nuevo orden social - Juventud Masculina de Schoenstatt en Chile

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RETIRO SEMANA SANTA 2003. “Hermanos en la cruz, seguros de tu victoria”
María, respuesta para el tiempo actual
1. Introducción:
-Ante el análisis difícil del tiempo no hay que perder de vista lo que estamos celebrando:
Muerte y victoria de Cristo en la resurrección. Después de la cruz siempre hay
resurrección e incluso en la cruz misma hay victoria.
-La vocación de María es ser la compañera y colaboradora de Cristo en toda la obra de la
redención: por esto Ella tira del carro de victoria de su Hijo y se compromete con la
redención a lo largo de los siglos. María no sólo es la que acoge, Ella quiere una
transformación del mundo para que tenga el rostro de su Hijo.( Es interesante releer bajo
esa óptica el Magnificat, palabras que son de María Lc 1, 47-55)
2. Intento de análisis de la realidad actual:
-Vivimos en un mundo que está en llamas: La antigua civilización va cayendo y nace algo
nuevo. El mecanicismo1 reina y nosotros lo percibimos sólo en los síntomas de éste
(realidad en Chile y el mundo)
Algunos ejemplos: Las Torres gemelas y el 11 de sept., Guerras en Afganistán, Irak
(¿Término de la ONU, nuevo orden mundial?) Son sólo pequeñas expresiones de lo que
estamos viviendo.
El cambio fundamental en la vida del hombre se está jugando en el modo de relacionarse
(con respecto a Dios lo vemos en la ‘campaña anti-iglesia’, con los demás se expresa en la
situación de la familia, en el individualismo creciente, etc’, En lo personal vemos una crisis
en la idea de la misión personal del varón y la mujer’, con respecto al trabajo es evidente
que se vive una creciente ‘despersonalización’):
“Estamos en medio de un profundo cambio cultural, que nos trasciende como país.
Cambios que plantean desafíos éticos muy vitales a la familia, a la vocación y misión del
varón y la mujer, a la manera de organizar la vida en sociedad, a la pedagogía de vida... Al
detenernos a mirar este mundo en gestación, nuestra actitud no puede ser ni de temor ni
de rechazo global. Lo hacemos con esperanza, pues sabemos que Jesús es el Señor de la
historia...”(Líneas pastorales 2003-2005, Arz. De Santiago)
Otro aspecto que ha crecido y que nos ha regalado no pocas satisfacciones es la
tecnificación. Ahora en ella muchas veces cuesta ver a Dios. Ello porque no deja lugar a la
Para entender este término propio de José Kentenich revisar “María y el nuevo orden cristiano de la
sociedad” del P. Rafael Fernández, pp. 57-61. Para algo más completo “Que surja el hombre nuevo”, P. José
Kentenich, pp. 75-108
1
Providencia, pero por sobretodo porque muchas veces se erige en forma dictatorial y se
pone por sobre la ética.
Una realidad nueva es la globalización: Existen preguntas ante la apertura de Chile a ella.
¿Cómo se realiza sin perder identidad cultural? Hay que acordarse de que el alma patria ha
estado fuertemente vinculada a la tradición católica. Falta que se acentúe la búsqueda de
sueños comunes que nos puedan aglutinar como país.
Una amenaza para nuestra sociedad de hoy es el creciente individualismo (Ejs: muchos
prefieren dejar sus grupos y seguir un camino propio, más personal para no tener que
depender de otros. Ej: Hoy en Santiago no tenemos noción ni siquiera de quiénes son
nuestros vecinos. Prueba de ello es lo que le pasó a una persona que fue a buscar a otra y le
dijeron que se había cambiado de casa, cuando le preguntó al nuevo dueño dónde se había
cambiado el anterior, éste no tenía idea. Al preguntar por otros lados dónde vivía se dio
cuenta que su amigo se había cambiado a la casa vecina de su antigua casa.) El
individualismo lleva a una falta de compromiso: lo que importa es ‘lo que me conviene’, es
decir, el yo gana siempre al nosotros. De esa actitud surge la corrupción (el bien personal
se impone al bien común), la desconfianza, las desigualdades socioeconómicas, el
marginalismo.
Otra amenaza es la vida acelerada. Muchas veces nos falta el tiempo necesario para saber
hacia donde voy y cuáles son las motivaciones. Corremos masificadamente sin reflexionar.
Existe una valoración de la familia, pero a la vez una inconsecuencia en el cultivo de ésta.
Asistimos a una debilitación cada vez más acentuada de la familia (el 80% de sectores
pobres no tienen una familia completa, ni siquiera con un 2do conviviente)
3. Rol de María en la construcción de un nuevo mundo (NOS)
El fin de Schoenstatt es educar un “hombre nuevo en una nueva comunidad con un
sello apostólico universal”. Se trata, como lo acentúa el P. Kentenich el 31 de Mayo del
49, de rescatar los vínculos de la persona. Ya sea con Dios (a través de María) como con los
demás (paternidad, filialidad, fraternidad).
Aspirar a generar un cambio en el orden social no consiste en “remosar” o adornar la
realidad existente, sino darle un nuevo rostro. No todos tienen una vocación política, pero sí
cada uno puede cambiar su mundo. Los grandes cambios sociales se han dado así; Benito y
Ed. Media, Edad moderna (Rev. Francesa, iluminismo, reforma protestante). Tal como fue
antes, ello no lo vamos a hacer solos, sino sólo creando una generación que se juegue por
ello.
Algunos ejemplos actuales de que se puede crear una nueva cultura:
El Metro: El santiaguino no tenía costumbre de cuidar los medios de locomoción, ni
siquiera de mantenerlos limpios. La empresa se preocupó de crear un nuevo estilo. Hoy el
que utiliza el metro asumió que hay que cuidarlo y que uno se debe comportar de cierta
forma. Ello sin duda exigió mucho esfuerzo e inversión al comienzo, pero ha dado fruto.
El fútbol inglés: Hace algunos años las barras bravas asolaban los estadios. Después de un
esfuerzo grande hoy vemos como los espectadores están al lado de los jugadores, los
estadios están llenos y cada partido es una fiesta.
El nuevo orden dela sociedad que propone el P. Kentenich no es otra cosa que una vieja
propuesta cristiana: El Reinado de Dios actualizado al hoy. Éste es lo que Dios quiere del
hombre; en la familia, en la educación, en el campo laboral y la economía, en la política, en
la cultura (Medios de Comunicación Social), en la religión, etc...
Nuestra labor es acentuar una reactualización de la imagen de María, volver a rescatar todo
su valor y apartarla de reduccionismos. Nuestro fundador nos ayuda a ello. Junto a esto
debemos cultivar el vínculo con ella (que nos gane el corazón) y el sentido y profundidad
de nuestro Santuario. Sólo así podremos dar una respuesta integral y no sólo intelectual.
San Luis María Grignon de Montfort afirmó el siglo pasado: “en los tiempos futuros los
santos que van a llevar a la Iglesia a realizar su misión en el mundo van a ser santos
marianos.” Esta afirmación no es gratuita. Él intuyó la gran misión de María para esta
época. María nos ayuda a definir y educar el tipo de hombre cristiano y complementa, a
veces corrigiendo, la imagen del hombre que se nos propone hoy.
Ahora, el P. Kentenich ante el análisis duro y descarnado del hoy recalca la esperanza:
“Yo creo que nosotros, tal como Juan XXIII y Pablo VI, debemos declararnos partidarios
de esta concepción. Un mundo nuevo está surgiendo; un nuevo mundo, un nuevo orden
social, un nuevo orden mundial. No puede gestarse, es evidente, sin espantosos dolores de
parto. Son, por tanto, dolores de parto no para ruinas sino para dar luz. Tenemos que
transformar el mundo. Es una palabra de Marx que actualmente sale innumerables veces de
boca de los católicos: transformar el mundo.... No somos pregoneros de tragedias ni somos
manos ni corazones desesperanzados. Vemos en cada crisis los dolores de parto de un
tiempo nuevo y en cada obstáculo, vemos la participación en la fecundidad de la cruz del
Señor, que es capaz de generar vida nueva, también allí donde, como en la oscuridad de
Belén, parecía no haber vida y estaba naciendo el Salvador; como en la oscuridad de la
tumba parecía todo muerto y estaba resucitando el único que vive de verdad”.
4. Construcción con María de un Nuevo Orden de la Sociedad
No se trata sólo de hacer muchas ‘cosas sociales’, se trata de cambiar la manera de
relacionarnos en todos los ámbitos, de cambiar el perfil del ser humano. Se trata de actuar
como María:
-Dependencia de Dios: CONFIANZA (nos cuesta pensar que Dios es más sabio que yo
(mandamientos, designios, etc), que dirige nuestros destinos, que nos sostiene, que el futuro
está en sus manos y no de otros)
-Acentuación de la dignidad de la persona: Cada hombre es imagen y semejanza de Dios.
(Sartre: los otros son el infierno) ¿Cómo dignificamos y valoramos al que es distinto que
yo? Pensemos en la mujer, el indígena, el pobre, homosexual ¿los tratamos dignamente?
-Necesidad de apelar a la libertad: Todos instan a ella y la manosean. María fue
plenamente libre de ataduras y usó esa libertad para decidirse. La libertad no es sólo para
liberarse de ataduras, sino para usarla, para comprometerse. María se comprometió y
asumió sus responsabilidades con reciedumbre. Nosotros queremos dar oportunidades a que
los demás también puedan tomar sus decisiones, a que puedan plasmar lo suyo. Ello
ayudando a liberar de ataduras (de pobreza, ignorancia, opresión, discriminación, adicción,
consumismo, cesantía, soledad, etc), como también educando en nuestro ejercicio de
autoridad (papá o empresario) para que otros también puedan tomar decisiones y se
responsabilicen de ella.
-Servicio (ejercicio de la autoridad): Se trata de ganar primeramente una autoridad moral.
Ello se logra a través de muchas formas, pero especialmente a través del servicio a los
suyos (debo estar dispuesto a hacer lo que le pido a los otros) y de la cercanía personal.
Servir implica humildad y desprendimiento. No queda duda que María vivió esta actitud.
-Justicia y solidaridad: Nuevamente revisamos el Magnificat. En Schoenstatt muchas
veces nos olvidamos de partes de éste: “derriba del trono a poderosos y enaltece a los
humildes, sacia con dones a los hambrientos y a los ricos los despide vacíos”. María quiere
una sociedad más justa y solidaria. Se preocupa de los más pobres. El P. Kentenich nos
recuerda que la Iglesia ha acentuado demasiado la caridad y poco la justicia. No sirve de
nada dar donaciones si no somos justos en pagar sueldos. Lo primero es la justicia, después
viene la caridad. Muchas veces nos rendimos ante estructuras de mercado y sistemas.
Pensamos que no hay otra forma de hacer economía o una empresa. Un buen ejemplo nos
da M. YUNUS con su banco de los pobres iniciado en Bangladesh y que ha planteado una
nueva realidad para la economía.
-Vínculos, familia e Iglesia (entrelazamiento de destinos): María es Madre y crea hogar.
Le da calidez a nuestras relaciones, a veces tan inclinadas al interés personal. Ella es la que
quiere crear familia en todos nuestras realidades (universidad, oficina, amigos, familia). De
ella aprendemos cómo podemos lograr el hogar y nos intercede las gracias para ello.
5. Conclusión
Ante los signos de muerte que hemos meditado podemos afirmar que late vida en su
interior. Es como el bosque. Los árboles caídos y muertos, se pudren y son abono para la
nueva vida que surge. Para ello necesitamos instrumentos que siembren ‘nuevos árboles’ y
así no quedarnos sólo con la ‘podredumbre’. Ante los signos que vemos hoy espero que
parte de esa vida, de esa resurrección, de esas semillas sean ustedes y que la resurrección de
Cristo la podamos apreciar con el tiempo en sus vidas
¡¡¡ HERMANOS EN LA CRUZ, SEGUROS DE TU VICTORIA!!!
P. Felipe Ríos C.
Semana Santa 2003
Universitarios de Campanario
TALLER
LA FORJACIÓN DE UN NUEVO ORDEN SOCIAL
Meta: forjar un nuevo orden cristiano en la sociedad con claro carácter mariano.
Vivimos en una época en donde cada vez son más comunes los actos de violencia y
desprecio al ser humano. Se sigue el ejemplo de EEUU cómo país a imitar por ser una gran
potencia, pero sus valores se encuentran en el progreso económico, el dominio de la técnica
y el poder de las armas. En él, cada vez son más comunes el aborto y la eutanasia ¿Qué
valores reales hay en todo esto? La deshumanización la vemos no sólo en las ‘grandes
realidades’ que se nos imponen, sino en el seno de nuestra familia, en el trabajo, estudio,
convivencia, etc, fruto de la despersonalización y del individualismo.
Debemos buscar la dignificación de la persona humana y la paz. Debemos cambiar los
valores reinantes para poder forjar un nuevo orden social.
Cuando aspiramos a cambiar el orden social no estamos haciendo nada nuevo, sólo estamos
llevando a cabo algo que creemos.
Renovación Moral: transformación de las costumbres, del estilo de vida, de las formas de
organización, de la sociedad, de los sistemas sociales, económicos, de trabajo, etc.
Para esto es fundamental crear vínculos, no sólo con los más cercanos, sino también con
todo nuestro ambiente. Se trata no sólo de cambiar realidades sociales, sino la manera de
cómo nos relacionamos. El carácter mariano se nota no sólo en LO que hacemos, sino en
COMO lo hacemos. No queremos ‘paliar’ las dificultades actuales, sino cambiar la cultura,
las costumbres, el tipo de vida.
Fundamental: incorporar el evangelio a la cultura.
Todas estas metas no son fáciles. Los motivos de esta dificultad son los siguientes:
Motivos de las dificultades a partir de la realidad schoenstattiana:
-
Desarrollo lento y progresivo: la familia de Schoenstatt primero se tuvo que
consolidar hacia adentro y luego hacia el exterior.
Nacionalsocialismo.
Exilio PK
Motivos a partir de la realidad eclesial:
-
-
-
Se veía a la Iglesia más como una escalera al Cielo que como una escalera que
acerca el Cielo a la Tierra. ( Espiritualidad de huída del mundo, se veía a la Iglesia
como una forma de escapar de las desgracias de la Tierra y no como una forma de
traer a Dios a la Tierra )
Sólo a partir del Concilio Vaticano II se destaca la santidad laical y su
especificación apostólica orientada a la ordenación de las realidades temporales
según las enseñanzas del Evangelio.
Sospechas de marxismo: se veía la justicia social y a la doctrina social como un
comunismo camuflado.
Se decía que la Iglesia no debía inmiscuirse en política. “ La religión es el opio del
pueblo”
Se pensaba que era una doctrina ineficaz de efectuar cambios. Muchos cristianos
pensaron que la Iglesia era incapaz de genera los cambios necesarios para lograr una
verdadera justicia social o cambios sociales, por ello se refugiaron en el marxismo.
Todo esto contribuyó a que la orientación marxista o socialista de izquierda se
apropiara de la causa de las clases sociales más postergadas y de la lucha de la
justicia social. Grandes sacerdotes como el padre hurtado fueron tachados de
“rojos”.
***Con el Concilio Vaticano II se busca crear un nuevo orden cristiano directamente
sobre los laicos. Es preciso que los laicos tomen como obligación suya la restauración
del orden temporal siguiendo las enseñanzas del evangelio y buscando la justicia del
reino de Dios***
Motivos a partir de la realidad chilena:
La clara división política de Chile que lleva a actuar con prejuicios y reacciones viscerales
a quien tiene una posición distinta a la de uno.
*Para distinguirnos por el sentido y por el compromiso social sólo debemos ser cristianos*
El poder político está muy desvalorizado, la participación electoral es bajísima y la
percepción de los políticos es muy mala.
NECESIDAD DE ABORDAR UN PROBLEMA DE FONDO
-
Cambiar la mentalidad colectivista o mecanicista.
El núcleo de la mentalidad colectivista es prescindir de Dios.
De esta prescindencia sigue el relativismo moral.
Ello es reforzado por el individualismo reinante en nuestra sociedad
¿ Basta la democracia para que el sistema sea bueno ? , leyes votadas en libertad y
democráticamente han llevado a atrocidades como el aborto y la eutanasia.
Existe la necesidad de hombres nuevos capaces de redimir los sistemas socioeconómicos y
políticos. Hay que cambiar las estructuras en libertad y a la luz del evangelio.
Santos Sociales: ahora cuando jóvenes es cuando debemos introducirnos con fuerza y vigor
en el engranaje del tiempo. Todos debemos jugarnos el 100% por la santidad en la
sociedad que nos toca vivir. Que no quede todo en bonito sueño.
La tarea de todos los schoenstattianos es que desde el Santuario tienen que surgir, crecer y
trabajar fecundamente hombres santos. Debemos trabajar con la valentía, creatividad,
constancia, fe y heroísmo necesarios para cambiar las costumbres y las estructuras. Para
esto es necesario un incansable espíritu de conquista.
Lo esencial de una cultura está constituido por la actitud con que se afirma o se niega una
vinculación religiosa con Dios, por los valores o desvalores religiosos.
EXAMEN DE CONCIENCIA
-¿Cuál es el rol de María en la construcción del Nuevo Orden Social y qué actitudes
marianas son fundamentales para ello?
-¿Cuáles son los intereses que hoy mueven a la juventud?
-¿Cuáles son los criterios para elegir una carrera?
-¿Cuánto sabemos nosotros sobre la realidad sociocultural del país?
*En general nos movemos más por vivencias que por ideas*
-¿Cuál es la formación que poseemos respecto a la Doctrina Social de la Iglesia?
-¿Concebimos nuestro hogar como un “taller de humanismo”?
-¿Cuál es nuestra posición frente a la sociedad en que vivimos?
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