265128. . Segunda Sala. Sexta Época. Semanario Judicial de la Federación. Volumen CXXXIII, Tercera Parte, Pág. 72. MIELES INCRISTALIZABLES Y ASIMILADAS, IMPUESTO SOBRE. NO ES UN IMPUESTO ESPECIAL FEDERAL A LA PRODUCCION, A LA EXPLOTACION O A LA VENTA DE PRIMERA MANO, SINO QUE CONSTITUYE UN IMPUESTO DE CONTROL. No es exacto que el impuesto sobre mieles incristalizables y asimiladas, a que se refiere la fracción V del artículo 1o. de la Ley del Impuesto a las Industrias del Alcohol y Aguardiente, sea un impuesto especial federal, de los que señala la fracción VIII del artículo 18 de la Ley Federal del Impuesto sobre Ingresos Mercantiles, esto es, a la producción, a la explotación o a la venta de primera mano de las expresadas mieles, sino que constituye un impuesto de los denominados "de control", instituido para evitar la elaboración clandestina de alcohol y aguardiente. Efectivamente, el impuesto sobre mieles incristalizables y asimiladas se causa, tratándose de ingenios azucareros, cuando éstos no pueden justificar la pérdida o desaparición de mieles incristalizables del total que debieron obtener, hechas las deducciones que autoriza el artículo 7o., fracción I, apartado B, de la ley de la materia, como producto residual de la fabricación de azúcar, de acuerdo con las cantidades señaladas en el artículo 79 de la misma ley. Los productores de azúcar que obtienen como residuos mieles incristalizables, pueden conservarlas, destruirlas, enajenarlas o explotarlas, siempre y cuando cualquiera de esas operaciones las efectúen satisfaciendo los requisitos que al efecto establece la ley de la materia; pero si realizan tales operaciones sin cumplir con dichos requisitos y, por lo mismo, no justifican los faltantes de las mieles incristalizables o asimiladas, estos faltantes causarán el impuesto de control conforme al artículo 7o., y la tarifa señalada en el artículo 15 de la misma ley. De lo anterior se sigue que el impuesto de que se trata, no se genera por la producción de las mieles, ni porque sean transferidas, enajenadas o destinadas a usos diferentes, previos los requisitos que establece la ley, ni por aquéllas que son destruidas o perdidas, si la destrucción o pérdida se comprueba a satisfacción de la Secretaría de Hacienda; tampoco por las mermas derivadas de su manejo, de sus almacenamientos o rectificaciones, ni sobre las conservadas por el fabricante de azúcar al terminar la zafra, y menos aún se genera por las exportaciones de mieles, si dichas exportaciones se efectúan de acuerdo con lo dispuesto por la ley de la materia y su reglamento. El impuesto sobre mieles incristalizables y asimiladas tiene por objeto el que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público controle el destino que se da a las citadas mieles, evitando de esta forma que con ellas se elaboren productos alcohólicos de manera clandestina o bien se practiquen algunas de las operaciones a que alude el artículo 7o. de la ley de la materia, sin la autorización previa de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Por otro lado, el impuesto de control sobre mieles incristalizables y asimiladas no es un impuesto a la explotación, ya que en ninguno de los preceptos de la ley de la materia se establece que la explotación o beneficio de las repetidas mieles cause impuesto alguno a cargo de las personas que realicen esa explotación, sea cual fuere el uso a que se les destine. Finalmente, el impuesto de que se trata tampoco puede quedar comprendido dentro de aquellos que gravan la venta de primera mano, toda vez que en la ley de la materia no se grava en ninguna forma la primera enajenación de mieles incristalizables, sino tan sólo el faltante de ellas, en los términos de los artículos 7o. y 9o. del ordenamiento antes indicado. Amparo en revisión 6327/67. Ingenio de Mahuixtlán, S. de R. L. de C. V. 25 de julio de 1968. Unanimidad de cuatro votos. Ponente: Jorge Iñárritu. Sexta Epoca, Tercera Parte: Volumen CXXXII, página 61. Amparo en revisión 3628/66. Ingenio Quesería, S. A. 6 de -1- 265128. . Segunda Sala. Sexta Época. Semanario Judicial de la Federación. Volumen CXXXIII, Tercera Parte, Pág. 72. junio de 1968. Cinco votos. Ponente: Pedro Guerrero Martínez. Volumen CXXX, página 56. Revisión fiscal 90/67. Ingenio La Margarita, S. A. 5 de abril de 1968. Cinco votos. Ponente: Jorge Iñárritu. -2-