COMENTARIO DE TEXTO. Las colectivizaciones en el bajo Aragón. Título: Las colectivizaciones en el bajo Aragón. Naturaleza del texto: Texto de carácter socio-político. Fuente: Secundaria. Cronología: 2005. Temática: Historia política y social. Autor: H. Tomas. Destinatario/ Finalidad: la comunidad científica. Dar a conocer el proceso de colectivización en el bajo Aragón. Contexto Histórico. Entre Julio y Septiembre de 1936, el Estado republicano fue incapaz de controlar su propio territorio, debido a la sublevación misma y a la presencia de poderes locales revolucionarios desde el principio de la rebelión. En la zona republicana se puso en marcha una revolución espontánea liderada fundamentalmente por los sindicatos UGT y la CNT, por medio de Comités, Juntas o Consejos. El Comité de Milicias Antifascistas, dirigido por la CNT y creado en Cataluña impulsará un proceso de revolución social durante la guerra que proponía cambiar el sistema de propiedad y destruir el Estado. Este proceso revolucionario también se extendió en otras zonas de la España republicana ( Valencia, Asturias) pero sobre todo en Aragón y Cataluña. Entre Agosto y Septiembre de 1936 empezó el proceso de colectivización, espontánea en algunos casos, y en otros impuesto por las columnas anarquistas desde Cataluña. Se colectivizaron aquellas tierras que habían sido abandonadas por sus propietarios o habían sido incautadas por los revolucionarios a quienes consideraban burgueses reaccionarios. Unas 150.000 personas de diversas localidades se agrupan en estas colectividades y estas a su vez en federaciones comarcales ( Alcañiz, Alcorisa, Caspe...). El órgano que coordinaba a todas las federaciones comarcales era el Consejo de Aragón creado en 1936. Su sede se situó en Fraga y después en Caspe. La composición y funcionamiento del Consejo se decidió en una reunión de la CNT en Alcañiz, y se nombró presidente del Consejo Joaquín Ascaso. Para conseguir la legalización del Consejo de Aragón dentro de la II República, se presentó un documento al presidente del Gobierno, Largo Caballero. En Diciembre de 1936 se legalizó y en Enero del 1937 se nombró a Joaquín Ascaso representante político de la República en Aragón. ANÁLISIS DEL TEXTO. El texto analiza el proceso de uno de los hecho más importantes ocurridos en el Aragón republicano en la Guerra Civil, que fue la experiencia anarquista de la colectivización de la tierra en el bajo Aragón; esto significaba: incautarla trabajarla en común y distribuir el producto en partes iguales. Fue una realización concreta de la ideología anarquista, donde no existía la propiedad privada, ni las clases sociales, ni el Estado, primando los criterios de autogestión. A través del texto se dan a conocer como se llevaban a cabo el proceso de reparto de alimentos entre las familias que componían la colectividad y como se funcionaba en ese modelo de autogestión ( alquileres, servicios gratuitos), con la abolición del dinero, aunque luego fue sustituido por vales o bonos, o reapareció con el pago de un “ salario normal” o en algunas colectividades se emitieron moneda propia como la de Hijar ( Teruel). La conquista del poder por los trabajadores, de lo que habla el texto, es una de las experiencias más novedosas que se pusieron en marcha en la zona del Frente Popular. Hacer la guerra y la revolución simultáneamente se convirtió en el programa de la CNT, la FAI, el POUM y algunos sectores de la UGT, y la mayoría de los experimentos revolucionarios y anarquistas, sobretodo las colectivizaciones se llevaran a cabo especialmente en el bajo Aragón a la que pertenece el texto. Las actuaciones de estas colectividades no solo fue económica, sino también actividades sanitarias, educativas, sociales... Ante el signo de los acontecimientos posteriores- enfrentamiento y ruptura entre la CNT y el POUM por un lado y PSOE y el Partido Comunista en Mayo de 1937 con la consiguiente caída del gobierno de Largo Caballero. El nombramiento de Juan Negrín ( Mayo del 1937 hasta Febrero del 1939) que formó gobierno solo con los partidos políticos, traerá consigo la disolución del Consejo de Aragón en agosto del 1937, ya que ante la evolución de la guerra, pretendía la centralización del poder republicano, por tanto se restringieron las colectivizaciones y se redujo el poder obrero. Adoptó una economía de guerra, regulando la producción agrícola a partir de las tierras colectivizadas para garantizar el abastecimiento de las ciudades. VALORACIÓN. Resulta contradictorio que la sublevación militar, que supuestamente pretendía evitar la revolución, lo que hizo en realidad fue provocarla. El proceso de colectivización de tierras en el bajo Aragón va a ser un hecho novedoso e irrepetible en nuestra historia. Esta experiencia será acogida de buen grado por los grupos de jornaleros y propietarios muy pobres, mientras que los grupos más acomodados debieron asumirla por la fuerza, por lo tanto el problema de la tierra y sus soluciones, no satisfizo a todos los implicados, y no debe olvidar los enfrentamientos entre jornaleros y propietarios a lo largo del período republicano y la difícil solución al conflicto. Estas colectivizaciones agrarias son plasmación del ideario anarquista fundamentalmente, en un momento crucial que es la guerra civil, y por lo tanto consideran que es la oportunidad para hacer la revolución, aunque se desconoce que tuvieran una buena planificación real para hacer efectiva la destrucción del Estado, la propiedad y el cambio de toda la sociedad española.