FASCÍCULO 4 LA CREATIVIDAD Y EL SUEÑO El sueño es una actividad psíquica donde el mecanismo productivo es resultado de una compleja mezcla de procesos neurofisiológicos, indispensable para cualquier ser vivo con sistema nervioso, ya que sus beneficios son irremplazables. Ayuda a la reparación de los tejidos del cuerpo y la reposición de la energía química. Se ha comprobado que el sueño regula la temperatura del cuerpo y disminuye en un 20% la actividad del cerebro, independientemente del consumo de glucosa y oxígeno que usa éste emplea durante el descanso. También influye en la memorización y consolidación de lo aprendido durante el día. Estudios indican que después de cultivar algo nuevo, al dormir posteriormente, se fijan con mayor éxito los conocimientos recién adquiridos. Otras ventajas del sueño son: la liberación de la hormona del crecimiento, que a su vez favorece el sistema inmunológico; la estimulación de las habilidades para la toma de decisiones, (reacción, memoria y coordinación) y la multiplicación de las conexiones neuronales. Durante el sueño, los protagonistas serán exclusivamente personas y situaciones que conocemos o hemos vivido. Alrededor del 10% de nuestras historias serán en blanco y negro, y un 90% a color. Se estima que un adulto promedio pasa un tercio de su vida durmiendo y de 3 a 4 años soñando, pero para ello debemos vivir las diferentes etapas del sueño y completar un ciclo equivalente a 90 minutos. Las etapas del sueño son: Somnolencia. Es una etapa intermedia entre estar despierto y durmiendo. Como característica física, decrece la tensión muscular, la respiración se suaviza, y en caso de despertar, se reacciona con rapidez y se niega el haber dormido. Sueño superficial. Durante este tiempo se bloquean los órganos de los sentidos y las ondas cerebrales se alargan y regularizan. Sueño medianamente profundo. En él, las funciones del organismo son cada vez más lentas y las ondas cerebrales aumentan de tamaño y lentitud. Sueño profundo. En esta etapa el organismo se recupera física y psíquicamente, mientras que las ondas cerebrales son largas y suaves. Sueño REM. Llamado así por la abreviatura en inglés del “movimiento rápido de los ojos”. Es el momento en el que suceden los sueños. Tiene una función biológica y psicológica, cuyo contenido sirve para entrenarnos ante situaciones extraordinarias que podamos protagonizar en la vida real. El cerebro contribuye al dejar de emitir señales a la medula espinal para evitar el movimiento desenfrenado de las extremidades, como producto del sueño. El flujo sanguíneo del cerebro se acelera y la respiración es rápida y entrecortada. También se procesan y ordenan los recuerdos emocionales. Según especialistas, para lograr un verdadero descanso posterior al sueño, la persona debe efectuar ciclos completos, es decir, períodos de 90 minutos. Para un resultado óptimo, se recomienda dormir cinco ciclos, equivalentes a 450 minutos u 8 horas. Los últimos 30 minutos previos al despertar, la hormona del estrés llamada cortisol manda una señal de alerta para preparar nuestro organismo. 1 Durante el letargo, las células del cuerpo utilizan el 90% de la energía en el metabolismo, lo que se traduce en la reparación y formación de tejidos nuevos. En situaciones de alerta, el cerebro envía un mensaje a las glándulas adrenales para liberar cortisol. El organismo libera glucosa a la sangre, permitiendo que los músculos tengan energía; en ese momento cesan las funciones anabólicas de renovación de tejidos y se inicia el metabolismo catabólico, resolviendo la situación de alerta. En el caso de no dormir suficiente se impide la formación de nuevas neuronas, debido a que la falta de sueño provoca inflamación cerebral. Es muy común escuchar, entre grupos de diferentes edades en el mundo, problemas asociados con el insomnio. Éste se refiere a la incapacidad de dormir en sueño profundo, debido a los altos índices de estrés generados por todo tipo de problemas, asociados con la falta de oportunidades, presiones económicas y situaciones emocionales, etcétera. Por lo anterior, es importante considerar algunas acciones que establezcan una rutina previa al descanso: evitar alimentos azucarados y quesos fuertes (por ejemplo, gorgonzola, roquefort, gouda y holandés); no consumir bebidas alcohólicas, dormir con audífonos o ver televisión (especialmente programas con alto contenido de violencia o suspenso). Se recomienda escribir un diario personal y establecer un horario estricto para ir a dormir y despertar. Actualmente, después de varias y diferentes investigaciones, se considera que la calidad y cantidad de sueño repercute directamente en la creatividad. Las jornadas constantes de trabajo tienen mejores resultados si se combinan con momentos de descanso preciso, aunado a un equilibrio en la vida diaria, generando mayor productividad. Como prueba de lo anterior, se hizo un estudio del número de horas que durmieron diariamente algunos creadores e inventores de la humanidad, tales como el compositor Ludwig Van Beethoven, quien tenía como hábito dormir de las 22:00 a las 6:00 horas. Producto de ello son sus múltiples obras, que cuentan con temas muy variados. Su legado se divide en tres períodos de composición y no hay melodías repetidas, por ejemplo entre la Novena Sinfonía y la Obertura Egmont. En el caso de Antonio Vivaldi, se pueden escuchar los mismos patrones de composición en la totalidad de sus obras. Entre los críticos musicales, se dice que escuchando tres de sus piezas, se conoce la totalidad de su trayectoria musical. Esto se debe a que Vivaldi dormía pocas horas, seccionadas en 50 minutos, pues los episodios de tos, silbidos y opresión en el pecho, debido al asma que padecía, lo despertaban varias veces durante una noche. Músicos e inventores han experimentado sueños creativos. El compositor italiano del siglo XVIII, Giuseppe Tartini, soñó una vez que había vendido su alma al diablo a cambio de que éste tocara el violín para él con la mayor perfección posible. A la mañana siguiente compuso su obra magna El Trino del Diablo, diciendo que era algo parecido a la música que había escuchado en el sueño, pero tal fue su desilusión al no lograr la hazaña musical hecha por el Diablo, que prefirió suicidarse. Otro caso sobresaliente es el de Dimitri Mendeleiev, químico ruso nacido en Tobolsk, Siberia, en 1834, a quien se le debe la tabla periódica de los elementos. En ella se clasifica, organiza, y distribuye los diferentes elementos químicos conforme a las propiedades y características que ostentan. Se sabe que Mendeleiev trabajaba días completos en su laboratorio. En una de esas jornadas se quedó dormido sobre su mesa de trabajo, por una hora y media aproximadamente. Cuando despertó anotó lo que había soñado, resultado de ello se encuentra la tabla periódica. 2 Para Winston Churchill era de vital importancia tomar una siesta, ya que creía que así dirigiría con éxito su nación. Para tal efecto, tenía en el Parlamento una cama donde descansaba todos los días de 16:30 a 18:30 horas, independientemente de que su horario para dormir era de las 3:00 a las 8:00 horas. Donald Trump sólo duerme tres horas cada noche, se cree que para tener ventaja sobre la competencia. Siendo su horario de sueño de la 1:00 a las 4:00 de la mañana Por lo que observamos que las horas de sueño también enmarcan el comportamiento social de los individuos. Leonardo Da Vinci dormía 20 minutos cada cuatro horas. No hay que olvidar que lo más importante de cada ciclo de sueño es la Etapa REM (donde se agrupan la mayor cantidad de beneficios). Pero ante la falta de sueño, el cerebro engaña al cuerpo para entrar rápidamente en el sueño REM y no esperar de 45 a 75 minutos en las diferentes etapas de sueño. De esta manera se obtienen los mismos beneficios de un sueño de 8 horas. A esto se le conoce como el ciclo Uberman, donde se realizan pequeñas siestas de 20 a 30 minutos cada cuatro horas, dando un total de 6 siestas diarias. De todos es conocido que Leonardo da Vinci (1452-1519) incursionó con éxito en varios campos del saber humano, como la anatomía, botánica, pintura, escultura, arquitectura y la música, por mencionar sólo algunas disciplinas de la ciencia y el arte. Sin embargo, nunca pudo escribir correctamente debido a su dislexia. Con el fin de que obtengas mejores resultados en tus estudios, te dejo este test que ponderará si duermes o no tiempo suficiente. La escala de Epworth, desarrollada por el doctor Murray Johns, del hospital Epworth de Melbourne Australia, es una opción para medir el nivel de somnolencia durante los estados de vigilia: 0 ninguna, 1 leve, 2 moderada y 3 alta. Qué probabilidad existe que duermas: ___Sentado y leyendo. ___Viendo el televisor. ___Sentado sin actividad en un sitio público. ___Como pasajero de un transporte público. ___Sentado después del almuerzo, sin haber ingerido alcohol. ___Sentado y hablando con alguien. ___Acostado para descansar. ___En el auto detenido algunos minutos en el tráfico. ___Total Menos de 8 puntos, duermes lo suficiente. 8 a 11 puntos, duermes un poco menos de lo que necesitas. El cerebro podría desarrollar mejores resultados con un poco más de horas de sueño. 12 a 15 puntos, no estás durmiendo lo suficiente. 16 a 24 puntos, no puedes manejar maquinaria pesada ni conducir, ya que estás durmiendo muy poco. Después de leer el presente texto te recomiendo escuchar: De Antonio Vivaldi 3 Concierto para dos violines y orquesta en la menor Op 3 no. 8. https://www.youtube.com/watch?v=JoIuL2GsSIs Concierto en la menor para violín Op.3 no. 6 https://www.youtube.com/watch?v=W_35BlsTW3E De Ludwig van Beethoven Obertura Egmont https://www.youtube.com/watch?v=pkxXFLRmqvw Obertura Coriolano https://www.youtube.com/watch?v=4AMXX_9Aplo Fuentes consultadas: Spencer, A. El sueño y sus beneficios, Melbourne, Australia, National Editions, 1ª Edición, 2010. Murray, J. Test ¿Duermes bien?, Guía de Bienestar Selecciones p. 86. Marzo, 2016. https://www.youtube.com/watch?v=OT7ugXEifKMhttp://www.entrepreneur.com/article/267950. 4