Nútti. 4 8 0 . InevQ» 13 , 4p Apttowbre de 1866. AfioVI. •MMMaiHMMMIÜHii •g··nnmpMi·NMMií 8ÜSCRI€IW #flj5er(^.j.... 3ft * i BírtíuoMrl».^,.,; 6mi AMPURDANES. calle de Ç^amaflo. (ialledé^rtàíarit, n.'» I w t ó w C O D K INTBnESgS MORALES T MATERIALES, AVISOS T NOTICIAS. ) r. '.I.L í' }^fflli0^fffmmmiimmmmmmmmmmmmmmammamm dioíreéo el reino de Pakslioa. Kl puebío bendice a reyes que le oprimen; y al quererer el colosoíriancés destronar SHJ ídolfl Fernando, se opwe su corazofi noble, su 1 .: , ^s(rakl·lft4tie^a4ígRioitanMa, y habfeis eorazofl lodoamor, su corazon que perdo j j ;\ . ídesIruidOila &iíía eríme».—¥. H. 1)4 à«Vs verdugos, sa corazon que desarma ; ^ j | | lluct»' G^p: ei çfifiçaiQ ^esaríelio 4 sus ppre&ores y be?* SUÍÍ freiii^., èPí^'flU'^· pues, ba sofridd *Éín4«i? jporqué «»'i^u«í r«lrd«aBP' el i>íeto««laï' ^ las cla^ ; j^bffetarlas, Èb iaiio' los hàcaldiis bé 'Vegelado en el atslamient# i pfffqué òo ha logrado sacudír la «litiefik? lJ,qa,r«RW ra PQS lo dice: porqm haiidüigmi^aníe. Üa jgnora&'cià le hizo escluvo éa el « ^ 0 ^p«M^enir. IbsIVéctíos ilesVacepanmuittfo anliguo. le despedazaba en el t'ií-r ï|u4S | 0 r a n z a s ; la realid^ bj^rr^ ti>s co, le ancgiíba.en el Tiber, y leembrületia BíS«M*gÜeftas ilusiones. lífeoti^arBénle: durahii sido siempre la con el ejempfode losdisofülosCésarescella ittndícion del'iiuçjjlo .Sil marlirologio m le retenia peehero en el feudaiismo, des-r armaba la mano romana del laligo, para il códj^ 4e-cuai)ia!í iperíeeociones ha su ieiéttiido cww)4tis iH^Hinashà arrancadò el aprisionar sus piésíon arg-ollasde hierro: WfrtlWíeiíík»-'idil·lis (y<)s efGiíWiidos, de ella le salvo de aquellos horrorcs para envilectrle: quiso iibrarie de las sombrasdeJ claus!ro, para sumirle en las linieblas <lel eoo miirlir. .• ' • ^Secftifue'bao^shif ü ítítnoías ciianlas liiosoíisnio· arranco de sus manos el vaso chrilizaciones'*ha al = vísnduf ^-ori que ei llei Mifriuiienlo, para darle àbeber lacicU' progreso ha díltííiiiíi <n niaictia gloriosa la de la desesperacion: quiso hacerle feliz, ÇAlipíTARoando eti los* liaBcíw de la male- y le liizo miserable. Solo aíí logra explicarse la larga cadena rüíí'gswàqiie lo-i íllaniropos se híin heclio íWfdíO^à la voz del InfortuDÍo, y que íos de sus sufrimienlos; porque de otra manera èwicis con ígnoble desden han vuello &us se hubiera escedido: babiera arranoado de sus ojos la venda que le cegaba, hubie«spaldas à la plebe ,j§noranle, abandonàora pulverizado el circo, fundido el hierro, à)l»«fl so aislamienlo? deígarrado el J^ligo y disipado ctíaotas ïs lo cçprio que pocas veces hemos sombras cntumecian su menle y ofuscabaa t i ^ teodéirpk! ona rnano amiga; es lo su iiitíe'Hgencia. '^rt(M)iie sMimpre haii ésrasea<io los pro5<>ómo explicarse, si no, lanlas asona yectíw destí felicidad;es locierlo qiiesiem das y revoluciones? ^cómo darse cuenla de {ire ha viv^do eb el abandono, pues se ha esa multitud innumerable de crímenes que «Ividado qtieei pueblo es nuestro henna- cubreR ée rnbor la frente de la justícia? ^cómo descifrarse estos dramas del hogar ^i todas I9S clases ban lenido sus dias que marlirizan Us família»? felices; sí p^ra (odaí; ha sopado su hora de La ignorància, solo la ignorància es la fegen«racioft, solo ha si<Jo el pueblo el qae que produee tales desconcierlos; solo ella oonca ba sHb feliz. solo ha sido el pueblo es la que deja corromper su corazon y des«Iqoesiempre ha vivi^O la vida del des- orientar hairta su ri^slínto irresistible al «ogaid. bien. Y no es que creamos que sea un críY no es que no sebaj'an praclicado esfuer men el ser ignoraoles; però sí que es un IRSíprafebaèlIitaEÍe; y BO es que no se ha- çrimioal, à nuestro ver, el que pudiendo )«• adnaWttdo mil à^tíríGcios en pro de su desterraria de lasmasas, deja que se arraip f s a y i^ra so provccho. g«e y afirme en ellas, para producir los ., lï.pof {iii|íl(iiE|ue fto merece, ingralitu^ males que deploramos. f)e un pueblo igiKtranle oad^ buepo ét»ik ^ s « ^oktafia. Ella abandona ba las tiiM^. coaBílo el suilor dd Irabnjo mas pesadb bafiaba su cuerpo desfallticido, pa<ra dirigir la ballesta caulra los enemigos .ífja^filriíi; fipsfiiibA el JéUgo feudal que #ia«gE«9A»l)ftiíUff»H^e,f)&ia esffl»ltarsiyi Diputació de Girona — Servei de Biblioteques del aulóu.ata, privadodelures y codOci-' mienlos. èQuereis ennoblecer al pueblp fl# g p bernais? decia B. de Saz, Iv^iMej Y ao temais que la inslruccioa en él sembrsda encierre nunca en su seno elemeijjtos pefliirbadores ^(le se conjuren palía 'destruir los buetios prtncipios, par^i demolér la» bases de lodo lo juslatrenle creadp, pafs» amagar cou un goipe de pmerle k s Vieoe^ radas iostituciones del pais. ^ Si alguna vez ha padecido «Piores, sob una lamentable consecuencia de la falfa deesainstruccion qué'lehan'ne'gado; èrirores que loman el nombre de crímenesíi tos ojos de la ley, peiA íjjue solo sop desgracias ineparables de sú ítleligencm enervada. íostruidle, y borrareis el dicladó de popuIacBo. Inslruidle, y la viudictà publica no tendra que salisfacer tanlas rer paraciones. Instruidle, yéí Estado «o tendra que lamentar tantos escàndolos en la vida pública y privada de los individuos. Hay todavía algo no perverlido en el fondo de su noble corazon: su inteligençia responde todavia é lo bueno y à lo bello; preciso se bace aprovecbar eàlaà dísposiçiones que cofreo inminenle ries| o , pueslas al contaclo eoo ladesespe'racion de su suerle y con el olvido à ^ue pareee condenada esta ílase Joforlunada. Instruidle, y habceis bofmdo eda ré^ mora que amenaza de muerte à las ^oIciedades: destruíd là cueva ignpwacàa, y cstad segurlsimos de que 00 solo èd-* breis preslado on servicio eoiinenté i1a iDorai y à là ctvftizaciOD, mo q p b^tarr bien babrei.s deslruido la cveva dei ciímeo.—F. S. L·AJLUE. La aarara venia, y ante »o enicetididà fàz se entojecian las nabes, se apagaban la? 06trellas Y se aloiBbi-aba etffiondo.A su yisL» ouiao las sombras, con etlas la t'risit^ZtS j j{ dolor; alejàbanse los enapúpzçínaflos vi^ftti:^ de la nocbe, y venian impregoados 4e 1^' ^u«de espefarse. Orieniado por la d^il che y miel suaves y cariposos cé^im; re* clarídad dedudosas sombras, tiene forzo- tiràbanse à sa» guaridas l9s o<oeM]<rn6«ia«i· males, y salian de entre «^peflo» Mlaj^tas samenle que tropezar; y sus Iropiezo&coD' encanladoras ave« à saloiar la otieva ttiz. Biuevíosieroprftlos cimienlos sociales. Y La 9^Dolieuta laoa iba retiraodó de4aí títr-^ es lo mas çingular que no puede irrogàr- ra sqs maueitentos rayoa, y,eome Itoroía viu» seies loda.la culpa; porque su arcion es la da, iba ocoUaado sa rostro Iras deitcados