MOCIÓN SOBRE DERECHOS HUMANOS Desde siempre hemos luchado en Aebu por la ampliación y defensa de todos los derechos. Nuestra concepción amplia del Estado y la democracia nos lleva a sostener que, cuanto más derechos se reconocen y amplían, más sólidas se vuelven las instituciones. Por ello seguiremos bregando por una sociedad y un Estado que rechacen y combatan discriminaciones de cualquier orden. La condición de la mujer trabajadora; las asimetrías salariales por raza profesión u oficio; el respeto de los derechos de los trabajadores y una seguridad social abarcativa y solidaria constituyen nuestras primeras preocupaciones. También nos sensibiliza la situación de la minoridad en el seno de la sociedad problematizada contemporánea. Los niños y jóvenes agredidos son muestra de una sociedad insegura que tiende a reproducir este flagelo. Por ello trabajamos en la construcción de una sociedad inclusiva e integradora que tienda a eliminar las prácticas violentas. Consecuentes con estas posturas, enfrentamos desde siempre toda forma de injusticia y autoritarismo. Hoy, con sus cambios coyunturales, la pelea sigue siendo la misma: o el Estado democrático se autoafirma o retrocedemos hacia el miedo y la intolerancia. Cuando los derechos se mutilan todos estamos en peligro y por ello la sociedad debe apoyarse en su memoria para poder avanzar y debemos asumir como Estado las secuelas del autoritarismo pasado Son estas las razones de nuestra lucha por la libertad de los presos políticos, contra la tortura y el asesinato y por la amnistía general e irrestricta. Es por ello que, cada 20 de mayo, Aebu ha dicho presente por verdad, justicia, memoria y nunca más. Hoy, en medio de un gran despliegue jurídico y mediático, se nos quiere conducir a debates técnicos sobre preceptos éticos fundamentales. Se pretende presentar las violaciones flagrantes de nuestros derechos por el terrorismo de Estado como una discusión académica. Nuestra respuesta es simple: los delitos de lesa humanidad no prescriben. Nuestro Estado de Derecho debe reconocer la agresión del Estado terrorista, tal cual afirma la ONU y como lo dispuso últimamente el fallo de la Corte Interamericana de DDHH. Siguiendo este fallo imperativo para nuestro orden jurídico, se debe pedir disculpas públicas a la sociedad toda, se debe reparar a las víctimas directas e indirectas de la violencia y garantizar el verdadero nunca más por todas las vías. Esta condena no admite dudas ni pretextos que intenten cumplir formalmente con el fallo sin respetarlo en sus contenidos, ni tampoco es pasible de acatamientos parciales. Por ello, todo el movimiento popular —con nuestro PIT CNT en primera fila— seguirá trabajando por el futuro y por la paz. Seguiremos estando del lado de la integración de los uruguayos, del lado de la memoria y por una sociedad justa y solidaria. De acuerdo con estas consideraciones SE RESUELVE: 1) Continuar bregando en todo momento por verdad, justicia, memoria y nunca más. 2) Reclamar el cumplimiento del fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en todos sus términos. 3) Mantenerse en estado de alerta ante cualquier intento de frenar los pronunciamientos del Poder Ejecutivo y la Suprema Corte de Justicia en este sentido. 4) Continuar con nuestra línea de participación coordinada desde el PIT-CNT, junto al pueblo todo. ¡Verdad, justicia, memoria y nunca más!