Validación metodológica para la determinación de sedimentos

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Resumen: B-048
UNIVERSIDAD NACIONAL DEL NORDEST E
Comunicaciones Científicas y Tecnológicas 2006
Validación metodológica para la determinación de sedimentos
suspendidos en ríos aluviales.
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Sartirana, Marta C. - Suárez, Paola A. - Gómez, Edgardo E. - Orfeo, Oscar
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1. Asignatura Geología (FACENA-UNNE)
2. CECOAL (CONICET) y FACENA (UNNE)
Casilla de Correo 291 – 3400 Corrientes – Argentina
E.Mail: [email protected]
Antecedentes
De todos los sedimentos que transporta un río, los que se trasladan suspendidos en el agua son cuantitativamente los más
importantes y su determinación resulta un aspecto central en cualquier investigación sobre el tema, a fin de evitar errores en
los cálculos y gruesas distorsiones en la interpretación ambiental.
Estos materiales finos no solo provienen de las áreas de cabeceras, sino que son incorporados a través de toda la red de
escurrimiento, debido tanto a procesos naturales como inducidos por actividad antrópica. Aunque no necesariamente reviste
carácter espectacular, la descarga de sólidos suspendidos siempre es significativa por su constante presencia en cursos
aluviales, ameritando especial atención en su estudio.
Por sus implicancias físicas, químicas y biológicas, el registro de la concentración de sedimentos suspendidos en el agua
tiene uso generalizado. Con todo, no se reconoce un patrón único de procesamiento de muestras con este fin, aunque es
posible identificar tendencias globales en los procedimientos de laboratorio. Habitualmente se emplean con distinto éxito
dos técnicas clásicas para obtener este dato: evaporación y filtración (Carvalho, 1994; Colby, 1967; Guy y Norman, 1970).
El objeto de este trabajo consiste en realizar un análisis comparativo entre ambos métodos buscando obtener resultados de
óptima calidad, que resulten confiables y comparables independientemente de la fuente analítica.
Materiales y Métodos
Las muestras empleadas en este trabajo fueron extraídas en un tramo del río Bermejo comprendido entre la localidad de
Puerto Lavalle (prov. de Formosa) y su desembocadura en el río Paraguay. Se utilizó un captador instantáneo de
sedimentos para realizar extracciones a diferentes profundidades del cauce, obteniendo en total 24 muestras en el mes
de febrero de 2006. Cada una de ellas fue dividida en partes iguales para realizar las determinaciones de laboratorio que
se describen a continuación:
1) La técnica de la evaporación consistió en concentrar por acción del calor la fase líquida de cada muestra, hasta obtener el
residuo seco que componen los sólidos suspendidos (y disueltos) totales, observando el siguiente procedimiento:
1a) Tratamiento de la muestra completa:
Reposo de la muestra hasta decantación del material sólido
Extracción del agua sobrenadante con bomba de vacío
Medición del volumen de agua extraído
Secado completo del material sólido mediante baños termostáticos
Pesado del residuo seco
1b) Determinación de sólidos disueltos:
Separación de una alícuota del agua extraída en 1a)
Medición volumétrica de la alícuota
Trasvasamiento de la alícuota a cápsula previamente tarada
Calentamiento en baño termostático hasta evaporación total
Pesado del residuo seco y cálculo de la cantidad de sólidos disueltos
1c) Cálculos
El peso del residuo seco descontando el peso de los sólidos disueltos, brindó la cantidad de material suspendido en el
volumen considerado. La relación entre el volumen evaporado y 1.000 ml determinó la concentración de sedimentos
suspendidos expresada en miligramos por litro (mg L-1).
2) La técnica del filtrado consistió en inducir la circulación de la muestra a través de un filtro de membrana (mezcla de
ésteres de celulosa puros y biológicamente inertes) de 0,45 µm de porosidad para permitir exclusivamente el paso de la fase
líquida, observando el procedimiento que sigue:
2a) Tratamiento de la muestra:
Tara de filtros previamente deshidratados en estufa
Filtrado de un volumen conocido de muestra previamente homogeneizada en forma mecánica.
Deshidratación de los filtros en estufa.
Pesado de filtros en balanza de precisión
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2b) Cálculos:
La diferencia entre peso inicial y final de los filtros, brindó la cantidad de material suspendido en el volumen
considerado. La relación entre el volumen filtrado y 1.000 ml determinó la concentración de sedimentos suspendidos
expresada en miligramos por litro (mg L-1).
Como medida de control adicional, se midió la turbidez de las muestras originales a fin de identificar potenciales
valores anómalos en los resultados obtenidos por gravimetría. Para ello se utilizó un turbídímetro nefelométrico de
laboratorio que expresa los valores en Unidades Nefelométricas de Turbidez (NTU).
Discusión de resultados
El uso del método basado en la evaporación se vincula con la sencillez del instrumental requerido, la escasa demanda de
control durante el procesamiento y la retención de todas las fracciones detríticas presentes en la muestra. La precisión de esta
técnica aumenta con la cantidad de partículas suspendidas. Entre sus desventajas, además de resultar comparativamente
lento en relación al método del filtrado, se destaca la precipitación de compuestos disueltos, los cuales deben ser ponderados
y deducidos del peso obtenido de material detrítico para alcanzar resultados precisos.
Para llevar a cabo la técnica del filtrado la mayoría de los especialistas dedicados al análisis de agua acepta que el límite
entre la fase disuelta y particulada en una suspensión es igual a 0,45 µm. En consecuencia el empleo de filtros con dicho
tamaño de poro resulta un medio adecuado para la retención de sólidos suspendidos totales, sin interferencia de la fase
disuelta. El tiempo demandado por este análisis es variable ya que se relaciona con la cantidad de partículas presentes, su
tamaño y el volumen filtrado. No presenta limitaciones insalvables para procesar muestras con bajas concentraciones, en
cambio cuando éstas son demasiado elevadas o presentan abundantes partículas muy finas (arcillas), el filtrado se retarda
excesivamente por sobreobturación de poros. Dicho inconveniente se minimiza reduciendo el volumen de muestra mediante
la obtención de una alícuota representativa.
En la Fig.1 se aprecia la concentración de sedimentos suspendidos de las muestras analizadas, empleando las técnicas
analíticas descriptas con anterioridad. Estos resultados resultan concordantes entre si y acompañan las variaciones
registradas en la turbidez del agua, por lo que pueden asumirse como válidos los datos obtenidos. Lo dicho implica que con
las concentraciones empleadas en esta experiencia los métodos utilizados pueden considerarse igualmente válidos.
Turbidez (NTU)
CC5
CC3
CC1
PV5
PV3
PV1
EC5
EC3
EC1
PL5
2500
2300
2100
1900
1700
1500
1300
PL3
30000
25000
20000
15000
10000
5000
0
PL1
Concentración
(mg/l)
Comparación entre métodos
Lugar de muestreo
Filtrado
Evaporación
NTU
Fig.1 Concentración de sedimentos suspendidos y turbidez de las muestras analizadas
Las mediciones de turbidez de las muestras de agua permitieron su correlación con la concentración de sedimentos
suspendidos y descartar la interferencia de datos que puedan ser considerados erráticos, tal como puede apreciarse en
las Figuras 2 y 3.
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Relación general
3000
Turbidez (NTU)
2500
2000
1500
1000
500
0
0
5000
10000
15000
20000
25000
Concentración por filtrado (mg / l)
Fig. 2 Relación entre turbidez y concentración de sedimentos suspendidos obtenidos por el método del filtrado.
Relación General
Turbidez (NTU)
3000
2500
2000
1500
1000
500
0
0
5000
10000
15000
20000
25000
Concentración por evaporación (m g/l)
Fig. 3. Relación entre turbidez y concentración de sedimentos suspendidos obtenidos por el método de la evaporación.
La escasa dispersión de los valores graficados permite asumir una aceptable confiabilidad en los resultados obtenidos.
Conclusiones
Con los datos alcanzados se calculó una concentración media de sedimentos suspendidos en el río Bermejo igual a 8 g/l,
la cual resulta comparable con los antecedentes del tramo considerado en igual período del año (Orfeo, 1999).
Para dichos valores de concentración los métodos de cálculo basados en el filtrado y en la evaporación de muestras son
comparables y ambas técnicas pueden ser usadas indistintamente sin detrimento de la calidad de la información.
Esta validación metodológica debería ser revisada en condiciones diferentes a las que aquí se presentan. En este sentido,
valores de concentración de sedimentos suspendidos superiores a los empleados en esta comparación, confirmaría el
uso indistinto de ambos métodos. En cambio valores inferiores de concentración, es decir comparables a los registrados
en la mayoría de los ríos y arroyos del nordeste argentino (Orfeo, 1986), aconsejaría el uso del método del filtrado para
evitar el error intrínseco que el método de la evaporación introduce con bajas concentraciones de sedimentos.
Bibliografía
Carvalho, N.O., 1994. Hidrossedimentología Prática. CPRM – ELECTROBRAS, Rio de Janeiro, 372 pp.
Colby, B.R. (1967) Fluvial sediments. A summary of source, transportation, deposition and measurement of sediment discharge. U.
S. Geological Survey, Bulletin 1181 A, 47 pp.
Guy, H and Norman, V. (1970) Field methods for measurement of fluvial sediments. U.S.Geological Survey, Techniques of water
resources investigations, Chapter C2, 59 pp.
Orfeo, O., 1986. Estudio sedimentológico de ambientes fluviales del Chaco del Chaco Oriental. Revista Ambiente Subtropical, 1: 6072.
Orfeo, O., 1999. Sedimentological characteristics of small rivers with loessic headwaters in the Chaco, South America. Quaternary
International, 62: 69-74.
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