HECHOS RECIENTES EN EL PROCESO DE INTEGRACIÓN

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HECHOS RECIENTES EN EL PROCESO DE INTEGRACIÓN
LATINOAMERICANA
(Resumen ílel documento E/CN.12/833) *
Frente a la actual situación y perspectivas de los programas de cooperación e integración económica de América Latina —ALALC, Grupo Andino, AIccA y CARIFTA—
el documento trata de ponderar los avances logrados hasta el presente. En el caso
de la ALALC y el Grupo Andino se señalan algunos obstáculos y se consideran las
principales iniciativas tendientes a facilitar el desarrollo del sistema con relación a
los intereses de sus participantes.
Capítulo I
LA
AsOClAf.lÓX
LvTLXOAjrERICANA DE LlBRE
("oMKRf:(0
La preocupación de acelerar y ampliar cl proceso de integración, manifestada al
nivel político en los países de la AF-ALC, y la necesidad de encontrar fórinidas operativas para vigorizar el desarrr.illo armónico de la región, condujo a la reunión de
los Jefes de Pastado Americanos, en Punía del Este, en abril de 196k donde los
Presidentes formularon lui programa de acción encaminado a crear ei mercado
común latinoamericano basado en el perfeccionamiento y la convergencia progresiva de la AivVLC y del MccA.
Desde entonces se ha ido avanzando, aun cuando lentamente, en la elaboración
y adopción de las medidas adoptadas en diclio programa para vigorizar !a integración regional.
Al mismo tiempo, la ALALI; ha debido atender diver.sos problemas relacionados
con la negociación del segundo tramo de su Lista Común, si bien en el séptimo y
octavo periodos de negociaciones de las listas nacionales se aprecia ima mejoría en
cuanto al número de concesiones pactadas en los anteriores. En cambio, el comercio
internacional registró un retroceso en 1967 con respecto a 1966.
La situación actual
Consecuencia directa de los tropiezos de la Lista Común ha sido la decisión i\r
la AL.ALC de convocar la CKF, a comienzos del segimdo semestre de 1969, para
efectuar una evaluación de la marclia del proceso de integración v determinar las
acciones futuras para impulsarlo. Sin eml>argo, es de esperarse ima consideración
global de los diversos aspectos de las actividades de la Asociación. Para resolver
las dificultades apuntadas se han insinuado dos caminos: eliminar el compromiso
de la Lista Común o prorrogar los plazos fijados en el Tratado de Montevideo para
el cumplimiento del programa de liberación.
La primera alternativa podría limitar la AT.ALC a im sistema de preferencia?
comerciales zonales no contempladas en las reglas del GATT sobre zonas de libre
comercio. La segunda prolongaría en el tiempo el cumplimiento de] programa de
liberación, sin afectar su carácter preferencia! v sin modificar los mecanismos del
Tratado.
* Drciniotercer periodo de sobíone.s. Lima, Perú. 14 al 23 de abril de 19G9.
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DOCUMENTOS
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Algunos obstáculos en el avance de la ALALC
Los acontecimientos narrados ponen de manifiesto de nuevo las dificultades existentes en la Asociación. Entre las que señala el documento, las principales son las
siguientes;
aj los diferentes niveles de desarrollo y de potencialidad de los países de la
Asociación;
bj las disparidades entre las políticas económicas;
cj las diferencias de vinculación comercial, financiera y física;
dj la incertidumbre sobre los efectos posibles de la liberación comercial;
ej los problemas de la balanza de pagos y las disparidades de las diferentes tasas de inflación y del tipo de cainbio; y
¡) la escasa identificación de sectores que ofrezcan condiciones más favorables
para activar el proceso de liberación a fin de establecer en forma parcial
sistemas de desgravación programada.
Capitulo II
EL GRUPO ANDIDO
Evolución institucional de los mercados suhregionales
La Declaración de Bogotá trazó los cimientos políticos para una coopor¿ición
recíproca entre sus signatarios basada en la coordinación de políticas en sectores
determinados. La Declaración de los Presidentes de América consagró el régimen
de los acuerdos subregionales. Posteriormente, la ALALC estableció las normas a
las que deberá ajustarse el sistema.
El Grupo Andino
La decisión de los Presidentes permitió poner en marcha el programa de la Declaración de Bogotá.
En junio de 1967. en Viíia del Mar, Chile, quedó instalada la Comisión Mixta.
En la tercera reunión —Caracas, agosto de 1967— se adoptaron las bases del acuerdo subregional entre los países de la Declaración de Bogotá, las que luego fueron
aprobadas por el Consejo de Ministros de la ALALC en su reunión de agosto del
mismo año.
En la cuarta reunión de la Comisión Mixta (Lima, noviembre de 1967) se
convino proceder a la redacción del proyecto de acuerdo subregional. Dichos trabajos se realizaron entre enero y junio de 1968. En agosto se celebró en Cartagena,
Colombia, la sexta reunión de la Comisión con el fin de discutir el proyecto y decidir acerca del mismo.
7ó(J
EL TRIMESTRE ECONÓMICO
El proyecto Jr acaerdu de integraciáii subregional
La iiitegiaciún subiegional es enlcndida como una política que se dirige a promover el desarrollo armónico de los países miembros y como un medio para facilitar
su participación en el proceso íle integración de América Latina. A fin de alcanzar
í'stos objetivos, los países adojjlari'm una estrategia para el desarrollo de la subregión que contemj)la la armonización de su política económica y social, la coordinación de sus planes de desarrollo, la programación conjunta de la industria, la
agricultura y la infraestructura, y el establecimiento de im mercado común. La administración y ejecución del acuerdo corresponderá a la Comisión Mixta.
La Corporación /indina de I'unienlo
La Corporación Andina de Fomento (CAF), constituida en febrero de 1968,
tiene por objeto ini])ulsar el proceso de integración subrcgional impulsando el apro\ecbajniento de las oportunidades y recursos que ofrezca el área, mediante la creación de empresas de producción o de servicios y la ampliación, modernización o
concesión de las existentes.
La directa y estrecha vinculacióji enli-e la CAF } los órganos del sistema subrcgional contribuirá a evitar la dispersión de esfuerzos y a que los recinsos financieros propios }' de la subregión se dirijan y concentren eji aquellos sectores especialmente importantes desde el i)unto de \ista del desarrollo del área.
(.(ipil a lo ¡II
El.
MERCADO (!OMúN (^KNTKOAMEKICA.Xü
Consideraciones generales sobre el Mercado Común Centroarnericano
La fase actual doí MCCA, que comienza en 1966 y continúa hasta ahora, representa un periodo de revisión, ajuste >■ reglamentación. Ln ella se iniciaron gestiones
tendientes a coordinar las jjrincipaíes políticas económicas nacionales y a vincular
Ontroamérica con el exterior. EsSc último trienio constituye ima etapa en la que
se ha acentuado la actitud regional en cuanto a las decisiones tic inversión, producción y distribución en el nuevo espacio económico creado por el Mercado Común
('entroamericano. De la misma manera ha aparecido ahora im conjinito de problemas, principalmente fiscales, de la balanza de pagos y de distorsiones en el intercambio zonal, que se origina tanto por el creciente dinamismo del ^.lercado C!omún
como jjor la influencia que sobre él tiene el comportamiento del sector exterjio
de Centroaméric.n. Pareciera que varios de estos problemas podría resolverlos cada
jiaís y que para ello podrían aprovecharse los mecanismos coordinadores de la
integración, sin que esto implique que dicha solución deba proporcionarla nece.sariamente el Mercado Común. Otro es el caso de aquellos }:)roblemas que sí ha
provocado el propio proceso de integración regional, a los cuales deberá darse
una respuesta concertada multinacional o bilateralmentc. Los problemas que .se han
encontrado durante los último? tres años, para alcanzar con mayor celeridad etapas
DOCL'MKNTOS
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máíi avanzadas de integiacióii, constituyen un producto natural de su e\pansión y
c(»nsolid¿uión. Las soluciones que si^ han dado a estos y otros problemas han puesto
de manifiesto que el Mercado Común Centroamericano, antes que debilitarse ]>or la
presencia de ellos, siprvie siendo una importante empresíi en mar<ha.
Capítulo IV
LA
COOPEIIACIÓN RIILTINACIOIVAL Y LA I.NTEGK \(;IÓN
KCONÜMICA EN El. CARIBE
Lo- ir<ibiernos de los países del Caribe, movidos por el propósito de elevar el nivel
de vida de sus piicblos, intentan actualmente reorientar sus economías a través de
la inlensifiración y liberalizacic'jn del comercio y adoptando políticas que se encaminan lia-' ia una coortlinación más estrecha del desarrollo de esos países.
r.l piinier paso hacia la fornnilación de tal programa lo dieron los gobiernos
d< Antigua, Barbados y Guyana al adoptar el texto inicial del Acuerdo para la
Asociación de Libre Comercio del Caribe (CARIFTA), en diciembre de 1965.
Kn febrero de 1968 se ajuobó el Acuerdo de la Asociación, la que actualmente
e-iá constituida por 13 miembros.
Ilrrhos principalrs del proceso de cooperación del (.aribe
a> ¡Al Asociación de Libre Comercio del Caribe (CARIFTA). El objetivo de
(,Aiíii-TA es la reducción inmediata de todas las barreras del comercio de bienes
originarios del área tomando en consideración las características de ciertos problema^-, y el nivel de desarrollo de sus miembros. Existe una lista de reserva: los gravámenes de esa lista serán removidos gradualmente.
b) El Mercado Común, del Caribe OrieiUal (I\IC(X)). Los Estados asociados han
acordado adelantar el proceso de integración creando el Mcco para operar dentro
de (^ARlFT.v. Dicho mercado entró en vigor el 1.5 de julio de 1968,
Las consideraciones principales para llegar a este nuevo acuerdo fueron: crear
un mercado común compatible con la zona de libre comercio, mediante el cual los
paí-es menos desarrollados, actuando en conjunto, puedan hacer más efcv-tivas
las veiilajas f[iw les son otorgadas en CATíIFTA y armonizar la legislación nacional
de los países participantes en los camjios principales de la política econcimica a
fin de ir eliminando las restricciones que dificultan el juego de los fiíclores de
¡>rodncción.
Siiuarión presente
La ]iucsla en marcha de- ('ARIFTA y el T^iIccí) })lanlea una serie de problemas
refeientes al comercio y a la aplirarión de varias de las di.-posi'.iones de los respectivos Acuerdos. Un problema general se ha presentado en cuanto al trato uniforme
a las mercaderías de íLXUIFTA. tanto (n lo que respecl;i a los derechos como a los
procedimientos aduaneros. Problemas parlirularps plantea el origen de los bienes
v el I omercio de ios productos agrícolas.
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EL TRIMESTRE ECONÓMICO
CARIFTA y una América Latina más amplia
CARIFTA ha reconocido la necesidad de ampliar la cooperación a toda la subregión caribeña y por eso previeron el acceso de otros países al Acuerdo. Algunos
miembros han expresado, además, su anhelo de que CARIFTA llegue a asociarse con
el proceso de convergencia iniciado entre la ALALC y el MCCA y, en su oportunidad,
con el acuerdo de integración subregionai de los países del Grupo Andino.
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