EL NOMBRE DE LAYO, PADRE DE EDIPO 5 l. El

Anuncio
EL NOMBRE DE LAYO, PADRE DE EDIPO
5 l. El nombre de Layo no aparece en los poemas homéricos. No obstante, como señala Lamer l, esta ausencia debe ser producto del azar, pues la
leyenda de Edipo es conocida para el autor de la NÉmia. La mención de la
madre de Edipo en h 271 (p,q~@aT' OiGt7~óGao%ov, xahw 'Enixaozqv)
implica que a los aedos homéricos no les era desconocido su padre.
Bajo la forma ~ a i o el
c nombre de nuestro personaje se atestigua por primera vez en los tres trágicos, en los cuales la métrica garantiza la cantidad
larga de -a-.
Heródoto utiliza la forma Aaioc (genitivo Aaiou en IV 149, V 43, 60;
acusativo Aaiov en V 59). Tratándose de prosa, los testimonios herodoteos
no ofrecen información sobre la cantidad de -a-. En la hipótesis de que -afuera breve en el jonio de Heródoto, en contraste con ático ~ & i o ctal
, forma
necesitaría una explicación. En la hipótesis, más probable, de que la forma
jónica fuese idéntica a la ática, la presencia en ambos dialectos de -a-(en lugar de -q-) induce a pensar en un origen secundario de esa vocal larga.
5 2. Las especulaciones sobre la etimología de Aaioc implican el
supuesto de que este nombre propio fue en su origen un apelativo que
describía adecuadamente al personaje, como suele ocurrir con las figuras
del cuento popular: K15xhov «el del ojo como una rueda de carro», Caperucita Roja, Blancanieves, etc.
Ningún valor tiene la derivación de hrj'iov «mieses sin segar)), que encontramos en Eustacio 862.56, ya que no satisface ni por su forma ni
por su significado.
Desde el siglo XIX lo más frecuente ha sido admitir una relación con
haóc «pueblo». Así para Pape-Benseler 2, que toman la explicación de
Curtius, A a i o ~sería equivalente a AGp,io~(cf. lat. Publius), interpretación a la que se adhirieron Wilamowitz 3, Robert 4 y, más recientemente,
Marie Delcourt 5. Contra esta teoría hace observar Lamer que en la
1
R E XII, 1 s.v. «Laios», col. 468.
2 Worterbuch der griech. Eigennamen 11, p. 762.
3 Hermes 34, 1899, p. 77.
4 Oedipus, Berlin, 1915, 1, p. 11.
5
Bdipe ou la Iégende du conquérant, Liege, 1944, p. 27.
6 Art. cit., col. 512.
época antigua, en que se supone que se formó el mito, ningún rey era
llamado «popular» ni ((amante del pueblo», aparte del hecho de que
Layo no aparece caracterizado como tal y de que haóc y GTjpoc no
son términos sinónimos. Interpretar Aáioq como una forma abreviada
o hipocorística de un compuesto de haóc (e.gr. 'Ay6haoc 7) tampoco
resuelve la dificultad de que en ático y en jónico un derivado o un
hipocorístico de un compuesto de haóc, con -a- antigua, aparecería necesariamente como Aq-, no A&-8.
Dejando a un lado el inverosímil intento de S. Levin 9 de ver en
Aaioq el reflejo griego del semítico Levi-, merece atención la identificación de Aaioc con el adjetivo haióc «zurdo», sobre la que C. LéviStrauss 10 y otros etnólogos han basado su interpretación estructural del
mito de Edipo: en el linaje de los ascendientes de Edipo (AapGaxoc,
Aaioc y el propio OiGino~~)
los tres nombres aluden a la dificultad
para caminar derechos que, en paralelos de otras culturas (indios
Pueblo), es característica de los hombres nacidos de la tierra, como
también lo son los Cnap~oi,salidos de los dientes del dragón sembrados por Cadmo, que están en el origen del linaje de Edipo.
AáPGaxoc, en efecto, es un derivado del nombre de la letra háPSa
(nombre mas antiguo que hápf36a "). La forma arcaica de esta letra
con dos trazos de distinta longitud explica que este nombre, aplicado a
personas, significase «cojo». Sobre ello es explícito el pasaje de Heródoto V 92P, en que el nombre de la madre de Cípselo de Corinto AáP6a es dado como equivalente de ~ o h q«coja».
En lo que concierne a la cronología, es importante observar que el
nombre de AáPGaxoe, dada su derivación, no puede ser anterior a la
creación del alfabeto griego, ca. 900/850 a. C . 12, lo cual deja a Lábdaco fuera de las fases más antiguas del mito de Edipo en las que los
nombres de los personajes pueden encontrar una justificación.
OiGinouc es, en impecable análisis lingüístico, «el del pie hinchado»,
cuyo primer elemento OiSi- (relacionado con oibÉo) es la forma que en
7
Así A. FICK- FR. BECHTEL,
Die griech. Personennamen, Gottingen, 1894, pp. 183,
429.
8 Cf. G. BJORCK,Das alpha impurum und die tragische Kunstsprache, Uppsala,
1950, p. 106 n. 1.
9 «Greek occupational terms with Semitic counterparts)), The first LACUS forum,
Columbia, 1975, pp. 246 SS.
10 Anthropologie structurale, 1, Paris, 1958, pp. 235 SS. J. P. VERNANT,
«íEdipe» en
Dictionnaire des mythologies (Flarnmarion), 11, Paris, 1981, p. 191.
11 Ver L. H. JEFFERY,The local scripts of archaic Greece, Oxford, 1961, pp. 30 s.
12 Así ya F. VIAN,Les origines de Thebes, Paris, 1963, p. 178 n. 6.
EL NOMBRE DE LAYO, PADRE DE EDIPO
169
esa posición toma, conforme a la ley de Caland, m tema adjetival
*oidro-, que se reconstruye con la ayuda del aaa. eittar 13.
Nuestro punto de vista es que, de los tres nombres aducidos, sólo
OiGinouc puede invocarse válidamente para una fase más antigua del
mito, pues Lábdaco presenta una cronología reciente, posterior al 11 milenio, y Layo no puede contener referencia a defectos del pie o dificultades en el caminar, según veremos en § 3.2.
5 3. La ecuación Aaioc = hatóc con la que operan los citados
antropólogos requiere algunas precisiones:
1. hatóc (de ide. *laiwós, cf. lat. laeuos, aesl. Iévü) no significa en
griego «torcido, ladeado» (fr. «gauchi»), sino pura y simplemente «zurdo» (fr. «gaucher»). Es un término probablemente dórico, ajeno a los
poemas homéricos y al jónico-ático 14. Especular con relaciones sexuales
«torcidas» en el mito (Layo con el joven Crisipo y con su propia esposa
para evitar tener hijos) con el fin de justificar esa interpretación de
Aaioc como h a d e , no responde al significado estricto del término en
griego.
2. En el uso griego documentado, hato6 no hace referencia a dificultad para caminar, sino a la lateralización izquierda, que se manifiesta
primariamente en el uso de las manos y en la orientación con relación a
aquélla. Así en la canción popular espartana fr. 18 Diehl, ha@ pEv lzuv
npopáhsoes «con la mano izquierda poned por delante el escudo»;
Eurípides, Heracles, 159 npoq ha@ xspi; Suppl. 705 xCpac zo hatóv.
3. El nombre A&oq no es sin más el adjetivo hatoc; (jcantidad de
-a- e hiato!), sino un derivado de él, por lo que resulta necesario justificar la morfología y la fonética del nombre.
Nuestra interpretación es que Aólioc es el resultado fonéticamente esperado de un derivado * A a í ~ - t oformado
~
sobre el adjetivo * h a t ~ ó c .
8 4. Es un hecho bien conocido en distintos ambientes culturales el
empleo de adjetivos con el sentido de «izquierdo, zurdo» como antropónimos, que debieron ser en su origen simples apodos.
En el conocido repertorio de Bechtel 15 encontramos:
Apiozspivo~Kopiv0toc (s. IV a. C.)
Cxaov AI<OVEU~
(S. IV a. C.).
13 Ver H. FRISK,Griech. etym. Worterbuch, 11, Heidelberg, 1970, pp. 358 s.; P.
CHANTRAINE,
Dict. étym de la langue grecque, Paris, 1968, p. 780.
14 Ver P. CHANTRAINE,
«Les mots désignant la gauche en grec anciem, Festschrift
Kretschmer, 1, Wien, 1956, p. 62.
15 Die historischen Personennamen des Griechischen bis zur Kaiserzeit, Halle, 1917,
p. 498.
Además, Aaioq npopahioioq (s. IV a. C.) 16. Los tres ejemplos están formados sobre &pioospóc, oxatóc y haióq respectivamente.
Los nombres de persona formados sobre 6~kióq«diestro» son más
difícilmente interpretables como apodos a causa del sentido meliorativo
del adjetivo que les sirve de base (no obstante, es concebible como
nombre de esclavo ASkioq «Hábil»). Por ello AÉt,ioc, A ~ k i o vson más
probablemente formas abreviadas de compuestos como Asktcpávqq, As~icpov,Aekioxoc 17.
En micénico, PY An 192.14 ka-wi-jo es un antropónimo que admite
ser interpretado como Cxai~ioq,lo mismo que KN Sc 7471 v. ka-wopuede ser Cxayoq o Cxat~toqo C x a ~ ~ i w Inequívoco
v.
es el nombre de
persona PY Cn 254.4 y KN C 908 de-ki-si-wo, PY Jn 413.10 de-ki-siwo-jo, entendido como A e g y o ~ ,sin excluir la posibilidad de A ~ k i ~ i o q ,
una vez que el silabograma wo puede notar tanto la sílaba [-wo-] como
[-wjo-] 18.
Del examen de este breve «dossier» resulta:
1. El uso de adjetivos del campo semántico de hatóc como
nombres de persona.
2. La formación de derivados sufijales para este uso antroponímico.
El nombre tópico de hetera ~ a f le9 es susceptible de ser interpretado
como el tema femenino * A a i ~ i 6 correspondiente
al masculino *Aai~.iosegún el tipo n á ~ p i o q: n a ~ p i c .La relación con haóq («mujer pública)),
«die gemeinhin Bekannte))) era posiblemente producto de una etimología
popular.
5. En ático, la forma ~ a i o qresulta ser el tratamiento normal de
*Aayioq, que postulamos como origen conforme al tratamiento del grupo - a y - seguido de vocal central o anterior 20:
* E h a i ~ a> Ehaa
*Ehai~ivoq > Ehaivoq (pero ante vocal posterior *Ehai~ov>
Ehaiov).
1. KIRCHNER,
Prosopographia Attica, 11, Berlin, 1903, nr. 8961.
BECHTEL,
Die hist. Personennamen, p. 120.
M. S. RUIPBREZ,
«The Mycenaean Name of Dionysos~,Res Mycenae, Akten des
VIL Intern. Mykenologischen Colloquiums in Nürnberg vom 6.-10. April 1981, Gottingen
1983, pp. 408 SS.
19 Plutarco, Moralia 750D, Anth. Pal. V 250, 1 ; VI1 222, 6. PAPE-BENSELER,
col.
Der
762, recogen testimonios epigráficos de Corinto, Sicilia y Beocia. Ver H. VOLKMANN,
kleine Pauly, 111, Stuttgart, 1969, col. 457.
20 Ver E. SCHWYZER,
Griech. Gramm., 1, München, 1939, p. 266; M. LEJEUNE,
Phonétique historique du mycénien et du grec ancien, Paris, 1972, p. 247; L. LUPAS,Phonologie du grec attique, The Hague, 1972, pp. 35 s.
16
17
18
EL NOMBRE DE LAYO, PADRE DE EDIPO
171
* a t p i > así (pero * a i ~ o v> aióv).
*aipzóc (de una forma anterior *a~yszóc)> aszóq
xhanv de * x h a ~ ~ s es
s v fonético, pero x h a o (por xhaio) resulta
de una igualación del paradigma.
En cuanto al jónico, faltan datos seguros 21. Hom. Q 762 GaÉpov
frente al voc. I' 180, Z 344 G&sp (<*Saysp) puede presentar un tratamiento fonético, como &si en M 211, Y 648, o 379, mientras que 66sp
pudiera ser un aticismo de la tradición.
Así pues, resulta imposible decidir la cantidad de -a- en la forma herodotea Aaioc.
No perteneciendo al léxico del jónico-ático el adjetivo haióq (ver
5 3.1), hemos de admitir que Aaioc se creó en una tradición ajena a la
épica jónica, muy probablemente tebana.
5 6. Finalmente pasamos a examinar si A a i o ~ interpretado
,
como
«Zurdo», entra satisfactoriamente en el contexto del mito de Edipo.
Notemos, para émpezar, que su homónimo Aaioc, púgil que venció
a Heracles (Ps.-Zenobio V 49), resulta plausiblemente interpretado como
«Zurdo» como alusivo al temido uso de la mano izquierda por el luchador. La explicación de que fueron dos los que se enfrentaron con Heracles es, sin duda, un aíziov creado a posteriori, cuando el adjetivo
haióc no era usual.
En cuanto a Aaioc padre de Edipo, la interpretación de su nombre
debe referirse al motivo principal que vincula a nuestro personaje al
gran tema de Edipo, esto es a la muerte de Layo a manos de Edipo en
un encuentro en un camino.
Remitimos al excelente trabajo de Lamer, ya citado, para todo lo referente a las circunstancias del encuentro segun las diferentes versiones.
El motivo puro y simple es que Layo, «el Zurdo)), se cruza en un camino con Edipo. Todas las difíciles e intrincadas especulaciones sobre el
cómo y el porqué del incidente deben dejar paso a una consideración
perfectamente simple: Layo, como zurdo, que era, pretendía pasar por
su izquierda, que era la derecha de Edipo.
21 Ninguna mención del fenómeno en A. THUMB
- A. SCHERER,Handbuch der griech.
Dialekte, 2. Auflage. Heidelberg, 1959, pp. 150 SS. Así, hom. 6 ü ~ pqueda aislado y puede
Sprachliche Unterser un aticismo de la tradición por Gakp. Contra WACKERNAGEL,
Gramm. homérique, 1,
suchungen zu Homer, Gottingen, 1916, p. 146, P. CHANTRAINE,
Paris, 1942, p. 167, se niega a considerar aticismo la forma &i. Para todo el fenómeno
ver E. CRESPO,Cuadernos de Filología Clásica 12, 1977, pp. 206 n. 1.
Existen testimonios inequívocos, reunidos por J. C . Lawson 22, de
que la derecha ha sido siempre la dirección de buen augurio en Grecia.
En Homero H 184, el heraldo lleva la suerte extraída del casco y va
mostrándola a los capitanes por la derecha. En p 365, Ulises pide limosna por la derecha. En A 597, Hefesto va por la derecha sirviendo el néctar a los demás dioses.
Layo, pues, incumplió la norma al intentar pasar por su izquierda,
que es la mano de mal agüero: fue muerto en el incidente. Layo fue el
culpable; Edipo (que además, no sabía que Layo era su padre), inocente, como inocente es en todos los demás motivos que componen su leyenda.
Martín S.
RUIPÉREZ
Universidad Cornplutense
Madrid
22 Modern Greek folklore and ancient Greek religion. A study in survivals, New York,
1964, p. 312.
Descargar