Migración bilateral de catéter ventriculoperitoneal abolsa escrotal L. F. Porras Estrada; 1. Fernández Portales; J. M. Cabezudo Artero; J. A. Rodríguez-Sánchez; L. Lorenzana Honrado y Fernández Vigo* Servicio de Neurocirugía y Cátedra de Oftalmología*. Hospital Clínico Universitario Infanta Cristina. Badajoz. Resumen the case of bilateral and sequential migration of the peritoneal catheter to scrotum in a 6-month-old infant. Complications related to the peritoneal catheter are reviewed and the ethiology and management of this complication are outlined. A partir del desarrollo técnico de los sistemas valvulares en la década de los 50, comienza a tratarse la hidrocefalia mediante el uso de derivaciones ventrículoatriales (VA) Y posteriormente ventrículo-peritoneales (VP) siendo estas últimas las más frecuentemente utili- el 20/11/2016. KEY WüRDS: Complication. HydroDocumento descargado de http://www.revistaneurocirugia.com Copia para usoCatheter personal, semigration. prohíbe la transmisión de este documento por cualquier m zadas. Si bien se trata de formas de tratamiento eficacele. Hydrocephalus. Processus vaginales. Scrotum. Vences y bien toleradas no están exentas de complicaciones. triculoperitoneal shunt. Se presenta un caso de complicación de válvula VP Introducción por migración del extremo abdominal a las bolsas esLa primera derivación ventriculoperitoneal se atribuye crotales de forma secuencial. Los autores citan las dia Kausch'o y fue realizada en 1908. El resurgir del trataversas complicaciones del extremo abdominal de las miento de la hidrocefalia mediante la colocación de deriválvulas y en particular la asociación a hernia inguinal vaciones a peritoneo se atribuye a Cone'o, si bien su amcon o sin hidrocele. Tras exponer las diferentes hipóteplia difusión se deben a Ames y Pudenz". Es la técnica sis sugeridas en esta asociación, se resaltan ciertos asquirúrgica más utilizada para el tratamiento de la hidrocepectos clínicos-diagnósticos y puntualizan algunas confalia por la rapidez y sencillez en la técnica quirúrgica así sideraciones sobre el tratamiento quirúrgico de esta como por la menor frecuencia y gravedad de las complicacomplicación. ciones en comparación a las válvulas ventrículo-atriales 'o . Para los autores la existencia de un hidrocele en un niño portador de válvula VP debe de plantearnos coCaso clínico mo diagnóstico diferencial la migración del catéter a la Paciente varón de 6 meses de edad con hidrocefalia bolsa escrotal. congénita debida a estenosis del Acueducto de Silvio, intervenido al nacer mediante colocación de válvula ventriPALABRAS CLAVE: Complicación. Derivación ventrículoperitoneal, que acude a consulta al haber notado sus culo-peritoneal. Escroto. Hidrocefalia. Hidrocele. Migrapadres un aumento considerable del volumen en el testícución valvular. Proceso vaginal. lo derecho. Dos meses antes había acudido por el mismo motivo habiéndose descartado mediante exploración c1íniBilateral scrotal migration of a ventriculoperitocaa y radiológica la presencia de la válvula en la bolsa esneal shunt erotal. A la exploración el niño presenta un buen aspecto general, desarrollo psicomotor correspondiente a su edad, fontanela aún palpable con tamaño y aspecto normales. Summary Perímetro cefálico de 47,5 cm. No reunía signos de hiperAfter shunts hardware was developed around 1950, tensión intracraneal. Se aprecia una bolsa escrotal derecha the standard treatment for hydrocephalus has been the de tamaño aumentado que sugiere la presencia de conteniplacement of a ventriculoatrial or ventriculoperitoneal do líquido y por transiluminación-palpación la presencia shunt. Ventriculoperitoneal (VP) shunt is the prefede una formación tubular que llega hasta el fondo de saco rred procedure today. Although it is a safe and well toescrotal identificándose claramente como catéter. La ralerated method, many complications of VP shunting diografía confirma el diagnóstico de malposición del exhave been described in the literature. We are reporting tremo peritoneal de la válvula (Figura 1). El niño fue intervenido realizándose hemiorrafia con reintegro del exNeurocirugía 1999; 10: 164-170. tremo del catéter a cavidad abdominal. Cinco meses más 164 Migración bilateral de catéter ventriculoperitoneal a bolsa escrotal Neurocirugía Algunas series han referido una alta incidencia de hernia inguinal e hidrocele, en niños tratados mediante colocación de válvula ventrículo-peritoneap·11. Así, Grosfeldl 1 en una serie de 185 niños con hidrocefalia tratados mediante válvula VP tiene una asociación a hernia inguinal en 31 casos (16,8%). En cambio, Bosch y cols. 1 en una revisión de 548 derivaciones ventriculoperitoneales realizadas en la edad pediátrica, encuentran 31 complicaciones relacionadas con el catéter distal y de ellas asociadas a hernia inguinal sólo 4 casos (0,7%). Estas cifras son demasiado dispares y quizás la explicación sea debida a que los casos referidos por Grosfeld son niños intervenidos con una edad media de 1,5 meses, edad en la que aún permanece permeable el proceso vaginal en un alto porcentaje de casos. Mecanismo de producción Documento descargado de http://www.revistaneurocirugia.com el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier m Fig. 1.- Rx simple de abdomen en que se aprecia ocupación escrotal por el extremo del catéter peritonea!. tarde acude de nuevo a consulta, esta vez por un hidrocele izquierdo, detectándose el extremo valvular en dicha bolsa escrotal. Se practica herniorrafia con reintegro valvular a abdomen. La evolución posterior fue satisfactoria. Discusión Excluyendo las complicaciones fundamentales de toda válvula, infección y obstrucción, en las de tipo VP se han descrito múltiples complicaciones asociadas al extremo peritoneal tales como formación de pseudoquistes abdominales··6.18 , perforación de viscera hueca l,17,23,16, vólvulo intestina l14 , migraciones a parénquima hepátic0 19 , a cavidad torácica9.14,17, a bolsa escrotal I3 ,11.11.31, extrusiones 1.3.5.1 1.19.15.30, ascitis 18.31.33 etc.... La presencia del extremo distal de una válvula en el escroto supone la persistencia del proceso vaginal en comunicación con la cavidad abdominal. El proceso vaginal permanece permeable en el 80% de los recién nacidos y a los dos años de edad aún persiste aproximadamente en el 50% de los niñosl 6. 166 Para explicar esta asociación se ha postulado que el drenaje continuo de LCR en cavidad abdominal podría exceder a la capacidad de su reabsorción en determinadas circunstancias1.18,18J1J\ y que la existencia de presiones intraabdominales altas podría inducir una disminución en la resistencia de la capa vagina16.11.I3,18. En una revisión de la literatura médica nos llama la atención que en aquellos casos en los que se desalTolló como complicación una ascitis lo que se supone un acúmulo importante de líquido abdominal y de aumento de la presión intraabdominal, no se describe la asociación de hernia inguinal en ninguno de estos casos1.7,15,18.18,JI.31. Kwok y cols. 13 opinan que ante persistencia de un proceso vaginal no obliterado y de otro lado la presecia de un catéter valvular móvil, se produce un efecto de flujo «tipo embudo» que tiende a dirigir la punta del catéter hacia el canal inguinal, y facilitar así la migración a escroto. Diagnóstico El diagnóstico es simple y creemos importante resaltar el valor de un método tan sencillo, no invasivo y de fácil ejecución como esla transiluminación para realizar el diagnóstico «de visu» e inmediato de la migración del catéter, el cual es fácilmente palpable. La radiografía aparte de confirmar el diagnóstico nos indicaría la existencia o no de una posible desconexión de catéter distal. En niños portadores de válvula VP la presencia de un hidrocele debe de plantearnos este diagnóstico diferencial. Tratamiento El tratamiento es quirúrgico. Deben evitarse maniobras quirúrgicas encaminadas a extraer la válvula del escroto y acortarla desde el punto de entrada en la zona abdominal ya que no han dado resultados satisfactorios, bien por persistencia del hidrocele o por recidiva de la extrusión a los pocos días ya que con este proceder no se re- Migración bilateral de catéter ventriculoperitoneal a bolsa escrotal Neurocirugía neal: Aportación de un caso y revisión de la literatura. An Esp. Pediatr. 1988; 28: 565-568. 16. Nelson, W.E., Vaughan, V.e., McKay, RJ.: Peritoneo y órganos anexos. En: Tratado de Pediatría. Barcelona, Salvat, 1971, ed. Sexta, Vo!' II, pp. 837-843. 17. Oi, S., Shose, Y., Asano, N., Oshio, T., Matsumoto, S.: Intragastric migration of a ventriculoperitoneal shunt catBibliografía heter. Neurosurgery 1987; 21: 255-257. 18. Parry, S.W., Schuhmacher, J.F, Llewellyn, Re.: Ab1. 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Wong, C.W.: Scrotal migration of a ventriculo-peritodez, R, Salazar, F, Taracena, B.: Ascitis por líquido cefaloneal shunt: report of a case. J Formos Med Assoc 1994; 93: rraquídeo como complicación en derivación ventriculoperito64-641. suelve el cierre inguinaF'·32. El tratamiento definitivo consiste en la herniorrafia e integración del extremo valvular a la cavidad peritoneal'2.13.21.22.32. Caso de existir hernia bilateral se realizará el cierre de ambas ya que es posible la recidiva de la extrusión en el lado opuesto como ocurrió en nuestro caso. 168 Migración bilateral de catéter ventriculoperitoneal a bolsa escrotal 33. Yount, R.A., Glazier, M.C., Mealey, J.K, Kalsbeck, J.E.: Cerebrospinal fluid ascites complicating ventriculoperitoneal shunting. J Neurosurg 1984; 61: 180-183. Comentarios al trabajo de Luis F. Porras Estrada y coautores: «Migración bilateral de catéter ventriculoperitoneal a bolsa escrotal» Neurocirugía Porras Estrada, L.F.; Fernández Portales, l.; Cabezudo Artero, J.M.; Rodríguez-Sánchez, J.A.; Lorenzana Honrado, L.; Fernández Vigo: Migración bilateral de catéter ventriculoperitoneal a bolsa escrotal. Neurocirugía 1999; 10: 164-17(3. ron hernia inguinal, en contraste con sólo 3 de 242 (1,2%) operados mediante derivación ventriculoatrial que presentaron esta complicación (P<O.OOl)'. El intervalo desde la colocación de la válvula al desarrollo de la hernia inguinal fue de 6,8 meses'. Existe una predisposición anatómica Los autores describen el caso de un niño, operado de para el desarrollo de la hernia inguinal tras DVP en varorecién nacido de hidrocefalia por estenosis del acueducto nes, 26 pacientes fueron niños y 5 niñas'. Naturalmente, de Silvio mediante derivación ventriculoperitoneal (DVP), que presentó a los 6 meses salida del catéter peritoneal a tanto el hidrocele como la migración del catéter al escroto bolsa escrotal derecha, y 5 meses más tarde a bolsa escroson exclusivos del varón. La radiografía de abdomen mostal izquierda, que requirieron tratamiento quirúrgico. Auntró el catéter dentro del escroto en 6/31 casos'. Otros facDocumento descargado de http://www.revistaneurocirugia.com el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier m que esta complicación tores que podrían contribuir a la patogenia de estas comha sido descrita previamente en la plicaciones podrían ser la menor superficie peritoneal en literatura, no está de más recordar a los lectores sus impliniños, capacidad de reabsorción del peritoneo disminuida, caciones clínicas. Ramani 3 describió un niño con un catéalteraciones del LCR (infección, hiperproteinorraquia), ter peritoneal enrollado dentro del escroto, sin hidrocele. Villarejo y colaboradores 4 documentaron un niño de 4 aumento de presión intraperitoneal (obesidad, paresia intestinal en casos de mielomeningocele), etc.... Aparte de años con hidrocele comunicante a los cuatro días de colocarle una DVP por hidrocefalia asociada a un meduloblasla tumefacción escrotal y molestias locales, la salida de toma, en la que parece ser la primera descripción de esta LCR y/o del catéter al escroto no suele provocar síntomas complicación en la literatura en lengua castellana. La pade disfunción de la válvula. El diagnóstico clínico y radiológico suelen ser fáciles. La reparación quirúrgica de la togenia de estas complicaciones parece estar en relación con dos factores: 1) la persistencia del conducto peritohernia debe de acometerse precozmente, sobre todo si hay salida del catéter al escroto, para evitar lesiones por preneo-vaginal, permeable en casi todos los recién nacidos y sión de las estructuras de la bolsa escrotal, y la posibilidad que se oblitera alrededor del primer mes de vida en un alto teórica de ulceración cutánea y salida al exterior del catéporcentaje de casos 5, y 2) con la presencia del LCR en la ter por la piel de la bolsa escrotal. Hasta ahora no se han cavidad peritoneal que favorecería la persistencia de dicho descrito medidas de prevención de estas complicaciones. conducto más allá de lo normal, bien por un aumento de la presión abdominal, o por un aumento del volumen de líBibliografía quido intra-abdominal que tendería a abrirse camino hacia 1. Bosch, l, Poch, J.M., Moraga, F.A., Terradas, P., Ruun lugar de menor resistencia. bio, E.: Complicaciones abdominales en la edad pediátrica de Las complicaciones que se pueden presentar en niños las derivaciones ventrículo-peritoneales. Neurocirugía 1990; portadores de DVP con persistencia del conducto perito1: 293-296. neo-vaginal son esencialmente tres: 1) hernia inguinal, 2. Grosfeld, J.L., Cooney, D.R., Smith, l, Campbell, que supone la salida de vísceras huecas por el conducto R.L.: Intra-abdominal complications following ventriculoherniario, 2) hidrocele comunicante, que implica el acúperitoneal shunt procedures. Pediatrics 1976; 54: 791-796. mulo de líquido en la capa vaginal del escroto, en comuni3. Ramani, P.S.: Extrusion of abdominal catheter of vencación libre con la cavidad peritoneal, y 3) la salida del tricu10peritoneal shunt into hte scrotum. l Neurosurg. 1974; propio catéter peritoneal a la cavidad vaginal de la bolsa 40: 772-773. escrotal. La incidencia de hernia inguinal en operaciones 4. Villarejo, F., Bordes, M., Cuadros, J.: Hidrocele comude DVP fue del 0,75% (4 de 548 casos) para Bosch y conicante: posible complicación de las derivaciones ventriculoautores2, mientras que para Grosfeld y colaboradores' esta peritoneales. Rev. Oto-Neuro-Oftalm. 1977; 35: 39-41. incidencia fue de 16,8% (31 de 185). La diferencia entre 5. Weyrauch, H.M.: Hidrocele. En Davis L (ed) Cristopestas dos cifras2.3 parece estar en relación con la edad de her Tratado de Patología Quirúrgica. México; Interamericalos pacientes incluidos en ambas series: a menor edad mana, 1965; pp. 779-781. yor probabilidad de que el conducto peritoneo-vaginal esté abierto. La relación causal de la hernia inguinal con la Juan F. Martínez-Lage, DVP en estos casos parece un hecho demostrado, ya que Neurocirugía Pediátrica. Servicio Regional de Neurocirugía. Hospital Universitario «Virgen de la Arrixaca». Murcia. 31 de 185 (16,8%) niños tratados mediante DVP presenta170