volverían a usar armas"
(Alma 24:18).
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